Naruto ni Highschool DXD me pertenecen son de sus respectivos dueños así como los animes que salgan aquí.

Sin más que decir se despide su amigo y que comience este jodido capitulo de mierda.

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-¡¿PORQUEEEEE?!-Issei chilló mientras que corría a la máxima velocidad que sus piernas le daban.

Issei sentía que se iba a morir, sus piernas ardían en protesta, su estómago rugia de furia por no haber sido alimentado, su rostros pálido y lleno de miedo.

Odiaba este desierto.

Si desierto.

Un páramo de arena interminable se extendía por todo su alrededor, el sol carmesí abrasador subía la temperatura y hacía que la arena del desierto fuera tan caliente que desde la distancia se podía ver borroso debido al mismo calor desprendido.

-¡Corre pequeño cerdo! ¡Corre!-Habló Naruto mientras que estaba a unos metros de el una sombrilla flotando y una bolsa de palomitas entre sus manos.

-¡Por favor ayúdame!-Grito Issei mientras que sudor empapada su cuerpo.

KIEEEEEECK.

Issei chilló como un cerdo cuando escucho aquel sonido peculiar, se atrevió a ver atrás cuando en cualquier película mataban al tipo que veía para atrás.

Un ciempiés se movía por la arena mientras que grandes lagrimas de baba escurrian de sus afilados dientes viéndole con hambre.

Aquello hizo que tropezara pero había aprendido a no caer tan fácilmente, dando un par de vueltas se reincorporó perdiendo solo dos segundos a lo mucho y manteniendo su impulsó.

-Ehhhh~ No quiero, a este entrenamiento le llamo, entrenamiento [Solo Leveling], además es divertido verte correr por tu vida-Hablo Naruto desde las alturas comiendo palomitas

Issei lloraba lagrimas cómicas ya que el no debió aceptar unirse a los demonios, eran unos desalmados totales.

Naruto observó su reloj, habían pasado cinco horas desde que lo trajo para que viniera a realizar un entrenamiento suave.

Por ello lo arrojo al desierto rojo.

El desierto rojo era conocido por estar plagados por los ciempiés comecarne, más que nada era para darle motivación a Issei de seguir corriendo.

Primero tenia que aumentar la estamina de Issei, luego pensaría en ejercicios físicos, por el momento a Issei le faltaba salir a correr un par de horas.

Todo en la vida tenía solución.

Además Rias apoyaría aquello, sabía que la niña tenía un alto grado de aceptación por los entrenamientos espartanos.

Al ser demonios no necesitaban dormir ni comer, por ello no se preocupo por Issei, tampoco necesitaba descanso ya que sus músculos no eran como los humanos que se comerían a sí mismos si se excedían con el ejercicio.

Issei estaría bien.

Issei se preguntó que clase de monstruo era Naruto, acaso no conocía lo que era la camaradería.

Flush.

Sentir el mordisco de aquel ciempiés gigante rozar su cabello hizo que sacara otro chillido de cerdo.

Naruto observaba con una sonrisa a Issei correr, tenía que ponerse un poco en forma si quería sobrevivir en esta nobleza.

Primero estaba el, un humano reencarnado con una línea de sangre que se había creído exista desde hace 400 años, luego estaba Akeno, una híbrida caido/humana que era hija de uno de los seres más poderosos sino el más poderoso de Grigori, estaba Koneko quien era una espécimen de Nekomata siendo una de las razas más peligrosas de los panteones Nekoshou.

Luego estaba Rias.

Aunque ella era débil.

De Baiken y Krul no hablaría mucho, las dos también se encontraban en su propia liga, aunque no eran tan hábiles como él tenían un par de trucos que lo habían sorprendido.

El nivel de esta nobleza debido a ellos estaba muy por encima del promedio, Issei tendría que hacerse fuerte rápidamente o sin lugar a dudas moriría.

Issei contaba con una ventaja enorme, esa era su Sacred Gear, los dragones alcanzaban su madurez a las 4 horas de haber nacido y sobre todo entre más estuvieran al borde de la muerte su poder crecía.

Una vez que Issei despertara su Sacred Gear sin lugar a dudas tendría una taza de crecimiento nunca antes vista, por el momento lo único que Naruto podía hacer es comenzar a sembrarle el hábito de ejercitarse.

"¡QUIERO DEFECAR!"

Naruto suspiro al oír al flojo de Issei gritar aquello, todo fuera por saltarse un trote matutino.

Un suave trote.

3 horas después.

Naruto lanzo un bostezo mientras que caminaba por las calles de Kuoh, ya había dejado a Issei para se cambiará y viniera a la escuela.

También le dejo un círculo de electroshook debido que el flojo de Issei al parecer se le había detenido el corazón una vez.

Que le traigan una falda a la niña.

Naruto bufo recordando que Issei tenía piernas de gelatina y parecía una calavera con piel dándole un pulgar arriba con una sonrisa que le hizo dudar de la cordura del niño.

Ahora lo haría cargar unos 50 kilos en sentadillas y pechadas con 70 kilos sobre su espalda.

Sentía algo extraño, varias firmas mágicas se aglomeraban en lo que parecía ser una iglesia, pero no eran puras sino manchadas, como si un pitbull lo cruzaran con un chihuahua.

Eran ángeles caídos.

Por ello quería preguntar a Akeno para saber si ella había invitado amigos, sino para tenerlos en mente y un día próximo hacerles una visita para saber si necesitaban algo.

"Il mio cappello"

Naruto entonces sintió un viento demasiado fuerte seguido de un pequeño y asustadizo grito de voz femenina.

Naruto giro su cabeza debido al nuevo sonido mientras que veía a una monja rubia de ojos verle extender su mano para intentar atrapar el sombrero.

El sombrero era simple, blanco en su totalidad, se notaba echo a mano, no de manera artesanal, se podía ver todo el amor que le había puesto la persona que lo había creado, Naruto sabía que había sido creado especificando para ella.

TAS.

No fue difícil atraparle ya que paso a su lado, solo tuvo que extender su mano y tomarlo sin problema alguno.

La niña entonces le vio, seguramente ella pensó que no le estaba viendo debido a que portaba sus vendas para descansar su vista ya que parecía curiosa ante aquello.

Pero no se acercó.

Naruto se le hizo tierno ver aquello, parecía una pequeña oveja que se debatía entre ir a un pastizal que le había prohibido o quedarse en el pastizal que le habían dicho.

-E-Eres un demonio-Hablo la niña con voz temblorosa ya que podía sentir la firma mágica de aquel muchacho rubio.

Era abismal.

A ella le enseñaron a sentir magias desde una edad muy temprana, ella había sentido la presencia de los hijos de su dios y se sentían cálidos, como si un calor le abrazara de manera maternal.

Pero el no.

Asia sentía como aquella ocasión que quiso nadar y creyó que estaba lista para la parte más profunda de la piscina.

No podía respirar, no podía moverse, se sentía como si se estuviera ahogando sin ella poder hacer nada, como si peso inimaginable cayera sobre sus hombros sin ella poder quitárselo de encima, era una presencia antagónica con la de los ángeles que ella había sentido.

Chask.

"HUUUUU"

Naruto chasqueo sus dedos mientras que automática Asia dio una gran respiración mientras que sentía que sudor empapada su rostro.

-Stai più attenta, sorella, se vai più in profondità puoi rimanerci intrappolata (Ten mas cuidado hermana si profundizas mas puedes quedar atrapada en ello)-Sonrió Naruto mientras que le extendía el sombrero a Asia.

Asia entonces intento tranquilizarse, sentía su cuerpo frío o más concretamente su estómago, como si toda la felicidad de su cuerpo la hubiera abandonado.

Asia cerro sus ojos mientras que sentía su cálida magia invadir su cuerpo, le habían enseñado a hacerlo cuando tuviera miedo, esta era una de esas ocasiones.

Naruto sonrió al ver que la niña en cuestión de segundo volvía a tranquilizarse usando 'Corazón de piedra', básicamente era proteger tu cuerpo con magia para que así se pudiera relajar.

-Tu hablas italiano?-Habló Asia con sorpresa ya que había escuchado que los demonios conocían todos los idiomas por medio de la magia, pero ella supo que él sí lo hablaba de manera natural.

-Por supuesto, eh aprendido 10 idiomas diferentes ya que las películas las disfruto en su idioma original, cuando se usa el traductor demoníaco es como si estuvieras viendo una traducción de mala de calidad, tus labios se mueven y en ocasiones el traductor termina de traducir y la persona sigue hablando-Habló Naruto en el mismo idioma de la niña.

Asia asintió ya que no sabia a que se refería con doblaje de mala calidad ya que las hermanas superiores solo ponían noticias italianas cuando encendían la televisión.

-¿Pu-Puedes dármelo?-Susurro Asia mientras que señalaba el sombrero en la mano de Naruto.

-Nop ahora es mío-Sonrió Naruto mientras que le daba una vuelta en el aire y caía en su cabeza.

Asia hizo un puchero mientras que dejaba la maleta, rápidamente intento quitarselo pero Naruto simplemente se movía evadiendo.

-Por favor es mío, me lo dieron a mi-Asia le veía de manera amenzadoramente tierna.

Todos los que pasaban por ahí veían aquella tierma escena de la que para ellos eran pareja, la niña daba ligeros saltitos mientras que el muchacho se movía para no dejar que ella tomara el sombrero.

Minutos después.

Asia había reprobado educación física en el internado al que ella iba, ahora esto le jugaba en contra también.

Tenia sudor en su rostro, sus mejillas sonrojadas debido al esfuerzo y estaba inclinada respirando de manera agitada.

Se preguntaba como una persona con discapacidad se podía mover como se movía ese muchacho, por más que intentó atraparlo no pudo.

Ya se había resignado.

Había perdido el regalo de su abuelita.

Tas.

Asia sintió que algo le era puesto, al alzar su vista pudo ver el color blanco de su sombrero que le había sido puesto por aquel muchacho.

-Ahora si estas relajada hermana, no te preocupes, no te haré nada, nuestro encuentro fue una casualidad simplemente-Sonrió simplemente Naruto al ver que ahora la muchacha se había calmado.

Podía verla un 80% más relajada que antes de verlo y sentir lo que era, lo único malo de ser demonio era que todo el mundo se tensaba pensando que les robaría el alma o algo por el estilo.

Asia se dio cuenta que lo que decía Naruto era verdad, ahora no se sentía tensa con Naruto a su alrededor, incluso se había aclimatado a su aura extraña.

-Pe-Pero eres el mal, tu haces caer a los humanos en pecados y lleva sus almas al infierno-Habló Asia ya que la madre superiora le había explicado que era un diablo.

Desde siempre ella estuvo aislada, por su poder jamás le dejaron relacionarse com los demás, incluso las niñas del orfanato tenían prohibido acercarse a ella.

Ella intento hacerse amiga de una niña de ahí, pero solo sirvió para que al descubrirlas la llevaron a los bosques de Alemania para seguir con sus estudios y entrenamiento.

Ella por error había curado a un herido que cayó en los bosques alrededores del castillo, una monja vio aquello y sin ella conocerlo había curado un demonio.

Fue acusada de bruja, hereje, engendro del mal, expulsada de la iglesia y condena a huir de todo lo que ella conocía.

Pero una mujer se le había cercado a ella ina fría noche que dormía en un callejón, le dio un poco de dinero y un boleto de avión para venir aquí, ella sin nada que perder estaba aquí.

Le había dicho que se presentará en la iglesia de Kuoh, ella no podía estas más feliz debido a que después de muchos meses podría orar en una iglesia.

-Bueno estoy seguro de no haberme llevado el alma de nadie que recuerde, además no me considero alguien malo en absoluto, aunque la que llamo maestra es muy fea pero creo que tampoco es mala-Habló Naruto mientras se tocaba con su dedo la barbilla en tono pensativo.

Le daría el beneficio de la duda a Rias sobre si era mala o no, después se rodó arrojarle un vaso a alguien no tenia que ser de buena persona.

-P-Pero me dijeron que Lucifer es un ser de piel roja, ojos negros, dientes afilados, una cola roja....ah también me dijeron que era narizon-Hablo Asia no sabiendo porque el señor Dulio le había especificado aquello.

Naruto se aguanto la carcajada al oír que alguien le decía narizon que Sirzechs, guardaría esta broma para molestar a Sirzechs luego.

-Ya veo así que narizon-Sonrió Naruto mientras que Asia asentía ante aquello.

-Si-Habló Asia asintiendo mientras que entonces observaba el reloj simple en su muñeca.

La niña jadeo al ver que llegaba unos minutos tarde, rápidamente camino a su pequeña maleta mientras que debido al puso era un poco difícil de llevar.

Pero Asia abrió los ojos al ver que Naruto le ayudaba a llevar su equipaje echándolo en su hombro.

-Vamos por lo visto pesa un poco y tengo un tiempo libre, consideralo un servicio gratuito-Habló Naruto con una sonrisa mientras que volteaba su cara donde estaba Asia.

Asia se preguntó si esto se consideraba venderle su alma al diablo, ella no quería admitirlo pero su equipaje pesaba lo suficiente para sacarle el sudor si caminaba mucho con él

No había firmado nada, por lo que un contrato no tenía validez así.

¿Verdad?.

-Y-Yo me dirijo a la iglesia-Hablo Asia ya que seria lo que dios dispusiera de ella.

Ambos comenzaron a caminar mientras que la niña cada vez estaba más curiosa por el demonio a su lado.

Eran esas vendas.

Cubrían la totalidad de sus ojos, podía ver que daban varias vueltas por lo que el niño no tenía visión alguna, sin embargo caminaba como si pudiera ver, no vacilaba o se quivocaba en cada paso que daba.

-¿Si?-Pregunto Naruto al sentir la intensa mirada de Asia sobre él.

Ya habían abandonado el parque recreativo para niños pequeños de esta parte de Kuoh, dentro de unos 20 o 25 minutos llegarían a la iglesia.

-Tus ojos, ¿Te los has lesionado?-Pregunto la niña con preocupación, tal vez ella podía ayudarle a volver a ver nuevamente.

Naruto se preguntó que quería decir con ello, pero luego recordó que veía como una perdona normal y supo que andaba con las vendas sobre sus ojos.

Estas vendas iban con varios tipo de maldiciones en ellas, las había adquirido por un favor para un chaman de África hace ya un año y algo, las usaba más que nada para descansar la vista.

Sus ojos no tenían un interruptor de apagado, siempre se mantenían activos por más que el quisiera cortar la conexión no se podía en absoluto.

Una parte que agradecía el era que los demonios no necesitaban dormir en absoluto, claro que era un reflejo mental, pero si podías pasarlo por alto no te hacia ningún daño el no hacerlo.

Seguramente era por ello que los otros usuarios de estos ojos no habían pasado los 25 años, siendo humano te podía afectar muy pero muy mal el no dormir bien durante toda una vida.

El ritual inverso servía para curar el daño que era generado por no dormir, pero Naruto sabía que era malditamente difícil de lograrlo, el tuvo que casi patear el balde para poder conseguirlo, dudaba que sus antepasados lo hubieran echo.

-Oh por supuesto que no me eh lesionado, simplemente mi vista es mejor y más aguda, uso estas vendas para ver tu rostro en lugar de solo tu sistema nervioso y mágico-Habló Naruto ya que eso era lo que veía cuando se quitaba sus gafas o sus vendas.

Podía concentrarse para ver "borroso" pero incluso así era muy difícil de mantenerlo por largos periodod de tiempo y le provocaba una jaqueca terrible.

-Ya veo, eso es un alivio-Sonrió de corazón Asia al ver que el no tenia ninguna lesión.

Nunca le había gustado ver oa gente herida, no era tonta, sabía que algunos debían mejor ser 'Desechados' pero como médico ella hizo un juramento que toda vida es preciosa a su modo, claro una más que otras, ver herido a alguien sin ella poder ayudarle despertaba un molestar en su corazón.

-Dime hermana, porque te ha traído aquí a Japón, es muy largo de donde sus congéneres se reúnen-Habló Naruto ya que él vaticano estaba a miles de kilómetros.

Los Angeles tenía estrictamente prohibido para venir a profesar la religión aquí en Japon, por ello era que incluso después de 2 mil años en Japón la religión cristiana no era común.

La misma Amaterasu había prohibido aquello ya que no permitiría que una religión tan bañada de sangre como la cristiana fuera forzada en sus habitantes, si querían recibirla ella no se oponía pero no iba a permitir campañas de cristianos intentando lavarle el cerebro a los Japoneses.

Naruto estaba deacuerdo con ello, incluso conociendo que había un dios no creía que el fuera uno bueno en absoluto, sino había que ver a todos los demás, solo velaban por ellos mismos lo cual no criticaba, sino la hipocresía de una entidad que te vendía que el dios de ellos era mejor porque una blanca paloma embarazo a una joven árabe y de ese embarazo salió un semidiós blanco.

También la hipocresía de ellos decir que se tenía que tener amor al prójimo y respeto, pero cuando un pueblo o etnia decidía no adoptar la religión de ellos entonces comenzaban carnicerías llamándoles herejes, impuros y cuanta palabra degradante ellos encontrarán.

Que solo ellos estuvieran en lo correcto.

Y los demás sino creía eran menos que animales

La hipocresía verdaderamente enfermaba a Naruto con todo su corazón, incluso ahora en la misma actualidad Naruto sabía que la iglesia seguía con los mismos estigmas.

Sino había que mirar a ella.

Naruto sabía que no venía por parte de los ángeles, los caídos eran los que habitaban en la iglesia, iglesia que justamente estaba abandonada y en ruinas.

Pero podía sentir el aura de Asia, era complemente puro, sin mancha alguna en ella, el sólo que estuviera aquí daba a entender que estaba exiliada.

Había escuchado un rumor cuando estaba el Bulgaria, sobre el exilio de una Doncella que había vendido su alma al diablo y había fornicado con él.

Lo cual ahora Naruto sabía que era una total y absoluta basura, cuando uno tenía un ritual tantrico como lo era el tener sexo ambos hombre y mujer mezclaban sus energías por lo que su misma aura cambiaba en forma de ello.

Por ello en la raza demoníaca eran muy pocas las infidelidades, por tenias que ser muy pero muy bueno protegiendo tu núcleo mágico para evitar que se "manchara" con el aura de tu amante.

Grayfia le había resuelto aquella duda cuando ella de inmediato se dio cuenta que había tenido sexo con Akeno hace cuatro años.

Aquello le ayudo a saber del porque Rias no le había hablado durante un mes al sentir la energía de Akeno dentro suyo, y la suya dentro de Akeno.

Ningún ángel se atrevería a venir aquí, mucho menos que Rias Gremory y Sona Sitri estaban presentes y activas.

Los Angeles no era estúpidos como los caídos, sabían que la fracción diablo podía asesinar a Rias y charle la culpa a ellos para que la cuarta guerra se registrará como los ángeles los causantes.

Mucho menos conociendo que Rias era una lisiada, ellos habían estado conviviendo con los demonios muchos años para no conocer sus costumbres con los lisiados.

Los demonios la matarían con una sonrisa si eso era comenzar una guerra y deslizarse de la responsabilidad de ser descrito como el causante de la misma.

-Y-Yo, bu-bueno, nos han enviado con el propósito de restaurar la iglesia de Kuoh, es muy vieja por lo que estaremos haciendo renovaciones-Habló Asia recordando lo que le habían explicado cuando le preguntaran aquello.

Mentira.

Naruto sabía que era una mentira, podía escuchar su corazón latir irregularmente por lo que había mentido, pero no era algo que no se esperaba.

Pudo notar la tristeza del tono de la niña, sonrió ya que supo que la niña quería arreglar la iglesia de todo corazón lo cual seguramente nunca sería posible.

-Ya veo, un objetivo muy grande, si necesitas algo y me ves puedes intentar pedírmelo, los demonios y la iglesia tienen un alto al fuego por lo que veré que puedo hacer por ti, soy Naruto por cierto, Naruto Uzumaki-Habló Naruto dándole su nombre al fin a la niña.

La niña parpadeo antes de sonreír de manera tierna al oír que el lo deja de verdad, las mentiras aue le dijeron sobre los demonios se hicieron añicos.

-Gra-Gracias, soy Asia, Asia Argento-Habló Asia mientras que veía al muchacha que le sonrió ante aquello.

-Un nombre muy hermoso igual que tu apellido-Habló Naruto mientras que seguía caminando sin preocupación alguna.

No vio que la niña bajo su mirada sonrojada ante aquellas palabras, nunca a nadie le había dicho tales palabras y sobre todo le hizo muy feliz de escuchar que eran de corazón.

Observó el terreno donde comenzaba la iglesia, a unos 200 o 250 metros al fondo de color grisáceo estaba la edificación antigua.

Otra cosa que que Naruto supo que en esta iglesia no había bendición alguna era que su [Limitless] no había sido activado por un golpe.

Naruto podía sentir cuando su "ritual" era golpeado por sea magia o fuerza física, el había aprendido que cuando decías la palabra del dios bíblico o alguna relacionada con los santos el sistema que tenían los ángeles se activaba enviando una pequeña ráfaga de poder santo para golpear al objetivo que había pronunciado eso, no era letal ya que producía una simple jaqueca pero estaba ahí.

Al ser un poder enviado en lugar de ser impregnado en la misma palabra su poder lo tomaba como un golpe, por lo que lo detenía sin problema alguno.

Era algo similar a un "Golpe asegurado" de una Expansión de dominio.

Pero eso era para más tarde ya que todavía tenia que enseñarle a Issei lo que era la verdadera hechicería.

Los terrenos santos también funciona a así y los signos divinos sean cruces, agua bendita, biblias y todo lo relacionado.

En su Infinito un solo milímetro a su alrededor podía contener billones de trillones dobleces de realidad por lo que incluso si se notaba que él estaba tocando algo no era así.

Aunque prefería no hacerlo al menos que fuera necesario ya que no le gustaba el tocar algo sin hacerlo, se sentía extraño.

-Gr-Gracias-Susurro sonrojada Asia mientras que observaba a Naruto.

Naruto entonces dejo el equipaje en la entrada de aquella propiedad ya que debía aparentar que no podía ingresar.

Asia le sonrió de manera feliz mientras que tomaba su maleta, al final los demonios no eran tan malos como creían.

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Fin del capítulo.

Sin más que decir se despide su amigo y pana del alma Escritor-san.