Naruto limpiaba sus armas en su departamento, sabía que tendría visitas, la ventana sonó, sonrió al ver a su sensei, abrió la ventana -sensei ¿iremos a entrenar?- Kakashi negó con seriedad observando a su alumno, la Hokage le había dicho que estuvo con ella esos días presionando por entrenamiento, lo vio con cuidado recordando ese chakra en la laguna -dime Naruto ¿enviaste un clon a seguirnos?- el rubio levantó su mirada y un puchero- no diga tonterías sensei ¿para qué lo haría? sé que me hubiera descubierto ¿o sucedió algo?- el sensei apretó suavemente el ceño observando a su alumno, tal vez tenía razón, si fuera el caso lo hubiera sentido o Yamato lo hubiera hecho, era más sensible al chakra a su alrededor -bien, iré a descansar, te busco la siguiente semana -Naruto asintió suavemente viendo como se iba, suspiró con fastidio dejándose caer en su cama.

Un cuervo entró por la ventana cambiando de forma, el sharingan giraba lentamente en los ojos del Uchiha- Akatsuki busca desesperadamente a la tortuga, piensan que está en la aldea gracias a la presencia de Konoha- Naruto giró su cuerpo boca abajo, colocó sus manos bajo su rostro, comenzó a mover sus piecitos suavemente de arriba a abajo, su rostro mostraba una leve sonrisa- primero que nada, hola Itachi- el Uchiha apretó el ceño- no es un juego, si se dan cuenta que está aquí en Konoha, vendrán por ambos- el rubio suspiró con fastidio -¿por qué siempre tienes que ser tan amargado?- el Akatsuki afiló su mirada -tú la tienes ¿no es así?- Naruto sonrió suavemente -tal vez- el Uchiha se cabreó -es peligroso, Konoha está en riesgo- Naruto levantó un puchero- kyubi necesitaba compañía, está solito ahí adentro, ya sabes, tu debes sentirte como nosotros, sólo es un poco de compañía, además, nadie sabe que está en mi poder-

Itachi suspiró con fastidio -¿qué pretendes al tenerla contigo?  no ganas nada atrapando a la tortuga -Naruto apretó el ceño, giró su mirada observando cómo el Uchiha lo veía- ¿qué más da quién tiene a la tortuga? al final Akatsuki querrá atacar a Konoha por kyubi, tenga o no tenga la tortuga ¿no es así? si está conmigo, ellos no la obtienen, sea lo que tramen, es menos poder para ellos, está a resguardo mío, además, por lo que dices, ya la tenían ubicada, era cuestión de días-

Itachi suspiró hondo, observó al chico con cuidado, no aceptaría que le agradaba bastante esa actitud retadora y esa astucia que había obtenido, lo observó por un momento detallando en él, sintió su rostro algo caliente, sacudió su mente- es verdad- Naruto sonrió, giró sobre el colchón con diversión viendo al Uchiha- ¿por qué no simplemente te relajas? -Itachi apretó el ceño- no digas estupideces- el rubio se levantó divertido parándose frente al mayor con diversión, mordió sus labios al verlo de cerca, era bastante atractivo, sonrió arrogante- cuando elimine a raíz y encuentre mi dinero, me largaré de aquí, ya lo decidí-

El Uchiha lo veía con seriedad, no mentía -deberías venir conmigo, en cuanto me pierda del mapa no lograrán atraparme, Akatsuki se quedará con las ganas y tú labor en la organización terminará -Itachi levantó una ceja con sorpresa ¿por qué lo invitaba a él? lo observó con cuidado, todos estos meses había estado preocupado por las acciones del Uzumaki, le preocupaba Konoha y el destino del rubio, no había un día dónde no trajera a su mente al chico, era por esa razón que constantemente enviaba a kuro con un genjutsu para tratar de calmarlo y hacerlo reflexionar, por alguna extraña razón había una sensación extraña en el ambiente cada que estaba con el rubio, se sentía bien- la vida de un fugitivo no es una novela de acción Naruto, hay demasiados riesgos, te cazarán, tendrás que enfrentar no sólo a Konoha, sino a Akatsuki, al mercado negro y a las otras aldeas, eres tú contra el mundo-

Naruto perdió la sonrisa, eso él lo sabía -dije, que no me encontrarán ¿por qué demonios siempre debes ser tan correcto y aguafiestas?- Itachi suspiró con fastidio -sólo me preocupa el destino que tendrás, eres un buen chico, esto que haces no eres tú -el rubio afiló su mirada dando un paso atrás -este Naruto es lo único que existe ahora, el iluso y confiado Naruto dejó de existir, el idiota, no volverá- el Uchiha apretó el ceño- ¿qué no entiendes que sólo te estoy protegiendo de ese destino, demonios?-

Naruto rio con burla llena de  sarcasmo- ¿proteger? No digas mierda, lo único que proteges es a tu amada Konoha, lo único que te interesa es que Kyubi no caiga en Akatsuki o en las manos del enemigo porque perjudicaría a Konoha, tu no me proteges a mí, proteges al zorro, siempre haz puesto por encima a esta maldita aldea, te recuerdo, y así como tú, el resto, Naruto Uzumaki no es prioridad para nadie, el zorro lo es, así que no tienes que fingir interés o preocupación, no es creíble y ya no soy ese idiota para creerlo-

Itachi dio un paso hacia el chico apretando el ceño, eso no era así, sí estaba preocupado por él. Naruto lo veía hacia arriba bastante cerca sin intimidarse, sintió su cercanía con agrado, el ambiente se sentía tenso, no sabían si por la molestia o la cercanía. Ambos se vieron con intensidad, el Uchiha podía verlo con cuidado, sus onix observaron sus facciones a esa distancia tan corta reparando por un momento en sus labios, en reflejo lamió los suyos que se sentían resecos, se sintió atraído a los labios del rubio, sacudió su mente regresando nuevamente a la plática, se sentía frustrado al sentir que sus palabras no llegaban al Uzumaki -eres terco y testarudo, esos dos rasgos te llevarán a tu destrucción, aprende a escuchar, hasta los más fuertes deben hacerlo, te sientes fuerte, tal vez lo seas, pero esa arrogancia tuya te costará tu vida-

El Uzumaki afiló su mirada -¿y por qué si es así, tú no me escuchas? no mereces ese maldito destino que has tenido- Itachi abrió sus onix con sorpresa, había sido una cachetada a su ego, esas palabras habían atravesado su cabeza con fuerza -escapa conmigo, vámonos lejos de esto a iniciar de nuevo, que las aldeas se destruyan si es lo que quieren, tu eres un héroe, no un maldito mártil, ya diste demasiado de ti-

El Uchiha lo veía con cuidado, esos azules fríos se habían ablandado para él, quedó perdido en ellos un momento, era imposible no sentirse atrapado. Por un momento sintió su corazón latir con fuerza -no puedo hacer eso- Naruto apretó el ceño- ¿por qué? ¿por Sasuke? lamento informarte que no vale la pena, está podrido y siempre lo ha estado- Itachi apretó el ceño con dolor, bajó un poco su mirada -es mi culpa, era un buen chico, el día que me fui presenció bastante, le dije que lo había hecho por poder, que si quería vengarse debía hacerse fuerte-

Naruto apretó el ceño- ¿quieres que cobre su venganza? ahora veo, quieres morir porque estás lleno de culpa- se enderezó pensando. Itachi lo vio con seriedad -¿y después qué?- el Uchiha suspiró con fastidio -no hay más para mí, estoy enfermo, pronto moriré, ya sea por su venganza o por la enfermedad, pierdes el tiempo -Naruto abrió sus azules bastante, sintió temor y pena por el chico, angustia, tragó pesado, no podía dejar que se destruyera, mordió sus labios- entiendo, te mueres y todo termina para ti, el idiota queda más idiota por matar a su hermano, porque tarde o temprano la verdad saldrá a la luz, no puedes tapar el sol con un dedo. Sasuke es un idiota, pero no tan idiota para vivir en la mentira para siempre, yo que era un estúpido, salí -lo vio con fastidio tratando de definirlo.

Itachi por un momento recordó las palabras de su padre antes de morir “no debes sentirte mal, nosotros moriremos, me preocupas tú que cargarás con todo esto toda tu vida” el Uchiha tragó pesado -lo estás condenando a la locura- recordó a Tobi, sabía que tenía información sobre él, podía envenenar a su hermano contra la aldea- ese es mi problema -Naruto suspiró con fastidio viendo que era terco, se dio la vuelta sacando su camisa bajo la mirada del Uchiha, desabrochó su pantalón dejándolo caer por sus piernas- me daré una ducha, me sacas de quicio, necesito calmarme- sacó su bóxer quedando desnudo frente al azabache, caminó directo a la ducha tomando su toalla, lo había hecho frente a sus amigos en los baños termales, al final también era hombre. Itachi se quedó perdido observando su lindo cuerpo moverse suavemente hasta el baño, sus onix recorrieron en cuestión de segundos todo lo que la vista le regalaba, podía ver a través del espejo en el baño al chico ducharse, por algunos minutos se quedó perdido viendo con detalle cómo se duchaba, cómo sus manos tocaban su cuerpo, tragó pesado con un ligero sonrojo, giró su rostro avergonzado al tomar conciencia, desapareció en cuervos.

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