Pokemon y sus personajes no me pertenecen, esta historia no tiene otro fin más allá de el de entretener.

VIVO EN EL MAR.

CAPÍTULO III: 2 Y 2.

Las 10 de la mañana, a la entrada de una cueva a unos cuantos kilómetros de ciudad Luminalia se encuentran 2 jóvenes descansando, los 2 chicos ayer dieron una batalla feroz para defender a sus amigas y amores secretos, las cuales por su cansancio psicológico sumándole que ellas atendieron a todos los pokemon heridos y dejados KO se habian dormido, en los ojos de un azabache de z en las mejillas la luminiscencia le obligaba a querer tapar su vista con sus manos, acción que no pudo ser completada pues su mano derecha estaba atrapada, al mirar que era la causa , y su sonrojo fue masivo cuando distinguió un cabello pelimiel corto, recostada en todo su brazo abrazada a su vez a su persona infundieron paz en el Ketchum, esa batalla de la noche anterior no se sentía si con eso pudo proteger a Serena, detalles de estar enamorado o simpleza de querer demostrar amor, pero como respuesta su cuerpo se tensó, su musculatura no estaba acostumbrada a esa actividad física extensa y menos a volar, su visión le dolía, y su garganta estaba algo fría, pero abrazó más a la chica, la razon de haber llegado a extenuarse tanto estaba allí, tenía nombre, apellido y una cabellera miel hermosa, estaban acostados sobre sus sacos de dormir y tapados con la manta azul de Ash, su amiga Korrina era como una hermana que nunca tuvo, y con esas 2 chicas su motivación era alta para lanzarse en ese acto suicida.

Por su parte, un rubio de ojos azules abrió lentamente los ojos, se sentía tenso, y todavía le dolía el cuerpo, no todos los días salía disparado por una pared de hielo electrificada, sumándole que la locura de proteger a las chicas fue un acto suicida, sin entrenamiento o idea de como usar los rayos se lanzó con Ash, pero salvo a su rubia amiga, nada más allá importaba, su amiga Serena estaba bien, quiso moverse pero un bulto amarillo en su pecho se lo impidió, en primera instancia pensó en pikachu, pero cuando aclaró su vista la rubia cabellera le sonrojó al máximo, estaba allí la chica que le motivó a lanzarse sin pena contra esa amenaza claramente superior, si no supiera Sambú quizá este rato estaría muerto, agradecía internamente a su papá por motivarlo a temprana edad a practicarlo.

-Buenos días- un sonrojado Ash se levantaba con mucho cuidado para despertar a la peli miel en su torso- Serena ya es de día-

Un movimiento de acurrucarse y mandarlo de nuevo a la improvisada cama sonrojan más al chico que si por si fuera poco ahora cree que sus oídos resultaron dañados en la pelea anterior.

-Cinco minutos más cariño..- Serena se acurrucaba en el pecho de Ash inconscientemente cual pareja haría en su lecho, provocando la risa de la par de rubios ya en pie para empezar el día, a lo cual Ash rio nervioso y Serena, bueno ella primero despertó y como es usual ese tiempo de milisegundos antes de recordar quien eres y que haces en el mundo le puso sus manos en forma de puño cerrado para refregarse el sueño de sus párpados. Ash solo sonrió, sus labios algo rojos, su cabello miel levemente despeinado, y sus facciones delicadas le hacían sentir bien en cierto modo, desde Alola aprendió mucho y maduro para ahora apreciarla en su esplendor, pero como todo en cuestión de milisegundos la peli miel cayó en cuenta que llamó "cariño" a Ash y encima se acurrucó en su pecho, las risitas de Clemont y Korrina le pusieron de vuelta al mundo, estaba encima del pecho de Ash como almohada y escuchaba el palpitar del corazón del azabache, algo desacompasado, quizá por la presión que ella ejercía sobre él, pero ella desconocía que eso estaba más que lejos de la verdad, y es que cuando la chica que te gusta se acerca se te acelera el corazón no digamos cuando ella duerme encima de tu pecho, te llama cariño y te abraza, Ash estaba metafóricamente al borde de un ataque cardiaco, aunque si eso ocurría su sonrisa por la cercanía se la chica lo compensaba bien.

-esta bien…"nena"- Ash sonrojado le miro

Ella se movió de golpe quedando ella de rodillas y él erguido en la cama , sus rostros juveniles rozaban los milímetros de separación, a tiro de piedra de un beso, su primer beso, pero como reacción natural rieron apenados y se separaron, cada uno tomó su mochila, se fue a cambiar mientras los rubios iniciaban el desayuno para la pandilla.

-Con algo de música sería mejor- Korrina le guiñó el ojo a Clemont sonrojándolo mucho- ¿podrías cantar algo?- ella apenada pidió y como mandato divino Clemont respondió en un afinado cántico ("Muchachita Linda- Juan Luis Guerra").

"yo bailo mi bachata con mi muchachita buena"- el rubio le tomó de las manos y mientras el agua se calentaba empezó ese baile pegadito de la bachata mientras los pokemon miraban a los rubios bailar sonrojados, el rubio decidió que no podía seguir así, si tenía que seguir ocultando lo que siente prefería volver a pelear con los metalition. Su chespin tomó unos trozos de madera y los usó como bongos, pikachu usó el ukelele que había comprado Serena para darle cuerpo a la canción mientras Luxray adornó la cueva con su ataque rapidez de su cola salieron estrellas. Un plan sin planear.

-"pues ella es vida para mi, lo se"- le dio la vuelta a una sonrojada Korrina , que seguía anonadada en los brazos del chico, dejándose llevar por la magia que envolvía aquel acto sin planear.

-"la flor que sueño en mi jardín, lo se"- y otra vuelta quedando frente a frente, sus rostros en carmesí vivo y sus ecuanimidades estaban fuera, el patinaje, la experiencia en las batallas, hasta la ciencia y la locura de ayer noche se fue mientras el espacio entre ellos se acortaba. Y esa corografía seguía en destellos desacompasados de amor.

En el lago cercano, luego de cambiar su ropa, peinarse y usar nueva ropa, un suéter rojo unos jeans y unas deportivas carmesí, Ash Ketchum se encuentra lavándose su rostro, miraba su reflejo incrédulo en el lago.

-ella no se fijará en ti- susurró el chico mientras se daba otra sumergida en el agua y bebía un poco, pero algo se movió y eso no pasó desapercibido a sus oídos provocando que se lance a posición defensiva

-¿Quién anda alli?- pregunto el chico y al no recibir respuesta se elevo un poco con voz más grave habló- !si no quieres recibir un rayo calórico de mi mirada sal de allí!

El arbusto se quedo en paz, Ash miró tratando de hallar una irregularidad allí, al momento del silencio se calmó y volvió al suelo, buizel vino con él y decidió darle algo de privacidad a Clemont quedándose en el lago con su amigo buizel con un par de maracas anaranjadas.

Detrás de un árbol circundante, unos mechones miel con una tímida chica estaban allí, escondida debido al susto de casi ser descubierta, curiosamente ella no estaba acechando, había visto a Clemont y Korrina en su baile y por ellos decidió salir al lago para relajarse mirando el agua, pero no contaba que Ash estuviera allí. Dejando el susto de lado se le acercó.

-!H-hola Ash!- Serena interrumpió al chico que se sobresalto al principio pero después le sonrió y le saludó

-¡Hey Serena!- le dio un abrazo- ¿qué te trae por aquí?

Pues deseaba ver el agua y relajarme- sonrió ella- ¿y tu?

-Vine a lavarme la cara y descansar- rio nervioso el chico- pero ya que estas aquí- le invito a sentarse a su lado, y Buizel salió disparado al agua para no interferir entre los 2, que decir, los pokemon saben lo que sus entrenadores sienten, no en vano combatir juntos estrecha lazos y los une.

Ella se sentó y el silenció los invadió, no era incómodo sino era de ese silencio que te gusta por la compañía. Pero Serena no quería seguir así, de amigos, si algo le pasaba al chico no quería que el no supiera lo que ella siente. Y para varias Ash no estaba distraído, estaba en sus propios pensamientos sobre su amiga peli miel. Era verdad que ella era linda, pero por dentro su corazón no tenía precio, era de oro y diamante, siempre para él sin importar que problema se metiera, esos recuerdos reprimidos, del campamento, de Kalos un año atrás con Bonnie y Clemont, de la liga, del Team Flare, eran revividos en su mente con la esperanza de prolongar su existencia siempre, ella no daría el primer paso, Ash decidió que era hora de sincerarse, con los consejos de Brock, las instrucciones de Gary y leyendo estaba preparando esto para decirlo después, pero no contaba con que ahora su vida estaba en defender a las chicas con Clemont, si algo pasaba prefería irse diciendo lo que sentía, si era rechazado no importaba, siempre podrían ser amigos, de manera incomoda pero amigos.

-Serena- muy calmado Ash intentó articular la siguiente frase, en milisegundos armo su estrategia, tenía que entrar en atmosfera, internamente agradecía a Brock y Gary- gracias….-

La chica se sobresaltó un poco pero debía responder- ¿por que?

-Por siempre estar conmigo…- le sonrió y ella se sonrojó, pero por instinto se acomodo en el hombro del chico el cual se tensó pero luego dejó que todo siga su curso.- y por siempre seguirme a todas mis locuras….por soportarme cuando estoy molesto y por siempre apoyarme…creo que si no estuvieras aquí yo no hubiera llegado lejos- y le regalo entre sonrojos una sonrisa marca Ketchum, amigable, tierna y sincera, cosa que causaba locura a la peli miel, que no tardo en por instinto darle un abrazo.

-Gracias por ayudarme a encontrar mi camino – ella hablo y ablando el corazón del chico, si esto no funcionaba con Ash ella al menos diría que lo intentó- desde que te conocí en aquel campamento has sido un motor de ayuda, yo te seguiré apoyado te seré incondicional.-

-Igual que yo a ti- él apretó más el abrazo quedando milímetros entre sus rostros,- siempre te cuidaré….-

-¿Siempre?- como una niña pequeña Serena cerro sus ojos lentamente mientras sus rostros se acercaban con un objetivo claro y una motivación directa, amor.

-Siempre….en Alola me preguntaron con quien desearía pasar mi ultimo día en la tierra, y pensé, mi padre no lo conocí, mi madre no soportaría un ultimo día en este mundo…y pensé…Misty es como mi hermana mayor, May una hermana menor…Dawn es mi mejor amiga….Iris…- se detuvo y lo pensó un poco- es Iris (xD)…y luego pensé en ti- le sonrió totalmente sonrojado

-Ash…- ella estaba al borde de las lágrimas en sus ojos azules

- tu ternura, tu apoyo, tu calor, tu suavidad….Serena- Ash le sonrió- creo….que me enamoré de ti…-.

Ella no pensó mas y le planto un beso largo, primero fue algo nuevo, pero el amor mueve los labios al compas del corazón

Y así se besaban, con suavidad, con amor, con ternura, con esos sentimientos guardados en el profundo del corazón, cuando el aire mortificó el beso se separaron y quedaron con ese color rojo en sus caras, su mirada en el otro, Ash supo que ahora tenía que sellarlo con algo espectacular

La tomo de la cintura y la levantó al estilo nupcial, ella no dijo nada, y él voló lentamente sobre el agua, en el centro se detuvo y le la pregunta se hizo presente

-Serena….quiero compartir contigo cada día que me quede…hasta que muera…¿quisieras ser mi novia?- Ash sonrió y ella al calor del agua, con el cielo matutino no necesitó responder, pues una acción, un beso hablaba mas que ella.

Continuará