Capitulo 2
(Pov de Seras)
Antes de que pudiera dar un paso más al sótano, Alucard apareció delante de mí. Sus ojos ardían de furia, apretando los dientes. Y el agarró mi muñeca dolorosamente.
-Que incipiente irrespetuosa- Alucard gruñó.
-Maestro, no vas a tocarme- Le dije mirándolo directamente a sus ojos. Él solo me sonrió y se inclinó más cerca de mí para que nuestros rostros estuvieran a pocos centímetros de distancia.
-Eso es lo que piensas, querida- Alucard dijo acariciando mi pelo. Traté de alejarme, pero él sólo me jalo hacia él.
-¡Maestro! ¡Alto! ¡No!- Le grité - sabe que esto es como una violación!- Alucard simplemente se rio.
-Pero sé que anhelas mi tacto, Seras- Alucard ronroneó en mi oído -Yo sé lo que te gusta- Él dijo cuándo su mano rozó mi cintura. Escalofríos agradables pasaron por mí espalda, una sensación de hormigueo en la parte baja de mi estómago.
-Alucard... Maestro... por favor, no- Le rogué tratando de alejar su mano.
-Ahora. Cálmate - Alucard dijo acariciando mi cuello, me levantó y me llevó de vuelta al sofá. Me esforcé para liberarme de su agarre. Alucard se sentó poniéndome sobre su regazo, de espaldas a su pecho. Coloco su rodilla entre mis muslos y los separo. Chillé y luché más, su agarre alrededor de mí no me permitía escapar.
-Maestro, esto está mal- Le dije.
-Silencio, Childe- Alucard ronroneó, acariciando mi cuello, su mano levantó la falda, y luego deslizó mi ropa interior hacia abajo un poco. Su ligero toque en la ingle fue suficiente para que arquee mi espalda con un gemido. Alucard sonrió. Sus dos dedos se deslizaron frotando en mi clítoris. Mi cabeza cayó sobre su hombro mientras yo gemía. Él estaba haciendo pequeños círculos tortuosos. Traté de empujar contra él para conseguir por lo menos una mayor presión sobre el terreno, pero él sólo se rio y me eché hacia atrás.
-Por favor...- Gemí necesitando su toque. Yo separe más mis piernas, para él. Alucard ronroneó y finalmente conseguí lo que quería, Alucard frotó más fuerte y rápido en mi contra. El toque se sintió tan bien, que traté de contener los gemidos. Las pequeñas sensaciones de hormigueo pasaron por mi bajo vientre. Mi respiración estaba apagada, mi corazón se aceleraba. Mi orgasmo llego y arque mi espalda. Cerré mis ojos y me relaje cerca de mi Maestro. Él se rio y retiro sus dedos dentro mí. Sentí sus dedos húmedos en mis labios. Abrí los ojos, al ver mi eyaculación en sus dedos. Alucard deslizó sus dedos en mi boca, recorriendo a lo largo de mi lengua, que luego los sacó. Yo lo observaba cuidadosamente mientras llevaba su mano a su boca y se metió los dos dedos. Él ronroneó, y sus ojos ardieron en los míos mientras lo hacía. Alucard sonrió y sacó los dedos de su boca, arregló mi ropa interior y la falda, luego me deslice de su regazo.
-Woah- dijo Pip. Me sonrojé recordando que él estaba allí y fue testigo de todo eso. Me senté en mi lugar junto a él.
-Creo... que es mi turno- Le dije.
-¿Qué demonios está pasando aquí? Primera Alucard apareció en su traje de cuero maldito, y me manosea. A continuación los dos hablan de que pip me cogiera, y ahora Seras estaba gimiendo- Dijo Sir Integra.
-Estamos jugando un juego infantil, te interesa unirse a nosotros?- Alucard preguntó sonriendo a su ama humano. Sir Integra se encogió de hombros y se sentó entre pipa y yo.
-Está bien... Integra, ¿verdad o Desafío?- Le pregunté. Ella me miró con una sonrisa.
-¿Es en serio? Todos están sentados jugando un juego de adolescente?- Preguntó Sir Integra. –Verdad-
-¿Alguna vez has pensado en acostarte con Alucard o pipa?- Le pregunté. Sus ojos se agrandaron y luego se veía absolutamente furiosa.
-Qué demonios ¿qué clase de juego están jugando?- Preguntó Sir Integra.
-Más o menos un Verdad o Desafío sexual- Le dije encogiéndome de hombros. -Es horrible- Le susurré.
-No te parecía importarte hace un momento, mi querido Seras- Alucard ronroneó. Me sonroje y aparte mi mirada de él.
-¿Cómo pudiste dejar que te trate de esa manera, Chica Policía?- Preguntó Sir Integra.
-Hey, yo les dije que se fueran a la mierda, mientras que me levantaba, y me retire...- le dije.
-Esa es mi chica- Sir Integra dijo con una sonrisa.
-Pero entonces, Alucard se enfureció y me ha tocado de manera inapropiada- Le dije.
-Mierda- Dijo Sir Integra.
-Entonces, ¿quieres jugar?- Preguntó Pip.
-Está bien- Dijo Sir Integra.
-Por favor, responda a la pregunta- Le dije -¿Alguna vez has pensado en acostarte con Alucard o pip?-
-Alucard... no tengo ningún interés en Pip ... sin ofender- Sir Integra dijo sacando un cigarro y encenderlo.
-Bueno, eso fue sencillo- Dijo Pip.
-Oh!, mi Señora ama a su siervo- Dijo Alucard.
-Cállate- Sir Integra dijo después de soltar una largo calada de su cigarrillo.
-Seras?- Preguntó Alucard.
-Desafío- Susurré.
-Te reto a besar a Integra- Alucard dijo sonriendo.
Pip se rió, Sir Integra y yo nos quedamos inmóviles. Luego me miró con ojos azules fríos. Escalofríos pasaron por mi espina dorsal.
-Yo no voy a besar a Sir integral- Le dije.
-¿Por qué no? Ya permitiste que te manosee- Alucard dijo. Yo lo fulmine con la mirada por mencionarlo. Sir Integra y yo nos quedamos en nuestros lugares, negándonos a besar nonos. La sonrisa de Alucard se ensanchó -Si no lo haces, chica policía, voy a pensar que te gusta mejor mis toques. Tal vez debería cambiar el desafío...- Alucard se puso de pie, me congele de miedo, como el lentamente caminó hacia mí. Agarré el cuello de Sir Integra, la atraje hacia mí y la besé con fuerza en los labios. Oí la risita divertida de Alucard. Sir Integra abrió sus ojos de sorpresa, pero luego ella me miró con los puños apretados. Rápidamente me alejé. Ella gruñó y me limpié los labios.
-Señorita Victoria!- Sir Integra gritó, se pone roja de rabia, me mordí el labio.
-Yo no quería hacerlo!. Maestro iba a tocarme otra vez!- Dije señalando a Alucard.
-No me importa si él iba a manosearte, no deberías haber hecho eso- Sir Integra gritó y Alucard se echó a reír de nuevo.
-¿Significa esto que puedo tener sexo con mi incipiente?- Alucard preguntó y me puse roja de vergüenza.
-¡Maestro!- Grité.
-¡No!- Sir Integra dijo agitando la mano molesta por su sirviente.
-Es una pena- Alucard bromeó.
-Alucard, verdad o desafío?- Preguntó Pip.
-Desafío- Dijo Alucard.
-Te desafío a frotarte contra Integra- Dijo Pip.
-¿Cómo dices?- Sir Integra gritó, se puso roja de ira. Me encogí ante la mujer aterradora. Alucard miró enojado por el reto, sus ojos se fijaron en mí, una sonrisa maliciosa y luego apareció en su rostro. Alucard se puso de pie y se acercó a Sir Integra, que fulminó con la mirada -Alucard, no lo harás...- pero ella no termino la frase. Alucard le agarro de la mano y tiró de ella hacia arriba y en contra su pecho. Él le sonrió.
-¿Por qué?, es sólo un juego, Maestro- Alucard ronroneó. Mis ojos se ampliaron de ancho, en realidad iba a hacerlo?! Sentí la ira venir de mí, yo gruñí al humano que estaba tan cerca de mi Maestro. La sostenía en la mano posesivamente como lo hizo conmigo, un par de veces esta noche. Mis ojos se volvieron de un rojo oscuro cuando Alucard comenzó a ratificar contra ella, gruñí de nuevo, y antes de que supiera lo que estaba haciendo, yo estaba de pie junto a los dos. Saqué a Integra de los brazos de Alucard, agarré su gabardina y frote mi cabeza contra su pecho como un gatito queriendo atención. Enterré mi cara en su pecho y ronroneó feliz, entonces moví mi cabeza y miré a Sir Integra por tocar a mi Maestro. Alucard se rió de mí. Con la una mano acaricio mi pelo y con la otra la envolvió alrededor de mi cintura posesivamente, sonreí alegremente. Integra sonrió a nosotros.
-Creo que es mi turno. Alucard, verdad o Desafío?- Preguntó Sir Integra.
-Desafío- Alucard repite, que me sostiene cerca de él.
-Te desafío a que tengas sexo con Seras- Sir Integra dijo sonriendo -Los dos no pueden alejarse el uno del otro-
-SIR INTEGRA!- Grité sorprendida.
-¿Qué pasa, chica policía?- Sir Integra preguntó resoplando en su cigarro -No quieres tener sexo con su maestro pervertido?- Me mordí el labio con un gemido. Sir Integra y Pip sonrieron mientras se levantaban. Ambos salieron de la habitación. Miré detrás de ellos, mi respiración inestable. ¿Que acaba de pasar?! ¿QUÉ? Me mire a Alucard con los ojos muy abiertos. Tenía una sonrisa pecaminosa oscura en la cara que hizo que mi corazón se acelere, un rubor cubría mi rostro y trague saliva.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top