Nada.
Nada admirable he de decir,
sobre los extraños sucesos,
que a menudo me suelen surgir.
No hay nada que describir,
nada para imaginar,
usar o vender.
Nada para ofertar,
amar o comer.
Nada con lo que soñar,
nadar o cocinar.
Nada que te pueda abrazar,
besar o insultar.
Nada extraordinario.
Nada para recordar.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top