Akutagawa despedía a Gin en la guardería, no podía creer que su hija le cambiara por la hija del tigre. Había decidido esperar, Gin le dijo que siempre llegaban antes de que sonara la campana.

Vio a Atsushi llegar a gran velocidad como tigre y a Kyouka riendo por ello, llegaron bien a la entrada del kínder, se despidieron con un gran abrazo, besó en la frente y un juego de manos que tenían. Kyouka entró alegre; aunque Atsushi fue interceptado por Rashomon — Akutagawa

— Jinko. No vengo a pelear

— ¿entonces porque Rashomon?

— intentó de suicidio

— ¿De quien?

— tuyo. Como sea, no tengo trabajo, hablemos

— Yo si

— un gato atrapado en un árbol puede esperar; ven o matare gente a diestra y siniestra

— eres el peor

— ¿vienes o no?

— voy

Atsushi le siguió.

Llegaron hasta un restaurante infantil, allí se sentaron, pidieron té y café.

El silencio era desgarrador e incómodo — entonces...

— Mi hija es una pequeña alfa que está fascina por el olor de tu hija

— ¿Kyouka-chan?

— Si, y mi hija quiere pasar tiempo con la tuya; así que estoy dispuesto a aceptar un trato entre tu y yo sobre este asunto

— Akutagawa, primero que nada, no soy el indicado para hablar sobre Kyouka-chan

— ¿Acaso su mamá interfiere?

— Kyouka-chan es una pequeña que la agencia armada de detectives adoptó a forme mi petición. Soy el tutor legal

— ¿no es tu hija?

— biológica, no. Pero está bajo la protección de la agencia armada — mencionó — puedo tomar decisiones por ella, pero el hecho que se involucre con la port mafia debo decir que la agencia no querrá eso

Akutagawa golpeó la mesa — Escucha Jinko — respiro y se calmó. Atsushi lo noto, hasta si expresión cambio — Gin es lo más importante que tengo, quiero verla siempre feliz. Jamás fue buena haciendo amigos, ni siquiera con los miembros de la port mafia. Actualmente sólo acepta jugar con mi jefe Chuuya. — miró al albino — por favor, déjala pasar tiempo extra con Kyouka

Atsushi trago saliva, se sentía el chico más loco de Yokohama — ¿Te gustaría una pijama?

Akutagawa lo miró y sorbió su té.

Gin estaba en la sala de su casa, estaba emocionada y Akutagawa sonrió de verla así — Mami ¿cuando te quitarás la ropa de trabajo? — se quejó — quiero que Kyouka vea lo guspiiiiisimo que eres

Akutagawa sonrió sincero — Más tarde, es que Kyouka vendrá con su papi

— Tío Atsu es genial. — mencionó divertida

— ¿tanto te gusta el tío?

— Si, tío nos llevó dulces el otro día, y en las participaciones de alumnos es genial

— Si, yo no puedo asistir a eso

— Está bien, Tío Atsu lo ha hecho por ti

— ¿Que? — preguntó molesto

Justo el timbre sonaba. Akutagawa suspiró y fue a ver, si, eran la menor Kyouka en los brazos del agente albino. Abrió la puerta — mamá de Gin, buenas noches — dijo amable la chica. Atsushi también se inclinó.

Akutagawa volvió a suspirar — Pasen

— permiso — dijeron ambos entrando, Atsushi bajo a la pequeña y Gin corrió a verlos

— Tío Atsu, ¡Kyouka!

Ambas niñas se abrazaron, tomaron sus manos — Ven, te mostrare mi habitación — añadió llevándosela

Akutagawa y Atsushi se miraron — ¿Que dijiste?

— Dije que iba a salir con ella de campamento

— Bien. ¿Cenas?

— oh, unh...

— Ya lo tengo todo, solo ven

— de acuerdo.

Ambos se sentaron en la mesa, Rashomon traía los platos servidos, Atsushi le miró curioso y sonrió. Fue cuando Akutagawa recordó — No te emociones, es costumbre, Gin ama cuando hago esto

Atsushi sonrió — es que es divertido

Sirvió la comida — gracias por la comida — dijo el albino amable, la probó y sonrió — Esto es delicioso

— cuando tienes pequeños aprendes a cocinar

— Yo no se cocinar mucho, por suerte Montgomery-san me ayuda bastante en eso, aunque creo que Kyouka-Chan aún no se adapta bien

— Es probable

— Es diferente contigo, a ti si te habla

— lo mismo con Gin

— Mami, mami

— Papi, papi

Ambas niñas se detuvieron frente a la mesa, fue Gin la que decidió hablar,

— Tío Atsu, mami, necesitamos personajes

— ¿Personajes?

— Seré una bruja

— Y yo una chica mágica

— rescataremos al mundo de los demonios, mami, ¿podemos usar a Rashomon?

— Será el chico malo

— el Villano

— pero necesitamos asistentes, mami, ¿puedes ser una chica mágica como Kyouka?

El azabache se sonrojó — ¿yo porque?

— las chicas mágicas siempre vienen en dos — contesto Kyouka seria

— buen punto

— Tío Atsu, tú serías un guerrero con su espada — dijo Gin emocionada

Atsushi sonrió — de acuerdo, debo sacar la espada de una piedra mágica primero

— ¡SI! — Gritaron ambas emocionadas

— ¿conoces sus juegos? — preguntó Akutagawa

— No, simplemente... pensé que debía decirlo ¿no le lees cuentos de hadas?

— no muchos, le leo sobre otras cosas

Atsushi sonrió — Quizá un poco de fantasía les vendría bien a ustedes dos

— Tío, apresúrate, ve por tu arma — dijo Gin

— Oh, denme un segundo, debo terminar la comida sanadora de Akutagawa para sanar por completo

— ¡Nosotras también! — gritaron ambas sorprendiendo a Akutagawa. Se le era difícil si no que imposible hacer a Gin cenar

— bien, entonces comamos — dijo Atsushi tomando a ambas niñas y sentándolas

Akutagawa les sirvió sus platos y ambas comenzaron a comer. El azabache miró al albino, este simplemente les sonreía y comía con ellas entre risas.

Había algo en su cuero, un cosquilleo, quizá su rostro se sentía agotado pero quizá y eso era una enorme sonrisa

En cuanto terminaron de comer los juegos comenzaron, Akutagawa jamás había jugado así con su hija pero su hija jugaba naturalmente con Atsushi. Tanto que llegaron a tirarlo y subirse a su estómago para aplastarlo entre ambas niñas. Aquello divirtió al mafioso.

Un rato después, los mayores llevaron a las niñas a tomar un baño. Akutagawa las acompañó mientras Atsushi esperó en la sala, no tardaron ni siquiera un minutos, y los tres miraron al agente — Tío

— papi, báñanos

— ah, pero... — Atsushi miró a Akutagawa

— dicen que quieren un baño largo — mencionó molesto

— ¿puedo? — preguntó el albino,

— Si, igual ya están limpias, solo es el juego

— okis

Atsushi entró al baño con las niñas, Akutagawa fue a su habitación, solo llevaba una bata de baño. Rápidamente se puso un pantalón holgado deportivo y una sudadera. Fue al baño encontrando a su hija riendo con un sombrero de espuma. Mientras el albino estaba en el suelo empapado — aaay niñas — dijo preocupado el albino

— Papi no te preocupes

— nosotras te daremos vestidos

Atsushi sonrió — seguro que me veré muy bien

Después de juguetear en la bañera, ambas niñas ya cansadas fueron llevadas por Rashomon a la habitación de la menor. Allí se vistieron. Atsushi y Ryunosuke cepillaron sus cabellos mientras jugaban aplaudiendo.

Después de ello, Atsushi se sentó a leerles un cuento de fantasía. Las dos estaban muy felices aún así, el cansancio ganó y ambas se durmieron.

Akutagawa esperaba al menor en la sala — están dormidas

— Bien, gracias

— me iré a casa, regreso mañana temprano

— de acuerdo, buenas noches

— buenas noches.

Atsushi salió de la casa, seguía algo mojado, Akutagawa se asomó por la ventana — Se siente raro si se va — mencionó el mayor viéndolo irse.

Fue a su habitación, se acomodó en su cama y suspiró — ¿Que debo hacer con estas niñas? Quiero que Gin sea feliz... Pero... Detesto demasiado esto...

Sus ojos se cerraron, falta mucho más por esperar

A la mañana siguiente, las niñas despertaron, Gin le mostró el camino a Kyouka y fueron a subirse a la cama de Akutagawa,— mami sigue durmiendo

— Yo despierto a papi saltando

— sáltemos

Ambas niñas comenzaron a saltar en la cama despertando de inmediato a Akutagawa y usando a Rashomon para sostenerlas — niñas, buenos días

— buenos días — respondieron ambas

— Eso que hicieron es peligroso

— pero Kyouka-chan lo hace todo el tiempo con tío Atsu

— si, no es peligroso

Akutagawa estaba molesto pero no dijo más.

Ambas niñas salieron a buscar al albino, claro, no estaba. Kyouka miró a Akutagawa, — tio, ¿y mi papi?

— vendrá pronto — mencionó. Kyouka apretó su peluche, era un conejito — ¿sucede algo?

Los ojos de Kyouka se humedecían — Quiero ver a Atsushi — pidió

— Solo espera un poco

Justo pudo ver cómo salía de aquella pequeña, un espectro con espada, se sorprendió. El timbre también sonó.

Akutagawa cubrió a Gin. — ¡Atsushi! — gritó Kyouka.

Abrió la puerta sin preguntar, era Atsushi con una cara preocupada — Yasha Shirayuki — dijo el albino preocupado. Trago saliva — Kyouka-chan, estoy aquí, aquí, así que pídele a Yasha que se vaya — pidió.

Akutagawa se quedó aferrado a Gin, jamás la pondría en peligro y parecía que el menor estaba logrando algo.

Atsushi rápidamente comenzó a acercarse, aunque lento, fue seguro de lo que hacía, Kyouka lo vio y por fin sonrió haciendo al demonio de nieve desaparecer. Solo en ese momento Atsushi pudo suspirar tranquilo. — perdón, traje un poco de pan — mencionó mostrando la bolsa.

Kyouka salto sobre el menor para abrazarlo — no me abandones

— Jamás te abandonaría Kyouka-chan

Atsushi miró al mayor, se inclinó de ello — Discúlpame Akutagawa, no era nuestra intención esto

— Explica, luego te disculpas

— Claro.

— ¡Kyouka-chan! — gritó Gin para abrazarla — estas bien Kyouka-chan

— Estoy bien, perdóname Gin-chan

Ambas se sonrieron, pero claro, Atsushi estaba lejos de estar bien con Akutagawa.

...

Solo para recordarles que es un omegaverse, Akutagawa es un omega dominante y Atsushi un alfa "normal". Después sabrán por qué esta entre comillas.

¡Gracias por leer!