Adrenalina

Como es que el era una maldición? Como sobrevivió a mi ataque?

- Mi habilidad de moldear mi alma me hace imposible de matar -dijo con una sonrisa-

- Quien te creo? Como es...

- Por ahora no puedo decirte nada, pero -en su espalda se crearon dos alas- espero pronto volvernos a ver

Hice que sus pies quedaran aprisionados por mi tierra control evitando así que se fuera volando.

- Tu no irás a ningún lado así ileso -la locura comenzaba a inundar mi cabeza, hice que en las paredes se crearan lanzas para estirar mis brazos a mis costados y luego juntarlos sonando un fuerte aplauso ocasionando que las paredes se juntaran aplastando de una manera grotesca al peliazulado- 

Separe las paredes para soltar los pies de mi presa.

- Si me molestas tu o alguien más de nuevo, no tendre piedad -me retire de allí para enseguida sacar mi celular y marcarle a Gojo-

— Bueno? —

— Satoru — mi respiración comenzaba a ser más rápida y pesada.

— Oi, donde estas? Estoy con Nanami —

— Estoy en el hospital cerca del colegio...—

— Genial! Oye quiero ir a comer ra...—

— Satoru — el sabía que nunca eran buenas noticias el hablarle por su nombre.

— Es algo malo, cierto? — suspire.

— Están comenzando a salir maldiciones de nivel especial, hasta tienen pensamientos propios y pueden hablar —

Iba seguir pero sentí como algo atravesaba mi pecho.

Voltee a mi hombro con un miedo recorriendo toda mi espalda, era una maldición alto de color blanco con tatuajes en su cuerpo, ramas en sus ojos y una gran túnica tapando su hombro.

— Ayuda —

Fue lo único que pude decir para luego ver como un ataque se dirigía a mi mano donde mantenía el celular, lo esquivé para luego tomar mi martillo de guerra y girarlo sobre mi cuerpo para tomar posición de combate colocando el mango sobre mi cabeza apoyando el metal en mi espalda.

- noc euq anu ed odarg laicepse, huh? (Con qué una de grado especial, huh?) -hablo, no logre entender, hablaba en clave acaso?-

No es momento.

Iba a lanzarme para empezar la pelea pero el albino apreció frente a mi junto a Nanami.

- Vámonos -dijo cargándome en su espalda para tomar el hombro de Gojo e irnos de allí-

- Mierda -solté al llegar al colegio expulsando de mi boca una gran cantidad de sangre-

La herida se estaba expandiendo sobre mi pecho, era como si de una planta habláramos.

- Hitomi -dijo preocupado Gojo, fuimos enseguida con Shoko para sentir como Nanami me acostaba con cuidado sobre la camilla de metal-

Luego de un rato de curarme vi la hora en mi reloj, ya había pasado de la media noche.

- Cómo estás? -era Kento, ya no estaba Shoko así que podía hablar más que cuando hay más gente-

- Mejor -suspire- No dejó de pensar en esas dos maldiciones, no puede ser

Seguía mi martirio mental acerca de no poder haber presenciado esa maldición con la vibración.

Es que no puede ser, como lo...

A menos que...

También tenga control sobre la tierra.

No creo, o si? No...

- Cariño, calma -sentí como me abrazaba, era algo reconfortante eso, sentir sus cálidos brazos sobre mi cuello y mi espalda-

- Hitomi, tenemos que hablar -dijo Gojo entrando al lugar-

Esto no iba ser bueno.

————

Luego de platicar acerca de la misión decidimos mantenernos alerta en cada segundo, saber dónde está el otro en caso de estar en peligro avisarnos enseguida.

- Nanami, me tendré que ir a mi casa, tengo cosas que hacer del clan acerca de lo sucedido -dije mientras guardaba mi martillo de guerra, al terminar me puse un suéter ya que hacía algo de frío-

- Claro, espero que todo salga bien -salimos del colegio juntos, al ver que ya me estaban esperando Kento me detuvo jalándome del brazo para llevarme con impulso hacia el-

Tomó mi nuca con una mano y la otra aún en mi muñeca para besarme algo brusco.

Creo que lo asuste un poco, no debí ser tan descuidada, probablemente me va regañar por eso.

- No se que haría sin ti -sus palabras fueron tan cálidas, pero tan llenas de preocupación, lo entiendo, estaría igual si fuera el quien llegara tan lastimado de una misión- ten cuidado por favor Hitomi -puso su frente contra la mía mientras cerraba sus ojos con fuerza-

- Perdón Nanamin -susurré-

- Anda, ve a tu casa, mañana estaré algo ocupado, en caso de no hablarte o verte en todo el día, ya sabes qué pasa -asentí-

- Gracias amor -me deposito un ligero beso en la frente para luego dejarme ir para entrar al carro-

Toda la noche dentro de mi oficina estuve investigando sobre esas maldiciones pero todo fue en vano, no encontré nada. Me quede dormida en el escritorio agotada.

Siguiente día

Gojo Satoru

Lo que había dicho Hitomi se me hacía conocido, había peleado contra un cabeza de lava hace poco, y lo describió parecido, tenía pensamiento propio y podía entablar una conversación.

- Tengo que decírselo -susurré mientras veía como Ichiji manejaba con sumo cuidado por las calles de Japón-

Me habían pedido ir a una misión algo lejos, espero que ella esté bien, si tengo que usar mi habilidad para cuidarla lo haré.

No pienso perder a nadie más.

No como a Geto.

Fukunaga Hitomi

Al despertar vi como en mi celular habían notificaciones de Nanami, Gojo y unas cuantas llamadas de Maki.

Decidí primero regresarle las llamadas a Maki.

— Hitomi-sama —

— Que sucede? —

— Puedo ir a entrenar con usted? —

— Ya sabes que puedes hablarme de tu, me siento vieja —

— Perdón —

— Hoy a las 5, en el colegio —

— Gracias Hitomi-sama —

Le conteste ahora a Nanami el mensaje, y luego vi el de Gojo.

Me dijo que estaban en camino a una misión junto una nueva integrante de primero.

Yo no tenia nada que hacer, me sentía aburrida. Decidí tomar un baño, donde nadie me puede interrumpir, quería descansar de todo el estrés sobre mis hombros.

Pero algo me interrumpió.

El sonido de mi celular me hizo suspirar con molestia.

— Quien? —

— Hitomi-sama? — era la voz de un joven.

Mi corazón dio un vuelco de alegría al saber quien era.

— Yuuta? —

— Si — escuche una pequeña risa de su parte.

— ¿¡Como has estado?! —

— Muy bien! Realmente Miguel me ha dado muchos platillos deliciosos —

— Me imagino, que bien que has disfrutado el lugar —

— Si, oye, quería pedirte un favor, puedes ayudarme a entrenar cuando regrese a Japón? —

— Claro! Cuando regresaras? —

— Aún no lo se, sigo buscando el arma que me dijo Gojo, pero pronto regresare —

— Perfecto, mientras estaré entrenando a Maki — se que a él le atraía en cierto sentido a Maki, y a ella también le atrae Yuuta, aunque lo niegue.

— Ma...Maki? —

— No te preocupes, la cuidaré bien para cuando regreses —

Sabía que estaba sonrojado.

— Ya...Ya me tengo que ir Hitomi-sama —

— Anda con cuidado, te espero con ansias aquí en Japón —

— Perfecto, hasta luego Hitomi-sama! —

Colgué para luego seguir con mi baño.

Salí de la tina tomando una toalla para secar mi cuerpo, me cambié a algo casual, un pans negro con una camiseta de Nanami que había dejado en mi cuarto.

Iba ir con Galio para ver como iba el clan pero una corazonada me llegó dándome malas noticias.

De quien?

Donde?

Una llamada llegó a mi celular, era de Ijichi.

— Señorita Hitomi, estoy con los muchachos de Gojo, están contra una maldición especial, por favor, ayúdenos —

Deje lo que hacia para irme corriendo, tome mi martillo de guerra para romper la tierra y sacar un pedazo grande haciéndome elevar por los aires hacia el lugar donde estaba Ijichi.

Al verlo, note como había un manto enorme alrededor del lugar, deshice el pedazo de tierra para lanzar los pedazos hacia el manto pero fue inútil, estos fueron destruidos.

Al bajar, caí de rodilla al suelo. Ijichi soltó un pequeño grito asustado, yo me levanté para caminar hasta el manto.

- Informes -hasta a mi me aterró la voz que salió de mi-

- Se suponía que era una maldición de grado dos o tres, pero se convirtió en una maldición de grado especial.

- Bien -susurré y me adentré al manto-

No dejaría que lastimaran a ninguno de los alumnos de Gojo. Asesinare a quien se atreva a hacerles daño.

Una explosión sonó en la planta baja, escuche unos pasos rápidos subiendo, enseguida me desplace con ayuda de la tierra sobre mis pies. Baje las escaleras para toparme a Megumi con una joven en sus brazos.

- Nobara está demasiado lastimada, necesitamos ayuda, Yuji se quedó abajo peleando con la maldición de grado especial.

Coloque mis manos sobre las heridas de Nobara para hacer una Técnica de Maldición Inversa, me lo había enseñado Ieri, no soy tan excelente en eso pero lo voy mejorando poco a poco.

- Llévala con Ijichi para que vayan inmediatamente con Ieri, no se distraigan con nada, yo asesinare a la maldición -golpeé en suelo con el mango de mi martillo e investigué donde era la ubicación exacta de la maldición- ya!

- Hitomi-sama, salva a Yuji -lo dijo demasiado serio, al parecer ambos crearon un lazo de amistad-

- No te preocupes -baje convirtiendo las escaleras en un piso plano logrando llegar al final más rápido-

- ¡¡YUJI!!

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Una gran gran disculpa por haber tardado mucho en subir otro cap, realmente no me sentía tan inspirada para terminar el capitulo, aparte de que he comenzado a trabajar en dos lugares, más la facultad, se me ha hecho difícil actualizar mas seguido pero intentaré organizarme para actualizar o cada semana o cada dos dias o así, como se me facilite mejor. Espero que les guste el cap ! ❤️❤️