[05]

Kim Taehyung ayudó a dejar una canasta de sábanas, Dahyun las recogió y empezó a extenderla solo unos alambres, para que les diera el sol. El humano se sentó sobre una roca alta y suspiró. Hace una semana que había llegado a ese lugar, no había avance ninguno con el joven Park, el tipo trataba de evitarlo todo lo posible.

Sacó de su bolsillo del pantalón una pequeña cajetilla de cigarro, se lo metió en la boca y lo encendió, hizo una mueca de cierto disgusto, en esos días no había vuelto a tener contacto con Park Jimin.

Sentía que a esas alturas no lograría nada. No era fácil convencer al antagonista de esa historia en la que reencarnó. En las novelas y películas de reencarnaciones, se veía fácil: "¡Incluso el tercer amante logró conquistar al Duque! ¿Por qué no podía hacerlo con Park Jimin?"

Bueno, tal vez no era tan aventado y loco como el tercer amante, muchas veces ese tipo pudo morir a manos del Duque. Tuvo suerte: "Pero él podría no tenerla, debía andarse con cuidado"

—¿Otra vez pensando en la inmortalidad del cangrejo?—interrogó la doncella aún poniendo otras sábanas.

—Los cangrejos no son inmortales y soy un humano que ya morí antes...no sé que estoy haciendo aquí, no he logrado nada en una semana. Tal vez esto sigue siendo un sueño, debería tirarme de una ventana.

—¡Oh no! ¿Por qué quieres morir? yo que te considero mi amigo—chilló con un puchero en su rostro—. Si es por que aún no haces amigos con algunos de nuestros compañeros, no te presiones. Siempre he pensado que tener solo un amigo que sea leal a ti y te quiera mucho, es mejor que tener varios que no te vayan a dar su amistad por completo.

—No te pareces en nada a tu hermana—comentó con suma sorpresa Taehyung.

—Nací muchos años después, no me crié con ella y cuando vine a trabajar a esta casa es porque quería conocerla—rió un tanto nerviosa—. Pensé que seríamos amigas pero supongo que no puedo obligar que alguien me quiera.

La puerta de aquel lugar se abrió, apareciendo Irene, quien miró a ambos sujetos de pie a cabeza, enarcó su ceja derecha y juntó sus manos un tanto pensativa.

—Si tienen tiempo para estar conversando tonterías, supongo que podrían ocuparlo para estar trabajando con más productividad. Mayordomo Kim, habrá visita esta tarde, necesitaré de su ayuda para que atienda a nuestros invitados.

Taehyung afirmó. Irene se acercó y le arrebató el cigarro de la boca al humano para tirarlo al suelo y presionar la punta, apagándolo en el momento. El menor le miró boca abierto ante la actitud.

—Está prohibido fumar.

Dicho eso, la ama de llaves ingresó a la casa con suma elegancia. Taehyung suspiró viendo la colilla del cigarro aplastado en el suelo: "¡Mujer más fría, le congelaba el corazón" no sería nada fácil lograrse la amistad de Irene.


Cuando se hizo tarde. Dos mujeres ingresaron al salón de invitados, una de ellas era una mujer de 60 años con su hija de 30, dos vampiras sangre puras de cabelleras castañas y ojos celestes,muy guapas. A pesar de su edad, su belleza y juventud se mantenía en ellas.

Kim Taehyung ingresó al salón con una bandeja de plata, al ver a Park Jimin conversar con aquellas mujeres, sintió los nervios acumularse en su interior, carraspeó, tratando de evitar cruzar miradas con su jefe y se acercó a ambas mujeres, sirviendo el té. La mujer mayor alzó el rostro viendo de pie a cabeza a ese humano que ingresó.

—Había pensado que al Conde Park Jimin no le gustaban los humanos—comentó la mujer mayor siguiendo con su mirada al guapo sirviente que había ingresado y no era la única que no le quitaba los ojos, su hija también sonrió gustosa.

Park Jimin tomó su taza de té y frunció el ceño, le dio un sorbo a su bebida para disgustar y darse su tiempo de responder.

—Necesitaba un nuevo mayordomo y fue recomendado por el Duque Jeon—comentó aquel vampiro para dejar su taza sobre la mesa, notando que las mujeres no quitaban la vista de Kim Taehyung, el cual se fue a una esquina de aquel salón, manteniendo una pose elegante por si necesitaban de su ayuda.

—Es un mayordomo...bastante joven.

—Lo es—afirmó con tono frio aquel vampiro.

—¿Cúal es tu nombre, mayordomo?—preguntó la señora mayor ofreciendo una sonrisa un tanto socarrona.

—Un gusto saludarla, dama. Mi nombre es Kim Taehyung, soy el mayordomo de esta casa.

—¡Oh!—exclamó fascinada aquella vampira—. Está muy bien educado. Oh, este té esta delicioso.

—Lo hice yo, dama—exclamó Taehyung ofreciendo una cálida sonrisa a esa guapa señora.

Park Jimin puso los ojos en blanco al notar la descarada sonrisa de aquel humano hacia su invitada.

—Tienes buenas manos—comentó—, quiero verlas—Taehyung obediente se acercó mostrando sus manos—Incluso tus dedos son largos y bonitos y tus venas, se ven muy bien—relamió la vampira sus labios, gustosa.

—¿Usted cree?—Taehyung contempló sus manos con sorpresa.

—Me pregunto que otras cosas pueden hacer—acarició la vampira con cierta sutileza—. Mi hija y yo nos quedaremos a dormir aquí , me gustaría que me hicieras un té para esta noche, si también quieres, puedes atender a mi hija.

—¡Claro, le llevaré-...

Taehyung no terminó de hablar cuando se escuchó un golpe seco, los presentes miraron en dirección del Conde, que había puesto sin delicadeza alguna la taza de cerámica sobre la mesa. Park Jimin limpió con delicadeza sus labios con una servilleta de tela y lo depositó sobre la mesa.

—Marquesa, es una lastima; pero el joven Kim no podrá prepararle un té esta noche. Estará muy ocupado ayudando con unos papeles—Park Jimin ofreció una gélida sonrisa, puso su mano sobre el corazón—. Es un pesar, me duele tanto no poder compartirlo con usted—habló con ironía—. No me gusta compartir un buen...servidor.

La Marquesa sonrió con sarcasmo.

—¿En serio? solo porque me sirva el té un rato, no creo que el Conde sea tan inútil para proseguir el mismo con sus propios papeles de sus tierras ¿No es un dolor de espina, pensar que debe predecir de un humano?—ella ensanchó más su sonrisa.

—Oh, es que soy un hombre tan ocupado y una mano tan buena como el de mi mayordomo, me facilita la vida—rió con mucho más sarcasmo Park Jimin, poniendo una mano sobre su mejilla fingiendo inocencia—¿Qué podemos hacer al respecto, marquesa?—unos intensos ojos rojos se hicieron presente—. Puedo enviarle a otra de mis ayudantes para que le prepare un té.

Irene apretó los labios al sentir el ambiente tenso, Kim Taehyung dirigió su mirada sobre Park Jimin y rió ladino, divertido por lo que acaba de ocasionar. No era un idiota y entendió desde el principio el doble sentido de aquella mujer; pero quería saber si Park Jimin haría algo al respecto.

Irene le hizo un gesto a Taehyung para que saliera de aquel cuarto, el humano afirmó. Cuando la puerta se cerró tras él, una gran sonrisa se hizo presente, riendo divertido. Empezó a caminar en dirección de la cocina para dejar aquella tetera, se detuvo un momento, mirando en dirección del bosque, viendo la nieve caer, sería otra noche fría de seguro.

¿Podía ser posible que Park Jimin detrás de todo su aspecto frío hacia él, en su interior, sentía un leve interés a su persona?


Kim Taehyung siguió caminando, olvidando el hecho de que Joy lo vigilaba a lo lejos. La vigilante dejó de colgarse de las varillas del techo y cayó sobre la alfombra de aquel pasillo, apresuró sus pasos y se puso al lado derecho del humano, Taehyung pegó un grito del susto y casi dejó caer la tetera de porcelana.

—¡¿Qué demonios está mal contigo!?—exclamó aquel humano que casi sintió sus piernas flaquear—¡Sentí morir por segunda vez!...¿Se puede saber qué se te ofrece?

—Puedo escuchar los latidos de tu corazón ir a gran velocidad—comentó aquella mujer con tranquilidad, acomodó su oído sobre el pecho del humano, interesada—. Había olvidado como era la cara de una persona asustada. Escuché que le harás compañía al amo esta noche.

—Al parecer lo ayudaré en un papeleo, que se yo. Es un tipo muy solitario, a estas alturas debería haberse casado y formar una familia...¿Hmm? ¿Por qué no se ha casado?

—Es un sangre mixta—comentó la vampira, ambos empezaron a caminar a la par—. Ninguna familia noble quería tener a nuestro amo como posible yerno. Ni siquiera lo tomaban en cuenta, aunque ahora que recuerdo, escuché que alguien le pidió la mano.

—¿Le pidieron matrimonio? entonces estuvo comprometido.

—No, fue una promesa de matrimonio. Mi amo esperó muchos años a esa persona y cuando se volvieron a ver después de tanto tiempo, la persona...lo había olvidado. Mi amo había escuchado que su futuro esposo había regresado al pais y fue a buscarlo ese mismo día, incluso llevó los documentos de matrimonio pero...regresó sin nada y con lágrimas en los ojos.

—¿Quién sería tan idiota para rechazar al Conde?—exclamó con suma sorpresa y ofendido ante lo que acaba de oír—¡Si tuviera a esa persona frente a mí, le diría hasta de lo que se va a morir!

Joy sonrió de forma gélida.

—Me pregunto...porque lo hizo. Joven Kim, quisiera saber porque lo hizo.

—No me preguntes a mí, ni sé quien era esa persona.

Joy se cruzó de brazos.

—¿Acaso lo olvidó por el golpe que se dió antes de venir? escuché que se cayó de un árbol. Le refrescaré la memoria, fue usted quien le pidió matrimonio a nuestro amo.

—¡¿Qué, cuándo fue que hice eso?!—gritó con suma sorpresa.Taehyung se tocó la cabeza, pero no podía recordar nada al respecto, la mirada de Joy hacia él era fría, con cierto desprecio—¿Yo...lo hice? no puedo recordar nada...yo...siempre estuve enamorado del joven Park.

Joy suspiró y juntó sus manos, desvió su mirada.

—No sé la razón y no quiero saberla, pero no ilusione otra vez a mi señor, esta vez no se lo dejaremos pasar.

Irene salió de aquel cuarto, contempló a Kim Taehyung y a Joy, la ama de llaves se acercó a ambos con rostro serio.

—¿Se puede saber qué es tan importante para que se queden hablando en medio del pasillo? ¿Acaso no tienes trabajo que hacer, Joy?

Taehyung retrocedió nervioso, salió a pasos apresurados de aquel lugar, tratando de buscar las respuestas. Eso no estaba escrito en el libro de Saudé, no hablaron sobre ese pasado, ni siquiera debería estar vivo su personaje y si eso fuera poco, no tenía esas memorias. Incluso, no había empezado ni las escenas principales del inicio del libro. Kim Taehyung sabía que en ese momento, estaba en escenarios de fondo no existentes en la historia original.

Porque la novela empezaba con la historia del protagonista y Park Jimin aparecía hasta que el tipo es tirado en medio de un camino, dándolo por muerto. Lo que había detrás del antagonista, no se describió.

—¡Maldita escritora!—chilló molesto y dejó la tetera sobre una mesa—¿Qué demonios-..., le pedí matrimonio, bueno, técnicamente no fui yo si no el personaje que poseí. Era un tonto...¡Teniendo semejante hombre y olvidaste tu promesa y no fuiste por él!—chilló frustrado y sacudiendo sus cabellos— Ahora entiendo porque me despreciaban en esta mansión

Unas doncellas que iban pasando, frenaron en seco, viendo con total lástima a ese mayordomo que no parecía estar muy bien de su cabeza, con un suspiro pesado, se giraron sobre sus talones para tomar otro atajo y no cruzarse con el nuevo desquiciado de la mansión.

—No ha pasado tantos días para que ya estés loco—escuchó una ronca voz a su derecha, Taehyung subió su rostro, viendo a Felix, el cocinero se cruzó de brazos—. Pensé que los humanos eran cuerdos, me doy cuenta que me equivoqué.

—¡No es así! estoy muy bien de mi cabeza—se levantó con una gran sonrisa.

—Si...fingiré que te creo—musitó aquel cocinero, el tipo soltó un bostezo y se estiró—. Hmm, andaba buscando a Dahyun ¿La has visto? tiene que llevar los postres a la sala de invitados.

—Puedo llevarlos yo.

—¿Seguro? esa chica no se a donde se va—exclamó quejoso rascando tras su oreja. Le entregó a Kim Taehyung una bandeja de postres—. Llevalo con cuidado, que no se mueva ninguno.


Park Jimin se encontraba conversando con la marquesa sobre algunos asuntos de trabajo, ella solía ser una importante exportadora de los vinos que se hacían en las tierras de Saudé, era de los mejores y más caros, por su buena calidad. La hija al ser la siguiente heredera, escuchaba con atención a su madre. La puerta fue tocada e ingresó Kim Taehyung con la bandeja de postres.

Irene al verlo, su ceño se frunció extrañada. No se supone que debía ser él que entregara la comida, si no su hermana.

El humano depositó sobre la mesa aquellos manjares, bajo la mirada de los tres vampiros. Park Jimin lo contempló por varios segundos, escuchando como la Marquesa había empezado a preguntar sobre los nombres de aquellos postres y de que estaban hechos, fingiendo ser ignorante al respecto.

—Joven Kim ¿Ya está casado?—interrogó rápido la marquesa con una espléndida sonrisa. Contempló con cierta diversión a Park Jimin y luego enfocó su mirada de nuevo sobre aquel joven humano—. Es decir, usted es muy guapo, es imposible que a estas alturas no tenga alguna pretendiente, prometida, esposa o...amante.

—Digamos que no he encontrado a la persona indicada—comentó Taehyung que se paró al terminar de dejar los postres.

—¿Pero no hay alguien que le guste?

Park Jimin tomó un pastelillo, mirando con curiosidad al humano y expectante de la respuesta.

—Marquesa, no creo que sea adecuado preguntarle asuntos privados a mis sirvientes.

—¿Pero por qué? no creo que tengas a este joven a tu lado solo como un simple mayordomo, en la nobleza de los vampiros...un joven tan guapo como él, es un amante.

—No tenemos ese tipo de relación—enfatizó rápido Park Jimin con suma molestia—. Retirate—ordenó el vampiro a Kim Taehyung quien sonrió, dando una despedida de respeto.

La puerta se cerró, la marquesa suspiró viendo un tanto molesta a ese joven frente a ella.

—Es interesante, en serio. Siempre rechazabas a los humanos pero parece que este chico es diferente, sin embargo, lo tienes pero no haces uso de él; pero tampoco quieres compartirlo o dejar que otros lo tengan, no dejes que las cosas acumulen polvo. Un joven tan bello como él, encerrado en este lugar, es un desperdicio.

—¿Qué está insinuando? el joven Kim no es un objeto—comentó frunciendo el ceño, molesto por las palabras de aquella mujer—Además, marquesa, usted ya tiene 6 amantes ¿No cree que ya es suficiente? debería dejar de poner ojo sobre las personas que se encuentran en mi mansión.

—¿Crees que ese chico no te dejará si tiene la oportunidad de trabajar para alguien mejor? no importa como lo mires, es un humano y caen ante las tentaciones. Además, tu ya no eres joven Park Jimin, deberéis empezar a plantearte tener un heredero para estas tierras ¿Dónde estaba ese joven con el que estuviste diciendo hace unos años que te casarías? no te preocupes si traes a otro bastardo sangre sucia como tú, no es como si pudieras darte el lujo de casarte con uno de nosotros—rió de forma vil.

—Agradezco su preocupación—Jimin le ofreció una sonrisa gélida—. Pero no es como si hubieran puestos prospectos de esposos entre los aristócratas sangre pura. Y aunque tenga un hijo bastardo, será un futuro Conde. Aunque usted sea una marquesa y se encuentre en un nivel más alto que yo en título, mi hijo heredará todo y será incluso más rico que usted. Me imagino lo impotente que se siente que un bastardo como yo...tenga mucho más dinero.

El vampiro trató de mantenerse calmado, ya que no podía perder relación con esa mujer, debido a que era poderosa en los niveles sociales de la aristocracia.

—¿Qué es esta insolencia de tu parte? ¿Te has puesto así por un simple humano? ¡Ese tipo de hombres caen ante la belleza de cualquier mujer y no se digan sobre la codicia con el dinero, puedo comprarte a ese sirviente Park Jimin. Si se lo pido a nuestra Reina, me lo dará, es mi prima.

Park Jimin tomó la taza de té y derramó el líquido sobre la mesa. La marquesa rió ladina al darse cuenta que era la forma de avisarle de que esa reunión se había terminado y que tenía que retirarse a su cuarto asignado.

La vampira se levantó junto con su hija sin decir más. Jimin bajó su mirada con pesar, Irene se acercó rápido junto con otras dos acompañantes a limpiar la mesa y retirar las vasijas.

—Mi señor-...

—Ordena sacar a la marquesa de este lugar en estos momentos.

—Mi señor...si hace eso, pondrá a la Reina en su contra, recuerde que son primas—comentó con suma preocupación aquella ama de llaves. Irene tomó las manos del vampiro y acarició—. Debe tranquilizarse y aguantar un poco más hasta que encuentre otro comerciante importante que no sea la marquesa.

Jimin reaccionó y suspiró al darse cuenta que no había podido controlar sus sentimientos.

—Me disculparé con ella mañana.

—Mi señor...¿Por qué trajo a ese humano?—preguntó Irene—. Se que el Duque lo ofreció pero ese joven Kim, le rompió el corazón.

—No hablemos de eso, Irene.

—Él ni siquiera lo recuerda, amo ¡Está campante paseando por esta mansión como si nunca-...

—¡Irene!

La doncella se sobresaltó al escuchar aquel grito, la ama de llaves al ver que las mujeres terminaron de limpiar y habían levantado ya todo, contempló con suma tristeza a su amo.

—Me disculpo, mi señor. Hablé de más...me retiraré.

La ama de llaves salió de aquel cuarto y cerró la puerta tras sí, agachó su rostro con suma tristeza. Recordando aquel dia en que vio a su amo salir con una gran sonrisa y unos documentos en manos y regresó con lágrimas en los ojos . Incluso rompió todo los jarrones de aquella mansión hasta caer al suelo por el ataque de nervios que tuvo y pasó días sin querer comer, fueron semanas difíciles en las que Park Jimin se encerró sin querer saber nada del mundo.

Le había abierto el corazón a un humano y ese humano...hizo de las suyas y se lo rompió.

Cuando se enteró que esa misma persona iba a trabajar allí, sintió mucha molestia. Porque regresó como si nada hubiera pasado, con una gran sonrisa en su rostro fingiendo inocencia, para ella:  "Los humanos rompían sus promesas con mucha frecuencia."

La ama de llaves sabía que su amo solo iba a visitar al Duque, un viaje de cinco horas para poder ver solo por un momento a esa persona que le había prometido que tomaría su mano. Aunque Park Jimin no se lo dijera, ella lo sabía en lo profundo de su corazón que su señor siempre esperó que ese tipo, se lo propusiera de nuevo.

Joy bajó del techo y notó unas leves lágrimas asomarse en la esquina de los ojos de aquella ama de llaves. Limpió con cuidado y le ofreció un abrazo, esa mujer cuidaba mucho de su señor desde que era un niño, sus sentimientos maternales eran fuertes.

—¿Cómo puede ser tan descarado?—interrogó la ama de llaves.

—No lo recuerda—comentó Joy con tono tranquilo—. Yo se lo comenté y parecía muy sorprendido...tal vez, sucedió algo que no sabemos Irene, por eso no recuerda la promesa que le hizo a su amo.

Park Jimin se acercó a la ventana y bajó su rostro, viendo una caja negra, la cual al abrirla, dejó ver dos hermosos anillos de plata con una linea de diamantes, uno era pequeño y otro grande. El vampiro lo cerró y limpió sus lágrimas con suma tristeza.

¿Por qué cuando se volvieron a ver, ese tipo actuó sin descaro alguno, haciendo que su corazón volviera a recordar esa calidez que tanto extrañaba?

<<Park Jimin bajó del carruaje e ingresó a la mansión del Duque, se acercó a una sirvienta mientras en su mano llevaba un documento enrollado.

—Disculpa, el joven Kim Taehyung—preguntó—. Escuché que regresó ayer.

—Si, se encuentra en estos momentos en el jardín arreglando unas flores.

Park Jimin le agradeció y caminó con rapidez en búsqueda de aquel joven, al llegar al jardín, se quedó sorprendido de que ya no era un niño quien estaba allí, si no un joven adulto de 20 años muy apuesto, el cual cortaba unas rosas blancas. El humano se detuvo y el viento golpeó a ambos, el castaño contempló a su izquierda con suma seriedad. El vampiro se fue acercando, sintiendo una presión en su corazón, como latía con fuerza y los nervios se acumulaban.

—Joven Kim-...

—¿Viene a visitar al Duque?—la voz de aquel humano era tranquila pero al mismo tiempo parecía desmotivada.—Él se encuentra en su oficina, Conde Park.

—Te has vuelto ya un adulto.

—Es parte de la vida...¿Necesita algo más, Conde?

—Me hiciste una promesa hace años-...

—Ah, hice muchas promesas cuando era niño, no recuerdo a que se refiere, Conde—sonrió de forma melancólica.

—Prometiste tomar mi mano.

El humano contempló al vampiro por varios segundos y después desvió la mirada, su rostro se puso serio.

—Ah...¿Yo hice una promesa así siendo niño? tal vez lo hice, en ese momento usted me gustaba—sonrió a la fuerza—. Lo siento, me disculpo pero...creo que eso no sucederá.

Park Jimin apretó aquel documento que tenía en sus manos y se acercó al joven y le tiró el objeto al rostro. Rió con amargura mientras de la esquina de sus ojos salieron unas leves lágrimas.

—Pero tú-...

—Conde ¿En serio creyó semejante tonteria?—comentó aquel tipo sonriendo con amargura—¿ Qué iba a tomar su mano? juntarme con un monstruo, con solo pensarlo...me da asco.

Los ojos de Park Jimin se abrieron en par y soltó un gruñido para ofrecerle una fuerte bofetada a ese humano y salió de aquel lugar a gran velocidad.>>

Jimin tocó su nuca donde se había hecho aquellos tatuajes, logrando ver la figura de Kim Taehyung, el cual llevaba un abrigo y se acercó a la hermana más pequeña de Irene, la cual le ofreció una cálida sonrisa, extendiendo sus manos, mostrando unas uvas congeladas, ambos sonrieron divertidos, empezando a correr en la nieve como si no tuvieran trabajo que hacer.

Y ahora era como si la vida se estuviera burlando de él. Trayendo a ese hombre que años atrás le hizo tocar mismo infierno y ahogarse en las llamas de la desesperación y el dolor.

Lun-17-jul-2023:

Lamento la demora, no habia tenido internet T^T

¡Recuerden el lema de la familia: Somos Sol que calienta pero no quema!

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top