-¿Entonces te gusta Derek si o no?-alza las cejas.

Suspiro y dejo de remover mi chocolate caliente para mirarla.

-No lo sé Lau...-niego- Es muy guapo, simpático y todo eso, pero aún así sigue siendo el primo de Connor, y probablemente no tenga nada que ver con él... pero no puedo olvidar lo que me hizo y no creo que pueda salir con su primo.-le digo sinceramente.

-Te entiendo... no sé lo que haría yo si estuviera en tu lugar, es algo complicado- asiente con los labios apretados.

-Yo creo que será mejor que nos quedemos como amigos- digo antes de darle un sorbo a mi chocolate caliente.

-¿No quieres intentarlo?-niego.

-Será mejor que lo dejemos así, porque las probabilidades de que lo nuestro salga bien son bastante bajas...-hago una mueca.

-Pues si es lo que quieres, yo te apoyo-me dice con una sonrisa.

-Eres la mejor- le tomo la mano que lo tenía por encima de la mesa- Gracias, en serio -sonrío agradecida.

Ésta sí es una verdadera amiga. Estoy muy agradecida de que la haya conocido. Cada vez es más difícil encontrar amigas verdades.

-De nada, para eso estoy.-se encoge de hombros sonriente.

Tomo la taza entre mis manos y le doy un sorbo.

-¿Y te gusta álguien más?-empiezo a toser como una loca al escuchar la pregunta de mi mejor amiga y no lo sé por qué.

Te va a crecer la nariz de tanto mentir...

-¿Cómo dices?-le pregunto una vez haya calmado la tos.

Ella sonríe pícara, alza las cejas y ladea la cabeza.

-Que si te gusta álguien más.-me repite.

Bufo.

-Claro que no. ¿Quién me iba a gustar a mí? Nadie. Absolútamente nadie.-niego con la cabeza mientras suelto mi vómito verbal y luego le doy otro sorbo al chocolate avergonzada.

Su sonrisa traviesa se ensancha cada vez más.

-Suéltalo. ¿Quién es?-mueve las cejas de arriba abajo.

-Nadie. De verdad que no me gusta nadie.-repito intentando convencerme a mí misma.

-No me quieres decir...-entrecierra los ojos.

Suena el móvil de Lauren indicando que tiene un nuevo mensaje y nada más abrirlo una sonrisa se dibuja en su rostro.

-¿Quién es?-ladeo la cabeza y sonrío pícaramente. Ella me mira y un leve sonrojo se apodera de su rostro por lo que suelto una risita.

-No, solo...-niega con la cabeza y vuelve a guardar el móvil en el bolso, pero al ver mi mirada curiosa sobre ella y darse cuenta de que me tendrá que contar deja salir un suspiro.-Mark. Era Mark.-intenta decir de manera indiferente pero una sonrisa vuelve a aparecer en sus labios.

-¿Te gusta Mark?-pregunto con una gran sonrisa. Tengo que admitir que me encantaría que saliesen juntos.

-¿Qué? -frunce el ceño- Claro que no.-niega- Mark es un mujeriego. Jamás saldría con él, solo me cae bien...

-Bueno, vamos poco a poco... antes no querías ni verle...-le recuerdo con una sonrisa a lo que ella rueda los ojos.

(.../...)

Salgo de mi habitación y camino hacia la cocina para buscar un poco de nutella. Abro el armario y cojo el bote de nutella y me siento en el sofá viendo la tele junto a Justin.

-¡Oye!-me quejo.

-Lo siento- se disculpa riendo mientras saca su dedo del bote de nutella y se lo lleva a la boca, le fulmino con la mirada.

-Cómprate el tuyo.-entrecierro los ojos.

-¿Hace falta recordarte que es de todos?-me mira de la misma forma que yo. Vuelve a meter su dedo en el bote y luego se lo lleva a la boca mientras saborea de manera exagerada para joderme.

-Estúpido- le doy un leve golpe en el brazo.-¿Sabes si Ari va a la fiesta?

-Antes me ha dicho que si. ¿Tú por qué no te vienes?

-No tengo muchas ganas...-hago una mueca y él asiente.

-Ya estamos listos- dice Mark bajando las escaleras seguido por Chace.

Justin se levanta del sofá y tras despeinarme el cabello y darme un beso en la frente se despiden de mí y se van.

-¡Pasadlo bien!-les grito antes de que cierren la puerta.

Suspiro y pongo la película Ted 2 en Netflix. Después de unos 20 minutos viendo la película yo sola, llega Jason.

-Hola rubia- me guiña el ojo.

-Hola- hago un gesto con la cabeza en forma de saludo sin apartar la mirada de la tele.

-¿Qué ves?-me pregunta sentandose a mi lado y pasando su brazo por mis hombros.

-Ted 2- le digo mirando su brazo.

-Me encanta ésta peli- sonríe y me acerca más a él, tanto que puedo oler su perfúme.

Sacudo la cabeza y vuelvo a fijar mi vista en la tele, después de un rato intento apartarme un poco de él, pero él me acerca aún más a él. Cada vez siento mis párpados más pesados al igual que la cabeza, poco a poco se me va cayendo la cabeza quedando sobre el pecho de Jason y los ojos se me cierran, puedo sentir como late el corazón del castaño. Al cabo de unos segundos intento levantar la cabeza pero solo queda en un intento fallido, al intentar por segunda vez, Jason coloca su mano sobre mi cabello y empieza a acariciarme.

Así no ayudas Jason, me voy a quedar dormida...

-Tranquila- me susurra y me deja un pequeño beso en la frente.

(.../...)

Me despierto por la luz que entra por mi ventana y después de estirarme un poco entro al baño y me limpio la cara. Me miro en el espejo con la cara mojada y frunzo el ceño.

Espera... ¿yo no quedé dormida en el sofá? ¿Cómo es que llegué hasta mi cama?

Que yo sepa no soy sonámbula...

¿Jason me habrá traído a mi cama?

No, que digo, claro que no...

Me seco la cara con una toalla y bajo las escaleras y me preparo un café, en eso llega Jason

-Buenos días rubia- canturrea con una sonrisa de oreja a oreja.

-Vaya... alguien ha amanecido contento- comento para luego darle un sorbo a mi café con la espalda apoyada en la encimera de la cocina. Él me guiña el ojo y abre el frigorífico para luego coger un refresco.-Eh oye...- me muerdo el labio nerviosa.

-¿Si?-alza una ceja.

-Eh por casualidad tu ayer...

-¿Si fui yo quién te llevó a la cama?-completa la frase por mí con una sonrisa divertida antes de darle un sorbo a su refesco con una mano en su cintura.

-Bueno, eso ha sonado un poco raro...-hago una mueca y él ríe levemente- Pero si, era esa la pregunta -asiento un poco avergonzada y tímida, no me pregunten por qué, ni yo lo sé...

-Si- asiente con una sonrisa y camina hasta el salón para luego sentarse en el sofá.

-Gracias...-musito antes de darle otro sorbo a mi café.

(.../...)

Tocan la puerta de mi habitación y tras decir un pasa sin despegar la mirada de mi libro se abre la puerta.

-Hey rubia.- hago un gesto con la cabeza en señal de saludo- ¿Qué lees?-se acerca y se sienta en el borde de mi cama.

-Buenos días Princesa- respondo sin despegar la mirada del libro.

-¿En serio?-dice sorprendido- No creía que te gustaran ese tipo de libros...

-Te repito. Hay muchas cosas que no sabes de mí.

-Ya bueno... necesito pedirte un favor- dice rascandose la nuca.

Cierro el libro, lo dejo a un lado y le miro con los ojos entrecerrados.

-¿Qué tipo de favor?-le pregunto desconfiada.

-Pues veras... mis padres tienen una cena de negocios y me han pedido que cuide a mi hermana.

-¿Muy bien...?-asiento lentamente confundida.

-Necesito que me ayudes a cuidarla.

-¿Qué?-frunzo el ceño levemente.

-Por favor por favor por favor- hace un puchero y junta sus manos.

Una pequeña sonrisa se dibuja en mis labios.

-¿Es tan insoportable como tú?-alzo una ceja.

Se lleva una mano al pecho y abre la boca ofendido.

-¿Disculpa? Yo no soy insoportable.-niega cruzandose de brazos. Alzo las cejas incrédula- Bueno, tal vez un poquito...-hace un ademán restandole importancia y yo niego divertida- Pero no, ella es un cielo de niña- una tierna sonrisa se apodera de su rosto y sus ojos castaños brillan.

-Está bien.-asiento con una sonrisa.

-¿En serio?-abre los ojos más de los normal y vuelvo a asentir- ¡Gracias!- se abalanza contra mí y me da un abrazo.

Río.

-Ya ya, anda quítate- intento quitarmelo de encima.

-Salimos en 30 minutos- dice antes de cerrar la puerta de mi habitación.

Miro el reloj y son las 5.30 pm me levanto de la cama y pongo un poco de música, You Don't Know Me y abro el vestidor. Bien, ¿y ahora qué coño me pongo?

Después de 10 minutos pensando que ponerme, al final me decido por unos pantalones negros pitillos, una camiseta blanca de manga corta y un poco ancha metida para detro, unas zapatillas blancas, un pañuelo negro enrollado en el cuello y por último unas gafas de sol. Me coloco un poco de corrector, rimel, colorete y un poco de brillo en los labios y listo.

Cojo el móvil y bajo las escaleras trotando.

-¿Vas a salir?-me pregunta Chace salindo de la cocina con un refresco.

-Si. Voy a ayudar a Jason a cuidar de su hermana.

-¿En serio?-pregunta Mark desde el sofá con una sonrisa de lado y las cejas alzadas.

Camino hasta él y me siento a su lado.

-Si, en serio- contesto- Y ya deja de insinuar cosas estúpido- le digo entre dientes para que solo me escuche él.

Suelta una risita.

-Yo solo digo lo que hay- me guiña el ojo y coloca sus manos detrás de su cabeza. Suelto un gruñido y en eso llega Jason.

Lleva unos pantalones vaqueros oscuros, una camiseta gris de manga corta y el cuello en forma de V, unas zapatillas negras y una chupa de cuero en la mano.

-¿Vamos?-pregunta saltando las últimas escaleras y revolviendo el pelo.

-Si- parpadeo varias veces y me levanto del sofá mientras escucho la risita de Mark, le fulmino con la mirada y se muerde el labio intentando aguantar la risa por lo que le piso el pie al pasar por su lado haciendo suelte un quejido y yo sonría victoriosa.

Tras despedirnos de los chicos salimos de la casa y al cabo de unos 25 minutos llegamos a la casa de los padres de Jason. La casa es enorme, tiene 3 plantas, un jardín enorme con la piscina y hay 2 Porsches aparcados afuera. No quiero saber como es por dentro ésta mansión, porque más que una casa es una mansión.

Jason toca el timbre y en unos segundos abre la puerta una mujer de unos 43 años, tiene el pelo rubio recogido en un moño, unos ojos azúles preciosos y la piel tan suave como el de un bebé sin ninguna arruga, no es ni muy alta ni muy baja, medirá como 1.67 metros sin contar los tacones que lleva y el vestido ajustado de color azúl electrico le hace una figura impresionante.

-Hola cariño- le da un rápido abrazo a su hijo y un pequeño beso en la mejilla.

-Hola mamá.-sonríe un poco.- Esta es Selena -me señala.

La mujer rubia me mira con una gran sonrisa y no tarda en darme un gran abrazo.

-Encantada Selena, yo soy Elisabeth.-dice con su perfecta sonrisa.

-Igualmente -asiento con una sonrisa.

-Por favor, pasad- se hace a un lado para que podamos pasar y Oh Dios Mío.

Estoy sin palabras. Esto parece la casa de Paris Hilton. Con eso ya os lo digo todo.

Mientras me encuentro con la boca abierta observando maravillada la mansión como una boba, llega un hombre que supongo que será su padre por el gran parecido que tienen. Es unos pocos centímetros más alto que Jason, tiene los ojos castaños al igual que su pelo, barba de un par de días que le da un toque atractivo e interesante y lleva un traje.

-Hola- sonríe el hombre pero no tanto como su esposa. -Cuánto tiempo hijo-le da un pequeño y rápido abrazo.

-Hola papá- dice con una pequeña sonrisa metiendo una mano en el bolsillo de los pantalones vaqueros.

El hombre desvía su mirada hasta mí con una cara de confusión y felicidad a la vez.

-Hola. ¿Quién eres tú?-me pregunta con una sonrisa.

-Hola, yo soy Selena.- asiento con una sonrisa.

-Oh, encantado. Yo soy Louis- me da dos besos.

-Hijo, no nos habías dicho que tenías novia- comenta Elisabeth con una sonrisa y el ceño levemente fruncido a la vez.

Jason y yo nos miramos durante unos segundos con los ojos más abiertos de los normal hasta que hablamos a la vez.

-No, no. Nosotros no somos novios- negamos.

La expresión de la rubia se cambia totalmente y hace una mueca de tristeza haciendo que yo frunza el ceño confundida.

-¿Ah no?-negamos- Oh, esta bien- sonríe un poco pero no como las veces anteriores.

-¡Jason!-un grito llama la atención de todos nosotros.

Miramos en la dirección del grito y una niña de ojos verdes y cabello castaño de unos 7 años corre hasta los brazos del castaño. Éste se agacha y abre los brazos con una gran sonrisa para recibir a su hermanita.

-Hola enana- le despeina el cabello liso y castaño mientras ésta mantiene sus brazitos enrollados en el cuello de Jason.

Awwww, pero qué monos por favor.

-Mira enana te quiero presentar a una amiga- le dice mirandome a mí.

La niña se aparta un poco de él pero sin soltarle del todo y me mira con una sonrisa.

-Ella es Selena-me señala con la cabeza con una sonrisa. La niña me mira durante unos segundos y luego vuelve a mirar a su hermano con una sonrisa traviesa para luego soltar a él y correr hasta mí para abrazarme por lo que me pongo me cuclillas para abrazarla.

-Hola- digo riendo. Se aleja de mi unos pocos centímetros- ¿Lily cierto?-pregunto con una voz dulce y una sonrisa tierna y ella asiente enérgicamente con una sonrisa.

-Bueno, nosotros nos tenemos que ir- dice Louis mirando su reloj- No llegaremos demasiado tarde.

Jason y yo asentimos y tras despedirnos de ellos salen de la mansión. Los tres nos quedamos mirando entre nosotros sin saber muy bien que hacer.

-Voy un momento al baño, enseguida vuelvo- comenta Jason para luego entrar al baño que se encontraba en la planta baja a solo unos metros de dondo nos encontrábamos.

-Y bueno Lily, cuéntame ¿cuántos años tienes?-le pregunto con una sonrisa colocándome de nuevo de cuclillas para quedarme a su altura. Ella me enseña 7 dedos- ¿Tienes 7 años?-ella asiente orgullosa- Vaya, qué grande- exclamo con una sonrisa.- ¿Hace mucho que no veías a tu hermano?-ella asiente con una carita triste.

-Si, como un par de meses...-dice mirando al suelo mientras entrelaza sus deditos. La miro con un poco de lastima- Pero hablamos por teléfono- asiente con una pequeña sonrisa.

-¿Pues sabes?-le pregunto con voz dulce- A mí me ha solido hablar de tí.

Ella alza la mirada para mirarme con una gran sonrisa.

-A mí también de tí.

Abro los ojos sorprendida ante las palabras de Lily. ¿Jason le había hablado de mí? Antes de que pudiera preguntarla más se abre la puerta del baño dejando ver al castaño con una sonrisa tierna, se acerca hasta su hermana y vuelve a despeinarla.

-Bueno ¿qué quieres hacer pequeña diablílla?

Lily se encoge de hombros.

-¡Quiero pintar!-exclama moviendo sus brazos en el aire para luego salir corriendo, supongo que irá a por papel y pinturas.

Me quedo observando a Jason mientras él miraba con ternura en la dirección que había ido su hermana pequeña. ¿Por qué le hablaba de mí a su hermana? Espero que fueran cosas buenas...

-¿Por qué me miras así?-me pregunta Jason divertido con una ceja alzada sacandome de mis pensamientos.

Sacudo la cabeza.

-Por nada- alzo las cejas y en eso llega la pequeña con tres neceseres gigantes. Suelto una risita al ver como se balancea de un lado a otro.

-¿Qué traes ahí?-le pregunta su hermano con el ceño fruncido y una pequeña sonrisa mientras le ayuda a su hermana con los neceseres.

-Pinturas duh -responde obvia.

Me acerco hasta ellos y abro uno de los neceseres para encontrarme con un montón de maquillaje.

-¿Maquillaje?-pregunto confundida mientras cojo unos polvos y la miro a Lily. -¿Quieres que te maquille?-ella niega y frunzo el ceño sin comprender.

-A mí no, a él-dice con una sonrisa malvada mientras señala a su hermano.

Le miro a Jason mordiendome el labio inferior intentando aguantar las tremendas ganas de reír al ver su expresión de horror.

-¿A mí?-se señala a sí mismo con los ojos abiertos como platos- No, no enana. A mí no- niega.

-¡Si!-se cruza de brazos y arruga la frente.

-Anda Jason, déjala, le hace ilusión. ¿No querrás que tu hermanita se ponga triste? -finjo preocupación.

Él me fulmina con la mirada y luego vuelve a mirar a su hermana quien se encuentra con la misma expresión de antes.

Bufa.

-Está bien- dice entredintes- Pero sin pasarse eh- nos advierte. Lily y yo nos miramos con una sonrisa malvada para luego hablar a la vez.

-Si, si, no te preocupes.

(.../...)

-¡¡AAAAAAAAAAH!! ¡¿PERO QUÉ DEMONIOS ME HICISTÉIS?!

Lily y yo nos encontramos tirados en el suelo riéndonos como maniáticas mientras sujetamos la barriga de tanto reír al escuchar los gritos de Jason del baño.

-¡Estáis locas!-grita furioso apareciendo en el salón, pero con esa cara es imposible tomarselo en serio. En estos momentos es unicejo, tiene sombras moradas por los parpados y no parpados, un montón de colorete en las mejillas, rimel en las pestañas y restos de éste en los parpados y los labios rojos. Lily y yo nos reímos aún más fuerte al verle- ¡Dios!-se tira del pelo desesperado- ¡Vosotras dos juntas soís un peligro para la sociedad!-nos señala a las dos.

Nos calmanos un poco y le guiño el ojo a Lily para después chocar los cinco.

-Hacemos un buen equipo eh.-ella asiente con una gran sonrisa.

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Lily en multimedia.

¡Espero que os haya gustado mucho el capítulo!

•¿Qué créeis que le decia Jason a Lily sobre Selena?

•¿Os gustaría la pareja de Mark y Lauren?

•¿Qué opináis sobre que Derek y Sel solo se queden como amigos?

¡¡Muchas gracias a todos por leer!!

♡♡♡