Nuevamente Astrid se encontraba en la escuela aburrida, ya que su profesor de Cálculo había faltado, así que decidió ir a la cafetería para comprar un jugo

Al llegar notó que estaba un poco vacía, y no como las otras veces que llena de personas, al llegar pidió pero no traía consigo su dinero

—Yo te lo compró—Se escuchaba una voz de tras de ella. Hiccup

—No es necesario

—Vamos, es un regalo de como me comporte al principio

—Bien

Hiccup pago por 2 bebidas, Astrid agradeció por su amabilidad

—¿Porque handas tan sola?

—No tuve Cálculo y decidí ir por un jugo y luego apareciste tú

—Ya veo

—¿Y tú?
K
—¿Yo que?

—¿Porque no estás en clase?

—Ah, es que hoy salgo temprano

—¿Y qué haces aquí?

—Te esperaba

—Ja, ¿A mí?¿Porque?

—Pues solo quería verte

—Bien ya me viste, ahora te puedes ir

Astrid se iba a ir pero sintió que su silla era empujada por Hiccup

—Vamos te llevo a tu salón— mostró una linda sonrisa, Astrid no tardó en sonrojarse

[...]

—¡Hiccup!— Se escucho la voz de su Amigo peliblanco

—Oh, hola

—Llevo un rato esperado—Se formó un puchero de su parte

Se habían quedado de ver en una plaza para ir a comer

—Lo siento, estaba con Astrid

—Oh, ¿Me cambias?— Se llevó una mano a su pecho fingiendo lastimado

—Si

—Oh que descaro de tu parte

—Oh que ¿Quieres ser mi novio para que te ponga más atención?

—Pues claro querido—

Los dos rieron por aquel comentario, al llegar a su destino, se sentaron y ordenaron

—¿Y qué tal te la pasaste?

—Pues bien, fue agradable su compañía, le compré un jugo y después la lleve a su salón

—Uuuh, qué lindo—

—Si, es agradable estar con ella

—Déjame preguntar algo

—Escucho

—Ella, ¿Te gusta?