Narrador omnisciente:

Ciudad nueva York se encontraba tranquila en los últimos meses, gracias a la nueva brigada donde estaban los cuatro hermanos. Rafael, abril, _________ y Donni habían salido un rato por falta de misiones, los que se encontraban en misiones no pudieron acompañarlos.

— Acompañe por una blusa a la tienda. — le dijo abril a la castaña tomandola del brazo

— Claro. — respondió ________, quien se apresuró dejando a los dos chicos solos

— Ni modo, nos vamos a tener que ir mientras a otro lado. — dijo Donni — sugiero la tienda de música.

— Primera vez que tienes una buena idea fuera de tu gran cerebrito. — dijo Rafael burlón — y después vallamos a la tienda de deportes, debo ir por un nuevo casco, y no te preocupes, nosotros podemos recorrer todo el centro comercial y ellas ni la mitad de su tienda.

Donni le miro extrañado, caminaron hasta la tienda y al entrar, miraban tranquilamente los últimos discos en tendencia popular.

— ¿Estarán bien, Rafa?. — preguntó inquieto Donni colocando la canasta en su brazo

— Dudo que algo les pase a pleno día, tranquilo ambas podrán resolver cualquier situación. — dijo — callate y pasáme uno de los que tienes a tu derecha.

Los pasillos se llenaban de mujeres de entre sus veinte y treinta años, comprando miles de productos de belleza, zapatos y ropa bonita de tonos rosas y cafés. El color favorito de abril era el cerezo, que contaba como un tipo de rosa y esperaba encontrar algo bonito para su cumpleaños, que sería en unos días.
La castaña miraba a la pelirroja muy atenta a todas las prendas, curiosa y maravillada por todos los tonos y formas, ________ sonrió por lo bajo y miro atenta a su amiga.

— Abril, dejame comprarte yo la blusa. — sugirió — y la usas para ese día.

— Claro, sirve que la escojo yo. — sonrió y ella asintió — pero también quería hablar contigo sobre algo.

— Si, ¿sobre qué?. — preguntó

Ambas fueron hasta los vestidores donde abril ya había escogido la blusa que usaría y mientras se la probaba frente al gran espejo lleno de luces sonrió así misma y después miró a la castaña que estaba detrás de ella

— ¿A ti, te gusta Leo no es así?. — su gran pregunta tomo por sorpresa a la castaña

Quien la miro con los ojos grandes como platos, pero después se cuestiono así misma, Leonardo era un joven muy parecido y siempre fue muy amable y protector con ella, pero jamás paso por su mente si eso era amor, siempre creyó que era una amistad y que Leonardo tampoco la miraba como algo mas.

— Abril, es una excelente pregunta. — respondió _________ — pero jamas lo pensé, creó que a Leo le gustan mas otro tipo de chicas.

— ¿Cómo Karai?. — ella asintió — tienes razón, pero eso es porque es la prima mujer con la Leo a estado, ellos no conocieron a su madre así que era algo normal.

— Si, eso mismo yo pienso. — dijo recargándose en el asiento — es difícil, aun así yo no soy para Leo, estará mejor con alguien mas.

La castaña reía nerviosa, y después miro su celular donde recibió un mensaje de Rafa diciendo que salieran que ellos ya estaban a fuera.
Ambas salieron, y se encontraron con ambos chicos y algunas bolsas.
Donni y Abril caminaban en frente mientras Rafael y ________ iban atrás, todos platicaban tranquilamente.

— Ten. — dijo Rafa desviando la mirada hacia arriba mientras le daba una paleta en forma de nube color azul.

— Gracias. — dijo amable tomando la paleta — te compraré algo mañana

— No es necesario, dejalo así. — respondió quitándole las bolsas para llevarlas con el — vamos, Abril y Donni nos esperan.

Después de eso, cada uno se regreso a su respectiva casa y Abril iría junto a Donni a la casa de ellos. ________ se negó a que la acompañaran y que estaría bien.
Ese mismo día en la noche, en la sala principal de los Hamato, una discusión se llevaba acabo por los cuatro y la pelirroja, tanto que incluso Splinter tuvo que callar para escuchar como sus hijos y la amiga más cercana de la familia discutían un tema de gran importancia y muy delicado a la vez.

— ¡De ningún modo, Abril. — dijo Rafael molesto — no nos vamos a arriesgar!.

— No le hables así, Rafael. — le defendió Donni — no es manera, basta.

— También es amiga suya y mía, se que no estan en obligación de contarle la verdad. — dijo Abril — pero consideró que debe saberlo, antes de que se entere por otras personas.

— Nos arriesgaríamos a perderla. — dijo Mikey preocupado — y eso no lo podemos permitir.

— Donni no podrá hacerles las dosis por siempre, ¿lo han visto si quiera?. — cuestionó molesta — por supuesto que no, el siempre esta atado al laboratorio día y noche mas sus misiones, ¿y que si ya no pueda hacerlas?.

— ¡Ella nos verá por lo que somos. — la voz de Rafa se escuchó por toda la casa quien se levantó de golpe del suelo — y se alejara de nosotros, nos odiara o nos tendrá miedo, y no pienso tener que verla a escondidas sin que vea mi rostro!.

— ¡Yo los acepte, seguro ella también lo hará!. — de igual forma abril levantó la voz

El único que no había hablado en toda la discusión al fin se había levantado, y llamo la atención de todos, quería su atención al máximo para que no se cometieran los mismo errores, Splinter le miro serio, pero sabia que el líder de sus hijos podía manejar esta situación con calma, paciencia y madurez.

— Abril. — habló Leonardo — tu caso fue diferente, tu nos viste como éramos desde un principio y tu padre había sido secuestrado por el Crank, en el caso de ________ ella seguro no lo entenderá. No lo sabemos.

Abril les miro a todos incrédula e incluso se burlo de ellos y de ella misma, se sentó de nuevo frente a cada uno de ellos, excepto por Rafael quien estaba parado a un lado de su padre hablando entre dientes no se que tantas cosas.
El ambiente se volvió pesado e incómodo para todos, la situación era complicada y no sabían que hacer, tarde o temprano _________ se enteraría y sería tal vez demasiado tarde.

— Solo digo ... — susurro la pelirroja — que debemos decirle la verdad sobre ustedes, _________ los ama tanto como yo y es por eso que esta en este trabajo junto a nosotros, se arriesga con cada día que pasa y solo contamos tiempo para que el clan del pie ataque de nuevo.

Abril sabia que tanto ella como la castaña eran humanas, eran mas frágiles que los hermanos y que no siempre se podía proteger a todo el mundo. Splinter respiro de manera pesada y dejo su pipa a un lado de su almohada, levantándose con la ayuda de su bastón miro a sus hijos y habló tranquilo.

— Creo yo. — habló el mayor — que ambos lado tienen razón, ya dieron sus puntos de vista, no de la mejor forma pero ya lo hicieron, es obvio que todos tenemos miedo, justo ahora no sabemos que pasara en un futuro, sólo ruego para que tomen sus decisiones correctamente. 

Un grito ahogado resonó en la habitación a la vez que un jarrón rompió al tocar el suelo y el cuerpo de la chica cayo sobre este, asustada trato de levantarse en vano, y solo sus manos lograron cortarse con los pedazos del vidrio.
La chica sonrió de lado mientras la golpeaba con fuerza en el rostro, causando que la castaña se estrellara contra uno de los muebles cerca de la puerta, Karai se acercó y la tomo del brazo para levantarla pero esta se negó apartándola débilmente.

— Karai, vas a matarla si continuas golpeándola así. — dijo Ian — la misión no es esa, tu padre nos matara.

— Esta bien, es que no me gusto la forma en que me miro. — dijo la fémina — que hay de la madre, ¿está en casa?.

— No señora. — anunció un hombre desde desde el otro lado de la habitación — nada.

— Lástima. — dijo dejándola en el suelo — ¿Tus amigos mutantes dónde estan?

La castaña levantó la cara y le miro confundida, no sabía de lo que estaban hablando y mucho menos del porque habían irrumpido en su casa a altas horas de la noche, o con que motivo si ella no tenia información ni nada que darles.

— No se de que hablas. — hablo — no lo se.

— ¡Si sabes, no finjas. — grito Ian — destructor sabe que los hermanos con los que siempre estas son los fenómenos!.

— ¿Mutantes, fenómenos?. — preguntó confusa

Karai al ser una chica de todo menos paciente y amable la tomo del cabello y la levantó, arrastrándola hasta la sala donde la dejo sobre uno de los sillones y comenzó a hablar.

— Como son tus amigos supuse que te lo dirían. — dijo Karai — ahora puedo ver que tanta confianza te tienen.

Karai sonrió asiendo señas con su dedo índice, el hombre que había hablado antes se acercó a ella entregándole un pequeño frasco de cristal con un líquido verdoso y azulado muy brillante, por su condición parecía mas plasma que agua, eso pensó _________.
La fémina sonrió y le mostró el frasco a la castaña muy cerca de su rostro.

— Esto es mutagéno. — dijo Karai — es una sustancia única y extraña que no viene de este mundo, muy peligrosa apenas entre en contacto con tu piel.

Ian le miro extraño, no pensara en usar el mutagéno en ella, eso sería un grave error y destructor fácilmente la mataría y a el por cómplice, estaba a punto de interrumpirla pero la castaña habló en susurros.

— ¿Mutagéno?. — preguntó — de otro mundo.

— Este es especial, convierte a cualquiera en un mutante y después lo convertirá en un humano con alguna patología extraña. — sonrió mirando detenidamente la habitación — tus amigos mutantes han estado jugando con muchas sustancias, como estas.

Camino en círculos en toda la habitación, acerco una silla a ella y se sentó apoyando ambos brazos en el respaldo de esta misma, llevaba su traje obscuro completo pero ahora tenia el cabello mas largo, atado a una coleta alta, y como siempre su delineo de ojos color carmesí.
Estaba apuntó de dar la explicación que le pidió su padre, omitiendo algunas cosas claro esta, _________ debía estar de su lado si querían llegar a las tortugas para acabar con ellas, y ahora que sabían que ninguno de los hermanos le habían dicho nada el plan salio incluso mejor de lo que habían planeado.

— Karai. — Ian coloco una mano en su hombro — sabes que contarle

— Veras, _________ — hablo — cada uno de nosotros tuvo contacto directo con esto, es por eso que ya no nos consideramos humanos, incluso Ian quien fue tu compañero en la escuela esta enfermo por esta cosa. Donatello, Miguel Angel, Rafael y Leonardo no son la excepción, pero si son un caso fascinante.

— Ellos eran animales antes de ser tocados por el mutagéno, y gracias a que su padre era anteriormente un humano colaboro para que después de su cura fueran sometidos por segunda vez a esta sustancia. — explicó Ian — suena ilógico todo lo que te digo, incluso yo no soy capaz de creer en mis palabras.

— Eso no es verdad. — dijo la castaña desafiando a ambos sujetos pero sin sonar agresiva, aun le dolían los golpes — ellos me lo hubieran contado, su cuento de hadas y experimentos no me lo creo ni un poco.

Karai seguía mirando la habitación con atención hasta que encontró algo estaba buscando desde hace un momento, cuando _________ no quiso creerles, se levanto de su silla y todos la miraron caminar hasta la pequeña pecera donde estaba la mascota de la castaña, Karai la saco de su casa de cristal y la llevo hasta donde estaba ella.

— Esta es muy bonita, seguro la quieres mucho. — dijo tomandola del caparazón con fuerza

— Gellert... — susurro el nombre del pequeño, molesta se abalanzó sobre Karai, pero Ian la detuvo antes con un solo brazo — ¡Sueltame!.

— No te preocupes no la matare, estoy en contra de eso. — dijo la rubia — pero te voy a mostrar, lo que no quieres creer.

Sin poder hacer nada, y ante sus ojos miro aterrada como el pequeño Gellert era sometido al mutagéno, se retorcía y hacia sonidos extraños y terroríficos, parecería que en cualquier momento moriría de tanto sufrir, incluso la habitación se ilumino a medida que los minutos pasaban y cedía ante la pronta muerta de su gran amigo.
Pero no fue así, después eso quedó aun mas sorprendida de lo que estaba mirando, de entre los restos de la sustancia surgía y se arrastraba por el suelo una figura humanoide completamente desnuda, sin poder hablar se quedo inmóvil.

— Gellert no morirá. — dijo Karai con una sonrisa sostenido a _________. Esta última había comenzado a llorar — el sigue aquí, solo con una forma distinta.

— ¿Por qué. — cuestionó — por qué hiciste eso, dime que quieres de mi?. Ya les dije que no tengo información útil para ustedes, no tengo nada.

— El problema fue que ellos no te dijeron nada, incluso después de años estas son las consecuencias.

Y de un momento a otro, uno de los espías que vigilaba fuera de la casa de la castaña había anunciado que Bebop y Rocksteady habían llegado de la última misión, y que debían ir cuanto antes, pues destructor ya los había llamado.

— Esa misión aun esta en proceso. — dijo Ian — habrá que esperar solo un poco.

— Lo que me faltaba, ahora debo lidiar con esos idiotas. — dijo Karai molesta — toma al pequeño Gellert y vámonos ya, esta chica no sabe nada, y ya me canse de ver su estúpido rostro lleno de lágrimas y sangre.

— No será la última vez. — Ian camino hasta Gellert quien se mantenía inmóvil y débil y lo cargo en su espalda

Gellert parecía un hombre joven, de largo cabello negro y piel tan clara como la porcelana.
Lo había cargado con facilidad, mientras el peso de Gellert aplastaba ligeramente sus alas, ________ miraba como todos ellos salían por su ventana haciéndola pedazos, había sido una terrible y larga noche para ella.