XXXIII
Una vez que Izuku guardó los billetes mal hechos de Yumina, saludó Shizuka, quien bajaba del segundo piso.
Oh, Izuku, que bueno que llegas -saludó la mujer- Yumina-chan, ¿por qué estás vestida así?
Sálvame de esta, onii-chan -susurró Yumina-
Al escuchar el susurro de su pequeña hermana, Izuku sonrió.
Le dije que la llevaría a comer unos helados y se vistió así -le respondió a Shizuka- Creo que la rareza de Nejire es contagiosa
Shizuka miró a Yumina, quien rápidamente empezó a asentir con la cabeza.
Ya veo... Bueno, como vas a salir, ¿puedes comprarme algunas cosas? -preguntó Shizuka- Hoy haré Katsudon
Claro -respondió alegremente-
Una vez que Shizuka le entregó la lista, Izuku salió con Yumina, quien seguía con su disfraz de juez.
No era necesario traer el mazo, ¿sabes? -dijo Izuku mientras caminaba con Yumina-
Tenía que venir con el disfraz completo... Me alegro de que hayas cumplido con lo acordado -respondió Yumina-
S-sí... Pero por lo menos te hubieras quitado el bigote falso -habló el peliverde-
Esto también es parte del disfraz, onii-chan -contestó- Apresúrate que los helados se van a acabar... Aunque quizás pueda usar mi quirk para ir más rápido
Sabes muy bien que está prohibido el uso de quirks -dijo Izuku, quien se sentía raro al decir eso, ya que el usaba su quirk cuando sea, donde sea y con quién sea-
Yumina solo hizo un puchero para después seguir con su camino.
Mientras ellos continuaban caminando, las personas se le quedaron viendo a Yumina, pues le parecía raro ver a una niña vestida de jueza con un bigote falso mientras llevaba un mazo.
Todos te están mirando, onii-chan -dijo Yumina-
En realidad, te están mirando a ti, después de todo, no es común ver a una niña de 5 años vestida de jueza -comentó Izuku para después suspirar-
Pero la semana pasada hubo varios niños que estaban disfrazados y a las personas no le parecía extraño -dijo Yumina-
Eso era porque estaban en una actuación -le respondió Izuku-
Al mismo tiempo que ambos hablaban, al otro lado de la calle caminaban tres chicas que se detuvieron al ver a Yumina.
Oye, mira a esa niña -dijo una de las chicas- Se ve tan linda con ese disfraz
S-sí -respondió tímidamente otra chica, quien se sonrojó al ver a Izuku-
¿Te sucede algo, Megumi-chan? -preguntó la primera chica al notar el nerviosismo de su amiga-
N-no es nada... Solo que ese chico fue el que me salvó hace algunas semanas, p-pero no tuve oportunidad de agradecerle -respondió Megumi avergonzada-
¿Hablas de Nakahara Izuku? -preguntó la tercera chica, quien era una peliverde-
¿Lo conoces Aiko-chan? -preguntó la primera chica-
Pues, digamos que es alguien "famoso" en algunos lugares... Además, él fue el chico problemático de la estación de tren -relató Aiko- ¿Acaso no lo recuerdas, Suzu-chan?
Lo había olvidado -respondió Suzu- A todo esto, ¿cómo fue que te salvó?
Sucedió después de salir del club... -comenzó a relatar-
[...]
/Flashback/
Eran aproximadamente las 7 de la noche. Una chica de secundaria iba caminando por una calle por donde pasaban pocas personas.
Esa chica, de nombre Amano Megumi, acababa de salir de la secundaria a esa hora debido a su club.
Lamentablemente no tenía quien la acompañara, puesto que sus amigas habían salido más temprano.
Con un poco de temor, ella continuaba su camino, hasta que fue detenido por dos sujetos raros.
Hola, ¿a dónde vas, hermosa? -preguntó un hombre obeso-
Si quieres, podemos acompañarte -dijo otro sujeto- O si gustas, podríamos ir a divertirnos
Megumi quería decir que no, pero sus palabras no salían debido al miedo. Y lo peor era que no había ni una sola persona al cual le podía pedir ayuda.
Los hombres poco a poco se acercaban a Megumi, quien no podía huir porque tenía las piernas temblando.
Vamos, no te haremos daño -dijo el hombre obeso mientras se lamía los labios-
Cuando Megumi estaba a punto de gritar, pudo escuchar la voz de un chico que se iba acercando.
Tsk. Maldita Mei. Le dije que su invento iba a explotar -se quejó Izuku mientras se acomodaba el cabello debido a que se formó un afro por la explosión-
Al ver esto, Megumi le iba a pedir ayuda, pero ambos hombres se le adelantaron.
Justo cuando Izuku pasó al costado de ellos, decidieron actuar.
Oye mocoso, piérdete -dijo el hombre gordo tratando de empujar a Izuku-
A pesar de que el hombre lo empujaba con todas sus fuerzas, Izuku no se movió ni un solo milímetro.
Viejo, ¿qué demonios haces? -preguntó Izuku un poco enojado-
Quiero que te largues -dijo el obeso-
¿Por qué nunca puedo estar tranquilo un solo día? -pensó Izuku-
El peliverde agarró la mano del hombre obeso que estaba en su hombro y lo empezó a apretar.
Mientras el obeso gritaba debido al dolor, el otro hombre fue hasta donde estaban ambos, pero se cayó debido a que Izuku le puso el pie.
Luego de mirar a su alrededor y ver a la chica con miedo y temblando, comprendió la situación.
Me dan asco -habló con una voz sería-
Justo cuando dijo eso, Izuku apretó la mano del obeso con fuerza hasta que se rompió, mientras pisaba la cara del otro hombre.
Será mejor que vayas a casa -dijo Izuku a Megumi- Debes tener más cuidado para no encontrarte con estos tipos de bastardos
Sin decir nada, Megumi se fue corriendo mientras escuchaba los gritos de dolor de ambos hombres.
/Fin Flashback/
[...]
... Luego de eso, vi en las noticias que esos hombres terminaron colgados en un poste, en ropa interior, con las caras dibujadas y un cartel que decía: "Soy puto" y otras cosas más que me avergüenzan decir -terminó de contar Megumi-
Y-ya veo respondió nerviosamente Aiko- C-creo que lo mejor sería seguir nuestro camino, ¿verdad?... ¿Eh? ¿Suzu-chan?
Antes de que las dos se dieran cuenta, Suzuki había cruzada al otro lado de la calle para hablar con Yumina e Izuku.
¡Hola! -saludó Suzu alegremente-
Suzu se había puesto delante de Izuku y Yumina.
Hola -correspondió al saludo Yumina, quien se aseguraba que su bigote no se cayera-
¿En qué te podemos ayudar? -preguntó Izuku-
Esto parecerá un poco extraño, pero, me preguntaba si me podía tomar una foto con la pequeña -contestó Suzu mientras sonreía- Por cierto, me llamo Suzu
Una foto, ¿eh?... Está bien -respondió alegremente- Mi nombre es Yumina y él es mi onii-chan, Izuku
Genial, gracias Yumina-chan... ¿Puedes tomarnos la foto, Izuku-san? -preguntó mientas le entregaba su teléfono-
Izuku recibió el teléfono para tomarle una foto rápido, con la esperanza que se fuera lo más pronto posible.
Bien, sonrían... Listo -dijo Izuku mientras le entregaba el teléfono a Suzu-
Oye, Izuku-san, me preguntaba ya sabes, quizás, tú y yo... -trató de hablar Suzu-
Suzu-chan, ya no les quites mas tiempo -interrumpió Aiko- De seguro tienen cosas que hacer
Justo antes de que Suzu pudiera terminar de hablar con Izuku, fue interrumpida por Aiko y Megumi, quienes se habían acercado hasta ellos. Izuku solo suspiró, pues él quería irse de ese lugar.
Por cierto, ellas son Megumi- chan y Aiko-chan -las presentó Suzu- Y ellos son Yumina-chan e Izuku-san
¡Hola! -saludó alegremente Yumina-
M-mucho gusto, soy Amano Megumi -saludó nerviosamente mientras miraba a Izuku-
Soy Midoriya Aiko, un placer -se presentó-
Justo en el momento que miró a los ojos de Izuku, Aiko sintió un pequeño dolor en el corazón... No sabía por qué, pero de alguna manera u otra, esos ojos heterocromáticos la pusieron nerviosa.
¿Pasa algo con onii-chan? -le preguntó Yumina a Megumi- Desde hace rato no dejas de mirarlo... Muy sospechoso
L-lo siento. E-es que... Izuku-san, gracias por salvarme de esos dos hombres hace unas semanas -habló Megumi mientras agachaba la cabeza-
No te preocupes, deberías tener cuidado por donde andas para que no te vuelva a ocurrir lo mismo -respondió Izuku-
Onii-chan, ya debemos irnos -dijo Yumina mientras jalaba la mano de Izuku- El helado se va a acabar
Ok... Nos vemos -se despidió Izuku tratando de alejarse-
¡Espera! -gritó Suzu- Quizás deberíamos intercambiar números... Ya sabes, para enviarte la foto que nos tomaste
Lo siento, pero no tengo teléfono -respondió Izuku-
Justo en ese momento, comenzó a sonar el teléfono de Izuku.
Adiós -fue lo último que le dijo antes de irse con Yumina y contestar su teléfono- Aló, okaa-san...
[...]
Cuando ambos llegaron a la tienda de helados, Yumina rápidamente se dirigió para elegir su sabor preferido.
A mí me da este, este y este –le dijo Yumina a la vendedora mientras se limpiaba la saliva que estaba cayendo de su boca-
Me da el de mora -ordenó Izuku, quien estaba sacando dinero de su billetera, pero fue detenido por Yumina-
No te preocupes, onii-chan. Yo pagaré todo -dijo Yumina mientras le entregaba unos billetes a la vendedora-
-Al recibir los billetes, la encargada sonrió- Ojou-chan, nosotros no aceptamos los Yuminadólares
¡¿QUÉ?! -gritó Yumina al sentir que toda su vida había sido una mentira-
Disculpe a mi hermanita... Aquí tiene -dijo Izuku mientras entregaba a la vendedora billetes de verdad-
Luego que les entregaron los helados, ambos salieron del lugar y caminaron hacia la tienda para comprar las cosas que Shizuka había pedido.
Ne, onii-chan. ¿Qué haces con los Yuminadólares que te doy? -preguntó Yumina-
Los guardo en un lugar especial, ya que son muy importantes para mí -respondió Izuku-
Yumina sonrió y siguió comiendo su helado, hasta que...
¡Mira lo que has hecho mocosa! -gritó un sujeto con aspecto de maleante-
Por un pequeño descuido, Yumina había chocado con un sujeto, ocasionando que lo manchara con el helado.
L-lo siento, no fue mi intención -se disculpó Yumina mientras trataba de aguantar las lágrimas-
¿Crees que un lo siento va a solucionar las cosas? -dijo otro hombre que acompañaba al sujeto-
En total eran 4 hombres con aspecto de maleante.
Oye viejo, ya te dijo que lo sentía... Es solo una niña -habló Izuku-
Sabes, como su hermano mayor, debes ser responsable de los actos de tu hermanita -respondió uno de los sujetos-
Espero que estés listo para la paliza de tu vida -dijo otro sujeto mientras que los otros tres tronaban sus dedos-
Esos sujetos estaban a punto de golpear a Izuku, quien estaba con una expresión aburrida, hasta que...
JAJAJAJA
Yumina comenzó a reír fuertemente.
JAJAJAJA... ¿Ustedes se quieren enfrentar a onii-chan? -preguntó Yumina mientras reía- Un simple grupo de babosos y debiluchos quiere luchar contra onii-chan... JAJAJA... Es lo más gracioso que he escuchado en todo el día
Tan escandalosa era la risa, que las personas a su alrededor comenzaron a mirar hacia donde se encontraba ellos. En cuanto a los matones, ellos estaban con la boca abierta debido al repentino cambio de actitud de Yumina... Incluso Izuku estaba sorprendido.
Al notar que habían llamado la atención de las personas, los matones decidieron irse, mientras que Yumina no paraba de reír.
Para Yumina, no había nadie mas poderoso que Izuku... Ella estaba 100% segura que ni siquiera All Might podía ganarle a su asombroso e increíblemente fuerte hermano mayor... Para ella, Nakahara Izuku es la persona mas poderosa del universo y nadie la podía hacer cambiar de idea.
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