Al regresar de la misión de la Ola el equipo venía acabado- entregaré la misión, vayan a descansar chicos -asintieron. Kakashi avanzó dejándolos atrás -me largo -Sakura suspiró con frustración viendo a Sasuke alejarse de ellos -nunca me verá ¿no es así?- Naruto la abrazó con cariño -es como Neji, un cretino, ese bastardo sólo ve a su estirpe, ya sabes, Uchihas con Uchihas, no he sabido que ningún miembro de su clan ame tanto como para dejar a su tribu -sonrió divertido.

Sakura volteó los ojos con fastidio -demonios, soy una idiota- Naruto negó recordando a Itachi -simplemente somos humanos mi querida Sakura-chan, ahora vayamos por el equipo de idiotas al casino, ganaremos mucho dinero hoy ttebayo -Sakura sonrió divertida- eres mala influencia Naru-chan -se unieron al equipo diez de inmediato, sabían que estaban en la barbacoa Akimichi.

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Kushina platicaba alegremente con Mikoto viendo a sus maridos preparar la barbacoa. Itachi y Shisui platicaban de algunas misiones con Kakashi bastante entretenidos- tch ¿por qué debemos reunirnos fuera del horario de misión?- Naruto volteó los ojos con fastidio -vamos teme, acepta que me amas, no hagas una escena ttebayo -Sasuke apretó el ceño- no digas estupideces, tengo hambre -Naruto sonrió, sacó de su chamarra un tomate- vamos come, te lo regalo- el Uchiha lo tomó levantando un puchero, sonrió con disimulo -me enteré de lo de Neji- el Uzumaki apretó el ceño- ¿te vas a burlar?-

Sasuke volteó los ojos con fastidio- tch no digas estupideces, simplemente creo que el sujeto es aún más cretino que yo- Naruto sonrió ligero como un zorro- ¿Acaso tratas de consolarme ttebayo?- se abrazó a él siendo empalagoso. Sasuke lo empujaba, comenzaron a rodar peleando una vez más, la familia los vio con diversión.

Fugaku volteó los ojos con fastidio -ya tienen dieciocho años ¿cuándo pararán?- el par se detuvo al escuchar su voz, un escalofrío los recorrió, se levantaron de golpe haciendo una reverencia -lo lamentamos padre- el Uchiha levantó una ceja negando con molestia, siguió hablando con Minato. Itachi se acercó -¿pensé que ya habían terminado sus peleas?- Kakashi sonrió -¿de qué hablas? Esto es diario- una gota recorrió a los menores. Naruto levantó un puchero no queriendo sentirse expuesto frente al heredero- eso no es cierto Itachi-nii- el Uchiha acarició su cabello con cariño como siempre hacía, sonrió amablemente.

Naruto se dejó hacer -es mejor así, que no cambien senpai -Kakashi negó con cansancio al ver a los menores -los tienes muy mimados kohai- Shisui sonrió con diversión -no sea dramático Senpai ¿para qué queremos dos gruñones? así me agradan bastante- sonrieron con diversión. Naruto veía con timidez y disimulo a Itachi, el Uchiha bajó su mano de su cabello acariciando su cuello con disimulo con una sonrisa amable mientras escuchaban hablar al resto, el rubio simplemente se dejaba hacer disfrutando el mimo.

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-Concéntrate, debes pulir tu chakra si quieres aumentar el grosor de las cadenas y su velocidad- los clones giraban piedritas por su cuerpo usando su red de chakra. Kushina veía a su hijo y sus clones esforzarse, era demasiado avanzado para su edad. La Namikaze sabía que Naruto era tan inteligente como su marido, había sacado su alegre personalidad, una combinación perfecta entre el rayo amarillo de Konoha y el habanero sangriento de la aldea.

Naruto original recordó un entrenamiento similar con cientos de clones, mientras crecía, todos esos sueños que tenía a veces eran demasiado realistas, pero no cuadraban con la realidad. El timbre de la casa Namikaze sonó, el pequeño levantó el rostro con sorpresa -iré a abrir, no reconozco el chakra ttebane- Naruto negó con velocidad -es un amigo mío, yo voy, no te preocupes ma ttebayo- Kushina lo vio con duda caminar a la entrada. Naruto abrió la puerta viendo a Sai en la entrada, sonrió ligero, era idiota preguntar cómo sabía dónde vivía si toda la aldea tenía conocimiento de ello- hola Sai- el chico sonrió, el Namikaze lo observaba con cuidado, parecía una sonrisa forzada, tal vez estaba nervioso -me preguntaba lindo ¿quieres dar una vuelta conmigo?-

Naruto se sintió tímido, avergonzado, acomodó un mechón de cabello detrás de su oído algo coqueto- ¿una cita?- Sai sonrió amable, asintió. Naruto abrió sus azules con sorpresa, sonrió con timidez, recordó el cuadro que Sai hizo y las palabras de su amiga de dar vuelta a la página, asintió levemente -dame un momento, sólo aviso- el chico asintió -aquí te espero belleza- el pequeño Namikaze se puso bastante rojo, cerró la puerta con velocidad corriendo hacia su madre, la pelirroja lo veía con duda- es un amigo, quiere ir a la plaza ¿puedo ir? dejaré a mis clones -Kushina suspiró hondo con fastidio -¿quién es este chico? no ubico su chakra-

Naruto levantó un leve puchero- es un anbu, su nombre es Sai, lo conocí hace unos días, es agradable- la pelirroja apretó el ceño al ver un sonrojo en su hijo, asintió con fastidio -no llegues tarde, deja el doble de clones o te retrasarás- Naruto asintió, salió corriendo dejando muchos clones atrás, sabía que a sus padres no les agradaba la idea de que le gustaran los chicos, eso era obvio.

Al salir vio a Sai -vamos, muévete antes de que se arrepienta mamá -el chico azabache parpadeó confundido -¿sigues pidiendo permiso?- Naruto suspiró hondo- bueno sí, son mis padres, por lo menos debo avisar, además me estaba entrenando -Sai lo vio con cuidado -yo soy huérfano, mi hermano murió hace años- veía el camino con seriedad. Naruto al escuchar esa palabra sintió frío y soledad -¿te sientes sólo?- el azabache negó -no, esas cosas no son importantes, las misiones me mantienen ocupado- Naruto mordió sus labios curioso -eres anbu ¿No es así?- Sai asintió -guarda un poco el secreto, ya sabes, identidad y todo eso- el rubio sonrió divertido.

Naruto lo veía de lado con cuidado, tenía una sensación extraña a su lado, era como si su cuerpo lo pusiera alerta, pero él no veía nada extraño en el chico, al cual más, era lindo con él, lo invitó a comer, tuvo que moderarse con un solo plato de ramen para no dar una mala imagen. Caminaron por la aldea platicando de la vida de Naruto porque el chico decía muy poco aferrándose a la confidencialidad de su trabajo como anbu y a ser huérfano, el pequeño rubio sonreía con diversión con sus respuestas directas -No conoces mucho el tacto ¿no es así?- sonrió divertido. Sai abrió levemente sus onix con sorpresa -bueno no, siempre he sido directo, evita el conflicto de tener dudas -Naruto suspiró hondo- te agradezco invitarme, disfruté salir contigo- Sai sonrió ligero.

Habían llegado a la casa del rubio -tal vez el sábado podamos volver a salir- Naruto acomodó un cabello tras su oído, levantó sus azules tímidos- ¿otra cita?- Sai asintió con seriedad- otra cita, tal vez podamos dar un paseo por el bosque -Naruto sonrió suavemente, asintió quedito, pero era evidente que estaba emocionado, vio a Sai acercarse bastante y besar su mejilla, abrió sus azules bastante, sonrió divertido al verlo irse, era bastante raro, pero agradable, se sonrojó un poco.

-Ese chico, no lo ubico- Naruto se asustó, brincó un poquito, no había sentido el chakra del Uchiha llegar, carraspeó un poco -Itachi-nii-san, me asustaste- se puso bastante rojo al sentir al chico a su lado, su corazón latía con fuerza cada que estaba cerca suyo. Itachi veía al azabache alejarse, apretó su ceño al no ubicarlo, le daba un mal presentimiento, giró su mirada viendo al pequeño Naruto tímido a su lado, sintió incomodidad al verlos juntos, no le había agradado lo que vio -¿es tu novio?- el rubio mordió sus labios con vergüenza, negó -no, pero- subió y bajó sus azules con timidez- tal vez me gusta-

Itachi apretó el ceño bastante sintiendo molestia y algo más ¿qué era esa sensación de incomodidad al ver al pequeño rubio de esa forma con ese sujeto? se había cabreado bastante al ver como había besado su mejilla -deberías tener cuidado, hay algo en su mirada que no me agrada -Naruto parpadeó con sorpresa, apretó el ceño al sentir rechazo- ¿de qué hablas? sólo es serio y algo idiota para responder, pero le gusto y él me agrada-

Itachi levantó su mano al verlo molesto, tomó con cuidado la mejilla que ese sujeto besó, observó un suave sonrojo en su piel acanelada, con su pulgar limpió la mejilla de Naruto discretamente haciéndolo ver como una caricia -sólo ten cuidado pequeño, no bajes tu guardia ¿quieres?- Naruto bajó su mirada con timidez, se recargó en su mano sintiendo lindo su cariño y su preocupación- gracias por preocuparte- Itachi sonrió viendo adorable al pequeño como siempre lo había visto, con una luz especial- entra a tu casa, ya es tarde, dale esto a tía Kushina- Naruto sonrió divertido tomando una enorme bolsa- se la daré, gracias Itachi-nii- el Uchiha lo vio con cuidado entrar viendo sus enormes azules asomarse hasta que la puerta se cerró, parpadeó al haberse perdido una vez más en su mirada, suspiró hondo caminando lejos del lugar.