Capítulo 11.
*Mía Parker*
-¿Para qué es esto? - Le pregunto a Andrew sobre los dos tiquetes que me acaba de entregar.
- Son entradas para un foro literario, iré con algunos amigos - Dice mientras se sienta en una de las sillas del comedor. Lo miro extrañada, no suele invitarme a sus planes - Pensé que te gustaría ir y ahora que estas estudiando literatura te vendría bien.
-Mmm esta bien... ¿Cuándo es? - Digo y me siento a su lado.
-Este sábado en la tarde, puedes llevar a una amiga si quieres, no dura mucho, a menos que quieras quedarte a comer algo - Me responde y le da un mordisco a la manzana que tiene en la mano.
-Así que a una amiga ¿Eh? - Lo miro con una sonrisa picara - ¿Desde cuando Andrew Parker está tan interesado en que lleve a una amiga? - Mi hermano casi se atora con un pedazo de su manzana cuando le digo esto.
- Pues no se, era para que no estuvieras sola - Se levanta de su asiento - ¿Sabes qué? No importa, solo quería tener un buen detalle con mi hermana.- Se da la vuelta listo para irse, pero esto no puede acabar aquí.
-Y con Emma también- Finjo que estoy tosiendo.
- ¿Qué has dicho?- Me pregunta con su típico tono amenazador.
Que pena que no funcione conmigo hermanito.
-Lo has escuchado perfectamente - Le digo y me rio al ver su cara de enfado, su mayor técnica de defensa es enfadarse cuando no quiere admitir la verdad.
- Fingiré que no escuche nada -Sigue caminando hacia la puerta que da salida a la casa - Mal agradecida - Dice y finge que esta tosiendo, tal y como lo hice hace un instante.
-¡Vaaale tu ganas, iré al foro! - Grito antes de que salga completamente por la puerta.
Sabe disimular igual de mal que yo, al menos en eso nos parecemos, porque en el físico para nada; en primer lugar lo que más nos diferencia es nuestro cabello, el de él es ligeramente crespo y el mío es totalmente lacio, nuestros ojos tienen tonos totalmente opuestos, los míos claros, los suyos totalmente oscuros y por último nuestros rostros, el suyo parece esculpido por los Dioses - Aunque me cueste admitirlo, porque ... ¿A quien no le cuesta admitir que su hermano es mucho más guapo? - Pero el mío no es que resalte mucho, aunque tampoco me quedo atrás, soy bastante simpática, pero no al nivel del tonto de Andrew, en fin, a lo que quería llegar es a que mi hermano no sabe ocultar su interés por Emma y yo ni siquiera se que se traen esos dos.
Me levanto de la silla y me dirijo a mi cuarto, tomo mi celular y le envío un mensaje a Emma avisándole acerca del foro de este sábado, luego abro el chat de Sam y me quedo pensando si escribirle algo. Nuestra historia es algo complicada, siempre hemos sido grandes amigos, pero algo cambio en mi forma de verlo, siendo exactos desde aquel día.
¿El problema? no soy capaz de confesarlo, mi mayor miedo es ser rechazada y tampoco quiero dañar nuestra relación por algo que probablemente sea pasajero. Sin pensarlo más marco su número y espero a que conteste.
- Hola Sam -Digo cuando contesta.
-Hola Mía - Contesta su sensual voz al otro lado de la lineal.
Algo que no entiendo es si me llama por mi nombre o si está declarando que soy suya. Probablemente ambas.
- ¿Ocupado? - Pregunto mientras me acuesto en mi cama para estar más cómoda.
-Si, ando algo ocupado, pero para ti siempre disponible - ¿Por qué los hombres son así? es tan difícil entenderlos ¿Por qué no me haces un hijo ahora? Para eso si no estas disponible ¿verdad?
- No para todo - Digo sarcástica en un susurro casi inaudible, pero que estoy segura que escucho, dado que suelta una pequeña risa- Solo quería saber si podíamos vernos el viernes en la noche, quizás a ver una película-
-Me paso por la noche a tu casa - Me responde - Escoge tu la película, pero nada de comedias románticas, sabes que las odio, mejor una de acción.
-¡Pues a mi no me gustan las de acción!- Exclamo.
La verdad me gustan todo tipo de películas, pero picar un poco a Sam es divertido.
-Entonces una de terror para que te refugies en mis brazos- Dice sin ningún rastro de broma en sus palabras.
-No voy dejar que te aproveches de mi mientras como palomitas, entonces ni hablar de ver una de terror - Le respondo y me rio.
-Esta bien, esta bien, veo cualquier película por ti, aunque si me quedo ciego por ver esas escenas románticas tu eres la responsable.
- Entonces elegiré la película más empalagosa y más romántica que exista.
-¡Que mala!
- Nos vemos el viernes- Le digo con una sonrisa estúpida en la cara.
-Vale ¿quieres que invite a los chicos?- Pregunta.
Así es como dañas un momento en un segundo.
- No se, como quieras - Di que no, di que no.
- Cuantos más mejor ¿no? - Idiota, idiota, idiota - Me paso el viernes entonces, un beso.
Cuelgo sin despedirme ¿Tan difícil era adivinar que solo quería que fuéramos los dos o el simplemente no quería ir solo conmigo? suelto un largo suspiro mientras abrazo una almohada y permito que el sueño invada mi cuerpo.
¿No recuerdas todo lo que pasó en el verano Sam?
*Emma Meyer*
Estoy sentada detrás de la barra de servicio de la cafetería revisando algunos mensajes que tengo y encuentro el de Mía. Me sorprendo al ver que se trata de otro plan, aunque esta vez es uno que me gusta más. Se trata de un foro literario, una gran opción cuando estudias literatura, dado que comentar y escuchar opiniones de distintas personas respecto a un mismo libro me parece muy emocionante. Le dejo un mensaje agradeciéndole por invitarme y asegurándole que iré.
En lo que estoy en mi celular se escucha que la campana de la puerta suena, así que levanto la vista y me encuentro con Cris, el chico del auditorio.
-Hola Emma-Me saluda sonriendo ligeramente y se acerca a la barra de servicio.
-¡Hola Cris!- Le devuelvo la sonrisa- ¿Qué te puedo ofrecer?
-Vine por algo de beber- Responde y luego se ríe nervioso - Y a saludarte.
-Oh...- ¿A saludarme? - y... ¿Cómo sabías donde podías encontrarme? - Le pregunto curiosa.
-Mía me dijo donde trabajabas- Hizo una pausa para sentarse en una de las sillas de detrás de la barra- Así que me pareció oportuno venir a verte.
Le sonrío, que tierno que se tomara el tiempo de venir a verme, se siente bien volver a tener amigos otra vez.
-¿Qué te sirvo?
- Un té negro, por favor - Responde y apoya sus codos en la barra.
Me volteo para comenzar a preparar su bebida y siento que sus ojos me están estudiando, la verdad es difícil no sentirse nerviosa cuando un chico lindo no deja de mirarte. Cuando termino pongo con cuidado la taza de té enfrente de Cris.
-Gracias - Dice y le da un sorbo a la bebida - Quedó delicioso- Le sonrío agradecida - ¿Qué pasó el viernes en la casa de campo en la mañana? Tuvimos que irnos temprano.
-La verdad nada interesante - Le miento- Los padres de Mía no se enteraron de nada.
-¡Menos mal! todos estabamos preocupados por Mía, su hermano no se veía muy contento y también nos dañó parte de la fiesta, yo estaba muy a gusto bailando contigo - Dice Cris y sonríe.
- Pues ya habrá otra ocasión para bailar-Río tímidamente.
-Estoy esperándola con ansias- Responde y me mira fijamente.
*Mejillas rojas activadas* Como era de esperarse me sonrojo, pero intento disimular alejándome un poco de Cris para secar algunas tazas que no estaban mojadas y me vuelvo para mirarlo sin saber que decir, pero en un silencio que no se torna incomodo, hasta que comienzo a hablar de cosas triviales; sobre nuestras carreras, libros y otras tantas cosas que no tienen tanta importancia. Así durante varios minutos.
...
-¿¡Me estas diciendo que nunca has leído Romeo y Julieta!? - Exclamo sorprendida.
-Exacto- Dice Cris con Expresión tranquila - Nunca he sido fan de esos dramas amorosos, además Romeo me cae mal.
Suelto una carcajada.
- ¡Pero si ni siquiera te lo has leído! ¿Cómo te puede caer mal? - Le pregunto aún entre risas.
Cris dice algo pero no escucho su respuesta, porque la campana que anuncia la entrada de alguien en la cafetería hace que deje de prestarle atención y más cuando veo que se trata de un hombre que puedo reconocer a metros de distancia.
Andrew.
El lleva una buso de color negro y vaqueros, bastante informal, pero aún así se ve realmente atractivo, da un paso al frente y me mira, escrutándome con sus ojos oscuros mientras andando hacia la barra.
¿Cómo hace para aparecer en todos lados?
Al parecer Cris se da cuenta de que no le estaba prestando atención y se gira para mirar quien ha captado mi atención, ambos observamos en silencio como Andrew se sienta dos puestos lejos de Cris, apoya sus codos en la barra y me mira exclusivamente a mi con una sonrisa en los labios.
-Hola Emma - Dice con esa voz gruesa intimidante - ¿Podrías atenderme?
Salgo como puedo de mi estado de shock. Hacia tiempo que Andrew no se pasaba por la cafetería y la verdad es que no esperaba verlo justamente hoy.
-Claro - Camino hacia la izquierda para quedar frente a Andrew y tomar su pedido - ¿Qué va a pedir? - Andrew no deja de mirarme fijamente a los ojos y de sonreírme, lo que me dificulta concentrarme.
- Teniendo en cuenta que no estas en el menú... Me veo en la obligación de elegir algo más - Susurra, de tal manera que solo yo escucho lo que acaba de decir - Lo mismo que la primera vez - Dice más alto esta vez.
Por supuesto que me acuerdo que la primera vez que vino pidió un café en leche, pero no pienso admitir que después de tanto tiempo aún lo recuerdo.
- ¿Qué era? - Le pregunto y agradezco que mi voz no se cortó en ningún momento.
Andrew pierde su sonrisa por un segundo pero luego vuelve a recomponerse.
- Un café en leche - Dice sin dejar de mirarme fijamente.
Me alejo de la barra para preparar la bebida y si antes estaba nerviosa por tener que soportar la mirada de Cris, ahora estaba peor soportando la mirada de dos chicos extremadamente guapos.
Intento sincronizar lo mejor que puedo mis movimientos pero no puedo evitar que se me caiga una maldita cuchara de entre los dedos, por lo que tengo que agacharme para recogerla, espero que no hayan tomado eso como que quería enseñarles el trasero, en verdad fue un accidente. La idea de que ambos chicos estuvieran observándome el trasero hace que mis mejillas vuelvan a sonrojarse.
Cuando termino le entrego rápidamente la bebida a Andrew y luego me alejo para continuar hablando con Cris. Siento que no es el lugar ni el momento adecuado para dejar muchas cosas en claro con Andrew.
-¿En qué íbamos? - Le pregunto a Cris mientras me seco las manos con mi delantal.
- Íbamos en que te estaba invitando a salir este sábado- Responde Cris.
-Ah - digo ladeando la cabeza - Es tentadora la propuesta Cris, pero yo...
-No puede - Me interrumpe Andrew desde donde está sentado.
¿Pueden imaginar mi cara en ese momento? estaba totalmente confundida ¿Desde cuando Andrew decidía si podía salir?
-¿Perdona? - Digo elevando un poco más la voz y mirándolo enojada. Andrew me mira y a pesar de notar mi enfado mantiene esa estúpida sonrisa en el rostro, luego se gira para mirar a Cris esperando su respuesta.
-Creí que estabamos hablando Emma y yo - Le dice Cris apretando su mandíbula intentando controlarse. Debo aceptar que eso se vio realmente sexy.
Nuevamente vuelvo a mirar a Andrew y hace el mismo movimiento de apretar su mandíbula sin dejar de mirar a Cris ¿Es qué estos dos piensan matarme de un ataque al corazón? ¿Por qué aunque estén enojados se ven lindos? Cálmate Emma, no es momento para pensar en eso.
¿Cómo sería un trío? Cosas que se piensan pero que nunca se dirán...
-Emma irá este sábado con Mía a un foro literario - Comenta Andrew y bebe un sorbo de café.
-Creo que ella puede decírmelo sola - Le responde Cris mirándolo fijamente.
-Qué lastima que ya lo he hecho yo - Dice Andrew con una tranquilidad que hace enojar un poco más a Cris.
-¿Tiene algún problema? - Le pregunta con un tono de voz un poco más elevado pero manteniendo la compostura - ¿O es que la edad lo hace exaltarse con facilidad?
Agradezco que hay pocas personas, porque de lo contrario sería aún más grande el alboroto.
Andrew se levanta de su asiento, ahora sin ningún rastro de tranquilidad en el rostro. Yo salgo corriendo de la barra para evitar que esto llegue a mayores y alcanzo a ponerme en medio de ambos. Jamás me sentí mal por mi estatura, pero en este momento me siento como una hormiga intentando separar a dos elefantes ¡Ambos son realmente altos!
Un dato que no es importante pero que se tengo que decir, es que siempre me burlé de las escenas donde la chica separaba a los dos tontos que peleaban por estupideces, pero la verdad es que nunca me imaginé ser "Esa chica".
- Ya es suficiente - Les digo a los dos hombres que tienen las respiraciones agitadas a causa de la furia - Andrew es mejor que te vayas.
A pesar de escucharme se queda un minuto más sosteniéndole la mirada a Cris, hasta que por fin se separa un poco, saca su billetera y deja sobre la barra un billete.
- Emma gracias por el café - Dice Andrew nuevamente tranquilo como si nada hubiera pasado.
-No, gracias de nada, aquí no puede venir a hacer escandalo por una estupidez, no solo peligra su ego sino mi trabajo ¿Comprende? - Me atrevo a decirle cuando va caminando hacia la salida.
-La veo el sábado- Dice en la puerta de la cafetería..
- ¿Qué le pasa? - Pregunta Cris frunciendo el ceño.
Debo procesar lo que acaba de pasar, porque esta vez realmente que no lo entiendo, necesito hablar seriamente con Andrew, no puede aparecerse de un momento a otro y hacer este tipo de escándalos.
¿Qué le pasa? A mi no me va a venir a hacer escándalos.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top