▶NUEVE◀

"Sonreir"

Se quedaron viendo a los ojos por unos segundos, luego las luces se encendieron y aplausos se empezaron a escuchar por lo que ambos despertaron del trance y desviaron miradas para encontrarse con las de sus amigos que unos sonreían picaramente pero prefirieron no decir nada al respecto.

-Nada mal para tu primer baile- dijo el ojiverde teniendo sus manos en su cintura -creo que esperaba que me pisaras.

-Y puedo hacerlo sin necesidad de estar bailando, sabes- lo vió de reojo y este agito ligeramente su cabeza con una pequeña risilla.

-Ustedes en serio parecen pareja- llegó Kai que estaba acompañado por Skaylor.

-¡No somos pareja!- respondieron al unisonio con un leve rubor en sus mejillas.

-Si, si como digan, iré planeando la boda- habló burlón y los dos jovenes le mandaron una de esas miradas matadoras y este tragó saliva -Era broma, era broma...

-Dejalos Kai, una amistad entre un chico y una chica no es nada malo, solo miranos a nosotros- siguió la pelirroja y Lloyd rió para sus adentros >Así se manda a alguien a la Friendzone< pensó el mismo.

-Golpe bajo amigo- Cole apareció colocando su mano en el hombro del castaño.

-¿A qué te refieres?- preguntó Skaylor.

-A nada ¿Verdad Cole?- le dijo con odio y este asintió alejandose lentamente.

-Jay tiene razón... en serio son extraños- mencionó ____ torciendo sus labios para un lado.

-¿Qué esperabas?- preguntó el rubio agraciado.

-¡Amigos!- se escuchó en el micrófono la voz de la misma chica, todos pusieron atención -¡Vayan a servirse un trozo de pastel ya que luego toca la conoración de los reyes del baile!

-Esa es mi señal- dijo el azabache y se dió la vuelta para tener dirección a la mesa de postres.

-Este chico se muere si no puede comer- llegó Nya en compañía del pelirrojo y el rubio platinado -¿Quiénes creen que sean los reyes?

-De seguro es Camille- habló la castaña sin interés cruzandose de brazos -ella recibe la corona en todos los bailes.

-¿Y el rey?- preguntó Jay.

-Ella lo elige.

-Creo que no entiendo- mencionó Zane -¿No se supone que es por votos?

-Si pero digamos que ella da un cierto aporte económico a la escuela, aunque sea la más prestigiosa de Ninjago- respondió -Por ella votan porque si no lo hacen reciben una sansión y elige al chico que es "más guapo" para que sea su acompañante, ya que según se al final ambos deben de bailar- dirigió su vista al ojiverde -Y creo que no me sorprendería que te elija a ti esta vez.

-Pues te aseguro que no subiré a ese escenario y menos con esa loca.

-Ya lo veremos ahora vayamos por pastel que no he comido desde el almuerzo- dijo Kai y todos fueron como siguiendo a Cole.

Ya podran adivinar que ellos fueron los últimos en llegar y los últimos en recibir su trozo de pastel, cabe resaltar que casi se quedan sin comer ya que aunque el pastel era grande, la cantidad de alumnos de ese grado era mayor. Su amigo azabache ya se encontraba comiendo el segundo trozo que había logrado conseguir por ahí y afortunadamente no lo habían descubierto.

-Llegaron algo tarde, ya iba a ir por la tercera- dijo este terminando su plato.

-No entiendo como no engordas- el pelirrojo lo señaló y este se vió el estómago.

-Hago ejercicio, algo que te falta- se burló este.

-¡Oye!

Los demás rieron menos la joven castaña.

-¿No puedes ni sonreir? Aunque sea un poco- Lloyd le dijo y ella solo se encongió de hombros.

-No tengo mucho humor ahora.

-¿Qué esperabas de ____, Lloyd?- llegó la pelimorado con intenciones de molestar como siempre -Ella solo reirá cuando se de cuenta lo tonta que es.

-¡Eres...!

-Ah, entonces por eso te estás riendo ahora- respondió el rubio y los que estaban viendo la escena hicieron el típico "UHHH..."

-No comprendo porque la defiendes, de tantas chicas... de mi, la elegiste a ella ¿No te da pena jugar con sus sensibles sentimientos?- habló burlona.

-¿Y a ti no te da pena pagar para que te quieran?- se metió la azabache defendiendo a su amiga.

-UHHH...- otra vez.

-No necesito pagar para que me quieran... pero ya desearías hacerlo tú ____.

-Pues yo tampoco lo necesito- respondió -Pierdes tu tiempo conmigo, si crees que eres mejor que yo no me dirías nada porque sabrías perfectamente que haga lo que haga siempre seré inferior. Pero no... ¿Acaso le temes a algo de mí?.

-¿Qué podría temerte, tonta?.

-Tal vez... ¿qué tenga más amigos verdaderos que tú?- siguió el ojiverde.

-Los amigos son para las personas fracasadas, las personas que necesitan de alguien ¿No qué querías ser independiente?, somos muy diferentes.

-Si, en eso tienes razón, yo no dependo de las opiniones de los demás.

-UHHH...- la tercera vez.

-Seliel esto se salió de control, haz algo- le dijo la rubia a su amiga, quien luego se subió otra vez al escenario.

-¡Haber a todos!- dijo para que le prestaran atención -¡Ya nombraremos a los reyes del baile!.

-Es mi señal...- dijo la pelimorada lanzando su cabello hacia atrás con un vaso de refresco en su mano mientras empezaba a caminar -mmm... creo que este jugo no me gusta mucho.

Siguió caminando hasta pasar por el costado de la castaña. Fingió tropezar un poco para terminar echandole todo el refresco al vestido de la joven que al ser de color blanco la mancha se hizo muy visible.

-¿No lo querías?- dijo burlona para luego reirse dejando a ___ viendo su vestido manchado.

Los demás también soltaron unas cuantas risas al verla en ese estado olvidandose de lo que podría hacer la castaña.

-¿Estás...?- quiso hablar el ojiverde pero la chica salió corriendo empujando a las personas que estaban ahí -¡____!

Avanzó un poco alzando la cabeza para ver si la podía encontrar pero no lo logró. Volteó a ver a sus amigos quienes también estaban preocupados.

-Chicos... debo-

-Ve con ella- interrumpió la pelirroja, este asintió y se fue lo más rápido que pudo.

Empezó a recorrer todo el lugar: pasó por donde se encontraba la comida, cerca de la cocina, por los baños (pero obviamente no entró al de chicas por lo que solo preguntó), detrás del escenario y no encontraba mínimo rastro de ella y tampoco podía preguntarle a alguien ya que sabiendo como son las cosas con ella, no ayudarían mucho.

-Muy bien...- dijo la rubia en el micrófono con un sobre en la mano -Ahora veremos quien es la reina de este baile- abrió el sobre y leyó sin mucha emoción -Camille ¡Yei!- dijo sin ánimos pero los demás si tuvieron que aplaudir por obligación.

La joven de cabellos morados subió al escenario luciendo ese vestido azul noche que era algo exagerado para el gusto de varios.
Finalmente llegó al lado de Pixal y ahi le pusieron la corona junto con un ramo de flores como si cuando se eligiera a la Miss Universo. Ella saludó a todos con una gran sonrisa.

-¿Algunas pa...?- le quitó el micrófono.

-Si si si, pues... antes que nada, gracias a todos por elegirme como su reina... otra vez- rió como toda una diva -De verdad les agradezco de todo corazón y decir que no importa el Rey que suba ahora porque de seguro va a ser el más lindo ¿o no?.

Ella se rió y los demás hicieron lo mismo pero de una manera fingida. La rubia rodó los ojos y esperó a que le diera el micrófono para poder nombrar ahora al otro Rey.

-Muy bien, bellas palabras- abrió el otro sobre y analizó un segundo el nombre -Ahora... el Rey del Baile de Primavera es: ¡Lloyd Garmadon!

Los reflectores se posaron en él que seguía buscando a su amiga. Se tapó con un brazo ya que la luz le estaba dando directo a los ojos.

-¿Qué crees que haga?- le preguntó Jay al azabache que también estaba esperando acción por parte de este.

-No lo se, pero se que esto se va a poner emocionante- afirmó este y luego miró a su otro amigo -Oye, deja de mirar a la presentadora- se burló.

-¿Qué? ¡No la miraba a ella!- Zane se ruborizó un poco.

-Si, como digas.

Siguiendo con lo otro... el ojiverde se enderezó y comenzó a caminar al escenario pero no subió a este, sino que solo extendió su mano para que le pasaran el micrófono y la joven de ojos azules cedió.

-Haber provando, uno, dos, tres. Toda la gente ¿Me escucha?- alzó su mano libre y algunos asintieron.

-Lloyd ¿Qué estas haciendo? ¡Ven aquí de una buena vez!- susurró la pelimorada zapateando un poco.

-Bueno lo único que quería decir es que este Rey le cedera su trono a...- buscó con la mirada hasta toparse con uno que tenía lentes y brackets, perdido en el espacio y tiempo -¡A ese él de alla!.

Todos voltearon a donde señaló el rubio y el reflector también apuntó a este que vio a los lados y luego otra vez al frente.

-¿Kien? ¿io?- se señaló a sí mismo y Lloyd comenzó a caminar hacia este con una sonrisa.

-¡Pues claro! ¿Qué opinas de ser el acompañante de esta bella reina?- apuntó a Camille que veía con desagrado y luego con el rostro de terror y sorpresa.

-¡¿Qué?! ¡No, no, no, no, no!- dijo agitando las manos hacia este.

-¿Esto se puede? ¿O no princesa?- miró a Pixal que se ruborizó un poco por el nombre que le habia puesto.

Esto de parte hizo molestar un poco al ojiazul, pero luego se le pasó porque aparte de que era un chico pacífico, sabía que Lloyd a veces solía ser algo coqueto sin querer y eso ya incluso se lo había hablado (además de que también shippeaba al Lloydx____)

-Claro que se puede, no hay ninguna norma que diga lo contrario- sonrió y luego le hizo una seña al chico que con una sonrisa boba subió al escenario.

-Te dejo a tu galán Camille- le devolvió el micrófono a Pixal para seguir con su búsqueda.

-¡No! ¡Ayudenme! ¡Ya no quiero ser reina!- replicó ella alejandose de ese tipo.

Los demás estallaron en risas incluyendo a los amigos del ojiverde quien siguió buscando como si nada hubiera pasado solo que ahora tenía una leve sonrisa triunfante en su rostro.

-¿Donde te metiste?- se dijo a sí mismo -Ya te busque por toda... ah, que idiota- se dio una bofetada mental por no haberlo pensado antes.

Salió de la escuela pasando por el cesped y dejandose envolver en el frío de la noche. Se asomó por los cenderos y caminó lentamente al rededor del lugar viendo siempre a los lados buscando alguna señal de la joven.

Llegó a darle casi toda la vuelta en cuanto encontró a una joven castaña sentada en la acera viendo la luna que se encontraba ahora en su máximo esplendor. Estaba temblando un poco y él lo había notado por lo que se quitó el saco y sin preguntar nada lo puso sobre sus hombros.

Ella se sobresaltó un poco pero afortunadamente no tuvo una mala reacción como para golpearle en modo de defensa en ese momento. Se dio cuenta de quién se trataba y solo se acomodó mejor el saco mientras que el joven se sentaba a su lado.

-No era necesario- dijo ella sin verlo a los ojos.

-Tenías frío y digamos que lo haces muy evidente- se desacomodó un poco la corbata que ya lo estaba ahogando un poco.

-¿Y tu corona?- preguntó viendo su cabeza sin rastro de que le hubieran dado una.

-Se la dí a alguien más pero eso no es importante- acercó su mano al rostro de la chica acomodandole los cabellos que tenía en la cara -¿Te encuentras bien?

-Si claro, solo me humillaron publicamente y el vestido que me prestó Skaylor esta hecho un asco y probablemente mis zapatos estén igual- dijo con ironía.

-Okey si fue una pregunta tonta- se rió de sí mismo y luego se puso a analizar el rostro de la joven -pero aún así no has derramado ni una sola lágrima.

-Aprendí a no llorar desde hace mucho- abrazó sus piernas soltando un suspiro -prometí no hacerlo, no quiero que me vean debil.

-Eso lo se perfectamente, ¿Pero por qué?- dudó él pero no recibió una respuesta por parte de ella. Sabia que posiblemente ella le diría algo como que no está lista para hablar del tema por lo que él decidió seguir hablando antes que eso -Mi vida tampoco es tan perfecta, sabes.

-¿A si? Pensé que tenías tu gran mansión y tu casa de vacaciones en Nueva York.

-Si, que chistosa- ladeó la cabeza -puede que sea así pero en realidad a veces uno se cansa de todo esto... tener una vida completamente planeada por us padres. Por ejemplo, ellos quieren que siga el negocio de mi papá para no dejar su empresa y estoy seguro que incluso puede que me tengan planeado el nombre de mis hijos.

-¿Tan grave?- lo miró de reojo.

-Si y además que solo por su trabajo nos tuvimos que venir acá, aunque creo que de eso no me quejo, por lo menos ahora me volví famoso por hacerme amigo de la rebelde y por humillar a la popular asi que creo que estoy augusto.

-No soy tan rebelde.

-¿A no?.

-Bueno un poco... un poco bastante- afirmó la chica y luego ambos se quedaron en silencio.

Observó el cielo por unos segundos y luego recordó todo lo que había pasado, sintiendo cierta injusticia por no hablar. Al final si lo decidió.

-Yo... pues... pasó mucho tiempo...- el joven se puso atento de sus palabras -Mis padres... ellos siempre peleaban y un día mi madre simplemente nos abandonó aquí, dejandonos una pensión mensual departe de ambos con la que pagamos nuestros estudios y lo que debemos preparar, a veces una que otra prenda pero... ya no es lo mismo... ellos en realidad al parecer nos veían como una carga más.

-¿No tienen familia aquí?.

-No, aqui no teníamos a nadie ni tenemos. Desde ese día prometí no confiar en nadie y no volver a permitir que alguien vea que en realidad por dentro estoy sufriendo, pedía algún día poder cambiar y ahora... creo que al tener algunos amigos me hace sentir... mejor, ya no me siento tan sola como antes.

-Bueno, si creo que podría pasarle a mi situación- sonrió.

-¿Tú crees?- preguntó ladeando los labios.

-Lo importante ahora es que las cosas pueden cambiar, y quiero ayudarte con eso y no solo yo, ya viste a todos los raros que tengo como amigos claro que tambien hay excepciones.

-Ja, si puede ser- regresó su mirada al cielo.

Lloyd hizo lo mismo pero luego fijó su vista a ____ que tenía algo particular en ese momento, algo que lo hizo sentir... no lo se.

-¿Cara de qué me ves?- dijo con una risilla aplastando levemente sus cejas.

-¿No te das cuenta que tienes en el rostro?- sonrió él.

-¿Qué cosa?- se rió otra vez de la misma manera.

-Tienes una sonrisa muy bonita- dijo para que entendiera a que se refería.

-¿Qué tengo...? ¿Qué...?- se tocó el rostro con algo de incredulidad.

Y ahi fue cuando cumplió su parte del trato, finalmente... una sonrisa.

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