capitulo 74
La mirada de Dariel y Sam está fija sin parpadear en la pantalla frente a ellos, este era el momento que tanto han estado esperado desde hace mucho. Hoy descubrían si es niño o niña lo que está creciendo en la pancita de Samuel.
—¡Es un niño!—Exclamó emocionó el alfa de ojos azul-violeta—¡Tendremos un niño!—Besa los labios y la pancita descubierta de Sam.
Por fin había dejado que descubriera su sexo, ambos padres primerizos tendrían un fuerte y sano varón. La emoción se reflejaba en sus sonrientes rostros. Ahora ya podían pintar e adornar la que será la habitación del bebé.
Dariel no podía dejar de sonreír mientras sujetaba mi mano y le decía cosas lindas a nuestro hijo...eso es lo que pasó hace cuatro meses atrás.
Ahora verme aquí acostado en esta camilla con mi gran estómago y unos malditos dolores peores que los que sentí en aquel tiempo que recibía quimioterapias.
Este es un dolor infernal que te adormece hasta tu alma, he estado así desde la una de la madrugada y ya son más de las tres de la mañana. Quiero tenerlo ya, pero dicen que aún no es tiempo. ¡¿cuanto más debo de esperar maldita sea?! Siento que estoy apunto de romperme peor que una rama seca de un árbol.
—Sammy.—Limpia el sudor del demacrado rostro del alfa menor.
Dariel no se a despegado de él en ningún momento, estaban durmiendo de lo más cariñosos cuando, él alfa mayor sintió un líquido mojado su muslo. Sam tenía la costumbre de tomarlo como almohada y que Dariel deslizará su pierna entre los muslos de Sam. Fue por eso que sintió cuando se le rompió la fuente a su prometido pelirrojo.
Solo bastó eso para que Dariel se volviera un manejó nervios y que sus feromonas se salieran de control por el susto. Samuel tuvo que darle un bue manotazo en la nuca, solo así, reaccionó.
Desde que Samuel cumplió siete meses de embarazo. Dariel ya tenía el equipaje del niño y el de Sam preparado porque no sabia en qué momento exacto podía romper fuente.
En ese tiempo Dariel no dejaba en ningún momento a Sam, era un gran León albino pegado como garrapata a su hermoso prometido, Samuel.
En las noches ni dormir lo suficiente bien por temor a que, Samuel se sintiera mal y el no lograra despertar a tiempo. Se volvió demasiado sobreprotector.
—Esta vez puedo verte—Sostiene la temblorosa mano de Dariel—Siento un inmenso dolor, pero ese dolor no está nublado mi mente. No te estoy confundiendo con mis delirios de soledad como en aquel tiempo—Besa la mano del mayor—Si estoy contigo, todo se vuelve más liviano, más dulce.
La mirada de Dariel se volvió muy cristalizada, posa su frente sobre la del más joven, este esta empapado de sudor. Dariel limpia cada cierto tiempo esa humedad, pero a los segundos vuelve nuevamente.
—Me disculpo por no a verme protegido bien e hacerte pasar por este infernal dolor—Besa suavemente los pálidos labios de su amado—Prometí hacerte solamente feliz, pero no lo estoy cumplido. Odio verte en este estado—Apreta sus dientes con fuerza para no llorar.
Verlo en este estado me hace recordar esos años dónde vivía con el miedo constante de que muriera mucho antes de que yo, pudiera encontrar una solución. Es aterrador, estoy rogando a los cielos para que sea un parto sin complicaciones, uno que termine lo más rápido posible.
—Lo sigues cumpliendo—Acaricia las mejillas de Dariel—Soy la persona más feliz que pueda existir, en estos momentos sigo siendo aún más feliz. Pronto conoceremos a nuestro hijo. Tal vez es un mini tú—Sonríe pero su rostro se frunce por el descomunal dolor.
Duele justo como me lo aseguro Oriel, dijo que había echo investigaciones sobre está situación y que todos decían que era vivir un infierno. Mientras me decía eso, su rostro se volvía tan pálido como la vez que se enteró que estaba esperando un bebé.
Se lamentan no poder estar esto momentos aquí, en el hospital. Pero su carrera está en su apegó y tiene muchas giras como programas que, grabar. Es por eso que tiene suficiente tiempo por más que lo deseé.
—Que tenga de los dos, tu deslumbrante sonrisa y hermoso cabello rojizo, por último mis ojos. Tal vez sean solo azules.
—Quiero que sean justamente como los tuyos, azul-violeta. Me encanta tus ojos, amo todo de ti.
—Y yo te amo a ti, amor mío.
—¡Aahh!—Gimio de dolor.
—¿Sammy?—Vuelve a ponerse desesperado.
—Ve a llamar al tío, Rex. Ya es hora.—Justo como él lo dijo, que iba a sentirlo. Este dolor es más espeluznante.
—¡Pero.....!
—¡Solo darte prisa!—Lo fulminó con la mirada—Nuestro hijo esta a punto de nacer, no es momento de que pierdas tu fuerza de voluntad—Apreta con fuerza la muñeca de Dariel—Es mejor que te controles y no salgas, alfa, o yo mismo te sacaré de la sala. ¿ME ESCUCHAS?
Lo menos que quiero es lidiar con Dariel en su modo alfa, ya la estoy pasando lo suficiente difícil con estos infernales contracciones.
—Sí—Besa la frente de Sam—Pero sigo sin prometer nada—Llama a Rex, por medio del teléfono de esa sala. No pasaron ni un segundo cuando venían todo un séquito a ponerse en marcha.
—Tío, ¿ya es hora? ¿Dime que si?—Jadea cansado, cada vez siente que respira menos.
Rex iba a verificar cuán dilató estaba Samuel, pero los feroces gruñidos de Dariel, lo hacían vacilar.
—¿Es necesaria que haga eso?—Gruño.
—¡Solo cállate y déjalo hacer su trabajo!—Sam no podía controlar lo que decía, esta muy asustado e irritado. Él solo quiere que todo termine.—Solo hágalo—Entrelaza su mano con la de Dariel—Verme a mí, no al doctor.
—Bien—En su visión solo estaba Samuel, no había nadie más que no fuera Sam.
—Sigue siendo muy estrecho, no podrá salir.
—¿Estrecho?
Samuel instintivamente lleva su mirada a la entrepierna de Dariel, preguntándose como esa enorme cosa si entró en ese "Estrechó" lugar.
—Tendremos que sacarlo por tu estómago, no podemos esperar más.
—Eso sigue sigue siendo seguro—Apreta con fuerza las manos de, Rex—Dijo que no abrían complicaciones—Sus ojos se volvieron más oscuros—No haga que me arrepienta de a verle creído.
—Dariel. soltarlo, él aún necesita sus manos—Mejor lo hubiese dejado allá afuera y le hubiera permitido a mi madre estar en esta sala.—Solo hágalo. Dariel—Sostiene con más fuerza la mano del mayor—No sueltes mi mano en ningún momento.
—Prepararlo—Ordenó.
Los enfermeros están apunto de poner ha dormir a Sam, iban a dormirlo por completo para evitar que el alfa en él, saliera al ver que están por cortar su piel y que a la fuerza quieren sacar su hijo. Eso lo tomaría como una amenaza y podría resistencia volviendo todo esto más peligroso de lo que ya es.
—No te soltare, nunca lo haré—Besa la mano que sostiene con cariño—Cuando despiertes te estaremos esperando. Te amo.
—Te amo—Poco a poco fue perdiendo la batalla contra el sueño hasta que se quedo dormido.
—Dariel—Rex sostiene el bisturí—Mantén la calma, no entres en modo loco. Mantén tu mirada solo en Sam, eso ayudará.
—Bien—No quería que lastimen el cuerpo de Samuel, puede que esa cicatriz en su momento no le permita ejercer su carrera como modelo.
—Empecemos.
Con su mano libre se cubrió la nariz para no oler la sangre, pero aún así, el olor penetra por los conductos nasales del alfa. Los ojos se tornaron oscuros, el par de colmillos están apunto de romper la blanda carne de sus finos labios.
Lo único que lo mantiene cuerdo es su mano entrelazada con la de Sam. Él tiene toda su atención en el rostro del menor, todo a su alrededor se volvió super silencio. Así evita el querer ver lo que le están haciendo a su Sammy.
Ese silencio fue roto por los llantos de un bebé, instintivamente la mirada del alfa se fue a esa dirección. Sus ojos se volvieron muy aguados, no podía creer que esa cosita es su pequeño bebé.
—Dariel Simmons y Samuel Astor, su hijo nació a las 4:30 de la mañana del dia 21 de octubre del año 20XX. ¿Cómo le llamarán?—Se lo entrega a la enfermera, ella lo arropa rápidamente en una manta color violeta.
—Se llamara Roshan que significa: Amanecer, brillante, luz—Es un nombre digno para este hermoso bebé que vino a nuestras vidas—Roshan Simmons Astor.—Sonrío con grandes lágrimas recorriendo por sus mejillas—Amor mío, es justo como lo imaginamos.
—Tiene tu hermoso cabello rojizo y unos grandes ojos de color Azul-violeta. Es precioso—Besa a Samuel—Despierta pronto para que podamos sostenerlo en nuestros brazos.
—¿No lo sostendrá?—Pregunta la enfermera.
—Quiero pero en estos momentos solo me conformo con verlo, lo sostendre cuándo mi Sammy este consiente.—Acaricia las rojas mejillas del Roshan.
—Despertara en otro rato—Habia terminado de limpiar y saturar esa cortada en el cuerpo de Samuel—Lo trasladaremos a la habitación VIP.
Dariel solo asintió mientras veía como se llevan a su pequeño a observación. La enfermera tuvo que explicarle el motivo por el cual se lo llevaba para que, la dejara de ver con esa mirada afilada.
Rex empujó la camilla hacía afuera de la sala de parto, Dariel seguía sosteniendo la mano de su prometido. No pensaba soltarla hasta que esté despierte.
¿Por qué aún sigue de pie? Lo que vio allá adentro no fue para nada simple, pero sigue despierto. Le diré a la familia Astor, que lo vigilen porqué puede caer inconciente cuando menos se lo esperen.
—¿Como se encuentra nuestro Sam? ¿No sucedió nada grave?—July besa todo el rostro de su hijo.
Greg sintió una opresión en su pecho al verlo inconciente, no le gustaba para nada verlo en ese estado.
—Todo está bien, le explicaré después. Mientras tanto, pueden ir a ver ha Roshan.
—Bien—Los abuelos se dirigen a esa sala guiados por una enfermera.
—Felicidades primo—Hodei abrazo a Dariel, lo soltó rápidamente porqué temía que Kole, se le fuera encima a su primo.
La causa de eso es, su embarazo de tan solo tres meses. Desde que kole se enteró, se volvió mucho más sobreprotector que él mismísimo Dariel lo fue en su momento con Sam.
—Despierta pronto hermanito—Acaricio el cabello de Sam—Vendremos en unos minutos—Sigue a su padre.
Ya estando en la habitación VIP, Dariel subió a la camilla junto a su Sammy. Sigue sin soltarlo, no puede estar tranquilo hasta que él más joven despierte. Se siente muy ansioso.
Las horas pasan y Samuel seguí sin despertar, eso causa más alarmas espeluznantes en el alfa mayor.
—Te amo, te amo—Acomoda su cabeza en el hombro de Sam.
—Ahora mismo tengo ganas de dejarte calvo—Con cuidado abraza al alfa que está en sus brazos.
Me siento como la mierda, no lo tuve por ahí, pero mi cuerpo sigue doliendo.
—¡Sammy!—Queria moverse pero no lo hizo para no lastimar a Sam.
—No te muevas, solo quédate así—Huele el aroma emanado del cuerpo de su alfa—Te amo, ¿Como es nuestro pequeño Roshan?
Entre cientos de nombres ese fue el que más nos encantó por los tres significados, Roshan y Dariel son mi luz enmedio de toda la penumbra oscuridad.
—Es hermoso, tiene tu cabello y mis ojos—Sonríe.
—Miren quién viene aquí—Greg traía en sus brazos a Roshan.
—¿Esa pequeña cosita es nuestro hijo?—Cubre su boca, no podía creer que haya nacido de él. Sus ojos marrón verdosos se volvieron una cascada.
Dariel lentamente se acomodó en la camilla para que los dos pudieran sostener por primera vez a ese pequeño niño que podría romperse en cualquier momento.
—Sí, él es su hijo. Nuestro nieto—Lo deja en los brazos de ambos alfas—Felicidades—Besa coronilla de Samuel—Ya son padres.
—Tenias razón, amor mío. Es hermoso, un tanto rojo pero muy hermoso....¿Dariel?
Dariel se había quedado dormido luego de atesorar el sentimiento de sostener a las dos personas que más ama en su vida.
—¿Dariel?—Se asustó—Amor mío...
—No entres en pánico—July palmeó el hombro de Sam—Él solo está dormido. Es sorprendente que se haya mantenido despierto hasta que despertaste, es un alfa muy fuerte.
—¿Es normal?
—No, para nada es normal que un alfa este en una sala de parto, es muy peligroso que entre en modo loco porque a sus ojos, los doctores están dañado a su pareja aunque solo estén ayudado.
—Tu padre es todo un alfa entre los alfas—Le sonreír a Roshan.—Descansa, te amo—Beso el cuello de Dariel.
Creí que solo yo era el que estába sufriendo por esos desgarradores dolores, pero no era así, mi amado prometido, sigue sufriendo mucho más que yo. Te seguiré recompensado toda la vida, cuando esté completamente sano, cumpliré una de sus tantas fantasías.
Nota 🤍
Buenos días 🌅🥺 vengo a informarles que el próximo capitulo es el final de está historia 😭
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