Escena 2

Los chicos se encuentran en un día común en fin de semana en el centro de su ciudad León Guanajuato, mientras estaban sentados como siempre en plaza expiatorio a Alejandro se le ocurrió una idea.

—Oye, hace mucho calor, ¿Vamos por un... helado? Bueno no, de esos que...- hace referencias con sus manos para poder recordar el nombre del postre - rayos, ese que hace "shic shic"

Diana ríe pero le ayuda con su enorme duda

—Un raspado o troll creo le dicen

— Ándale ese, vamos por uno, con este calor hasta mi memoria se derrite

—No es el calor tu así eres de olvidadizo - ríe

—¡Oye!, pero tienes razón - agacha el rostro un tanto desconsolado

—Bueno ¡ya vamos! - Diana lo tomó del brazo, Alejandro levantó su rostro con una gran sonrisa y unos ojos brillantes

Mientras caminaban, frente a ellos alguien que no era muy grato para su vida, venía con sus amigos, los cuales tampoco les caían bien. Pasaron unos segundos entre miradas al suelo, Alejandro y Diana mirándose para intentar disimular su desagrado y un silencio incómodo, pero después de eso aún tenían un objetivo, un shic shic , aunque Alejandro de un segundo incómodo paso a un momento de bestia domadora, ya que frente a él venía un chico, no tan atractivo pero con buen estilo, lo cual le llamaba mucho la atención a Alejandro, le dio un codazo a Diana para que mirara al frente y le diera su opinión.

Diana voltio a verlo pero algo andaba mal.

—Eh...Ale - Alejandro sólo miro pasar al chico sin decir nada pero no sin analizarlo con la mirada

—Pues creo que solo me gustó su gorro, ya que de cerca no se ve tan bien - voltio a ver a Diana quien estaba con una cara entre incomodidad y risa -¿Qué?

Diana soltó una pequeña risa nerviosa

—¿¡Qué!?- exclamó Alejandro por una respuesta

—Ese... Es mi ex - Mencionó Diana con una sonrisa tierna y con media carcajada atorada en la garganta

Alejandro sorprendido y un tanto sonrojado por lo tonto de la situación mencionó

—Si efectivamente este calor derrite mi mente, ya vamos por ese... - olvido el nombre otra vez- Bueno lo que sea, es mas vamos por su corazón, a de ser más frío que esta weá

Ambos soltaron una carcajada a tan inusual momento, pero después lograron disfrutar de su corazón en forma de raspado de mazapán y de limón.

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Para los que mencionaron sobre si era un libro autobiográfico de la vida entre Misaki (Diana) y Alessandro (Alejandro) sí, es un libro de nuestras pequeñas choco aventuras.

Espero les guste leer un poco de lo que pasa en nuestra vida.