-¡¿Por qué lo hicieron?! - Grito bañada en lágrimas.

No entiendo nada de lo que sucede, o tal vez me niegue a querer entender. No puedo creer que hayan matado a un ser tan noble como el que tengo entre mis brazos.

Si actuaron por temor, no es la primera vez que lo hacen y siempre les resulta más. ¿Por qué aferrarse a lo que no funciona?

Me miran compadeciendome. Si, me duele mucho, tanto que prefiero no salir de este lugar o cometere una locura peor que la que hice al beber la pócima de Ashkore... Digo de Viktor.

-No es lo que tu crees, dejanos explicarte. - Miiko trata de acercarse a mi. No, no quiero tenertela cerca.

-¡No! - Gruño. Ella no parece inmutarse y cada vez se acerca más. Cuando casi está a punto de tocarme, me lleno de furia. Ellos nunca entienden, no comprenden. Son buenos pero no misericordiosos. Ahora entiendo el porque Viktor no quiere ser bueno con ellos, simplemente no se lo merecen.

Miiko aprieta mi hombro en forma de apoyo, no, no caeré en tus juegos. Perdoname, Miiko, no puedo confiar en ti.

Quisiera hacerlo, pero pienso en mis amigos humanos, que al final no son tan humanos. ¿Cómo actuarían si los encuentran? ¿Los considerarían una amenaza y los eliminarían sin darles la oportunidad de explicar que son faelienne? Eso no pensaba permitirlo. No quería ese futuro.

-Vamos, te explicaremos. - Trata de levantarme.

-No quiero - Susurro levemente, me siento extraña. Estoy furiosa y eso está haciendo cambios en mi cuerpo, lo sé, lo siento.

Ella hace caso omiso a mis palabras y trata de levantarme.

-Dije... ¡QUE NO QUIERO! - Grito abrazada al cuerpo de mi amigo.

Una fuerza sale de mi y empuja a Miiko hasta la pared opuesta a mi. Los chicos son movidos un poco, pero no alcanzo a lanzarlos como a Miiko.

Abro los ojos sorprendída y comienzo a temblar. No se como sucedió eso. ¿No fui yo, o si? Muerdo mi labio temerosa de lo que sucedió. Yo no hice eso, tiene que ser una mentira.

Corto mi labio debido a la fuerza con la que estoy mordiendo mi labio, unas cuantas gotas caen en el rostro del perro. Debo irme, no puedo seguir aquí.

Cuando quiero levantarme, el suelo del cuartel general comienza a tambalearse. Esta temblando. Asustada miro alrededor. Varias piedras caen a mi alrededor.

Estoy segura que han comenzado a atacar. Logró dibujar una sonrisa irónica en mi rostro. Que gracioso, eso realmente no me importa mucho ya.

Decido quedarme ahí donde estoy a esperar el resultado. Si subo, no podré evitar ayudar a favor del cuartel y eso solo hará lastimarme más.

Abrazo al perro. Como quisiera estar en tu lugar amiguito.

Escucho como algo arriba de mi se desprende y el grito desgarrador de mi amor platónico, por que eso fue. Solo un momento, solo una ilusión.

Alzó la vista, una piedra esta por caer encima de mi y 'mi chico' corre desesperado hacia mi queriendo salvarme.

No llegará, lo sé. Así que solo le sonrió. No puedo presumir que me iré feliz o tranquila, pero al menos podré descansar un poco de tanta muerte y caos.

A centímetros de quedar aplastada por la enorme piedra. Ashkore aparece y me rescata teletranportandonos del lugar. Lo último que vi, fue una cara de sorpresa dibujada en su rostro. Lo siento, te amo, pero no quiero dejar las cosas como están.

Esta situación no puede continuar así.

Cierro los ojos y al abrirlos estamos en el bosque. Más específicamente en la copa de un árbol frondoso. Desde aquí, se puede ver claramente el caos que se entra viviendo en la ciudad de Eel.

-Estupenda actuación. - Me habla con ironía pero a la vez con tristeza. - ¿Ya me crees sobre ellos? No es justa su manera de actuar.

Lo sé. ¡Joder, lo sé! ¿Pero que hay que hacer? Ver todo el revoloteo en el cuartel no me gusta. Este hermoso lugar está sufriendo estragos. Las casas que tanto trabajo les costeo construír se vienen abajo en un segundo. No puedo soportar ver eso.

Me abrazo a mis rodillas y escondo mi cara entre ellas.

-Te creo, pero paren por favor. - Han lo entre lágrimas.

-No ahora, esto solo es una prueba de lo que podemos hacer, ya después las cosas se pondrán serias. - Me tenso al pensarlo. Si esto no va con todo todavía, ya me imagino como irá cuando sea de verdad. - Tranquila, nunca haremos daño a civiles. Esa no es la idea.

-Ya. - Eso no me tranquiliza del todo pero me da un poco de alivio. Se escucha muy seguro.

Acaricio con tristeza el cuerpo del perro negro que está al lado mío. No pude protegerlo.

De repente, se mueve. Sorprendida lo observó levantarse y sacudirse. ¿Qué está pasando? No parece que acabe de resucitar. Es como si nunca hubiera fallecido.

Me observa, se acerca y se recuesta en mis piernas y le ladra a Viktor. Este se agacha a acariciarlo.

-Gracias por revivirlo. - Me dice con alegría. ¿A que se refiere?

-La sangre de los Daemon es bastante poderosa, esa fue una de las razones por las cuales decidieron darlos en sacrificio. Es capaz de hacer milagros combinada con los sentimientos de su poseedor. - Lo escucho con atención. No me sorprende, ya puedo esperar cualquier cosa ahora. Solo falta que sea inmortal y que sea la única sobreviviente del apocalipsis.

-Tu, en el instante en el que le brindaste un poco de tu sangre estabas deseando con todo tu ser que estuviera vivo ¿no?

Asiento.

-Pues, observa, haz hecho un milagro. - El perro negro duerme después de las caricias que Viktor le proporciona.

Si eso es cierto, me alegra.

Ahora solo quiero averiguar, encontrar una manera de acabar con todo el caos sin perjudicar a terceros.

Solo quiero que esta tormenta pare y la historia pase de su momento trágico.

Espero ser capaz de hacer algo para acabar con esta locura.

Hola. Cap general, osease, para todos los chicos. Ya abarca todas las rutas.

Espero les guste y dejen un lindo comentario.

Leer en modo fantasma es como agarrar una chichi/pecho /bubi/glándula mamaria e irte disimuladamente.

Los quiero, gracias por votar, seguir y leer.

Por favor, los que puedan y quieran. Dense una vuelta por mi nueva historia. Me gustaría leer sus opiniones.

Este es el link :
https://my.w.tt/HCxQ1SgMdO

Muchas gracias. Hasta pronto.