—No me gustó que hayas dejado el equipo de natación Harper —dijo el profesor de deportes— pero me pone feliz que quieras entrar al equipo de americano. Eso te ayudará para la universidad.
—Gracias entrenador.
—Ahora, debes saber saber que ninguna chica ya entrado en el equipo de fútbol. Seras la única chica y te aseguro que los babosos de tus compañeros no sabrán jugar con una chica.
—Eso lo entiendo muy bien.
—Quiero que lo pienses muy bien, ¿ok? Hablalo con tu mamá y de acuerdo a la decisión que tomes, no me la digas. Si tu respuesta es Si te quiero ver en el entrenamiento.

Harper asintió y se fue a trotar. Había esperado casi un año para poder entrar al equipo de futbol americano, a los Titanes de Midtown, Anne prácticamente le había dicho que sí aquella vez que tuvieron esa platica cuando la niña, en aquel tiempo, tuvo que elegir entre la natación o el atletismo.
Prácticamente ya estaba en el equipo.

—¿Y ahora que vas a hacer, Harper? De seguro te convertirás en un chico.

Desde que Janeth había llenado la estafeta con crema y provocó el choque entre Harper y el otro chico, y luego de que Griffin supiera que Janeth fue quien le hizo esa trampa, una rivalidad había crecido entre ellas.

No se toleraban ni un poco.

—Vete a cazar moscas, Janeth.
—¿Por qué? ¿Te molesta que diga la verdad?
—Solo no soporto ver tu cara.
—¿Por qué? ¿Me envidias?
—Ni loca ni muerta.

Harper aumentó la velocidad y siguió corriendo.
En esta ocasión estaban corriendo en la pista y saltando las vallas para caer sobre una pequeña fosa de agua y seguir corriendo.

A Harper le encantaba correr y saltar sin tocar la valla y aterrizar fuera de la fosa. Es muy competitiva.

—¿Todo bien? —Alex la alcanzó.
—No la soporto.
—Sólo ignorala, te trata así porque te envidia.
—Envidiarme que.
—Lo linda, inteligente y competitiva que eres.
—Lo dices por ser mi amigo.
—No, lo digo como el chico al que le gustas.
—Ya —ambos rieron.

Luego de un primer día muy largo para todos y una ardua carrera, lo único que Harper necesitaba era un baño.

Preparó la bañera a su gusto y se introdujo en ella, con un poco de música puesta y el agua templada pudo relajarse y cerrar sus ojos y sumergirse en el agua.

—¿A donde vamos, Wan?
—Tranquila, Harper. Estaremos bien.
—¿Por que venimos? Hace frío.
—Mantente a mi lado, no te separes.
—Volveré.

Dijo Pietro y salió corriendo a la velocidad de la luz abandonando la base. El primero con el que se topo fue al Capitán América a quien empujó con fuerza pero él dio una maroma en el aire cayendo agilmente de pie.

—Esten alerta, hay un alterado.

—Quédate aquí.
—¿A dónde van?
—A jugar.

La pelirroja le guiñó un ojo y se fue dejándola sola. La castaña salió de la base y caminó por un sendero cubierto de nieve hacia el bosque. Sintió que alguien la observaba y giró su mirada hacia atrás topandose con unos ojos azules pertenecientes a un arquero que la apuntaba. Harper iba al convertirse en algún animal para atacarlo pero su hermano mayor se le adelantó y empujó al hombre.

—¿Acaso no lo viste venir?
—Pietro
—¿Donde esta Wanda?
—Jugando.

Pietro tomó en brazos a la niña y corrió al interior del castillo, mediante su conexión de gemelos localizó a Wanda y corrió hacia allí.

—Ahora las pagará —dijo Pietro.
—No, el es la clave —dijo Wanda con algo más que enojo en sus ojos.
—¿Es Tony Stark?

Harper salió rápidamente del agua y respiró agitadamente varias veces hasta normalizar su respiración.

Esa Wanda, la que había visto, era la misma que decía ser su prima.
¿Qué estaba pasando?
¿Y quien era ese Pietro y por qué lo conocía?

Además, Tony Stark estuvo ahí, y según lo que había investigado: Tony Stark es Iron Man, Iron Man es un Vengador. Entonces ¿Harper conoce a los Vengadores?

Los recuerdos cada vez eran más reveladores y si Harper descubría las respuestas a sus dudas y conocía su verdadero pasado todo sería una catástrofe.

Bum Baby!
Despues de 3000 años aquí estoy
Y se vienen cosas grandes :B