Sasaki Kojiro era el hombre es conocido por su gran paciencia y su gran talento con la espada.

Sin embargo ya tenia 1 semana junto al ex dios de los mares y ya quería rendirse, una semana en la que no le hablaba, una semana en la que no le miraba, una semana en la que aquel dios se miraba terriblemente apagado.

Una semana en la que el humano noto que dios se estaba deteriorando, por la falta de alimento y su autoestima por los suelos.

Una semana de sufrimiento así lo miraba Kojiro.

Pero Sasaki entendía al dios de una manera bastante empatía, comprendía que de tener todo a no tender nada era más que difícil.

Debía ser más que humillante para un ser como el.

-Levántate Poseidón.-Ordeno Sasaki de manera sería, el dios llevaba toda la semana acostado en esa habitación de aquella finca abandonada de la cual Sasaki había tomado para vivir.

Sin embargo el la había tomado por consideración al dios, pues era fácil para el vivir en la naturaleza, pero estaba seguro que el no podría si quiera durar un día afuera.

-Basura...-Menciono Poseidón enojado mientras se volteaba hacia el otro lado para ya no verle.

Lo que más deseaba en ese momento Poseidón era no ver al idiota pedazo de basura que le mató, no quería que lo viera tan debilitado, tan humano... tan frágil, se sentía indefenso ante aquel anciano.

-Poderoso dios del mar, no te voy a insistir nuevamente porque todo lo que te esta pasando tu te lo buscaste y estoy cien por ciento seguro que te lo mereces, intente ser amable contigo porque deseo ayudarte y porque ese dios me pidió darte una lección, aunque no entiendo del todo a lo que se refiere.-Menciono Sasaki de manera calmada mientras se sentaba frente al futon donde estaba acostado Poseidón.

-Perdedor...-Estaba más que furioso pero que podía hacer el, no era como si tuviera elecciones, solo se limitó a lanzarle la almohada.

-Ya es un avancé.-Dijo divertido Sasaki mientras que de su traje sacaba un pequeño bento y se lo entregaba a Poseidón.

Este solo miraba esa caja con indiferencia y repugnancia.

-Un dios no necesita comer.

-Ya no eres un dios, te recuerdo que ahora eres humano, necesitas comer.-Menciono Sasaki preocupado mientras empujaba el bento hacia el...

-No quiero tu lastima humano.-Dijo de manera fría Poseidón mientras alejaba aquella caja con comida.

La paciencia de Sasaki estaba de nuevo a prueba y estaba llegando a su límite pero en serio quería ayudarle.

Tenían esa necesidad de hacerlo.

Un ser sin sentimientos tal vez valga la pena ayudarle...

-No es lastima, es empatía por el prójimo y de verdad quiero ayudarte, Poseidón, por favor... déjame hacerlo.-Insistió Sasaki mientras de nuevo acercaba la comida a él.

Poseidón no quería hacerlo, deseaba morir y olvidar aquella humillación.

Pero algo en el fondo le decía que tenía que aceptarlo y con algo de timidez tomo aquel Bento de comida.

Sasaki se alegro al ver como el dios, destapaba la comida.

-Esto es...-Pero ese animo se fue al carajos al ver como Poseidón lanzó con furia la comida hacia afuera de la habitación.

-¿Qué te pasa?-Grito molestó Sasaki mientras recogía la comida del suelo para volver a ponerlo en el Bento.

-Tu basura, como te atreves a cocinar a mis súbditos!-Grito furioso Poseidón mientras se abalanzaba contra Sasaki.

Fue una larga lucha pero Sasaki salió vencedor ante el dios de nuevo.

Ahora mismo estaba sometiéndolo y haciéndole comer la comida que tiro al suelo.

Al principio Poseidón se negaba a comerlo pero al final accedía ya que Sasaki le tapaba la nariz para que abriera la boca.

-Tu... desgraciado...-Decía de manera débil Poseidón mientras seguía forcejeando para liberarse.

-No te dejaré morir y no puedes tirar la comida como si fuera basura, como si nada, sabes lo difícil que es conseguirla en esta época, sabes cuanto tarde en conseguir si quiera el arroz que estas comiendo, me importa una mierda si son tus súbditos, es lo que hay... no hay más Poseidón así es la naturaleza, los fuertes se comen a los débiles por más que odie esa idea.-Dijo Sasaki de manera fría, mientras soltaba a Poseidón, este solo se quedó sentado en el suelo.

Pasaron varios minutos y Poseidón seguía sentado en el suelo, en la misma posición con la mirada pérdida.

-Se que no es fácil, imagino que tener todo y ahora no tener nada no es agradable... pero es necesario para sobrevivir... no siento lastima por ti como tu piensas, siento que tengo que ayudarte... aunque no mereces casi mi consideración, los humanos somos así... así como tenemos cientos de defectos, también tenemos virtudes... ¿No quieres tomar el título que por derecho es tuyo?... Porque yo nunca veré a nadie más digno como el dios de los mares más que a ti.-El discurso de Kojiro llegó al fondo de Poseidón, este solo suspiro cansado y empezó a silbar, aquella melodía que tanto le gustaba.

Aquella melodía que le calmaba y que su hermano mayor le enseñó.

Sasaki solo escuchaba con calma aquella melodiosa melodía, era hermosa no lo iba a negar.

Después de varios minutos más , Poseidón dejó se silbar y se puso de pie, junto a Kojiro.

-Ayúdame...

-¿Qué?

-Ayúdame a sobrevivir... por favor.-Tartamudeo Poseidón al tener que decir algo tan humillante, pero esto solo causo sorpresa al humano, el cual al final sonrió de manera muy alegre.

-Será un placer, Dios de los mares.