Mientras tanto, cuando las hijas de villanas salieron del castillo, ambas tomaron asiento sobre el césped. Evie tomó su mano y la colocó sobre el lado izquierdo del pecho de su compañera de cuarto.

-Estas a salvo aquí. -Susurró la chica de cabello azul. - ¿Puedes sentir eso? Tu corazón aún late, y te prometo que estaré contigo hasta que deje de hacerlo. -Dijo, aunque su corazón estaba latiendo muy rápido debido a la ansiedad y eso le preocupaba.

-Tú y yo vamos a respirar juntas, M. -Exclamó la descendiente de Regina, no tardó en seguir su propio consejo, pero su chica no hizo caso. -Hazlo, nada malo te pasará.

La chica de cabello morado la observó con los ojos llenos de lágrimas y la obedeció, pues confiaba en ella, sabía que Evie solo quería lo mejor para ella.

-Así se hace, te mereces unas fresas. -La alentó la joven diseñadora. - ¿Quieres usar el diario que te regaló Carter? -Cuestionó, recibiendo una respuesta positiva por parte de la chica de la Isla.

La princesa malvada tomó el pequeño bolso que Mal había traído y sacó de su interior aquel objeto junto a un bolígrafo, lo abrió y se lo entregó a su mejor amiga, quien lo tomó con su mano libre y empezó a hacer garabatos en la hoja.

-Inhala, espera cinco segundos... y luego exhala. -Susurró Evie, respirando junto a ella. -Bien, ahora hazlo sola. -Le indicó, sintiendo esperanza, ya que sabía que su chica era capaz de hacer cualquier cosa.

La hija de Maléfica siguió las órdenes de su compañera de cuarto y sus manos dejaron de temblar, por lo tanto comenzó a escribir en el diario.

-Esa es mi chica malvada. -Exclamó la chica de cabello azul, sonriendo con orgullo al ver que sus consejos estaban sirviendo. -Hazlo de nuevo y te daré fresas. -Insistió por última vez.

Su mejor amiga la obedeció y luego dejó de sentir aquella sensación de agobio, cerró el libro de manera brusca y lo guardó en su bolso junto al bolígrafo.

- ¿Cómo es que Carter te dio ese diario? -Preguntó la hija de Regina, curiosa.

-Quiso darme una lección de empatía pero no me dejó ser la activa en la cama, ¿¡puedes creerlo!? -Se quejó la ojiverde, indignada.

-Creo que no entiendes lo que significa esa palabra. -Exclamó su compañera de habitación, encogiéndose de hombros.

-Lo único que entiendo es que mientras nos desnudábamos, arruinó el momento dándome ese estúpido diario que ni siquiera puedo leer completo, pero luego de eso... empecé a verla de otra manera, mi corazón late más fuerte cada vez que la veo y la extraño cuando no la tengo cerca, ¿crees que me esté muriendo? -Dudó la villana, sintiéndose rara pues jamás había tenido esta clase de conflicto. -Si este es otro de los trucos que papá tiene para contactarme te juro que voy a volver a la Isla y le voy a meter su ámbar por...

-No creo que estés muriendo, M, sin embargo estoy segura de que tienes más ganas de vivir aquí que en la Isla y la razón tiene nombre y apellido: Carter Mason. -Replicó Evie, sonriendo con picardía pues conocía perfectamente a su mejor amiga y sabía que Mal se había involucrado demasiado con la morocha. -Al menos una de las dos logró divertirse, lamentablemente para mí Rosalinda es más responsable de lo que pensé.

-La chica Cebo sabe demasiado, tuve que decirle sobre mi progenitor en el Banquete de Bienvenida, si abre la boca estamos perdidas. -Confesó la chica de cabello morado, haciendo una mueca, el hecho de que la prima de Alex Russo supiera uno de sus más oscuros secretos la ponía realmente nerviosa. -Sé que la harás caer tarde o temprano, E, no podrá resistirse a tus encantos por mucho tiempo más.

- ¿Le contaste sobre Hades a una desconocida pero no eres capaz de hablarles sobre tu propio padre a los chicos, quienes te han protegido desde siempre? -Cuestionó la princesa malvada, sin poder creer lo que estaba oyendo. -Claro que sí, cuanto antes la seduzca, será mejor para todos.

-La única razón por la que aún no les he dicho nada sobre él a Jay ni a Carlos es porque si ese maldito me abandonó es porque es más peligroso que mi madre, y ellos son capaces de ir a buscarlo para enfrentarse a él por haberme herido al marcharse, no quiero que los lastime. Los cuatro estamos fuera de su alcance y eso es lo que importa, y sé que Carter no tiene manera de localizarlo. -Se defendió Mal, quien haría cualquier cosa para mantener a salvo a sus mejores amigos. -Procura hacerlo antes de la boda, no creo que Ben la deje respirar lejos de ella cuando se casen. -Le aconsejó, encogiéndose de hombros.

-Se van a enterar tarde o temprano, M, así que yo te recomendaría que no les sigas ocultando esto. -Masculló su compañera de cuarto, se estremeció apenas una ráfaga de suave viento se hizo presente y se abrazó a sí misma. Le dirigió una mirada seria a su mejor amiga -pero era consciente de que probablemente la villana tenía razón- y decidió que lo mejor sería cambiar de tema-: Deberíamos regresar adentro ya...

Las dos se incorporaron del suelo y la Princesa del Inframundo entrelazó su brazo con el de la otra villana mientras caminaban hacia la entrada del palacio.

-Seguro, me muero de ganas de verte vomitar si es que la pareja real sigue bailando juntos como si no fueran dos hipócritas que engañan a la gente a la que gobernarán por el resto de sus patéticas vidas llenas de protocolos y mentiras. -Susurró la ojiverde, divertida. Evie soltó una carcajada y le dio un codazo para que mantuviera la compostura, entonces ninguna de las dos emitió palabra alguna hasta que regresaron al salón en el que se estaba realizando aquel evento, en donde todos estaban danzando en la pista de baile.

-Ugh, vomitaría si hubiera comido algo antes. -Protestó la chica de cabello azul, arrugando la nariz. -Supongo que vamos a tener que seguirles la corriente... -Dijo, entonces Can I Have This Dance comenzó a sonar.

- ¿No eres tú la que siempre se quejó de que yo tengo dos pies izquierdos? -Le recriminó la hija de Maléfica, elevando una ceja. -Lo haré solo si me guías hacia la mesa de bocadillos porque tú prometiste que me darías fresas. -Exigió, la otra villana no tuvo más opción que asentir y la guió hacia la pista de baile, uniéndose a todas las demás personas.

-Take my hand. -Pidió su compañera de habitación, estirando su mano hacia la villana, quien la tomó. -Take a breath. -Le indicó, entonces Mal respiró hondo.

-Pull me close and take one step. -Murmuró, acercándose a ella para luego retroceder, la chica de cabello morado comenzó a avanzar mientras miraba sus pies; pero la princesa malvada elevó su mentón para que observara su rostro y entrelazó sus dedos. -Keep your eyes locked on mine, and let the music be your guide. -Exclamó antes de colocar la otra mano de la villana bajo su omóplato mientras ambas comenzaban a desplazarse de atrás hacia delante.

-Won't you promise me? -Empezó a cantar Jay, quien bailaba con su novio.

-Now won't you promise me, that you'll never forget? -Prosiguió el pecoso, quien miraba de reojo a sus amigas, le hizo una señal con la cabeza a su chico para que se acercaran más a ellas.

-We'll keep dancing -Continuó el descendiente de Jafar, obedeciendo al VK con quien danzaba.

-To keep dancing-Dijo Carlos, sonriendo.

-Wherever we go next-Cantaron ambos, acercándose a las villanas, pero entonces otra pareja se interpuso en su camino.

-It's like catching lightning, the chances of finding someone like you. -Dijeron Lonnie y Jane, la pequeña hada giró hacia el lado en el que se encontraba el hijo de Cruella y entonces los dos cambiaron de pareja. -It's one in a million, the chances of feeling the way we do. -Dicho esto, volvieron a cambiar, al igual que el resto de la gente que danzaba a su alrededor.

-And with every step together, we just keep on getting better. -Exclamó la princesa de Auroria. -So can I have this dance?

-Can I have this dance? -Inquirió Chad, quien bailaba con ella, en un rápido movimiento la hizo girar para que ella quedara cerca de Mal, quien seguía danzando con su mejor amiga.

-Can I have this dance? -Preguntó la rubia para luego cambiar de lugar con Evie, la hija de la Bella Durmiente hizo una reverencia ante la villana. -Take my hand. -Dijo antes de ofrecerle su mano, quien la aceptó.

-I'll take the lead. -Aseguró la princesa de Auroria, entonces la chica de cabello morado se le acercó, logrando poner nerviosa a la chica de Auradon. -And every turn we'll be safe with me. -Cantó, haciendo girar a la ojiverde, quien colocó una mano sobre el hombro de Audrey mientras la última depositaba la suya debajo del omóplato de su compañera de baile.

-Don't be afraid, afraid to fall. -Mencionó la Princesa del Inframundo, pensando en que si lo que sea que tenía con Carter no funcionaba, podía buscar tener algo sexual con la rubia. La última rodeo con ambos brazos el cuello de Mal, mirándola con intriga, pues no sabía nada sobre ella pero estaba segura de que averiguaría muchas cosas cuando el Cotillón finalizara. -You know I'll catch you through it all...-Dicho esto, Audrey se dejó caer, mientras que la villana la sostenía de la cintura durante unos segundos y luego la volvía a levantar con elegancia; logrando que sus rostros quedaran muy cerca.

-And you can't keep us apart...-Prosiguió Rosie, quien ahora danzaba con su Consejera Real.

-Even a thousand miles can't keep us apart-Afirmó la hija del mayor Mason.

-'Cause my heart is...-Insistió la futura reina de Auradon.

-...'cause my heart is...-Repitió la morocha.

-...wherever you are. -Cantaron ambas al unísono, pero entonces Ben le ofreció la mano a su prometida y ella la aceptó, por lo tanto Carter decidió bailar con la chica de cabello morado.

-It's like catching lightning, the chances of finding someone like you. -Prosiguió la pareja real, la chica de Costa Luna le pisó el pie a propósito y le dedicó una sonrisa totalmente falsa. -It's one in a million, the chances of feeling the way we do.

-And with every step together, we just keep on getting better. -Habló Mal, dejándose guiar por la chica Cebo, la verdad era que disfrutaba danzar con ella; pero también adoraba oír los insultos que Ben & Rosie -quienes bailaban a su derecha- se murmuraban, aprovechando que la música estaba fuerte y creían que nadie podía escucharlos. -So can I have this dance?

-Can I have this dance? -Dudó la prima de Alex Russo, sintiendo que volvía a ser una chica que podía enamorarse de quien quisiera, sin tener que ocultar sus sentimientos debido a su trabajo.

-Can I have this dance? -Evie interrumpió la discusión en voz baja de la pareja real para ofrecerle su mano a la chica, quien sintió un gran alivio al tomarla, permitiendo que la chica de cabello azul la llevara lejos del príncipe. -Oh, no mountain's too high and no ocean's too wide...-Dicho esto, hizo girar a la chica del PPP.

-'Cause together or not, our dance won't stop. -Cantaron las dos al unísono.

-Let it rain...-Prosiguió la futura reina de Auradon.

-...let it pour, what we have is worth fighting for. -Continuaron las dos. -You know I believe, that we were meant to be, oh.

-It's like catching lightning, the chances of finding someone like you, oh, like you, oh...-Cantaron todos, danzando con sus respectivas parejas. -It's one in a million
the chances of feeling the way we do, way we do...

-And with every step together, we just keep on getting better.-Prosiguieron todos, sintiéndose felices y plenos. -So can I have this dance?

-Can I have this dance? -Preguntó Jay a su novio, quien le sonrió y unió sus labios en un apasionado beso.

-Can I have this dance? -Dudó la joven guerrera, mirando a su pareja, Jane no dudó en besarla.

-Can I have this dance? -Inquirió Mal, recibiendo como recompensa un beso lleno de cariño y deseo por parte de Carter.

-Can I have this dance? -Cuestionó la hija de Regina, observando con deseo los labios de la chica que la había rescatado y cerró los ojos esperando a ser besada, pero antes de que Rosie pudiera hacerlo; Ben comenzó a hacerle señas a Lumiere y entonces unas trompetas comenzaron a sonar justo cuando la canción terminó.

-Y ahora, para la inauguración de la obra maestra del príncipe de Auradon, diseñado especialmente para su Dama. -Intervino el hombre francés, señalando a Rosalinda. Las trompetas volvieron a sonar y todos se separaron, Evie abrió los ojos y ambas se voltearon para ver el vitral.

Todos los demás dieron media vuelta, esperando ver la sorpresa que el hijo de Bella tenía para su prometida.

Uno de los guardias destapó la manta que cubría el vitral y todos comenzaron a murmurar sobre lo hermoso que era, sobre lo tierno que era el príncipe y demás mientras comenzaban a aplaudir, excepto la princesa malvada; cuyos ojos estaban llenos de lágrimas.

- ¿Ben hizo eso? -Susurró la futura reina, sorprendida por la belleza de aquella pieza de arte.

-Sí, lo hizo. -Masculló la villana con rencor.

Rosie dirigió su mirada hacia el castaño, sin poder creer que había hecho tal cosa.

-Evie...-Murmuró Mal, abriendo sus brazos para incitarla a que se refugiara en ella, por lo tanto su mejor amiga no dudó en ir hacia ella y abrazarla con fuerza. -... no puedo creer que ese bastardo no me dé créditos por mi trabajo. -Añadió en voz baja mientras acariciaba el cabello de su compañera de habitación.

Los hijos de villanos caminaron hacia ellas, apretando los puños, cuando el futuro heredero al trono acortó la distancia que lo separaba de su prometida y la besó; siendo correspondido inmediatamente.

-No arriesgaría mi vida por él ni en un millón de años. -Gruñó el hijo de Cruella en voz baja mientras tomaba la mano de la chica de cabello azul para darle ánimos, ella dejó que una lágrima descendiera por su mejilla cuando vio aquel beso. - ¿Código Evie? -Murmuró a su pandilla.

-Código Evie. -Repitieron la descendiente de Maléfica y Jay, comprendiéndose instantáneamente, pues odiaban ver sufrir a su mejor amiga.

Y así los cuatro se voltearon para retirarse de la celebración en silencio, sintiendo muchas ganas de cumplir con su verdadero propósito.

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La hija de Regina estaba sola en su habitación de la residencia, usando su pijama -ya que acababa de darse una larga ducha para despejar su mente-, pero tenía que reunirse con sus tres mejores amigos; quienes la estaban esperando en el cuarto de los muchachos para terminar de arreglar sus asuntos.

La villana suspiró hondo cuando se miró en el espejo de su tocador, alguien golpeó la puerta de su habitación y bufó, pues Jay, Mal y Carlos habían estado mandándole mensajes a su celular durante quince minutos para que se apresurara.

Se incorporó de su asiento, pensando en que los tres habían venido a buscarla, por eso abrió la puerta inmediatamente.

- ¡Ya les dije que si recibo un solo mensaje más les voy a dar una pat...! -Se quejó, pero fue interrumpida por la persona que se encontraba frente a ella, quien le robó un beso. La villana le correspondió por impulso pero al darse cuenta de lo que estaba haciendo, se separó. - ¿Es costumbre para ti besar a las chicas que rescatas?

-Entiendo que merezco varios insultos pero honestamente preferiría que te desquites conmigo en la cama. -Admitió Rosie, quien aún seguía usando el vestido que le había diseñado la princesa malvada, pues acababa de llegar del Cotillón. -No, pero después de haber soportado al hipócrita de Ben durante toda la noche, solo quiero pasar el resto de la noche contigo.

La chica de cabello azul no necesitó más explicaciones antes de unir sus labios con los de la chica de Costa Luna y meterla dentro de su habitación, con un rápido movimiento de sus dedos cerró la puerta con magia mientras llevaba a la futura reina hacia su cama.

-Sabía que tarde o temprano, regresarías a mí. -Admitió Evie, colocando a su chica de espaldas para desabrocharle el vestido, luego se lo quitó y la empujó hacia el colchón con delicadeza; se colocó encima de ella mientras la observaba con deseo. -Te dije que serías mí Dama de la Corte.