La noche de las almas.

Calles coloridas con la sangre derramada, una ciudad descarnada, una brisa maldita, ¿quien le hizo eso a tu carita? ¿Por quien fuiste asesinada? Vengaré tu muerte injusta con un ataque a mano armada.
Vuelve a tu descanso, elévate al infinito, que todo ya está escrito, que a paso firme yo avanzo, sin miedos ni vacilaciones, sin permiso ni justificaciones, encontraré al maldito culpable y mi mano será estable cuando lance mi disparo.

En cada esquina un espectro, caminan lento buscando su destino, no encuentran su camino, están desorientados, de su descanso eterno fueron despertados, explicaciones yo no encuentro.
Mi sed de venganza aumenta con pasión, es tanto mi fervor por devolverlos a los campos de flores, ya no laten sus corazones y han perdido la razón, los sacaron de sus cajones, los privaron del perdón.

Niños salieron a jugar, en la noche caliente de octubre, y no hablo de la costumbre de pedir dulces o hacer travesuras, están en otro plano y no encuentro a quien conjura, esto es una locura ¿por que no los dejan descansar?
Y veo al hombre del sombrero, pantalón de tela y chaqueta de cuero, hablando en lenguas muertas, abriendo las puertas para que salgan los muertos, apunto el revolver y rezo un padre nuestro, la bala lo atraviesa todo ya está hecho, se fue sin darse cuenta, sin dolor y en calma, se cierra el cementerio, las criptas ya están en calma, ya es noviembre, cayó la madrugada, ahora soy el justiciero de la noche de las almas. 

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top