Los compañeros de Robaire a ver al líder tirado en el suelo inconsciente se aterraron, Jesse intentaba despertar a su amigo y ambos Aaron estuvieron llamando a una ambulancia. Se armó un gran alboroto en la escena, cosas como ¿Qué le pasó? ¿No es él chico de esa banda? podían oírse entre murmullos.

Pov Robaire.

Cuando sentí como me desmoronaba lo único que recordé fue las caras de los chicos... después de algunos minutos pude abrir los ojos, estaba aturdido y... algo mareado. Dándome cuenta que estaba en una camilla me confundí, ¿que me había pasado?
Trate de aclarar la vista y cuando lo menos me espere note que los demás estaban conmigo.

—Ah... ¿chicos?... —se talló sus ojos cansado.

—¡Robaire! —exclamó él rubio aliviado y fue a verlo—Ah, pensábamos que te había pasado algo.

—¿Estás bien Rob? —dijo él de la gorra preocupado—Nos tenías preocupado.

—Ah... en primera, ¿qué me pasó? —él líder trato de sentarse en la camilla.

—Te desmayaste... él doctor supo que no te has alimentado bien últimamente... ¿es cierto Rob?

—Ah... —bajó la mirada avergonzado—Ugh... es cierto, no estoy comiendo bien. Ayer no cené y hoy no desayuné.

—Ay Rob... —él basquetbolista se le acercó preocupado—Eso está mal, si es por Tae podemos entenderlo; pero debes prometernos que te alimentaras mejor, ¿entendido?

—Sí, lo siento en verdad...

En ese momento Henry entro a la habitación junto con él doctor, él manager se despidió del doctor y se acercó a los chicos.

—Ah... hola Henry. —saludó él superestrella líder avergonzado—Yo... puedo explicarlo...

—No, no es necesario. Perdón por no estar a pendientes de usfedes, sólo vine a decirles que en unos cuantos días nos iremos a la casa de playa, ¿saben cuál es, cierto?

—Oh... sí, yo sí. ¿Nos quedamos ahí?

—Sí Jesse, me comunicaré con la gente del traslado para que lleven a Tae a la casa. Él doctor me ha dicho que puede que se mejore en el clima de allá. —tosió para afirmar su voz y los miro—Robaire, siento decirte que deberás que quedarte aquí hoy. Ya mañana temprano ya te recogeré.

—¡Agh! ¡¿por qué!? ¡si me siento bien! —se quejo enfadado.

—Son órdenes del doctor, no reclames. —le advirtió al líder—Bueno, debo irme. Permiso, cuídense chicos. —se despidió y salió de la habitación quedando en completamente silencio.

—...Bueno, ¿quién tiene hambre? —dijo él de la gorra para romper la tensión.

Después del aquel día, Robaire se mantuvo en la habitación reposando. Pero en la misma noche no dejo de pensar en él rubio surcoreano... no tenía ni la menor idea de porque sus sentimientos, era demasiado confuso... pero incluso maravilloso; suspiro y cerró sus ojos para por fin dormir.

10:12 AM
Hospital central de Toronto

Días después de que le dieron de alta al moreno, él chico estuvo recordando varias cosas antes del accidente. La vez del apocalipsis panda, las experiencias que vivió con sus compañeros... y más con Tae. No entendía el porque se sentía tan abrumador por él asiático... lo veía y pensaba: ¿Por qué me afecta tanto?
Siempre considero que Tae tenía un encanto natural, después de todo él era la cara bonita del grupo. Por eso mismo aveces se le quedaba viendo en ocasiones sin motivo alguno, o sentía su cara prenderse en llamas cuando el mostraba una sonrisa dulce. Así debían sentirse todos ¿No es así? pues al parecer, no.

Durante en una tarde él afro-canadiense decidió ir a visitar al asiático, antes de ir al hospital compro un ramo de gardenias blancas y camino viendo el ramo de una forma... inusual, como si estuviese enamorado. No se estaba dando cuenta de la forma que actuaba, pero igual no le importaba por el hecho que traía una gorra y un cubrebocas para no ser identificado. 

—"Cause you have opened my eyes and stolen my heart, You make me believe that love can be hard, And I can never survive a minute apart" —tatareó a lo bajo. Minutos después llegó al hospital y se registró para visitar a Tae, aunque lo que no sabía era que llevaría una gran sorpresa...

Robaire camino con una sonrisa inconsciente a la habitación del chico, imaginando las posibilidades de ver al rubio despierto; viendo hacia la gran ventana y con una mirada angelical...

Se vale soñar, ¿No?

Pasando por el pasillo de las habitaciones donde se quedaba Tae, siguió tarareando la aquella canción escrita por su compañero; mientras olía el ramo de flores.

—"You are my one true love, my one true love; My heaven above, my one true love..."

Miro hacia el fondo del pasillo y quedó atónito, los padres estaban apenas saliendo de la habitación del coreano... ¡¿qué demonios?!

—No puede ser cierto... —apretó su puño desocupado y camino ferozmente hacia ellos—¡Oigan ustedes!

Los padres del coreano lo vieron acercarse, pero no de una forma amigable... él señor Kim Tae Sung observó determinamente al joven y de sorpresa recibió un empujón fuerte.

—¡¿Cómo se les ocurre llegar así de la nada?! —exclamó Robaire.

Él señor se puso a la defensiva viendo al superestrella—¡Tengo el derecho de ir a verlo!

La señora Seo Hye Joon se asustó ante eso, trato de calmar a su esposo pero no le hizo caso. Él coreano empezó a discutir con él moreno a gritos, Henry a lograr escuchar el gran escándalo llegó de inmediato y fue hacia ellos tres.

—A ver, ¿qué ocurre aquí? aquí es un hospital, es prohibido gritar en esta zona. —reclamó él manager.

—Los padres de Tae apenas llegaron a verlo... —dijo molesto él moreno.

Henry los miro seriamente y cruzó sus brazos—Hasta que al fin llegaron... ¿saben cuantos mensajes y llamadas les estuve mandando? ¡miles! ¿cómo se les ocurre hacer eso?

—¡Sí! ¿acaso ustedes no se preocupan por su hijo? ¡¿eh, eh!? —él líder los fulminó con la mirada.

—No veo más que a dos ridículos haciéndonos reclamos, ¡él debió tener una carrera en Corea! Aquí sólo sufría peligro, ya lo pudimos ver esto es culpa de la empresa.

—Además, nosotros queríamos que él fuese un idol. No un Hip-hopper. —dijo la madre de Tae.

En eso él afro-canadiense recordó el día que su compañero le había dicho sobre de volverse idol, él rubio no quería ser uno; la presión en esa zona de la música k-pop era tan horripilante que no sabía si... saldría con vida. De forma impulsiva, miro a Tae Sung con furia; ¿significado? peligro.

—Malditos... ¡ustedes no saben nada sobre él! —le dio una bofetada al señor en la cara.

Él hombre se sobo la cara antes de mirar con furia al joven—¡No me faltes el respeto, estúpido mocoso! —grito antes de propicionarle un fuerte empujón.

—¡Cariño! ¡detente! —exclamó Hye Joon.

Él moreno sin mas recibió el empujón y se enfrentó al señor metiéndole un golpazo en la cara; ambos hombres comenzaron a pelearse a golpes. El manager a querer detenerlos... recibió un putazo en la cara por parte de Tae Sung que causó que se cayera al suelo. Robaire espantado fue a socorrer a su manager ayudando a pararse, con la rabia que sentía aún más se aventó al señor a darse sus últimos golpes.

—¡Esto es por golpear a mi manager malparido! —golpeó su cara sin piedad, Henry alarmado lo separó con fuerza del señor y este empezó a patalear—¡Sueltame! ¡todavía no termine!

—Es hora de irnos, ¡quédate quieto! ¡¿oíste!? —se lo empezó a llevar como si fuese un gato rabioso afuera del hospital.

—¡Aagh! ugh...—se calló enojado cruzando sus brazos, viendo a los padres les gritó alto—¡ÇA NE VA PAS TENIR, ILS VONT EN PAYER LES CONSÉQUENCES!

—¡Silencio Robaire! —le reclamó al cantante en voz baja, a salir del hospital; pero por sorpresa había muchos periodistas que hizo que entrara en pánico—Ay no... —miro a ambos lados y suspiro—Perdón por esto, es una emergencia. —cargó al moreno como un saco de papas y corrió hacia el auto.

—¿¡Eh!? —se roburizo de la vergüenza en ese instante, al ver a los periodistas de lejos se avergonzó aún más y se puso la cara para que nadie lo viera.

Cuando entraron al auto, el manager encendió el vehículo y de inmediato salieron del hospital a la velocidad de la luz hacía el hotel. Después de unos minutos llegaron y al estar enfrente de la puerta de la habitación entraron ambos.

—Ay, ay... voy por una bolsa de hielo para mi cara... —dijo él manager sobando su mejilla yendo al refrigerador.

Jesse levantó la mirada cerrando su livro y se asustó al ver a su compañero golpeado—¿¡Rob!? —se paró del sillón y fue a verlo—¿Qué te pasó? estás todo amoratado...

—Meh... me peleé con los padres de Tae, estoy bien. —se sentó en el sillón desanimado.

—No, no lo estás... —dijo Aaron Z acercándose—Voy por el botiquín, vengo rápido. —se fue al baño corriendo.

Él afro-canadiense suspiro negando ligeramente su cabeza, en el momento que el basquetbolista llegó con el botiquín sus compañeros empezaron a curar a su líder entre todos.

Luego de un buen tiempo los chicos estaban todos juntos en la sala conversando sobre lo sucedido, Robaire masticó su barra de chocolate y gruñó.

—No puedo creer del como los padres de Tae no se preocupan por su hijo, es... ¡inexplicable! ¿¡cómo es posible esa estupidez!? ¡mi mamá si yo estaría en coma estaría siempre conmigo! agh...

—Sí, sí ya cálmate un poco amigo. —dijo él de la gorra.

—Estás muy enojado Rob, cálmate. —él rubio le sobo la espalda—vamos a ver una película, ¿vale?

—Aah... ya que, vamos.

En ese entonces los chicos armaron un rincón de almohadas en la sala, hicieron palomitas y trajeron los refrescos que había. A encender la TV buscaron los CD que habían en la habitación, aunque la mayoría eran de puras tragedias; así que lo mejor que pudieron hacer es ver una de romance.

Todo empezó con pura normalidad, la película contaba de una adolescente que tiene una aventura en el reino de lo gatos. ¿Qué era lo extraño? pues, mientras avanzaba la película involuntariamente él líder se empezó a imaginar a él bailando vals con Tae Young... Un momento, ¿¡y por qué se imaginaba a Tae en vestido!?

Él moreno se sonrojo bastante sintiendo su piel ponerse de gallina y trato de razonar que había imaginado—Ah...

Él rubio notó la expresión de su compañero y lo vio curioso—¿Sucede algo?

—Ah... bueno... yo... ¡tengo qué ir al baño! —se levantó rápido y salió volando de forma torpe al baño.

"¿Los sentimientos empezaron a florecer?"

Holaaa, gracias por haber leído este nuevo capítulo. les agradezco mucho por todo, nos veremos a la próxima!

Traducción: ¡ESTO NO SE VA A QUEDAR ASÍ, VAN A PAGAR LAS CONSECUENCIAS!