-- ¡Nada de crédito!, ¡Solo efectivo! _ El dueño le respondió en el mismo tono que Seiya le había hablado, serio y frío.

-- ¡Tarjeta de crédito!, .... ¡Es una tarjeta de crédito! _ Seiya un poco irritado le respondió al señor, agitando levemente su tarjeta a los ojos del dueño.

-- ¿Cuánto es?, .... ¿Dime el precio? _ Después de unos segundos en silencio, Seiya le pregunto por la tarifa.

-- ¿Qué? _ El dueño que no había prestado atención por estar viendo a Serena, miro confundido el rostro de Seiya.

Serena que estaba al lado izquierdo de Seiya, se aburrió de estar en ese lado y simplemente camino por detrás de Seiya y se fue hacia su lado derecho.

-- ¿Cuánto es la tarifa por una habitación para toda una noche? _ Muy serio y empezando a irritarse Seiya le pregunto, para luego dirigir su mirada a su cartera y guardar su tarjeta.

-- ¿Necesitan la habitación por horas? _ Casi en tono monótono y mirando hacia donde estaba Serena y Seiya alternadamente, el señor le pregunto.

Seiya al escuchar aquello, se enojó por las ocultas insinuaciones del dueño, por su parte Serena se interesó en esa plática y se acercó a ellos.

-- Solo contesta lo que te estoy preguntando ¿Vale?, .... ¡No te pases de chistoso conmigo! _ El tono de su voz sonó más frío, y señalándole con su dedo como amenazándole, Seiya se dirigió así al dueño.

Serena que también había escuchado eso, simplemente asentía con la cabeza mientras su mente comenzó a divagar entre los cuadros que tenía al frente suyo.

-- ¿Cuánto esta una habitación por un día? _ Esta vez Seiya le preguntó al dueño, el cual tenía un leve miedo por el tono de voz y las amenazas que había recibido hace instantes.

-- ¿Por qué necesitas separarla por todo un día?, .... ¡Sabes muy bien que no tenemos que quedarnos todo el día! _ Serena se había metido en la conversación para sorpresa de ambos caballeros.

Seiya al verla tan despistada con respecto a lo que insinuaba el señor se sorprendió, ya que minutos antes había pasado por una situación casi similar a la de ahora, y el dueño simplemente al escucharla, la sonrisa zorruna volvió a aparecer en su rostro.

-- Serena, por favor escucha y déjame a mi hablar _ De manera tajante y mirándola directamente a los ojos Seiya encaro a Serena.

-- Si, Si, claro como tú dices muchas cosas con sentido común, .... ¡No es así Seiya! _ De manera retadora le respondió Serena.

El dueño miraba la escena muy sorprendido, ya que usualmente los que hacían las negociaciones eran los varones, ante la postura sumisa de las mujeres, pero esta vez era todo lo contrario.

-- ¡Seiya, hablas como si no tuviéramos dinero en la cartera! _ Y señalándolo y tratando de que entienda le hablo a Seiya.

Seiya al escucharla la miro sorprendido y levanto una de sus cejas, por lo que recién había dicho: "Tuviéramos".

-- Ok, Ok, entendí, .... Como si no tuvieras; ..... Pero ya no me mires así _ Luego de recibir la mirada de Seiya, Serena se retractó, por lo dicho.

Mientras ellos seguían así con sus miradas sorprendidas, y agitaciones de manos como si estuvieran restándole importancia a lo que hablaban, el dueño miraba muy pícaramente a Serena, y ella si se daba por enterada.

-- ¡Cogeremos la tarifa por horas! _ Ante la mirada sorprendida de Seiya, Serena se volteo y agito su dedo ante el dueño, dándole a entender que aceptaba su propuesta.

-- ¡Serena!, no entiendes lo que él, .... Él_ Cómo haciéndole un pare con su mano, Seiya intentaba decirle cuales eran las verdaderas insinuaciones del dueño. Pero Serena lo interrumpió, poniendo una de sus manos en su pecho.

-- ¡Sei, se practicó!, ¿Por qué te avergüenzas?, .... No pasa nada, relájate, .... ¡Además la necesitamos solo por unas horas!, .... ¡Señor cogeremos la habitación por horas, entendido! _ Al momento que hablaba miraba alternadamente a Seiya y el dueño del establecimiento.

Ya al finalizar lo dicho se dirigió hacia el dueño con una sonrisa, el dueño al ver que la joven había ganado la discusión, y eso era fácil de comprobar, ya que la expresión de resignación del joven decía que ella había ganado. Simplemente sonrió ante lo visto.

-- ¿Cuántas horas desean? _ El dueño poso su mirada ante el rostro resignado y avergonzado de Seiya.

Seiya trato de relajarse soltando algunos pequeños suspiros ante la situación que afrontaba; cosa que solo lo relajaron un poco, por su parte Serena mirada muy sonriente y despistada al dueño. Luego giro su rostro casi en coordinación hacia Serena y le dedico una mirada de cansancio, para que sea ella quien responda a la pregunta, mientras que Serena lo mirada muy alegre.

-- Dos, .... ¿Dos horas serán suficiente? _ Con la ayuda de sus manos y la mirada aun fija en él, Serena le respondía en tono inocente.

Seiya la mirada con expresión de incredulidad plasmado en su rostro y con ello movía su cabeza de un a otro levemente en señal de negación.

-- ¡Bien!, .... Entonces para estar muy seguros, .... ¡Tres horas, de acuerdo!, .... ¡Tres horas son más suficiente!_ Le respondió muy enérgica y entusiasmada mientras miraba como Seiya. Aún mantenía la cabeza agachada, evitando que vea su leve sonrojo que se le estaba formando.

Luego de unos segundos en silencio y ver como Serena le hacía señas para que hablara, Seiya levanto su rostro sin el sonrojo en él, ya que ahora se veía que estaba plasmada una sonrisa divertida en ella, la miro muy sonriente y luego paso a mirar al dueño, que aún estaba muy a la expectativa de la respuesta de ese par.

-- ¡De verdad, que eres un caso Serena!, Enserio que eres tan despistada, .... ¡Eres todo un caso muy especial!, haces que cambie de humor tan abruptamente en solo cuestión de segundos _ Seiya pensaba eso, mientras contemplaba muy sonriente el rostro de Serena.

De pronto Seiya dejo de mirar a Serena y aun sonriente giro para decir su respuesta al dueño, a lo que Serena también copio la acción y lo observaba de manera despreocupada.

-- ¡Tres horas!, .... Danos tres horas _ Mirándolo directamente a los ojos y manteniendo su buen humor le hablaba al dueño. Y con su mano le enseñaba tres dedos levantados.

-- ¡Tres horas!, .... ¡Muy, tres horas!, .... ¡Vale! _ Lanzándoles una mirada y una sonrisa pícara, el dueño comenzó a escribir en un cuaderno azul, que en la pasta tenia escrito muy grande el nombre del hotel.

Por su parte Seiya abría nuevamente su cartera, para sacar de ellos el dinero suficiente para pagar por cuarto. Y Serena al ver que había aceptado su idea y que con eso se ahorrarían un poco de dinero, se marchó de ahí y camino hacia el comienzo del pasillo, donde estaban los cuartos.

Una vez que le dio el dinero para apartar la habitación, el dueño también le alcanzo su vuelto y al hacerlo hizo pequeños toques con su dedo, para llamar la atención de Seiya. Al recibir el vuelto y escuchar aquel sonido, levanto su vista para encontrarse con la mirada y sonrisa pícara del dueño.

-- ¿De verdad, se atreverá a preguntármelo?, .... No creo que sea tan tonto _ Seiya pensó eso, cuando miro al dueño.

-- ¿Dónde la has encontrado? _ Curioso el dueño soltó la pregunta.

-- Sí, me lo pregunto _ Seiya se respondió mentalmente, y sonrió sarcásticamente al dueño.

Serena se estaba a unos pasos lejos de ellos, se apoyó en la pared cruzando los brazos en su pecho y observo la rara escena en frente de ella.

-- En el tren _ Muy despreocupado y aun sonando sarcástico, hablo Seiya. Mientras apoyaba uno de sus brazos en el mostrador y se inclinaba a él, para que Serena no escuche lo que hablaban.

-- ¿En el tren?, ¿La conociste en tren? _ Aún muy desconcertado y sobretodo sin entenderlo, el dueño reflejaba en su rostro una notoria sorpresa.

Seiya simplemente asintió ante las preguntas que se le generaron, con un movimiento de cabeza afirmando su respuesta y una sonrisa de autosuficiencia en ella. Por su parte Serena observo muy extrañada e irritada aquella escena que estaban protagonizando aquel par de varones, así que no espero más y emprendió camino hacia el pasillo, decidió que mejor lo era esperar a Seiya ahí.

-- ¡Gran idea!, .... Una gran idea _ Hablo en tono de sorpresa el dueño.

-- Oye, ¿Cómo está?, .... ¿Dime tengo buenos gustos? _ Seiya quería seguirle su juego y en tono de complicidad le pregunto al señor.

-- ¡Hermosa!, ¡Preciosa!, ..... ¡Es toda una belleza!, ¡Y tiene buen cuerpo! _ Haciendo memoria, y luego sonriendo ladinamente le respondió a Seiya.

-- Esto muy divertido, ja ja ja _ Seiya se hablaba mentalmente, por las ideas erróneas que pasaban por la mente del dueño.

Mientras el dueño, aun miraba a Seiya con esa sonrisa en su rostro.

-- ¡Gracias!, ¡Tres horas!, .... ¡Tres horas! _ Y señalándole con la mano, tres dedos extendidos y en susurro, Seiya se marchó de ahí muy sonriente.

El dueño al escuchar a Seiya, solo le guiñó el ojo derecho y esta vez le sonrió pícaramente, mientras con su mano le pasaba un pequeño paquete de preservativo, al nivel de la mesa. Junto con la llave

Seiya al ver lo que pretendía, simplemente decidió seguirle el juego y aceptar ese pequeño regalo. Y sin más que hacer se fue hacia el pasillo, volvió a guardar las manos en sus bolsillos. Cuando vio a Serena recostada en una de las paredes le cedió la llave para que ella habrá la puerta. Al hacerlo Serena se metió muy rápido al cuarto y se sentó sobre la cama en posición de flor de loto, pero en su rostro se reflejaba mucha incomodidad.

Seiya que venía atrás de ella, se limitó a seguir caminando muy despacio; sabía que no tenía ninguna prisa en llegar a la habitación. Pero cuando llego a la habitación llego con la mirada agachada y cuando estaba en el marco de la puerta, y levanto la mirada se encontró con una Serena sentada sobre la cama, que murmuraba algunas frases que no lograra escuchar.

Luego de contemplarla durante algunos segundos, Seiya cerró la puerta generando un fuerte sonido, y con eso capto la atención de Serena que giro su rostro. Al hacerlo lanzo miradas llenas de molestia y de enojo.

Seiya al verla en esa situación no comprendía porque lo miraba así, avanzo unos pasos hasta cerca de la cama y se detuvo ahí, dándole la espalda a Serena y contemplando la sugerente decoración de la habitación.

-- ¿Qué le estabas susurrando? _ En tono como si le estuviera dando una orden, Serena se dirigió a Seiya.

-- ¡Eres un chiste!, ¿Lo sabía?, .... Eres todo un caso _ Girando su cuerpo para que pueda verla a los ojos, Seiya le contesto en tono sarcástico. Y al finalizar se apoyó en una mesa que estaba cerca.

-- ¡Puede que sea así!, ¡Pero se karate! _ Muy segura de sí misma le respondió Serena.

-- ¿Y?, .... ¿Qué con eso? _ Y con claro tono y semblante de confusión Seiya se dirigió a ella.

-- Solo te informo, soy cinturón marrón, .... Para que lo tengas en claro _ Y ladeando un poco la cabeza, y cerrando un poco los ojos esta vez, Serena hablaba.

Luego de unos segundos, Seiya había entendido a lo que se refería Serena y por unos segundos le pareció un poco cómico la reacción y el pensamiento de ella.

-- Ya veo, ya veo. Sabes karate, .... Quieres decir que si yo intentara violarte, .... Usaras el karate contra mí, .... Y así que no lograría hacerlo, .... ¿Verdad? _ Señalándose a sí mismo y luego a ella, Seiya ya empezaba a irritarse otra vez por culpa de las ideas locas que salían de Serena.

-- Puede ser, quiero decir que ¡Sí!, .... ¡Eso tenlo por seguro!, .... ¡Podré tener este aspecto frágil, .... Pero, ¡He puesto en su sitito a mucha gente! _ En tono y haciendo gestos propios de un matón, Serena le respondía a Seiya.

Seiya al escucharla hablar y ver los gesto que hacía, le causo una pequeña gracia, y para ocultar su burla bajo la cabeza para esconder su sonrisa y movía su cabeza de lado a lado.

-- No te preocupes. No te violare, .... Es más ni me provoca hacerlo _ Y poniendo su mano en un gesto de alto, le hablo a Serena después de haber controlado su risa.

-- ¡No puedes! _ Serena decía ya firmaba su posición.

-- ¡No quiero hacerlo!, .... ¡Ya te lo dije! _ Haciendo énfasis en su posición Seiya le respondía.

-- Aunque quisieras, .... ¡No podrás, no podrías! _ Y cruzando los brazos en su pecho y mirándolo de manera despectiva, Serena aun defendía su posición.

-- ¿Intentas provocarme para que te viole, Serena?, .... ¿Enserio quieres que haga eso? _ Y señalándola primero, para luego señalarse a sí mismo y terminar señalando la cama, Seiya le respondía ya en tono claramente irritado.

-- ¡No!, .... Solo intento aclarártelo Seiya, .... Es para que no tengas una idea equivocada de mí, .... Te abrace en las afueras de la estación, y te dije "Vamos a algún hotel", .... Fue solo porque necesita tu ayuda, .... Y la verdad que no sé qué clase de impresión debes tener de mí, .... ¡Más aun, siendo un chico como tú! _ Serena había dejado el tono de autosuficiencia y hablaba de manera calmada con Seiya.

-- ¿Un hombre como yo?, ¿Qué quieres decir con eso Serena? _ Muy indignado y con los brazos en su pecho, y acercando a ella con la mirada ya irritada, Seiya le pregunto a Serena

-- Pues eso es muy fácil, .... Las chicas deben irte detrás en Mumbai, ¡Esa clase de chicas!, que se lanzan a todos los tipos guapos, jóvenes y con dinero, .... Pero déjame decirte que yo, Serena Tsukino, no soy esa clase de chica, no lo soy, .... ¡Así que ni lo pienses! _ Serena le hablo en un tono confiado y lo miraba de manera seria.

Seiya la observada con claro semblante de irritación, ya que todo lo que le decía le estaba causando molestia, y sobretodo que le estaba haciendo perder la paciencia.

-- ¡Mis ideales son ortodoxos Seiya!, ¡Una mujer de un solo Chico!, .... ¡Y tengo a mi guapo novio!, ¡Darien Chiva!, ¡Solo el, para siempre y por siempre! _ Y con tono de enamorada empedernida, Serena le seguía hablando a Seiya; en su mirada se podía apreciar la ilusión y el gran amor que ella sentía por Darien.

-- Te alegrara saber que yo también soy chico de una sola mujer, ¿Vale? _ Y en claro tono de enfado Seiya le encaro y señalo a Serena.

Ante la mirada atenta de Serena, Seiya dirigió su mano hacia su bolsillo trasero y saco nuevamente su cartera, lo abrió para luego sacar una pequeña fotografía de ella.

-- ¡Mira!, .... Y mira muy bien _ Seiya se la enseño a Serena, la foto que tenía le Lita.

-- ¡A ver, a ver, a ver!, ¡Wow, Seiya!, ¡Es muy guapa, me dejaste sin palabras!, .... ¡Eres muy afortunado, muy afortunado! _ Y no espero mucho se abalanzó hacia Seiya y con clara evidencia de felicidad le hablo a Seiya, mientras sostenía en sus manos la foto de Lita.

En la foto, Lita estaba con lindo vestido de noche color verde jade, con un maquillaje de noche que combinaba perfectamente con el color del vestido, las joyas que traía puesta eran plateadas con pequeños toques verdes.

-- No, No soy tan afortunado Serena, .... No soy como tu dices _ Y en tono deprimente y miraba vacía, Seiya le quitaba de sus manos la foto de Lita a la mencionada.

-- ¿Qué?, .... Me estas bromeando verdad Seiya, .... ¿Qué hablas? _ En claro tono de no entender nada Serena lo miraba con clara señal de confusión.

Estuvieron así unos segundos en silencio, Seiya con la mirada agachada y tratando de guardar de nuevo su cartera a su bolsillo, y Serena contemplando por uno segundos, para luego mirar la fotografía de Lita que se encontraba ahora en la mesa.

-- ¡Oh, ya entiendo!, .... Seiya, así que ese es el problema, verdad, ¡Esa chica te ha dejado! _ Y En tono de compresión se dirigió a Seiya, mientras lo señalaba y señalaba la foto.

Seiya al escuchar aquellas palabras de la misma boca de Serena, simplemente levanto los hombros un poco, en clara señal de no darle importancia a lo que recientemente había descubierto Serena.

-- La vida me ha dejado Serena, .... La vida se me ha ido _ Y dándose la vuelta y volviendo al semblante y voz deprimente Seiya le contesto.

-- ¿La vida te ha dejado?, .... Seiya, ¿Qué quieres decir con eso, que no entiendo? _ Y con la cabeza ladeada a un lado, Serena le pregunto muy extrañada sobre la respuesta que le dio.

Seiya simplemente siguió con su paso lento hasta la cama, en ahí se sentó ahí seguía con la cabeza baja y con los codos apoyados sobre sus rodillas, toda esa escena era vista por Serena que se encontraba apoyada de espaldas sobre la mesita, que lo observaba un poco incrédula por lo que le había dicho. Y a la espera de una respuesta.

-- ¡Oh, Dios!, El famoso silencio, .... ¿Cuál es ese gran secreto tuyo Seiya?, ¡Vamos confía en la gente!, .... ¡Yo te lo he contado todo!, ¿Por qué no lo haces tú? _ Y de nuevo haciendo sus gestos dramáticos con sus manos, señalándose a sí misma para luego señalarlo a él, Serena intentaba que Seiya se liberara de su dolor.

Seiya suspiro cansado y por unos instantes se le cruzo la idea de sincerarse con Serena, pero luego esa idea así como vino se fue también.

-- ¡Da igual!, ¡Mira!, ¡Mira esta foto Seiya! _ Y cogiendo muy rápido entre sus manos la fotografía de Lita, Serena se fue a pararse delante de Seiya, para enseñarle el retrato.

Seiya a ver que Serena le ponía literalmente la foto de Lita en sus narices, simplemente volteo el rostro hacia otro lado para no ver nuevamente el rostro de la mujer que le rompió el corazón. Serena vio que Seiya se resistía, entonces puso más empeño en su propósito y llevo la fotografía hacia donde la vista de Seiya se dirigía.

-- La chica te ha plantado, ¿Verdad?, ¡Coge esto!, .... ¡Seiya, cógelo! _ Y poniendo la fotografía entre los dedos de Seiya, Serena se volvió rápido hacia la mesita, para abrir un cajón de este como si estuviera buscando algo.

Seiya que acepto y sostuvo de mala gana la fotografía de Lita entre sus manos, giro su rostro sin ánimos hacia donde estaba Serena, y la vio que se agachaba y buscaba entre el cajón de la mesita algo. Luego de unos instantes, vio que Serena volvía muy animada y con una sonrisa de una niña, que está a punto de hacer una travesura.

Serena muy sonriente y emocionada, volvió y se puso casi a la misma altura de Seiya, y le extendió entre sus manos un paquete de fósforos.

-- ¡Quémala!, .... ¡Vamos Seiya, Quémala! _ Y en tono y mirada complementamente traviesa, Serena le aconsejo a Seiya.

-- ¡Vamos, Serena!, .... ¡No puedes hablar enserio!, ¡Somos personas adultas!, Bueno en realidad yo si lo soy, ya que no puedo opinar lo mismo de ti _ Seiya trataba de convencer a Serena que era una locura lo que proponía. Y rechazo la caja de fósforos.

-- ¡Seiya, estoy hablando muy enserio!, ¡Sabes con estas cosas no se juega!, .... ¡Así que, quema la foto!.

-- ¿Qué chiquillada es esta Serena?.

-- ¡Escúchame Seiya!, Has esta chiquillada como la llamas, .... ¡Quema la foto, y después me dices que tal te sientes!, .... ¡Veras que te sentirás muy bien!, ¡Quémala Seiya! _ Serena le insistía a Seiya, haciendo gestos de dramatización con ambas manos y rostro.

Seiya simplemente le mandaba miradas de aburrimiento y de cansancio, ya que en su rostro se notaba claramente la duda que tenía acerca del plan de Serena.

-- ¡Toma, Seiya!, .... ¡Y quémala, quémala, quémala, sin remordimiento, sin nervios!, .... ¡Solo hazlo ya! _ Y dándole en una mano la fotografía de Lita, y en la otra mano ponía la caja de fósforos, Serena lo animaba.

Hola dostys, espero que estén súper bien. Saben me sorprenderé muchísimo y sobretodo me alegra a mil, la acogida que tiene esta pequeña historia, ya que nunca imagine que en apenas 6 capítulos tenga la cantidad de votos que tiene, quiero agradecerles a todos y cada uno de ustedes por haberlo hecho, grax...

Grax tambien por su buena vibra, comentarios, por leerla y por sus votaciones.

Y al final me convenciste, publique antes d lo programado.....

¿Qué cosas han hecho para olvidar un amor o una ilusión?