5° CAPÍTULO
Mirando cómo se iba el tren nuevamente, la joven otra vez se sintió fatal, ya que tenía muchos sentimientos encontrados; impotencia, frustración, ira, miedo y sobretodo tenía decepción, si todos eso sentimientos lo sentía hacia ella misma. Y así se quedó mirando por unos instantes la parte trasera del tren.
En otro lugar, para ser más exacto en una gran casa de la ciudad, pintada de color blanco la fachada y por supuesto la parte interior también contaba con el mismo tono que la fachada, se encontraba sentado en el sillón de color negro, un joven peli plateado con las ambas manos en la cabeza y sus codos apoyados en sus rodillas.
-- ¡Ah!, .... ¡Maldita sea Seiya!, .... ¡Adonde carajos te largaste! _ Yaten, estaba muy preocupado por su hermano.
-- Cálmate, .... Osito Gruñón, perdiendo los papeles no ganas nada _ Mina, al ver a su esposo muy angustiado, poso una de sus manos en el hombro de este, a lo que Yaten reacciono y levanto la mirada y se encontró con el rostro comprensivo de su esposa.
-- ¡Pero no contesta el celular!, .... Osita y si le paso algo, .... ¿Sabes hoy día, se casaba Lita?_ Muy preocupado le respondió a su esposa.
-- Mi Osito Gruñón, .... No te preocupes, y confía un poco más en tu hermano; .... No es fácil lo que está viviendo, .... Ya que según me contaste, los accionistas y funcionarios del conglomerado; humillaron nuevamente a Amy, pero esta vez delante de todos, .... ¿No crees que eso, también le afecto a Seiya, de algún modo?, .... Después de lo que paso entre ellos _ Mina, cogiendo entre sus manos el rostro de su esposo y sentando en sus rodillas, le hablo en tono suave y delicado.
-- Tienes razón, .... Lo mejor será darle su espacio a Seiya _ Yaten resignado por la dura verdad que su esposa le dijo, se resignó.
-- ¡Al fin entendiste!, .... Pero sabes mi Osito Gruñón, .... Mi suegrita Amy, necesita ahorita de sus hijos, .... ¿Cómo tu padre, mi querido suegrito, se fue para su chequeo anual, y volverá en 3 días?, ¿No crees que debamos ir a hacerle compañía? _ Depositando al final un beso en los labios de su esposo, Mina lo animo para que vayan hacia su madre.
-- Si, vamos mi Osita _ Y levantándose y jalando a su esposa se fueron hacia el segundo nivel, donde se encontraba Amy.
Caminaban como siempre, agarrados de la mano y cada cierto momento Mina apretaba suavemente su mano, a lo que Yaten la miraba sonriendo. Al llegar a la puerta la tocaron suavemente. Al no recibir respuesta, entraron sin permiso a ella.
Lo que vieron a ambos les sorprendió muchísimo, ya que nunca imaginaron encontrar a Amy así, claramente se veía que se había quedado dormida mientras lloraba, Mina y Yaten se apresuraron a ir rápidamente a ella, al verla más de cerca vieron que tenía entre sus brazos abrazados dos porta retratos.
El primero de ellos, era una fotografía de Seiya y Yaten de 2 y 1 año respectivamente, la cual solo posaban muy sonrientes ambos, la segunda fotografía eran de ella junto a los dos hermanos pero con 18 y 17 años, antes de partir a evento en el cual era el primero que iban como una familia.
Mina, trato de quitarles los portarretratos pero no pudo, ya que cuando ella jalaba de ellos Amy, los apegaba más hacia su pecho, Yaten decidido que lo mejor eran que se duerma así y acomodo el cubrecama en ella, para que no le pasara el frío.
-- Seiya, hijo ..... ¿Dónde estás?, .... Regresa pronto _ Entre suspiros y pequeños sollozos, Amy, hablaba entre sueños.
-- Tal parece que no eres el único que lo extraña _ Mina le hablo a su esposo.
-- No es un secreto para nadie, que Amy prefiere muchísimo a Seiya, .... A decir verdad él es su engreído, .... Mientras que yo lo soy de mi padre, .... Así que estamos a mano _ Yaten hablo, mientras acariciaba sutilmente los cabellos de Amy.
-- Sí, ... ¡Pero sabes que Osito Gruñón!_ En tono pícaro le halo a su esposo.
-- ¿Qué cosa mi Osita? _En claro tono de no saber nada, respondía Yaten.
-- ¡Que yo también te prefiero a ti! _ Y sin esperar mucho tiempo se lanzó hacia los labios de Yaten y los devoro sin reparo alguno.
Yaten al ver la reacción de su esposo, se avergonzó un poco por la presencia de Amy, así que simplemente corto el beso con Mina, y la cargo nuevamente en los hombros donde le dio una palmada en uno de sus glúteos.
-- Auch, .... Osito Gruñón, trátame muy bien _ Fingiendo resentimiento y haciendo un leve puchero levanto su rostro y lo giro hacia su esposo.
-- ¡Mina!, ¡Mina!, .... Mi Osita se ve que no puedes con tu genio _ Y golpeando nuevamente el otro glúteo Yaten se fue hacia su habitación con su esposa en sus hombros.
-- ¡Pero así me amas! _ Muy sonriente Mina le hablo a su esposo.
-- ¡Cómo no tienes idea! _ Muy enamorado Yaten le respondía.
Volviendo con la joven habladora, ella comenzó a ver hacia todos lados, y al ver que se encontraba sola se lamentaba por su acción que había tomado el de ayudar a Seiya.
Con miedo visible en su persona, llevo varias veces su mano hacia su cabello para tratar de relajarse un poco, pero no le había dado resultado, así que simplemente dejo por un momento descansar su mano en su frente, mientras a ella se le ocurría alguna idea, para que salga de ahí.
Las demás personas que estaban en la estación del tren la miraban extrañados, ya que no era normal ver a una joven, sola en la estación de tren, con su pijama a recién dada las primeras dos horas de ese día.
Comenzó a desesperarse, y sobretodo a sentirse perdía, ya que era la segunda vez que había perdido el tren, su equipaje, su viaje y sobretodo la calma en una misma noche.
-- Eh, mírala,.... Pobrecita la chica _ Un joven de aproximadamente 28 años hablo.
-- Si esta solita, ..., pobre chica _ Un señor de 45 años, fue el segundo en hablar.
-- Si, .... ¿Qué dicen si vamos a hacerle compañía? _ Un joven de 25 años, les hablo al resto de sus amigos.
El tono de cada uno de ellos, no era de querer ayudarla precisamente, ya que se podía percibir cierta ironía al momento de hablar. Así que todos juntos se dirigieron hacia donde estaba la joven, pero no contaron que ella tenía otros planes.
Al momento de verla dirigirse hacia donde se encontraban ellos, simplemente se callaron y disimularon lo que hacían. La joven al observarlo no les dio mucha importancia y siguió con su camino.
Mientras caminaba, miraba por todos lados, tratando de encontrar algo o a alguien.
-- ¡Eh, vamos!, .... Nos acercamos y le preguntamos, .... ¿Están de acuerdo? _ El señor le 45 años, convencía a los demás.
Todos al escuchar la idea, asintieron y se fueron detrás de ella, pero a una cierta distancia.
La joven al ver lo que buscaba, entro sin ningún miedo y se entrevistó con el jefe de policía del lugar, el jefe al verla se sorprendió y más aun cuando le contó todo su historia.
-- La siguiente estación es Kota, llamare al jefe de esa estación, el comándate Jadeite, .... El guardara todo su equipaje allí, y cuando esté lista lo podrá ir a recoger, .... ¿Entendió, señorita? _ El Comandante Nephrite, le informo muy serio y mirándola de pies a cabeza.
De pronto la puerta se abre y en ella se ve al joven de 25, que había sido empujado por los demás, al verse descubierto simplemente miro muy temeroso a la joven y al policía que se encontraban ahí y que dirigieron sus miradas hacia él, porque acabada de ocurrir recientemente y en acto reflejo simplemente llevo su mano a su rostro y salio rápidamente de la oficina, sus amigos que estaban afuera, al verlo como salía se burlaron de él.
-- ¡No que la ibas hacer tu novia!, .... Ja, ja, ja.
-- ¡Eres un cobarde!, .... Ja, ja, ja.
-- ¡Miren!, ¡Miren, su rostro!.
Todos se burlaban y hacían bromas de él. Mientras que aun la joven tenía la mirada fastidia sobre la puerta, y el comandante miraba reprobatoriamente hacia la joven.
-- No podemos hacer nada más, .... Ya hice todo lo que estaba en mis manos _ El Comandante Nephrite, le dijo en un tono serio mientras la miraba y con una de sus manos hacia señas de advertencia.
-- Pero, ¿Cómo llegare hasta allí?, .... ¡¿Demonios?! _ La joven comenzó hacer una pataleta tras la respuesta desinteresada del comandante, y luego giro su cuerpo hacia el lado izquierdo mientras colocaba sus manos alrededor de la cintura.
-- ¿Quién te dijo que te bajaras del tren?, .... ¿Quién te dijo?, .... ¡Deberías haber estado mucho más juiciosa, más atenta! _ El comandante le comenzó a llamar la atención levantando un poco el tono de su voz y la observaba de manera muy fría y dura, mientras que con la mano hacia señas apuntando su cabeza y para luego apuntarla a ella.
La joven al escucharlo, dirigió su mirada hacia el comandante y lo observo muy sorprendida por cómo le estaba hablando. Y el tono que estaba empleando.
-- ¿Qué harás ahora?, ....¿Qué solución tienes para este problema?, ¡Que estoy interesado en escucharla! _ Y haciendo pequeños sonidos con sus dedos en la mesa y levantando levemente una de sus cejas, la observaba.
La joven que no sabía cómo responderle, solo se mordió el labio y lo directamente a los ojos, tal vez así encontraría alguna solución o salida a su problema.
-- ¡El entusiasmo de la juventud!, ¡Ese entusiasmo es muy peligroso!, .... ¡No entienden nada!, ¡Nada de la vida y sus peligros!, .... ¡No entienden nada!, ¡Nada! _ Y continuo reprochando a la joven, pero esta vez ya o hacia golpes con sus dedos, sino que esta vez los hacía con la palma de su mano sobre el escritorio.
La joven que escuchaba y observaba cada uno de los movimientos que hacía, se empezó a irritar y su mirada comenzó a cambiar, de frustración e impotencia a irritación.
-- Te lo diré, .... Observa muy bien, .... La vida es como la vía de un tren, .... Una pulgada, es una distancia de muchas millas, .... ¡Y un pequeño error, uno solo; puede destrozar tu vida! _ Y comenzó a trazar en el aire una línea horizontal con sus dos dedos índices, uniéndolos paralelamente y luego desplazarlas lentamente a diferentes extremos.
La joven se irrito más, con la comparación que había tomado el comandante y suavemente ladeo un poco su rostro lo miro como totalmente confundida.
-- ¡Es enserio todo lo que me dice!, .... Tks, ¿Quién se cree para decirme todas cosas?, .... ¿Debería de hacer su trabajo, y no meterse en vidas ajenas? _ Aquello era lo único en lo pensaba la joven.
-- ¡Sí!, Yo también he perdido muchos trenes en mi vida, .... ¡Pero yo soy un varón!, ¡Un chico!, .... Con eso no quiero decir que ahora no los, .... Ahora también lo soy, pero no tan joven como antes; .... Pero en fin, .... Tú, tu eres una chica, .... Una chica joven y bonita, .... ¡Una chica como tú viajando sola en un tren, es como un cofre del tesoro abierto! _ Le volvía a llamar la atención y esta vez la señalaba directamente con el dedo.
La joven al ver eso, relajo un poco su rostro e intento sonreír y así cambiar el aspecto de irritación y fastidio que le producía el comandante.
-- ¡Sí!, ¿Sabes?, ¿Sabes?, .... ¿Sabes todo lo que podría pasarte?, .... ¿Sabes cuantas malas personas están ahí acechando a jovencitas como tú?, ¿Lo sabes? _ Esta vez ya no la señalaba con su dedo, ahora hacia señas de arriba abajo con ambas manos, señalaba la salida y levantaba cada vez más el tono de voz con cada palabra que decía y su mirada se transformaba más fría y seria.
La joven, lo miro como si le interesara la conversación puso lo mejor que pudo su rostro de niña buena y escuchaba muy atentamente todo su discurso.
-- No lo sabes, pero yo te los diré, observa muy bi _ Cuando empezaba a tratar de hacer un rectángulo con los dedos índice y pulgar de las manos, se calló.
-- ¡Perdone!, .... Pero podría hacerle una pequeña pregunta, .... Una pequeñita _ Con las manos entrelazadas delante de ella, con un semblante de niña adorable, inclinándose levemente hacia delante y sobretodo con un tono totalmente delicado y dulce le hablo.
-- Si claro _ Muy sonriente, el Comandante Nephrite acepto.
-- Todo lo que me ha dicho, .... Todos los consejos y los reproches, .... ¿Me lo va a cobrar?, .... O ¿Simplemente es educación gratuita, para los jóvenes? _ Con el mismo tono y semblante adorable, le pregunto.
El comandante al escuchar las inquietudes de la joven sonrió y se recargo calmadamente en su asiento y se acomodó en él.
-- No, No, .... Es gratis _ Muy cómodo y feliz le respondió.
-- ¡Bien!, ¡Muy bien!; .... Porque no tengo cambio, .... Y sobretodo no tengo paciencia para estar soportando todas las ideas ilusas que salen de su boca de acuerdo _ Luego de las dos primeras frases, el semblante y el tono de voz de la joven cambio totalmente a uno agresivo, ya que cada vez el tono de voz se elevaba mas y lo mismo pasaba con su mirada.
El Comandante Nephrite, al ver el cambio brusco de la dulce joven que tenía en frente, se sobresaltó en su asiento y la miro totalmente asustado, ya ella al final de hablar lo señalaba retadoramente son su dedo índice.
-- ¡Mira, viejo!, ¡Mira muy bien y sobretodo escucha muy bien lo que te diré!, .... ¡Porque no te lo diré dos veces!, .... ¡Deja de decir tonterías y mejor ponte a hacer tu trabajo! _ Y ya fuera de sí, seguía gritándole al comandante, sin dejar de señalarlo.
Afuera de la estación en las puertas, los jóvenes escuchaban y miraban muy atentos lo que pasaba ahí, mientras que el comandante la miraba ya muy asustado.
-- ¡Llama a Kota!, ¡Llama al comándate Jadeite e infórmale del asunto!, ..... ¡Que lo demás es problema mío!, ¡Entiendes!, .... ¡Y yo me ocuparé de eso!, ¡Vamos, llama ya! _ Cuando hablaba lo señalaba a él y al teléfono. Al finalizar simplemente señalo el teléfono y observo retadoramente al comandante
El comandante Nephrite, agarro muy fuerte el descanso de su silla, por el miedo que la joven le había infundado con sus gritos y sus gestos que hacía. No espero a que lo vuelva a gritar, así que ni bien acabo de hablar la joven cogió muy rápido el teléfono y marco hacia la comandancia de Kota, donde se encontraba su amigo el Comandante Jadeite.
La joven lo miraba muy enojada y asegurándose de que lo estaba haciendo, salido muy fastidiada del lugar.
-- ¡Vamos!, ¡Vámonos de acá!, .... ¡Si descubre que estamos acá, nos matara! _ El joven de 28 años, hablo muy preocupado a los demás.
-- ¡Vámonos que esperan!, .... ¡Fuera! _ El de 45 años, comenzó a jalonear y dejar libre el paso de la puerta.
La joven al salir afuera, vio como varios jóvenes estaban escapando de la puerta de la comandancia, giro su rostro hacia otro lado y no le dio la importancia.
Camino hacia una banca vacía que se encontraba cerca de donde había salido, al verla simplemente se sentó en ella e intento relajarse y reordenar sus ideas un poco.
-- ¿Ahora qué demonios haré?, .... ¿Cómo solucionare este problema? _ Se cuestionaba esas dos cosas, pero de pronto su calma se vio interrumpida.
-- Su agua, .... No soy un ladrón, eso es muy malo; .... Me llamo Rubeus, preciosa _ Sentándose a un costado de la banca y ofreciéndole su agua, le hablo muy pícaramente.
-- ¿Qué pasa Rubeus?, .... ¿Qué sucede? _ El señor de 45 años le hablo, mientras se acercaba y posaba su mano en el hombro de mencionado antes.
Al escuchar la conversación de esas personas, la joven simplemente los miro muy enojada, apoyo sus manos en sus rodillas y volvió a girar su rostro hacia el frente sin decir ninguna palabra.
-- Esta pobre chica Zafiro, ha pedido su tren, .... Y no solo el tren, sino también todo su equipaje _ Le contesto a su amigo Zafiro, mientras señalaba con su mano a la joven sentada a su costado.
-- ¡Hay, no, no, no!, .... Pero que mala noticia, muy mala noticia _ Fingiendo preocupación e indignación le respondió a su amigo.
La joven que escuchaba soportaba todo lo que decía, simplemente trato de ignorarlos lo más que podía.
-- Y no hay tren hasta mañana, en la mañana _ Cuando terminó de hablar Rubeus, movió sus manos negativamente y junto sus labios en una línea recta.
-- Oh, Dios, .... Eso es tener mala suerte, ¿Verdad?, .... ¿Está sola? _ Zafiro se dirigió a Rubeus.
-- Si, muy sola _ Rubeus le respondió y luego se acomodó mejor en la banca.
-- ¿Y qué va a hacer? _ Zafiro miraba deseosamente a la joven mientras preguntaba.
-- Eso, es el punto Zafiro, .... ¿No sabe qué hacer? _ Rubeus le contesto como si la conociera.
La joven ya se estaba cansando de todas las cosas que decían de ella, y cada vez su rostro se comenzaba a tensar más por la irritación e ira que se estaba acumulando.
-- Zafiro, tu sabes muy bien que, .... ¡Una chica joven y bonita, viajando sola es como un cofre del tesoro abierto! _ Y finalizado lo dicho la miro fijamente, y la señalo.
Su amigo que también al observaba, lo hacía con una sonrisa ladina en sus labios y su mirada no se despegaba del cuerpo de la joven.
-- Escúchame, escúchame muy bien viejo, .... No te hagas el listo conmigo, ¿Vale?, .... ¡Así que mejor piérdete!, ¡Ahora! _ Ya había perdido toda la paciencia y le grito a Rubeus. Con su dedo índice levantado le indicaba que se fuera de ahí y la dejara sola.
-- ¿Qué?, ¿Pero qué le pasa?, .... ¿Acaso le he dicho algo malo?, ¿Algo que la pueda ofender? _ Fingiendo sorpresa y sobretodo indignación le respondo Rubeus, ante la mirada cómplice de su amigo Zafiro.
La joven muy incómoda, volteo su vista hacia el frente para ya no seguir mirando su rostro de preocupación hipócrita.
-- Intente entender, señorita, .... Antes de que alguien intente aprovecharse de usted, .... Yo pensé en ayudarla desinteresadamente, ante todo soy un caballero _ Se dirigió a ella, para luego voltear a ver a su amigo, con el cual se lanzaban miradas cómplices.
-- No dejes que se quede aquí sola esta noche, .... Tendrás que tomarte la molestia de ayudar su mal genio, .... Pero, .... Llévala a algún sitio seguro _ Zafiro fingiendo preocupación y con una mano en el hombro de su amigo hablo en un tono sospechoso, mirando ladinamente hacia la joven.
-- Si. No hay otra opción _ Aceptando y moviendo su cabeza en señal de aceptación, la observo durante unos instantes.
-- ¡No te pases de listo, entiendes!, ... ¡Así que mejor lárgate y desaparece de mi vista! _ Perdiendo toda la paciencia, la joven se paró de un solo golpe y les grito a los dos señores que estaban ahí.
-- ¡Increíble!, ¡Increíble, ahora nadie sabe apreciar la cortesía de las personas de buen corazón! _ El señor fingiendo indignación le hablo a su amigo que se encontraba a su espalda, para luego pararse y mirar a la joven.
Zafiro que había escuchado lo que su amigo decía se limitó con agitar su cabeza de arriba abajo en señal de apoyo.
-- ¿Vez?, Te quiero llevar a un buen lugar, .... Uno que sea cálido, cómodo y sobretodo seguro y tú _ Le respondía señalando y haciendo señas y gesto.
Hola dostys, saben estuve leyendo sus comentarios, así que me dije a mi misma porque no subes otro cap. Hoy; y luego de pensarlo un rato, me decidí en hacerlo y bueno aquí lo tienen; espero que lo disfruten y sea de su agrado.
Una vez más gracias por tomarse el tiempo de leer, de comentarla, de votar y sobre todo por darle buenas vibras positivas, muchas grax.
Este cap. Está dedicado a: a Lupita84659620, user10239442, chaparra40748113, Sasuketha y tbm a yeanetarosquipa; por sus buenas vibras.
¿Qué harían en esa situación, aceptarían la ayuda de esas personas?
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