-- ¡Pero señorita, ya le dije!, .... Que tiene equipaje para medio mundo _ El conductor le respondía así a la joven.

Mientras la joven le pasaba su equipaje al conductor, este le pasaba a un señor y el señor lo acomodaba dentro del vagón del tren, entre aquellas cosas, estaban una maleta, unos bolsas de regalo, un peluche de cocodrilo, una planta de palmeras con todo y maceta, etc.

-- ¡Tome!, .... ¡Coja el cuadro con cuidado!, .... ¡Es de Babaji! _ Les gritaba un poco nerviosa y apurada la chica.

-- ¿Tiene más equipaje? _ El señor dentro del vagón les pregunto, mientras sostenía el cuadro entre sus manos.

-- ¡No se preocupe!, no importa cuanto tenga. Déjala entrar _ Un joven que también se encontraba ayudando a acomodar las cosas hablo.

-- ¡Esto!¡Esto!, ¡Coja esto! _ Les volvió a gritar la chica, alcanzándoles más cosas.

-- ¡Esto es muy peligroso! _ El señor hablo nuevamente, pero viendo hacia el joven que les ayudaba.

-- ¡Señorita, mire al frente! _ El conductor le volvió hablar.

-- ¡Si, ya lo hago!, .... ¡Pero meta todo el equipaje! _ Le respondió la joven.

Cuando ya se había acabado todo el equipaje, la joven simplemente tomo un poco de impulso, para correr un poco más y apoyada del conductor que le ayudo con su equipaje, estaba intentando abordar el tren en movimiento.

-- ¡Vamos, vamos!, ¡Deme la mano!, ¡Deme la mano! _ La joven le comenzó a pedir ayuda al joven que se encontraba cerca de la puerta, ya que el señor que estaba antes, se había retiro un poco, para acomodar mejor las cosas de ella.

Con casi medio cuerpo afuera del tren y el otro casi dentro, estiro su mano derecha para que el joven le pueda ayudar a subir, ya que con la mano izquierda se estaba sujetando de un costado del tren. El joven al ver la intensión de la chica en querer abordar el tren no dudo, y le extendió la mano, para que se pueda sujetar y tomar impulso y así pueda subir al tren.

-- ¡Vamos!, ¡Oh Dios! _ Muy sorprendido y asustado, el joven solo pudo exclamar aquellas frases, cuando vio como había entrado rápidamente la joven, ya que fue gracias a un tirón de parte de él, que ella pudo entrar.

-- ¡Sí!, ¡Sí! _ Muy contenta y sobretodo con un tono de voz un poco elevado, celebraba la reciente hazaña.

Todos los pasajeros al escuchar aquel grito solo giraron sus rostros para ver, quien era la responsable de tal grito.

-- Este era el límite y lo he cruzado hoy _ De manera muy agitada lo comento a los demás.

Los pasajeros, al percatarse del estado de la joven la observaban más curiosos e intrigados, por lo que había pasado.

-- ¿Saben qué?, .... ¡Hasta hoy nunca he perdido un tren! _ De manera triunfal esta vez hablo y con una de sus manos hacia una señal de victoria.

Algunos de los pasajeros, solo podían sonreír ante la ocurrente pasajera, mientras que otros simplemente la miraban de manera confundida.

-- ¡Gracias, Babaji!, ¡Has evitado que pierda mi récord! _ De manera muy alegre, agradecía y sobretodo recuperando aun el aliento, miro hacia el cielo y agradeció a su bisabuelo.

El joven que la había ayudado entrar solo podía sonreír ante lo que estaba viendo. La chica luego del agradecimiento, giro lentamente su rostro y miro aun cansada al joven que la ayudo.

Este al ver que la joven lo miraba, también dirigió su mirada hacia el rostro de la chica. Esta al ver que tenía la atención del joven, simplemente jalo la mano de él, ya que el joven aún mantenía entrelazado su mano con la de ella.

-- Estoy dentro _ Le pregunto ella.

-- Si está dentro _ De manera nerviosa le contesto el joven.

-- Entonces, puedes ya soltarme la mano, .... O mejor aún devolvérmela _ De manera muy alegre y divertida la joven le hablo al chico.

El joven al escuchar y darse cuenta que la chica tenía razón, sonrojado levemente soltó la mano de la joven a lo cual ella simplemente le regalo una pequeña sonrisa.

-- ¡No soy tan guapa!, .... ¡Pero creo que a él eso no le importa! _ Con su humor aun divertido y soltando al final una carcajada, la joven hablo hacia los demás pasajeros, que sonrieron al igual que ella con aquel chiste improvisado.

El joven aún estaba apenado, por lo que había pasado segundos antes con la chica.

Con todo el equipaje y más aun con las manos completamente ocupadas, el joven y la chica se dirigían hacia el asiento del tren de ella. Y mientras lo hacía la pequeña habladora no dejaba de hacerlo.

-- Prefiero viajar en los compartimientos Non-Ac, .... Pero mi familia dice:"¡Eres una chica!", .... ¡Por dios!, ¡Como si no supiera que soy una chica! _ Hablaba un poco dramática mientras caminaba hacia su destino.

De pronto una pequeña puerta se abre, y de esta sale un joven, al verlo la chica se detiene y se dirige al joven que recién acababa de salir de esa puerta.

-- Señor, ¿Es este el A1? _ La joven le pregunto seria.

-- Si este es _ El joven de responder amablemente.

-- ¡Gracias!, ¿Qué tiene que ver un AC con una chica? _ Le responde de manera igual de sería de cómo le pregunto. Y siguió su camino.

Al ver la reacción de ella, el joven que se encontraba en la puerta, se sorprendió muchísimo ya que pensaba que ella entraría ahí; el otro joven que venía atrás de ella ayudándole con su equipaje, se sorprendió de igual manera que el chico de la puerta, ya que pensó al igual que el anterior joven, que la chica se quedaría ahí.

Y mientras seguía caminando, ella seguía hablando con el joven que la ayudaba, y de rato en rato ella giraba su cuerpo para poder mirarlo, y cando lo hacia el solo podía reír ante los gestos y las ocurrencias que ella decía.

-- ¡De verdad que hasta ahora no lo entiendo! _ Decía muy enérgica la joven.

De pronto se vieron que llegaron a una especie de vagón compartido, ya que se veía varias personas a ambos costados y todos ellos estaban sentados.

-- ¡No es la primera vez que viajo sola!, .... ¡Ni tampoco en este tren!, ¡Ya que es como mi segundo hogar! _ Seguía con su plática.

Mientras buscaba su asiento a través del pasillo del tren, con boleto en mano revisaba cada uno de los asientos. Pudo observar que la mayoría de ellos estaban vacíos, siguió avanzando buscando el número de su asiento.

-- 17, 18 .... Aquí es _ Muy feliz le comento al joven que la ayudaba, para que le pueda dejar ahí su equipaje.

El joven que lo ayudaba, al ver que necesitaba más de su ayuda, muy educadamente se retiró de ahí.

Cuando finalmente lo encontró, reviso nuevamente su boleto, y volvió a mirar el número del asiento para cerciorarse de que no se haya equivocado.

Cuando lo hizo, se dio cuenta que no se había equivocado, muy sorprendida y algo incomoda, observo al joven de terno que se encontraba en su asiento. Observo que la manera en cómo se encontraba sentado y pensó que la apariencia que tenía debía de tener mucho sueño y cansancio.

Se acercó a Seiya con boleto en mano, y se lo enseño.

-- Por favor, enséñeme su billete _ De manera amable, la joven habladora le pidió su boleta, al ver que no le contestaba, dejo caer incomoda su mochila que lo tenía en su hombro.

Seiya por su parte estaba perdido en sus pensamientos no le prestó atención cuando hablaba y sin dudarlo; con su mano toco levemente el hombre de él para que le pueda prestar atención.

-- ¡Eh!, ¡Te estoy hablando a tí!.... ¡Eh! Es mi sitio ¡23! _ Ya un poco incomoda y sobretodo perdiendo la paciencia le hablo al joven, y este seguía sin prestarle atención.

Ya cansada y sobretodo perdiendo toda la paciencia, volvió a dirigirse a Seiya.

-- ¡Eh, Señor! _ Levantando la voz, y sobretodo chasteando sus dedos para que le pueda prestar atención.

Seiya al ver que alguien le había hablado fuerte y chasteando los dedos, se sobresaltó y se reincorporo de su asiento para ver a la persona que lo había hecho.

Al ver que había sido una chica se sorprendió muchísimo, y la observo confundido durante unos segundos.

Ella al ver que tenía su atención, contó mentalmente hasta 10 y volvió a recuperar la paciencia que había perdido, segundos antes.

-- ¡Este sitio es mío! ¡23! _ Hablando y haciendo señas le indicaba que ese era su asiento.

Seiya al darse cuenta que la chica le estaba hablando, se sobresaltó un poco al ver a la joven que hacia unas señales bruscas con su mano, y por unos instantes imagino que lo iba a golpear.

Al percatarse que no iba a hacer nada de lo que imaginaba, simplemente se levantó del asiento en donde estaba y se acomodó en el asiento que estaba en el otro extremo; la joven al ver que Seiya se retiraba de su asiento, aprovecho para acomodar su numeroso y variado equipaje, y mientras lo hacia ella seguía hablando.

-- A nadie le gusta coger el sitio del pasillo, .... Pero yo siempre insisto en cogerlo,.... Los de la reservas se alarman y se preocupan, .... Pero yo pienso, .... ¡Mi viaje no termina en este tren!, .... Voy a Bhatinda, .... Mi casa está allí. Mi familia está allí, .... Todo el mundo tiene familia, y yo también tengo una familia _ Le platicaba a Seiya.

Seiya simplemente se limitó a escucharla, sin hacer ningún gesto y observar como guardaba su equipaje dentro del tren, sin interés alguno.

-- Todo el mundo dice que Mumbai tiene demasiada gente, .... ¿A que refiere con demasiada?, .... ¡Nosotros también somos gente!, .... ¡Formamos parte del gentío!, ¡Aunque sea nuestra casa!, .... ¡Me voy de Mumbai!, !Para siempre!, .... ¿Sabes cuándo llegue aquí?, ¡Cuando Mumbai era Bombay! _ Ella seguía con su plática.

Seiya por su parte se había hundido otra vez en su pensamiento, pero su mirada estaba fija hacia la ventana del tren.

-- ¡Residencias, residencias, residencias!, .... ¡La residencia del internado de Santa Teresa de Shimla!, .... ¡La residencia del instituto religioso para chicas de Bombay!, .... ¡Te lo juro!, !De ahora en adelante no viviré jamás en una residencia!.

Seiya ya se empezaba un poco a incomodar por la presencia y la manera en que la joven le hablaba.

-- Espero que las obras de la carretera paren antes del monzón, .... Sino, ¿Sabes que pasara? ¡Bueno....!¿Qué pasa? _ Seiya no soporto más a la joven y se levantó de su asiento, y se retiró de ahí.

La joven al ver la acción de su compañero de viaje se levantó un poco de su asiento y giro su cabeza hacia donde él se alejaba por el pasillo, la joven ver que se iba lentamente simplemente volvió a sentarse y giro su cuerpo hacia la ventana.

Seiya, que había camino durante un segundos sin rumbo fijo, llego hasta una de las puertas en donde los pasajes subían; sin pensarlo por muchos tiempo, abrió la puerta del tren y comenzó a mirar hacia afuera y se percató que el tren estaba en movimiento y al frente de este había un espeso bosque.

Comenzó a caminar lentamente hacia el filo del marco de la puerta y en ella sintió como el frío aire le soplaba en el rostro, aun sintiendo aquel frío Seiya no despertaba por completo del trance en el cual se encontraba desde la mañana.

Ya no le quedaban más pasos que dar y estaba preparándose para dar el siguiente paso, cuando observo que por el otro riel venia en dirección contraria otro tren; Seiya reunió el poco valor y fuerzas que le quedaban para darse un pequeño y último impulso para perderse entre el tren que venía y los rieles.

-- ¡Por fin mi sufriente acabará!, .... ¡Adiós amor!, ¡ Adiós vida!, ¡Adiós mundo! _ Eso era en lo único que pensaba Seiya, mientras veía como se acercaba el otro tren.

Y conforme los segundos pasaban las luces del otro tren se hacían cada vez cercanas y Seiya levemente impulsaba su cuerpo hacia fuera del tren.

-- ¡¿Qué estás haciendo?! _ Escucho la voz de reclamo de la joven habladora de hace rato.

Y al escucharla se sorprendió y asusto tanto Seiya que lo saco del trance, y el volteo asustado mirándola.

Ella por su parte le estaba mirando muy enojada y con el ceño fruncido.

Al ver esa actitud, simplemente giro su cuerpo por completo hacia donde se encontraba ella y camino hacia la dirección de la joven.

-- La última vez un niño cayo y murió, .... ¡Es muy peligroso! _ De manera muy enojada la chica le llamo la atención

Seiya se sorprendió muchísimo, que alguien como ella que no lo conocía se preocupara por él. De pronto se escuchó el sonido del tren que venía al otro de riel y ya no pudo escuchar lo último que le decía.

-- ¿Eres mudo? ¿No puedes hablar? _ Le pregunto acercándose lentamente hacia él.

Seiya al ver que se acercaba lentamente, giro su cuerpo para otra dirección y así ella no iba a ver su expresión de sorpresa, miedo, remordimiento, desesperación y angustia.

Ella al ver que no le respondía, se volvió a incomodar y giro su cuerpo hacia donde se encontraba el lavamanos, y se dispuso a lavarse las manos.

-- ¿O eres tímido?, ¿O eres simplemente eres un insolente? _ Le repetía aquello mientras se lavaba las manos. Y después sacudía de ellas para que se fuera el exceso de agua.

Seiya por su parte no respondía nada de lo que ella le preguntaba.

-- ¡Algo tiene que pasarte!, He preguntado tres veces, .... ¡Y estoy si respuestas! _ Ya perdiendo poco a poco la paciencia y comenzado a agitar, un pequeño trozo de papel con el que secaba las manos, hablo.

Poco a poco, comenzó a salir de ese estado de confusiones y de sentimientos y emociones encontradas, Seiya ya un poco más centrado, reflejaba en su rostro lo que segundos antes estaba dispuesto a hacer. Y comenzó a girar su rostro hacia la joven y hacia la puerta abierta del tren.

-- ¡Billete por favor! _ El encargado de revisar lo tickets de viaje se acercó a ellos.

-- ¡Está en la litera! ¡Ahora se lo doy! _ Le contesto un poco fastidiada la chica.

-- Disculpe, señor, .... Billete, por favor _ Esta vez le hablo a Seiya.

Seiya que aún seguía aturdido, no le presto atención, así que el encargado paso por un costado de la joven y se acercó a Seiya, al estar ya cerca palmeo suavemente el hombre de este, para que lo pueda prestar atención.

-- Hola señor, .... Entre, por favor. ¡Vamos! _ Una vez que obtuvo la atención de Seiya, le indico que no debería de estar ahí y con señas de manos le indicada que retrocediera un poco.

La joven al ver que Seiya le hacía caso al señor, suspiro aliviada y retrocedió unos pasos para que Seiya estuviera más cómodo, aprovechando que Seiya ya no se encontraba cerca de la puerta abierta, el señor rápidamente cerro y la aseguro, todo esto a vista de los dos jóvenes presentes.

-- Enséñeme su billete _ El encargado volvió a hablar, mientras aseguraba la puerta.

La joven al ver que Seiya no le prestaba ni la más mínima atención se preocupó y se dirigió hacia a él, con la clara intención de hablarle.

-- Quiere ver tu billete, ¡Billete!, ¡Billete!, .... ¿Dónde está tu billete? _ Hablándole y también haciendo señas con sus manos, la joven intento que Seiya la entendiera.

-- No tengo billete _ De manera muy cansada y con la voz totalmente suave y ronca le respondió Seiya a la joven, para luego marcharse de ahí.

La joven al escuchar su voz y sobretodo porque le hablo, lo miro totalmente sorprendida, ya que ella imaginaba que era mudo y por eso no contestaba sus preguntas.

-- Tiene una linda voz, .... Una muy linda voz _ La joven solo podía pensar eso, después de escucharlo.

Luego de aquello, los tres se dirigieron hacia el compartimiento del tren que ocupaba la joven. Ahí se encontraban sentados los tres.

El señor se encontraba escribiendo sobre un papel que se encontraba apoyado en su rodilla, mientras que al frente de él se encontraba Seiya, y atrás del señor se encontraba la joven.

-- En realidad lo que ha pasado es que, .... Lo planeo todo en el último momento. Así que no tuvo tiempo de comprar un billete, .... Además, el tren está casi vacío, .... Así que puede darle un billete ahora. .... No pasa nada ¿Verdad?, _ La joven que estaba espalda del señor, trataba de convencer que todo había sido un pequeño malentendido y que lo pasara por alto.

El encargado que estaba escribiendo, evitaba prestarle mucha atención a la joven y más se concentró en hacer su trabajo. Al ver que el encargado no le prestaba atención, simplemente se limitó a palmear el hombro de señor para captar su atención y hablarle directamente, mientras que Seiya aún seguía perdido en sus pensamientos.

-- Señor, ¿Ya le he convencido o digo algo más para hacerlo? _ La joven no sabía que más hacer, para ayudar a Seiya.

El señor al ver las intenciones de la joven simplemente, volvió a girar su cuerpo para mirar a Seiya que lo tenía sentado al frente suyo. La joven al ver tal acción, hizo un gesto de angustia.

-- ¿Billete para dónde?,.... ¡Eh! _ El señor hablo con Seiya, y al ver que no le prestaba atención simplemente palmeo una de sus rodillas para que este le prestara atención.

Seiya al sentir aquel toque reacciono de forma monótona y lo miro al rostro sorprendido.

-- ¡A dónde va este tren? _ Con la voz aturdida le pregunto Seiya.

-- ¿Qué? _ El encargado respondió totalmente sorprendió por la pregunta.

Luego esas frases, ambos se miraron extrañados durante unos pequeños segundos, Seiya por no saber dónde estaba, y el señor por pensar que se trataba de una broma. La joven que estaba muy atenta a todo lo que pasaba se apresuró en intervenir.

-- Última parada. Delhi., .... Dele un billete para Delhi. _ Y rápidamente hablo muy optimista.

El señor al escucharla, simplemente giro su cuerpo hacia donde se encontraba la chica y la observo durante uno segundos; mientras Seiya aún seguía con su conflicto mental.

-- Mire, debería decirle esto también, pues, .... Él ha vivido una tragedia, ..... Y está pasando por un mal momento, .... Mírelo, usted mismo, .... Así que por eso él, .... ¡Delhi!, ¡Ponga Delhi! _ La joven en un leve susurro le comenzó a hablar al señor, este al ver que la joven tenía razón con respecto a Seiya no dijo nada.

El señor simplemente movió su cabeza de izquierda a derecha mientras bajaba la misma, para mirar el papel que sostenía en sus manos y prosiguió a seguir escribiendo en este.

Cuando termino de hacerlo, el encargado le entrego el billete a Seiya, y este lo guardo en uno de sus bolsillos de su saco, al ver que se encontraba solo, la joven habladora se acercó a él, sentándose al frente suyo.

-- ¿Qué pasa, jefe?, .... ¿Qué es esto?, .... ¿Estas drogado?, .... ¡Llevas drogas en tus bolsillos? _ De manera curiosa y sonriente le comento a preguntar a Seiya.

Al escuchar aquellas palabras, Seiya la miro muy sorprendido y levemente enojado.

Hola, como están dostys, como lo dije en el capítulo anterior esta es un adaptación de una de mis películas favoritas, ojo que el 90% pertenece a la película y el 10% es obra mía.

Espero que les guste y desde ya quiero agradecerles por votar, y tbm por sus lindos comentarios que escribieron el cap. Anterior.

¿Podrían compartir un viaje con una persona así de entusiasta y habladora que la joven?