Ahora que son las 7:00 pm estoy caminando por el pueblo, recorro los parques, las tiendas, las calles y cuando camino por la calle me encuentro a lo lejos donde está la mansión, mirando la enorme casa entre los árboles, me decido a ir ahí solo sin mi padre el jefe de los policías ni mis compañeros.

Cuando llegó veo que están las cintas policiales en las puertas de la mansión, también veo que no hay nadie en casa, pues mi padre dijo que era un lugar importante por investigar ya que ahí desapareció la señorita Samanta y por ello colocó esta cinta para que ninguna persona pasara, intente abrir la puerta pero no pude estaba cerrada así que abrí una de las ventanas de la mansión con mucho esfuerzo ya que estaban algo trabadas, luego metí una de mis piernas para lograr pasar y cuando mire a mi derecha al escuchar un ruido vi a tres niños uno montado en una bicicleta y los otros dos viéndome.

—Eh... no hagan esto, yo soy policía así que tengo derecho.

Los niños asintieron con la cabeza y yo me salte entrando a la mansión cerrando la ventana detrás de mí, después camine hasta el tercer piso admirando la mansión por cómo era por dentro, era un toque tecnológico con elegancia y de gran gusto, algo que estaba a la moda en estos tiempos, subí y comencé con mi búsqueda, busque pistas por todos lados o algo que me indicara que Samanta estuvo aquí y que aquí fue la última vez donde estuvo pero no hace nada.

—Ya me canse...

Me recargue en la pared del final del pasillo del tercer piso y al hacerlo mi cuerpo rompió uno de los muros y mi brazo quedó atrapado entre el muro haciendo que me asustara mucho.

—¡¡Ahhh!! ¿Pero que?

Saqué mi brazo de ahí y entonces vi algo muy extraño, vi que del otro lado del muro estaba una habitación, rompí más y más hasta que logre hacer un hueco en el que para mí podría ser fácil pasar.

—Que raro...

Cuando entre a la otra habitación parecía muy sola, estaba llena de polvo por todos lados y era molesto así que me cubrí la boca con la manga de mi suéter, vi que había una estantería con libros así que saque uno que llamó mi atención, cuando lo abrí en realidad no era un libro sino más bien un álbum, en el habían fotografías antiguas como de hace muchos años pero en algunas estaba esta mansión y fuera de ella estaba una mujer con sus hijos, era... como la otra foto que vi una vez. Debajo de la foto decía que había sido tomada en 1856, sí que fue hace mucho pero no sabía que está ciudad ya había estado desde aquella época.

Esta vez me quede investigando aquella extraña habitación, habían muchas cosas antiguas y raras y en ella no había ninguna ventana no sé ni cómo es posible que esté aquí en la mansión si este es el tercer piso, busque y busque y encontré álbumes, libros, objetos antiguos entre otras cosas pero poco a poco se hacía de noche y yo... ya no podía más me quede dormido en la mesa que había ahí.

3:00 am

Desperté aún algo cansado levantándome de la silla donde me senté para leer los libros y ver los álbumes, decidí volver a casa y tal vez regresar después pero cuando salí de la habitación... vi algo que realmente me sorprendió..