Capitulo 4
Lo que un día fue y ya no lo es más, es lo que más lastima el débil corazón de KyungSoo. Los recuerdos guardados en su recóndito corazón se abren tan libres como aquel día gris para su joven vida. El dolor está ahí, en su corazón, palpitando de solo chocar con aquellos ojos melosos y penetrantes hasta los huesos. Un sentimiento no deseado, pero quizás el más fuerte, ahora vuelve mucho más intenso que antes y KyungSoo solo quiere ignorar lo inevitable.
Pobre ingenuo.
Y pensar que si alguna vez volvía a toparse con Sehun, el sentimiento de amarlo con todas sus fuerzas ya no estaría, y al contrario, estaría el rencor y odio, pero KyungSoo sigue siendo un ser puro y perdona fácilmente, sin embargo, no olvida con la misma agilidad.
-Kyung, ¿Por qué tard-Taeyeon se corta las palabras al ver a Sehun allí parado viéndolos con ojos vivaces y ¿Furioso?-. Sehun, ¿Qué haces aquí?-pregunta molesta.
Lo mira tan penetrante como este mira a KyungSoo. TaeYeon abre los ojos como platos. ¡La siguió!
-No te importa –las palabras frías -como el hielo- son las tan familiares que hacen doler el corazón de KyungSoo-. Hola, Kyungsoo –el mayor no deja de mirarlo. No puede separar su vista de su menuda belleza.
El menor siente una corriente eléctrica recorrer su cuerpo al escuchar esas palabras dirigidas a sus ser por Sehun. Su voz no ha cambiado nada. Siempre tan fría y galante como siempre ha sido.
Kyungsoo se siente cada vez más débil. Sus piernas tiemblan como la gelatina. Su corazón palpita erráticamente. Pareciese que va a salir de su caja torácica. Su voz está perdida. Su cabeza comienza a dar vueltas. Esta desmayándose.
-¡Kyungsoo! –alerta Taeyeon y Sehun. Jongin está en Shock.
-¡Mami! -los nenes, al igual que Taeyeon y Sehun, gritan asustados.
Eso fue todo para que Kyungsoo se desmaye. Jongin ocupado con ambos niños no pude hacer nada. Pero gracias a Dios, Kyungsoo no se golpea en el suelo, Sehun lo toma fuerte de la cintura. La cabeza de este se apoya en su pecho y el aliento de menor chocando suave contra él.
-Kyungsoo –Sehun lo acomoda más firme entre sus brazos.
-No lo toques –Jongin deja a los pequeños en el suelo, al cargo de Taeyeon y se acerca hasta posicionarse frente a Sehun. Toma a Kyungsoo entre sus brazos, arrebatándolo de los contrarios. Jongin lo carga en pose "Princesa". La cabeza de Kyungsoo apoyada en su pecho, tal cual un ángel.
-¿Qué le paso a mami, papi?-SooHun jala de la playera de Jongin y este de inmediato baja su vista hasta su pequeño.
-Nada, Hun. Solo tendremos que regresar a casa –Sehun y Jongin, ambos, teniendo una guerra de ver quien puede poner la mirada más furiosa, penetrante y amenazadora se contraatacan-. Vamos chicos. Llevaremos a mami a casa –Jongin es el primero de caminar fuera de ese círculo con dirección al estacionamiento estando completamente confiado que los niños le seguirán.
-Sí, papi –ambos nenes sujetan una mano de su tía Taeyeon y le dan la espalda al "Extraño".Taeyeon le manda miradas reprobatorias a Sehun antes de hacer lo mismo que los nenes.
Sehun se queda unos segundos mirando cómo se marchan, pero no. El no dejara que se marchen. Ellos son de él tanto como lo es KyungSoo, y ese hombre, no se los llevara.
-No te llevaras lo que es mío, Taeyeon –sin previo aviso, Sehun toma a los dos pequeños en brazos y sale a paso rápido del parque de diversiones, dejando a una Taeyeon en total Shock mientras grita que se los devuelva.
*
Kyungsoo siente un leve dolor de cabeza, sus ojos pesados y unas tremendas ganas de vomitar avasallan su garganta. Con malestar comienza a abrir sus ojos. Una vez semi-abiertos mira su alrededor un poco borroso, sin embargo, logra percibir que está en su habitación.
-¿Cómo te sientes, amor? –la voz de Jongin hace que Kyungsoo ponga sus expresivos ojos sobre él.
-¿Qué paso? –pregunta. Su garganta arde. Esta seca.
-Te desmayaste –le informa.
-Oh. Mi cabeza duele un poco, pero eso es todo –sonríe débil importándole poco el malestar porque Jongin esta con él y eso le hace sentir muy bien.
Los recuerdos de un Sehun más maduro, pero con las mismas facciones que hace años, se pasan pos su mente le hacen tener miedo, pero no sabe de qué.
Quita su vista de Jongin y con ella misma busca a sus pequeños.
-¿Los niños? –inquiere lo que Jongin evitaba.
A KyungSoo se le hace extraño que no estén con él ahí. Ellos son como pequeñas garrapatas regordetas pegadas a sus papis. No pueden estar más de 1 hora sin ellos y Kyungsoo sabe que ya ha pasado más de lo debido.
-Con Taeyeon -miente.
Él sabe perfectamente bien que en este momento Taeyeon, Baekhyun y sus suegros más las personas que él les ordeno que buscaran a sus pequeños y al mal nacido de Sehun (quien es el responsable del paradero de los pequeños).
Jongin se puso tan furioso cuando vio como Taeyeon le decía que ella no pudo evitarlo, que Sehun se había marchado con los niños. Él quiso ir y buscarlos con ellos, pero todos se lo impidieron diciendo que si Kyungsoo no lo veía a su lado, pensaría que algo andaba mal, así que decidió quedarse.
-Ah. Ellos... ¿Están bien? – KyungSoo no puede evitar tener un mal presentimiento.
-Claro -Jongin se levanta del sillón en donde esta y camina hasta sentarse junto a Kyungsoo, en la cama-. Amor, ¿Quieres otro angelito?- el nombrado le mira y suelta una risita dulce para Jongin.
-¿Por qué la pregunta? –el más alto comienza a acariciarle el torso de su mano derecha. Kyungsoo se mueve un poco para recargar su cabeza en el pecho de su esposo.
-Responde –le alienta con una sonrisa. Kyungsoo niega por lo infantil que su Jongin puede ser.
-Claro que me gustaría tener otro angelito, Jongin. Eso sería una hermosa bendición. Un pedazo tuyo y mío, una bendita alegría –Jongin sonríe con felicidad desmesurada. Esa es una respuesta que ya se esperaba de su pequeño amor, pero escucharlo de su dulce y hermosa voz y, que lo confirme, es lo máximo.
-Si te dijera que ese nene ya viene en camino ¿Qué me dirías?-Kyungsoo se incorpora un poco más en la cama; sus palmas se apoyan en la cama, sus ojos bien abiertos miran hacia los ojos alegres y juguetones de su Jongin.
-¿Q-Qué? –vacila.
-Así es mi nene, tu pedazo y el mío, está creciendo aquí –Jongin pone una de sus manos en el plano abdomen de Kyungsoo, o al menos, por ahora estará plano-. Imagina lo felices que se pondrán los niños con la noticia de que su mami espera a su hermanito –Kyungsoo sigue en Shock-. Amor, estas embarazado. Tienes 3 semanas –Jongin se acerca a su bonito; Lo abraza dulcemente, pero después se acerca hasta su oreja, así rozando su caliente aliento contra ella-. Fue esa noche que salimos a cenar y lo hicimos como locos más de 7 veces –su bonito se sonroja de sobre manera y baja su cabeza avergonzado.
-Y-Yo... E-Estoy... Embarazado –logra decir y Jongin suelta una carcajada.
-Lo estas, amor. ¡Estamos esperando otro ángel para la familia Kim! -Jongin le toma del mentón y luego le suelta un pico en los labios; uno tan dulce que KyungSoo desea muchos más-. Gracias, bebé –le abraza con delicadeza; tal cual una rosa roja.
-Jongin -Baekhyun entra agitado a la habitación. Kyungsoo y él lo miran interrogadoramente-. Ven- pide y la voz de Baekhyun es una clara advertencia de que algo anda mal.
-Ahora vengo, bebé –Jongin se separa del abrazo que él mismo formo. Kyungsoo se queda solo en la habitación con un montón de preguntas y confusiones.
*
-¡M-Mami!-Solloza con demasiado sentimiento, SooHun.
-¡Q-Quiero a Papi y Mami! –secunda SooMin.
-Vamos pequeños, no lloren –Sehun se encuentra conduciendo a su departamento privado en Gangam.
-Papi, papi, papi, papi –lloriquea SooMin.
-¡Él no es tu papá, YO soy tu papá! –le grita furioso pero al segundo se arrepiente al ver el llanto y los morros que su pequeña suelta-. Yo... no quise –la niña abraza a su gemelo (ya que ambos van juntos en el asiento del copiloto con el cinturón de seguridad abrazándolos).
Sehun es egoísta por sonreír enternecido al ver a esos dos pequeños niños, llorando, haciendo esos pucheros únicos y tiernos, abrazados; cuidándose el uno del otro, ese es el fruto de su amor con la persona que más daño hizo y amo en este mundo, su KyungSoo. Esos niños son el mayor rechazo que hizo a su niño, su ángel.
Sehun no tiene derecho de sonreírles. Él no los quiso cuando se los ofrecieron en bandeja de plata, y ahora que su corazón tierno e infante, late por un extraño que llaman "papi", se dispone a luchar, se dispone a ser egoísta por última vez y traerlos de vuelta.
-Ustedes tanto como su Mami, son míos –recita.
Lo poco que queda de viaje a su departamento, los dos pequeños, así abrazados, se quedaron dormiditos. Sus respiraciones son música para los oídos de Sehun. Y se hace la pregunta que ya hace años rondaba por su cabeza pero jamás reunió la fuerza para preguntarse: ¿Cómo pudo seguir respirando, seguir viviendo sin tener a esos dos seres cerca de él? Y sobre todo, ¿Cómo pudo negarlos y negarlo a él, a su KyungSoo?.
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¡Holuuuuuuuu seres del mas allá!
Bueno, solo vine rapidin a dejarles esta actualización. Ando que me muero (¡Si, ando enferma hasta los huesos!), pero en verdad les deseaba actualizar algo y pues este fue rápido.
En verdad espero que les haya gustado el capitulo. Mañana veo que les actualizo para que no me odien.
¡Las amito muuuuuusho!
¡¡Que tengan una dulce y linda noche!
**Disculpen mis altas ortográficas**
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