Allen se encontraba dentro del auto mientras se comunicaba con Victoria.

-...bueno... ¿qué progresos me tienes?

--su nombre es Brenda Ross, es una camarera de un simple restaurante, tendrá mi edad a lo mucho, estoy viendo sus datos en estos momentos... al parecer estudia para abogada en una buena universidad, es becada...vaya tiene veintidós años, madre la chica es hermosa, tengo que admitirlo solo que no me dejara acercarme a ella...

-¡no quiero escusas!, ni me interesa que hagas con ella... solo quítala del camino a cómo te dije...-se corta la llamada

-¡No puedo creerlo!... una camarera- victoria por su enojo estrella contra el suelo una copa que sostenía en su mano y se queda pensativa.

Allen se queda pensativo por unos momentos mientras el auto avanzaba sin rumbo, levanta el teléfono de la limosina y le hace la llamada a su chofer.

-señor...

-llévame ahora al hotel... necesito relajarme para volver de nuevo.

-enseguida joven Walker...

Ya era hora de cerrar en el restaurante, el sol se iba metiendo por el lado oeste, casi ni se notaba por los edificios más altos y se veía a Brenda salir por el frente, solo en mente mantenía su casa y un merecido baño por el día laborado, solo que alguien la observaba, comenzó a caminar mirando si encontraba algún transporte de pronto la toman del brazo y ella mira para ver quien la sujetaba, era Allen quien para tranquilizarla le suelta de la mano.

-lo siento si te asuste, solo que enserio quiero conocerte...

-ya te presentaste antes, mas no me das confianza y prefiero evitarte... de verdad te atendí porque era mi trabajo más ya no estoy trabajando así que déjame ir y no me sigas.

-déjame ganarme tu confianza, dame una oportunidad y bríndame después tu amistad si llego a ser de tu agrado, si no, prometo retirarme y dejarte en paz.

-Sabes tengo novio...

-no te estoy pidiendo salir... aun, mas antes de eso podemos comenzar como amigos... anda déjame acompañarte pues las calles a estas horas empiezan a no ser seguras.

-me puedes acompañar en lo que encuentro un taxi mas no pienso hablarte.

-me parece perfecto, entonces solo yo hablare

Mientras caminaban, Allen se inventaba una historia que concordaba con su llegada.

- Como ya avía dicho, soy un hombre de negocios, vine aquí a la ciudad de Manhattan para la compra de unos terrenos para el comienzo de una nueva obra por parte de la empresa a la que trabajo, espero poder hacer que firmen el contrato para los arreglos, creo eso me tomara unas dos semanas, si lo consigo me dejaran quedarme unos dos meces para ir supervisando el comienzo de la obra.-dejo por un rato que el silencio corriera, que el ruido del motor de los autos y sus bocinas se apoderaran del lugar, sentir la brisa fresca que recordaba que el invierno avía comenzado, luego volvió a retomar la plática.

-sabes... no creí que vería a alguien encantadora en esta ciudad, puede que vaya muy rápido, más mi confianza me dice que puedo hacer así por un momento, pero si me paso quiero que me lo hagas saber y déjame volver a comenzar de nuevo, déjame conocerte como amigos por lo menos.

Brenda, desde el comienzo no le avía puesto atención pero mientras se alargaba la historia se iba olvidando de encontrar un taxi y se fijaba más en el hombre y en lo que le contaba, de pronto Allen alzó la mano apuntando a la otra esquina.

-mira ahí esta un taxi.

-ha si... bueno me tengo que ir.

Allen hizo una señal llamando al taxista, quien movió el vehículo hasta estar enfrente de ellos, le abrió la puerta, Brenda subió rápido y Allen mientras mantenía la puerta abierta, se agacho metiendo la cabeza en el auto sujeto su mano con fuerza lo suficiente para que no le soltara en el momento pero también para no lastimarla.

-te volveré a ver algún día- sonrió y beso su mano, cerrando la puerta después de eso el taxi partió de inmediato y en su lugar se estacionaba un Audi TT color negro de la marca Volkswagen del cual salió un hombre y se dirigió con Allen.

-aquí le entrego las llaves y su auto, ¿si encontró al taxista aquí?

-muchas gracias... todo fue perfecto.- Allen desembolso de su billetera quinientos dólares el hombre los recibió y cruzo la calle metiéndose en el establecimiento de la esquina. Allen se subió al vehículo y partió de nuevo hacia el hotel.

Una hora antes de que Allen abordara a Brenda, me encontraba en mi trabajo, una cómoda oficina con aire acondicionado, un escritorio de roble estilo inglés sobre el cual se encontraban papeles y contratos de vehículos nuevos, una computadora de escritorio y en la pared un reloj de manecillas y un calendario marcando el día cinco de diciembre del años dos mil, trece días desde que era Brenda se avía convertido en mi novia.

Clark entra en la oficina.

-oye... mmm no es bueno que seas muy supersticioso.

-pero es el día trece, algo malo pasara, ya paso una cosa en la mañana cuando fui a verla, creí que hay pasaría lo malo pero no.

-solo son días, todo mundo tendrá días malos y buenos.

-si pero es martes y llevo trece días con ella, es una señal.

-¿Sabes?... esto es absurdo, si quieres tomate el día, sal temprano privilegios de ser el jefe, sal a caminar, despeja tu mente, date un baño y acuéstate a dormir, mañana volverás a verla y todo estará bien.

-Gracias Clark, eso are nos vemos.

Me preparaba para dejar la oficina pero mi salida era interrumpida por una llamada a la cual me espere a contestar, era un negocio fuera de la ciudad en el cual Clark no podía asistir así que yo tenía que llevarlo personalmente.

-Ese negocio me tomara tres días terminarlo.- le comente a Clark.

-quisiera poder ayudarte pero velo de este modo, no podrá suceder nada malo contigo y Brenda si tu sales, o puede que esto sea lo peor, ¿no?

-bueno, me iré para regresar en cuanto pueda, te encargo todo ya que mañana se toman el descanso varios empleados, así que estarás casi solo.

-No te preocupes, así comenzamos tu y yo.

-Deséame suerte.

-suerte Tonny..., de verdad, suerte en todo amigo.

Partí fuera de la ciudad, el destino era a 10 horas en auto, y como iba a ser una compra de una gran flotilla no podía ponerme exigente con el cliente, no hubo problemas a mi llegada ni al encontrarme con el señor pero discutíamos el precio y la cantidad, no conseguía ponerme de acuerdo, además solo tenía una hora por día ya que el señor manejaba una empresa de camiones en el que mantenía la gran parte de su tiempo en los asuntos empresariales y administrativos.

Los días seguían pasando y el tiempo me avía llevado más del que creí, aun así me mantuve en contacto con Clark para saber cómo iba el negocio y a Brenda le hablaba en las noches antes de dormir.

Brenda me avía ocultado lo sucedido con Allen y que todos los días que no estuve iba a visitarla al trabajo y la acompañaba camino a casa, Brenda solo lo tomaba como un desconocido y no caía en las jugadas de Allen, era astuta en cierta forma pero no importaba como le dijera que se retirara de ella, el seguía insistiendo, así que terminó por aceptarle el ser amigos, Terry no mostraba celos ante Allen puesto que después de dejar a ella se juntaba con él y con su hermana y salían a divertirse a donde ellos quisieran y el pagaba. Discos, bares, eventos, fiestas privadas y a donde se pudiera con tal de írselos ganando poco a poco, lo cual estaba funcionando.

En los días que estuve ausente avían ocurrido, pequeños cambios que a futuro podrían hacerse grandes y yo aún no lo notaba, no me daba cuenta de los planes tan elaborados de mi hermano.

Regrese el quince de diciembre, pero el trabajo se avía amontonado que no nos dábamos a abasto con todos los empleados que teníamos, teníamos que hacer el contrato, pedir más vehículos a las empresas con las que teníamos tratos, incluso nos quedábamos hasta tarde para avanzarle al trabajo con el papeleo, no fue sino hasta el día veinte de diciembre cuando cerramos el negocio por excusa de las vacaciones navideñas, el cual no regresaríamos hasta entrando año nuevo, y todo el tiempo que avía perdido con Brenda esperaba poder compensarlo en esos días de descanso.

-por fin descansaremos, no crees Tonny.- Clark me hablaba mientras se recostaba en su silla llevando sus manos detrás de la cabeza y estirando sus piernas lo más que podía.

-sí, no he podido estar con Brenda todo este tiempo, lo compensare con unos detalles que tengo en mente.- lo decía mientras terminaba de firmar unos documentos.

-¿qué aras?

-esta vez no te diré.- mi rostro era cubierto por una sonrisa deseando ver a Brenda lo antes posible.

-¡ha picaron!, ya con esa cara me dices todo, bueno pues que te la pases bien esta navidad...

-oye Clark, no tienes con quien pasar la navidad ¿verdad?

-porque lo dices...

-te invito a pasar navidad en mi casa, pienso invitar a los amigos de Brenda también.

-así que le enseñaras tu casa...

-sí, yo he estado ocupado con el trabajo, ella también y además cada vez que salimos le provoco dudas de mí, así que quiero sincerarme más con ella.

-me parece perfecto, entonces nos vemos hay para la cena de navidad.-estrecho mi mano y nos retiramos tomando caminos diferentes, le marque al teléfono de Brenda para ver a qué hora podíamos quedar de vernos.

-¿bueno...?

-...hola Brenda, oye yo ya salí del trabajo, ahora empiezan mis vacaciones, ¿Tu a qué hora saldrás?

-ahorita estoy algo ocupada, pero pasado mañana tomare unos días, ¿Qué te parece si pasas a mi casa ese día?

-perfecto, solo dime a qué hora.

-a la hora que quieras, me avisas en la noche, nos vemos mi jefe quiere que siga atendiendo nos vemos, te quiero Tonny.

-Te quiero Brenda...-Unos días mas no me costaba nada esperar-pensé.