Desde hace días la comunicación entre Ellie y Gabby era muy distinta a la de antes, es como si todo el amor se hubiese desvanecido de la nada.

Antes se trataban con amor, había besos, abrazos, caricias y alguna otra cosa más subida de tono.

Ahora apenas unos besos y abrazos, suponían que tenían que terminar.

Bueno, eso pensaba Ellie antes, ahora terminar es la peor opción ya que sabría que Gabby no la dejaría y si lo hace seguro terminaría mal y quizás lastimada.

— ...

— Quiero volver a vivir sola, no importa si eso me lleva a la máxima pobreza y volver a esos dos estúpidos trabajos donde apenas puedo dormir o descansar.

Estaba cansada hasta de vivir, solo pedía morir y que si existe una forma de revivirla que ni lo hagan o que ni siquiera se acuerden de su existencia. Al parecer lo único que tenía era ese peluche, ese peluche por lo menos no le hace daño como lo hace Gabby.

Todo estaba tranquilo hasta que escucho un ruido que hizo que todo su humor cambiara repentinamente.

— ¿Gabby? — fue lo que dijo al verla — No, tu antiguo trabajo — se quedaron calladas y solo mirandose, ni una risa se escuchaba por ese chiste, bueno, ni siquiera sabe si eso puede contar como chiste.

— ujum... — se quedó callada por un momento hasta que volvió hablar— hasta ese trabajo que tenía era mejor que estar a tu lado— Fue lo que dijo sin pensarlo dos veces.

— ¿Ah? — Gabby se quedó sin nada que decir.

— Lo que oíste, es mejor estar en ese infierno que estar a tu lado — Ellie vio la cara de enojo de la morena que solo decidió seguir con sus palabras — Tranquila, es un chiste —.

Gabby con esa respuesta estaba más que enojada, pero no tenía animos de hacer algo con ella — No da gracia — Ellie rió al escuchar eso — como tu chiste ese de mierda —.

Sin duda que esa peli naranja se estaba pasando de la raya, quería golpearla hasta que llore de dolor, pero no, quizás hay algo mejor que eso.

— Chau — Dijo la morena y se fue de la habitación, quien sabrá a donde fue. Ellie solo soltó una pequeña risa, verla así le daba gracia.

— Si cree que con esas palabras de mierda que salen con su boca me pueden hacer sentir mal, está sin duda equivocada — Pensaba Gabby — Quizás tengo una idea en mente, ahora quien se andará burlando después... —.

Fue directo a su sala que tenía Ellie donde tenía todos sus vestidos.

Soltó una pequeña risa y al agarrar uno de los vestidos los empezó a pisar y romper algunas de sus telas que tenía en sus cajones, sabía lo preciado que eran sus vestimentas para Ellie que nunca se había atrevido a tocarlas, no hasta ahora.

— ¿Ahora quién es la burlona acá? — Fue lo que dijo, aunque nadie la escucho.

Siguió destrozando las cosas de Ellie y su estúpido salón, pero lo mas importante, la máquina donde hacía todo. La agarro y la empezó a pisar con todas sus fuerzas haciendo que se escuche por toda su casa, sin duda Ellie al escuchar eso amaría la escena que tiene ahora en su estudio.

Y claro estaba, Ellie al escuchar la bulla fue directamente a donde prevenia el ruido, cuando vio que venía desde su sala se preocupo y entro rápidamente.

— ah... — Ellie al ver la escena de todo su trabajo destrozado no sabía que decir, sentía un nudo en su garganta que no la dejaba hablar.

— ¿Qué pasa? ¿Te comieron la lengua o qué? — decía Gabby con un tono de burla hasta que vio como por las mejillas de Ellie habían rastro de agua ¿estaba llorando? — Que patética te vez así, eso te pasa por ser una burlona de mierda — Decía la morena, que decidió retirarse de la sala de estudio de su "amada" Ellie.

Ellie que todavía no sabía que hacer se quedó parada, hasta que sintió como Gabby cerraba la puerta con fuerza haciéndola asustar.

—... ¿por qué? — fue lo único que podía decir hasta que rompió el llanto.

Tenía que hacer algo por todo esto.

——

Corto, pero no tenía inspiración para algo jiji.