En la Casa de Géminis... (3:00am)
El caballero mayor de Géminis esperaba en la cocina sentado de brazos y piernas cruzados la llegada de su hermano.

¿...?:- ¡TRIÁNGULO DORADO! - Se oyó al otro lado de la puerta y supo que él había llegado. La puerta se abrió...
Saga:- Hermanito... - Lo miraba fiero y fijo. - Te estaba esperando para ver que volvieras bien. - Se levantó de su lugar. - Y por lo visto... - Se acercó como para darle un beso pero a milímetros de sus labios se detuvo. - ... estuviste bebiendo. - Torció la boca y le quitó la vista de encima alejándose de él. - ¿Con cuál de todas las mojarritas fue? - Empuñó el aire gruñendo por lo bajo.
Kanon:- Con los únicos idiotas que pueden llegar a seguirme la corriente... - Rodeó los ojos.
Saga:- ¿Sorrento y quién más? -
Kanon:- ¿Prometes no reírte? -
Saga:- Sí, pero ya dime quién. -
Kanon:- Julián. - Al mayor se le cayó la mandíbula. - Cierra el hocico que te entran moscas. -
Saga:- Hijo dep... -
Kanon:- De tu madre. -
Saga:- ¿De veras? ¿Don Pose? - Se le empezaba a dibujar una sonrisa.
Kanon:- Sí, pero todo tiene su explicación. (Posición de "vamo' a calmarno'" pero con los ojos cerrados) -
Saga:- Ven aquí. - Lo tomó por la muñeca izquierda lo jaló hacia él y le dio un beso corto para luego dirigirlo a la mesa y de paso sentarlo. - Cuenta todo. -
Kanon:- Ok... bien, fue así... -

* Falso Flashback *
-- relatado por Kanon --

Estábamos en la cena y todo iba bonito hasta que Sorrento me hizo una seña para seguirlo a otro lugar.

[Interrupción]

Saga:- ¿Otra vez quiso coquetearte? - Dijo molesto.
Kanon:- NO me interrumpas. -
Saga:- Ok, prosigue. - El menor asintió.

[Continuación]

Terminé de cenar con toda la serenidad del mundo, ya que estaba delicioso todo, y fui a ver qué tanto quería...
Me dijo que lo embriague a Julián para darle duro por la noche y yo le dije que eso no me incumbía a mí, que lo hiciera solo. Entonces me dijo que sólo yo podría hacer que lo hiciera. Entonces bufé y rodé los ojos y volví a decirle que no, que lo haga solo pero cuando volví a verlo me puso ojos de cachorro y tuve que aceptar y ayudarlo.
Empecé a molestar a Don Pose luego del brindis de medianoche para ver quién aguantaba más sin caer muerto y no lo hizo de inmediato, pero aceptó.
Le dije: "Enséñame qué tan macho eres Julián, ¿o me dirás, acaso, que eres una gallina?" ¿Para qué...? Saltó como leche hervida diciéndome de todo y que aceptaba el desafío.
Las primeras rondas fueron bien, pero a la decimosexta vuelta cayó como mosca.
Sorrento me abrazó casi asfixiándome y me dio un beso ruidoso en la mejilla. Levantó a Julián como una princesa y se lo llevó a su habitación.

* Fin Falso Flashback interpretado por Kanon *

Saga:- Pobre princeso... hasta me dio lástima... -
Kanon:- Sí, a mí también, pero me gusta ver arder el mundo y más aún si se trata de él. -
Saga:- Aaaaaaaaah... ¿Por? -
Kanon:- Simple, no quiero que Sorrento se me acerque y él es la excusa perfecta. -

Ambos rieron y fueron a descansar cada uno por su lado.
Al día siguiente un paquete gigantesco apareció en la puerta de la casa de Géminis con una etiqueta que decía:

"Para: Kanon
De: Rafael
Gracias por tu amistad"

Ejem, ejemm... traducido vendría a decir:

"Para: Kanon
De: Radamanthys
Gracias por la hermosa velada"

Y no faltó el "ataque de celos"...

Saga:- Y ese tipo, ¿quién es? ¿Qué quiere? -
Kanon:- Es sólo un amigo, vive lejos y mandó el paquete, eso es todo. - Volvió su vista al paquete. - Sí, claro... un amigo que me hizo el amor ayer mientras tú estabas aquí, muy tranquilo. - Lo analizó para ver de qué manera abrirlo. - Veamos... esto es así... y así... y luego... ya. - Lo logró y abrió por completo la caja que también tenía una nota...

"Lo siento, no sabía que enviarte y te compré lo primero que se me cruzó en el camino..."

Ambos miraron con detalle lo que había dentro y estaba un oso casi del tamaño del paquete todo comprimido para poder entrar, una barra de chocolate del favorito del gemelo menor y un almohadón con la forma de un emojie (😅). El peliagua se quedó estático.

Saga:- ¿Qué es todo esto? -
Kanon:- Es... esto es... - No le salían las palabras. - Es mi... -
Saga:- ¿Tu qué? -
Kanon:- Mi lista de regalos que publiqué en un estado. -
Saga:- ¿Un estado? Pero si yo siempre los veo y... - A pesar de estar ensimismado en sus pensamientos, reaccionó. - Lo olvidé... - Susurró casi inaudiblemente y gracias al cielo que no lo escuchó...
Kanon:- Ayúdame con el oso, por fa. - Entró con el chocolate y el almohadón.
Saga:- ¿Eh? Sí. - Entró el oso como pudo porque casi no pasaba por los marcos de las puertas.

Feliz, feliz, feliz Kanon siguió su día como si nada. Por la noche habló con "Rafael" y le agradeció muchísimo los regalos diciéndole de paso que lo amaba mucho.

⚀⚁⚂⚃⚄⚅

Los meses pasaron.
Periódicamente Géminis menor se encontraba con Radamanthys para charlar y tener pequeños rounds de cariño en el bosque o en su callejón, también para tener citas por las tardes después de los entrenamientos.
El danés se había acostumbrado al nombre "Rafael" y ya no se quejaba... tanto.

Aún así, el peliagua trató de hacer un último intento. En dos días sería San Valentín y esperaba que su hermano lo recuerde o aunque sea le diga "Feliz San Valentín". No esperaba un regalo, eso ya sería demasiado. Sólo deseaba que lo recuerde.

Ese día llegó, el entrenamiento fue normal, nadie mencionó nada, pero todos al terminar de entrenar se fueron con sus respectivas parejas.
Saga no le habló en todo el camino a Géminis, incluso ni siquiera lo había hecho dentro de la misma casa. Kanon comenzaba a decepcionarse por lo que decidió encararlo en su habitación a ver si le decía algo.

Kanon:- Oye hermano, ¿vamos a salir o qué tienes planeado? -
Saga:- Dormiré una siesta, luego me levantaré para hacer una cena simple. No estoy con ánimos de nada. -
Kanon:- (💔) Otra vez lo olvidaste... - Se quedó viéndolo al principio con asombro, pero luego su expresión cambio a una totalmente fría. - Está bien. Me voy. - Salió de la habitación del mayor. - No me esperes. No volveré. - Comenzaba a elevar su cosmos de la pura ira que le recorría las venas y su gemelo lo sintió.
Saga:- Oye, espera, ¿a dónde crees que vas? - Lo detuvo tomándolo por el brazo, pero el menor con un solo movimiento se deshizo de su agarre.
Kanon:- ¡Eso no te importa! Nunca nada te importa. Siempre hay algo antes de mí. No quiero ser tu prioridad, pero tampoco ¡el último ítem de tu lista! -

Salió hacia el hall de Géminis y cuando estaba por salir Saga lo tomó nuevamente por el brazo izquierdo ejerciendo algo de presión a lo que el menor respondió con una potente y sonora bofetada... ¡¡PLAFF!! Se oyó en cada rincón del tercer Templo y luego una estrepitosa caída a unos cinco metros de él. El pelimorado quedó sentado en el suelo tomándose el lado izquierdo del rostro mientras veía totalmente asombrado a su hermano.

Saga:- Kan... Kanon... - Fue lo único que logró pronunciar.
Kanon:- No te me acerques. No me sigas. No te quiero ver. No me hables. Fin del "nosotros". - El mayor sólo lo veía sin salir de su asombro. - Es más, jamás hubo un "nosotros"... - Se dio la vuelta dándole la espalda. - ... siempre fuiste sólo tú. -

Corrió escaleras abajo estampando al pobre borrego contra la pared más próxima tan sólo con el poder de su cosmos al ver que estaba en su camino.

Kanon:- Lo siento Mu... Lo siento Milo... Lo siento muchachos... pero ya no lo soporto. No puedo estar más aquí. -

Huyó a su "Lugar especial", se sentó en su árbol favorito y se dedicó a soltar sus últimas lágrimas.

¿...?:- Oye, amor... ¿qué ocurrió? -
Kanon:- Ya no puedo más, no lo soporto. A él no le importa en lo más mínimo. -
¿...?:- Está bien, ven, iremos ante el Señor Hades. -
Kanon:- Espera, Radamanthys... - El juez traía su Sapuri por mera casualidad ya que se había escapado de sus deberes.
Radamanthys:- ¿Qué ocurre? - El mayor sólo lo abrazó por la cintura apoyando su cabeza en su pecho mientras olía el perfume de su novio.
Kanon:- Ahora sólo quiero estar así. - El rubio correspondió ese abrazo presionándolo un poco contra su cuerpo.
Radamanthys:- Yo... No sabría qué decir. Es tu decisión... -
Kanon:- Si es así... - Hizo una pausa. Tal vez pensando en si decirle o no cuál era su decisión. - Quiero ir contigo. -

El juez abrió los ojos de par en par separándose un poco de él para besarlo con toda la pasión y felicidad que le causaba oír esas palabras.

Radamanthys:- Te amo Kanon. - Lo miró con una ternura que derretiría a cualquiera. - Vámonos, tenemos que dar la noticia. - Pero antes de poder salir de ese lugar...

¿...?:- ¡Alto ahí Radamanthys! -
Kanon:- Milo... - Géminis menor se separó un poco del juez.
Milo:- ¡Explícame esto Kanon! -
Kanon:- Oye, no eres mi novio para que te dé explicaciones. - Su voz era firme.
Radamanthys:- Vámonos Kanon. - Posó su mano sobre su hombro izquierdo.
Milo:- ¡NO LO TOQUES! - Se alteró el peliazul lanzándose al ataque contra el rubio. Éste último lo miró de manera sobrante, como retándolo con la mirada.

Pero, antes de poder llegar al danés, Géminis menor se interpuso entre ambos.
Kanon:- Si quieres tocarlo, primero deberás pasar sobre mí. -

Los tres caballeros presentes (Aries, Escorpio y Acuario) y el juez del Inframundo se quedaron asombrados al ver tal acción del menor de los gemelos.
Milo abortó de inmediato su plan de golpear al espectro cayendo de rodillas ante su mejor amigo.

Milo:- Kanon... - Se quedó con las palabras en la boca mientras sus lágrimas se desbordaban de sus ojos.
Kanon:- Lo lamento Milo, pero ya no soporto estar en el Santuario. - Sus palabras eran firmes. - No le digan a Athena a dónde iré, eso sólo generará conflictos. - Se volteó hacia Wyvern. - Adiós muchachos. Vámonos Radamanthys. -
Radamanthys:- Sí. -

Y así, se dirigieron al portal que ya habían utilizado previamente, pasaron por él saliendo en el Inframundo y, una vez allí, lo cerró.

Kanon:- Aún no me acostumbro a esto... - Observaba el lugar
Radamanthys:- Tranquilo, nada pasará. - Lo tomó de la mano entrelazando sus dedos y así caminaron hasta llegar al gran castillo de Hades.

Ya adentro del mismo fueron a presentarse ante el gran Señor del Inframundo.

Hades:- ¡Radamanthys! - Se oyó el llamado de su Señor retumbar en todo el lugar.
Radamanthys:- Mi Señor... - Caminó imponente hasta estar frente al superior. Se hincó sobre su rodilla quitándose su casco y reverenciándolo. Esperó palabras duras de su parte.
Hades:- ¿A qué debo el honor de nuestro invitado...? -
Radamanthys:- Mi Señor... - Hubo un pequeño silencio en el que meditó rápidamente sus palabras. - Le solicito encarecidamente que le permita quedarse y establecerse aquí a mi pareja, Kanon. -

El superior lo quedó mirando unos segundos... segundos en los que se lo comían los nervios rogando que su Señor Hades diga que sí.
Los otros dos jueces estaban ahí, en el lugar. También Pandora y algunos espectros de alto nivel.
Kanon estaba atento a la situación deseando que el Dios del Inframundo acepte la petición de su pareja.

Hades:- Kanon de Géminis o Dragón Marino... - Pasó su mirada hacia él. - Sé que aquí sólo pueden habitar mis súbditos y también sé que no te arrodillarás ante mí. - Silencio incómodo... - Pero... eso es simplemente porque no respondes a ningún Dios, ¿No es así? - El menor de los gemelos dio unos pasos al frente hasta quedar detrás del danés que aún seguía hincado.
Kanon:- Hades, Señor del Inframundo... eso es verdad, perdóneme. - El pelinegro sonrió. - Pero esa es mi naturaleza. -
Hades:- Cuánta sinceridad... - Dijo en son de burla como si la situación fuese divertida. - Me agrada. Te permitiré quedarte. - Todos se quedaron asombrados. - Estarás con Radamanthys en su habitación y NO quiero objeciones. - Miró fijo a su otros dos jueces que estaban a punto de estallar en quejas. - Pueden retirarse... tú también, Pandora. - Radamanthys se levantó y se disponía a irse, pero lo detuvieron. - No Radamanthys, tú te quedas aquí. - Se paró en seco. - Ven, acércate. - Le hizo una seña con su dedo índice y él obedeció posicionándose a un costado de su Señor lo suficientemente cerca como para oír sus susurros. - Cuida de él. Sé que puede acabar con todos mis espectros de un solo movimiento. - Miró al geminiano y siguió susurrándole. - No quiero problemas con mis otros dos jueces, así que contrólalo. -
Radamanthys:- Pero... mi Señor... ¿y si ellos comienzan una riña? -
Kanon:- Sé ignorar idiotas, Rada... - Ambos se dieron vuelta a ver al gemelo. - Pero si intentan golpearme los dejaré paralizados o viendo elefantes rosados voladores (Golpe de Ilusión). - Levantó sus manos un poco más arriba de su cabeza haciendo jueguitos con sus dedos.
Hades:- Oye, eso me agrada, es más... me gustaría verlo. - Lune lo miró con algo de terror.
Kanon:- Como usted diga. - Asintió con su cabeza y una sonrisa maliciosa. - Su alteza... -
Hades:- Perfecto. - Volvió con el juez. - Debes de estar orgulloso de él, ¿verdad? - El rubio se ruborizó tensándose un poco. - Eso es una afirmación... -
Radamanthys:- Mi Señor, por favor, no me haga esto... - Bajó su cabeza. - Sí lo amo. Y quisiera saber si podría hacerme un favor... - El superior arqueó una ceja. - ¿Podría convertir a Kanon en mujer? - Eso llegó a los oídos del mayor.
Kanon:- ¡RADAMANTHYS! - Se exaltó al oírlo. - ¿Ya, tan rápido? ¿Tiene que ser ahora? - Tanto el Juez como el Señor del Inframundo voltearon a verlo.
Radamanthys:- Bueno si quieres... ya sabes... -
Kanon:- Sí, sí quiero, pero tengo miedo... -
Hades:- Bueno... eso se arregla fácil y no es problema, pero ambos deben estar de acuerdo. - El gemelo menor con la cara tan roja como un tomate se escondió tras su flequillo y Radamanthys, preocupado, fue en su auxilio abrazándolo por los hombros.
Kanon:- Está bien, si es que puede hágalo. -
Hades:- Por supuesto. - Sonrió malicioso. - Sólo aléjate un poco Radamanthys. - El juez asintió y retrocedió unos cuantos metros.

El Dios levantó su mano derecha, giró su muñeca creando una esfera de luz y se la lanzó al caballero de Géminis. La esfera al impactar contra él cubrió todo su cuerpo emitiendo una luz cegadora que se levantó a centímetros del suelo, quedando como en un estado de sueño y haciéndolo girar lentamente.
Radamanthys, desde su lugar, se cubrió los ojos, pero Hades se mantuvo atento a cada cambio.
Se podía distinguir cada detalle de su transformación ya que parecía como si no tuviera ropa. Se veía como sus brazos se encogían levemente manteniendo una tonicidad envidiable, sus piernas tomaban una forma escultural dignas de una Diosa, su cintura se afinaba, sus caderas se ensanchaban y sus... sí, y sus pectorales se convertían en dos prrrrrrrfectos opais...
El Señor Hades sonrió maliciosamente pensando en cuál sería la reacción del juez.
La luz cegadora comenzaba a atenuarse de a poco a la vez que bajaba retornando a su posición original y volviendo a divisarse las ropas del gemelo.
Una vez en el suelo...

Kanon:- ¿Y? ¿Cómo me veo? - (Por si lo leen con las voces originales, imaginen que la nueva voz de Kanon es la de Mina, Sailor Venus de Sailor Moon).
Hades:- Pues... ¿por qué no le preguntas al señor "hilito de sangre" que tienes atrás? - Señaló con su dedo índice al rubio detrás de ella.
Kanon:- Rada... ¿manthys...? - Lo miró raro al ver que la veía de arriba a abajo como devorándola con la mirada, babeándose en silencio. - ¿Te encuentras bien? - Se acercó a él y pasó su suave y delicada mano por la mejilla del rubio.
Radamanthys:- Yo... yo... Eeeeeeh... - Se sintió tan suave como el pétalo de una rosa y no le salían las palabras.
Kanon:- A ver si esto funciona... - Lo tomó por ambos lados del rostro y le estampó un beso.
Radamanthys:- ¡Mmngh! - Abrió grandes los ojos sorprendido por el contacto. - ¡Kanon! - Estaba completamente ruborizado.
Kanon:- Así está mejor. - Sonrió divertida.
Hades:- Bueno, si ya están felices, pueden retirarse. -
Kanon:- Sí. - Le sonrió al Dios guiñándole un ojo y haciéndolo sonrojar levemente.
Hades:- Sí, sí, ya váyanse... - Miró hacia otro lado intentando cubrir su sonrojo, pero Kanon ya lo había notado...

Sonrió satisfecha con algo de malicia tomando del brazo al juez que aún no se movía. Lo arrastró con su gran fuerza que a pesar de haber cambiado su fisionomía no la había perdido. Y al darse cuenta de ello, lo levantó en su hombro y se lo llevó hacia la habitación previamente saludando coqueta al Señor del Inframundo.

Kanon:- Adiooós~... - Y en el camino a la habitación iba pensando... - ¿Y cómo diablos supieron que yo estaba en ese lugar...? -

He aquí, la explicación...

* Flashback *

Durante la huida de Kanon hasta llegar al lugar de paz...

En la casa de Géminis...
El borrego llegó hecho una furia gritándole al guardián de la tercera casa.

Mu:- ¡¡QUIERO UNA EXPLICACIÓN!! ¡¿QUÉ DIABLOS PASÓ AQUÍ?! ¡¿POR QUÉ KANON SALIÓ DEL SANTUARIO ESTAMPÁNDOME CONTRA LA PARED?! - El gemelo mayor se quedó sentado en el suelo sin siquiera mirarlo.
Saga:- Kanon se fue y no volerá.
Mu:- ¿Quieres decir que volverá muy tarde? -
Saga:- No. No volverá definitivamente. - El pelilavanda cambió su expresión drásticamente al asombro total.
Mu:- No, no puede ser, él es un caballero de Athena, no puede alejarse del Santuario.
Milo:- ¿Quién se fue del Santuario? -
Mu:- ¡KANON! - El mundo se le colapsó al escorpión.
Milo:- ¡¡TODO ESTO ES TU CULPA!! ¡¿QUÉ DEMONIOS LE HICISTE AHORA, MALDITO ICEBERG?! -

Tuvo la intención de saltar a golpearlo, pero Camus apareció detrás de él congelando sus piernas aferrándolo al piso. Habían tenido la brillante idea de salir en parejas con los Géminis, pero todo se arruinó al saber que el menor de los gemelos no estaba.

Camus:- No quiero ser malo, pero esta vez, el bicho tiene razón. -
Mu:- ¡Hay que hacer que regrese! -
Milo:- Pero no sabemos dónde está. -
Mu:- Yo sí sé. - Salió corriendo hacia ese lugar donde previamente había visto a Géminis menor con Wyvern.

Camus descongeló las piernas de Milo y lo siguieron. Al llegar, se encontraron con esa hermosa escena.

* Fin Flashback *

Bueno, hasta aquí les dejo por hoy el capítulo donde Rada casi se desangra jeje... 😅

Voten y comenten y perdón por tardar...

Nos vemos! 😘

Love you! ❤