NOTA: NO SE SI ESTO SEA UNA VIOLACION EN LA PUBLICACION YA QUE EL LIBRO ESTA CLASIFICADO PARA TODO PUBLICO, PERO EN ESTA PARTE LLEVA CONTENIDO EXPLICITO POR ESO LO CATALOGO COMO PARA MAYOR DE 18 AÑOS, O NO APTO PARA MENORES DE 15

-Gracias por ayudarme en todo...vamos te tengo que llevar a tu casa.

Brenda se queda pensando por un momento después de eso me hace una pregunta atrevida que no me esperaba.

-¿Qué pasaría si me quedo esta noche?

-...No creo poder controlarme...

-Dicen que el hombre llega hasta donde la mujer quiere.

-¿Estas dispuesta?

-Si...

Me acerque a ella y la tome de la mano, ella se acercó y tocando mi pecho con sus manos, me dio un beso suave y tembloroso, intentando encontrar valor en lo que estaba a punto de hacer, sus labios dulces encendieron la chispa de nuestro amor...abrasados y mientras nos besábamos la fui guiando hasta la habitación, al cerrar la puerta detrás de mí, Brenda me fue quitando la camisa botón por botón empezando desde abajo, la deslizo con sus manos por mis hombros besando repetidamente, llevando un camino con sus labios desde mi pecho, pasando por un hombro, el cuello y regresando a mis labios, coloque mis manos en su cintura levantando su blusa, alzo las manos para que saliera por completo dejando ver un sostén color negro de tirantes con bordes y el broche por el frente, entre medio de las copas, seguí levantando lentamente pero me detuve cuando descubrió sus labios donde la bese mordiendo el labio inferior provocando una de sus sonrisas más juguetonas y la más hermosa de las que me había dedicado, tire su blusa en alguna parte de la habitación sin importar que después tendríamos que buscarla, debajo de esa ropa, Brenda ocultaba una piel delicada y sensible al rose de mis labios, la bese por todo el cuerpo, su mejilla, su cuello, sus hombros, su pecho y bajando hasta su abdomen, nuestras respiraciones agitadas por la excitación eran controladas por la pasión que teníamos en ese momento, nos dejábamos llevar por los sentimientos que soportamos al ocultarlos ante la sociedad.

Terminamos desnudos en la cama excitados por el juego de caricias y besos que no pararon hasta desgastar nuestros labios. Esa noche hicimos el amor hasta antes del amanecer como si no hubiera un mundo, espacio, tiempo, o un mañana...esa noche, dejamos que nuestros cuerpos hablaran y lo único que decían una y otra vez, era, "TE AMO".

Al amanecer me encontraba mirando a la hermosa mujer que descansaba a mi lado, las sabanas le cubrían el cuerpo, solo dejando ver su rostro y una mano, su pulgar rosaba su labio inferior dando una impresión de un bebe dormido, aun no llegaban a su rostro los rayos del sol que entraban por la ventana. Brenda empezaba a despertarse. Abrió sus ojos y lo primero que miro era a mí, que inmediatamente me acerque a ella dándole un beso.

-Buenos días, amor.- le dije después del beso.

-buenos días...-mientras estiraba su cuerpo - ¿qué hora es?

-aún es temprano, ¿dormiste bien?

-dormí de maravilla.- me decía con una ligera sonrisa mientras se enderezaba en la cama.

Me levante de la cama tomando dirección hacia fuera de la habitación, Brenda me detiene pidiéndome que me quede más tiempo con ella y yo le digo que solo iría por el desayuno pues ya lo tenía preparado solo para traerlo, salgo de la habitación hacia la cocina. El desayuno era un plato de huevos con jamón, jugo de naranja y 3 rebanadas de pan tostado. Regreso a la habitación y me encuentro a Brenda sentada con su espalda en el respaldo de la cama, viendo en dirección a la puerta donde me encontraba yo, tenía puesta mi camisa desbotonada hasta la mitad dejándola ver muy sexi y excitante pero mostraba una cara de una niña pequeña e inocente, dándome a entender que podía ser serio y al mismo tiempo jugar un poco, camine hasta sentarme justo a su lado, tomo una de las tostadas y le dio una pequeña mordida, la mire y estiro sus manos poniéndome enfrente la tostada a la cual después de una sonrisa de mi parte, le di una mordida a la tostada, los dos nos miramos y nos dispusimos a terminar de comer.

-entonces, ¿les hablas tu y yo los espero junto con Clark? – conducía el auto mientras la llevaba de regreso a su casa.

-si, me parece bien – Brenda se miraba enrojecida desde la mañana, al parecer aun no sacaba de su cabeza lo que hicimos en la noche, pero yo tampoco lo ocultaba, estaba muy feliz por eso y sé que ni ella ni yo, nos arrepentíamos.

-Brenda, llegamos – apague el auto y le mire a los ojos, ella abrió la puerta y regreso a verme, seria porque el frio de diciembre entraba al auto rápidamente, o le encanto mi sonrisa que no ocultaba para nada, en su rostro el enrojecimiento de sus pómulos, daba un tono rosado y dando un suspiro contenido por unos minutos e acerco a besarme, me tomo de improvisto pero logre corresponderle a tiempo sintiendo sus suaves labios junto a los míos.

-adiós Tonny, te amo – Brenda bajo sin esperar respuesta y cerró la puerta tras de ella, sentí que algo me falto decirle, le vi subir las escaleras y buscar su llave para entrar, en un impulso puro y sin pensarlo abrí la puerta del coche y salí asomándome por encime para solo gritarle:

– ¡TE AMO BRENDA!...te amo – ella me miro y sonrió nuevamente mientras abría la puerta, entro de espaldas mientras me miraba y lanzo un beso con su mano mientras sonreía, cuando cerró la puerta me di cuenta de lo que había hecho y en un instante entre al auto logrando ver en el retrovisor la cara más colorada que había tenido en mi vida. Encendí el auto y marche del lugar aun con un poco de rojo en mi rostro.

Brenda aun permanecia recargada a la puerta con las manos a la espalda y una sonrisa, la mas grande que había tenido en su vida. Tomo aire y lo solto en un suspiro largo, saco su teléfono y marco un numero, el cual le dio tres tonos contestando del otro lado.

-hola, ¿Qué pasa? – la voz de Lynda sonaba adormilda aun, se encontraba en su cama llena de sabanas acolchadas y esponjosas que mantenían el calor en quien se metiera en la cama, inmediatamente alejo el teléfono de su oreja por un grito de Brenda que termino por despertarla.

-¡HAAAAAA!

-¿que sucede?, Brenda calma, ¿que sucede? ¿Qué? ¿vas llegando de la casa de Tonny?, ¿pasaste la noche con el?, ¿grito te amo? HAAAAA – ambas amigas gritaban al teléfono con alegría con todo el aire que podía soportar sus pulmones – espera, ¡espera!, ¿Tonny?,¿el Tonny que conocemos?

-¡SI! ¡SI! ¡SI!, ¡HA SI! – Brenda se acordó de la cena de esa noche. – Tonny nos invita a pasar navidad con él, a ti y Terry, si, pasas por mi, o yo te mando mensaje con su dirección, si, si, nos vemos Lynda, tengo que bañarme. – Brenda colgó y al instante le entro otra llamada. - ¿hola?, hola Allen, feliz noche buena.

-oye, quiero invitarlos a ustedes a pasar navidad en una velada, te vengo a invitar si gustas y después invitare a Terry y a Lynda.

-No, gracias Allen, pasaremos con mi novio, disculpa el rechazo, pero él nos invitó antes.

-Entiendo... - la voz de Allen sonó decepcionada.

-oye... si gustas puedes ir, si, no hay problema, que Lynda te de la dirección, adiós Allen. – tras eso, Brenda colgó y metió a bañarse