26. Control


- ¡Ese no era el trato! - Reclama con voz elevada.

-Tranquilízate, Armin. Supongo que los culpables fuimos nosotros. Nunca debimos confiar en ellos. - Alexy trato de tranquilizarlo y a la vez, hacer ver claro su enojo por la situación. Armin bastante enfurruñado, exhalo aire fuertemente.

-En eso, ellos tenían razón. Son unos incompetentes que siempre hacen mal las cosas. Por lo que creo que ha llegado el momento de tomar el control. - Con decisión, Armin, dio a conocer su resolución ante todos los presentes de manera concisa y como respuesta se oyeron varias exclamaciones de sorpresa de todos los miembros de guardia presentes en ese instante tan intenso.

-Realmente no queríamos llegar a tanto y mucho menos a esto, pero no nos dejaron otra alternativa ya que son unos buenos para nada. - Alexy apoyo a su hermano y después de revolverse el pelo despreocupadamente, decreto ante todos. - A partir de este instante, mi hermano Armin y yo, encabezaremos el cuartel general.

A penas termino de hablar, se pudieron oír los murmullos de asombro de todos. Nadie esperaba ese giro en la situación.

- ¡No pueden hacer eso! - Miiko lo enfrento furiosa. No iba a permitir que unos tipos como ellos tomaran el control y pusieran a todos en peligro. No iba a dejar que pusieran patas arriba el lugar que ha cuidado con tanto esmero.

-Jajaja, Armin, eso que acabo de escuchar es muy gracioso. - Alexy comenzó a reír y Armin lo acompaño de inmediato. Mientras Miiko solo los podía ver impotente. Al verla así, los jefes de guardia, quienes se limitaron a ser simples espectadores, decidieron intervenir.

-No permitiremos que ustedes tengan el control. - Dijeron con firmeza y se pusieron al lado de la Kitsune en forma de apoyo. Ella los miro enternecida, al parecer, Gardinne no era la único que podía contar con amigos.

- ¿Y qué harán? Dense cuenta de su lugar y cierren la boca. Ya hemos sido muy pacientes. - Con una sonrisa ladina, Armin los reto. Muy en el fondo, se estaba divirtiendo. Se sentía como un villano de videojuego.

-Gardinne ha sido secuestrada. - Alex informo de golpe, sorprendiendo a los chicos. - Y todo por culpa de las malas decisiones que este lugar a tomado. Nosotros no queremos hacer daño alguno, de haber sido así lo hubiéramos hecho desde el principio, solo arreglaremos los errores que se han cometido. Me imagino que ustedes quieren salvarla ¿No es así?

Los chicos, llenos de angustia, desviaron la mirada indecisos. Ellos no parecían querer causar daños, las únicas intenciones que mostraban eran de arreglar las cosas y un enorme deseo de salvar a Gardinne, tanto como el suyo.

Miiko al observar sus reacciones supo que se rendirían con tal de salvaguardar la vida de esa insignificante humana. Por lo que, bajo la mirada derrotada y llena de vergüenza y preocupación. ella tenia muy en claro que no podría luchar contra ellos ella sola. Así, en ese momento el cuartel general había sido tomado oficialmente.

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- ¿S-son Faelienne? ¿Cómo es posible? - Aturdida, me sostuve de los antebrazos de la silla mientras que, con la mirada les exigía una respuesta.

-Si, así es. De hecho, como ya te habíamos dicho, aun hay muchas cosas que debes saber y que nosotros te contaremos a detalle. - Viktor, agarro tiernamente mi mano para tranquilizarme, sin embargo, la situación no hacía más que inquietarme.

-Todo estará bien, solo escúchanos, por favor. - Por mi espalda, escuché una tierna voz y sentí como ponía su cálida mano en uno de mis hombros en forma de apoyo.

-Kentin...- Sus palabras hicieron un poco al lado la desconfianza que había surgido en mí, pero mi mente era un caos lleno de dudas e incógnitas que no estaba muy segura de querer resolver.

-El militar de juguete tiene razón, solo escúchanos y después toma una decisión. - La inconfundible voz de Castiel resonó tras mi espalda y casi de inmediato sentí su mano apoyarse en mi otro hombro.

-Sabes que, sea cual sea tu decisión, la respetaremos. - Ahora Nath, se pone al lado de mi y sostiene mi mano. Su calor es inconfundible y poco a poco mis dudas sobre ellos se van disipando. Ellos son mis preciados amigos.

-Puedes confiar sin dudar un solo segundo en notros. - Ahora Lys se acerca a mi y acaricia mi cabello entre sus dedos. - Considéranos, por decirlo de alguna forma, tus fieles caballeros, mi bella dama. Quienes solo buscamos tu bienestar y felicidad.

-Chicos.... - Susurro enternecida.

Me miran con tanto cariño que haber dudado de ellos me hace sentir el peor ser vivo. Ahora se que, ellos siempre estarán conmigo y sin importar que, estoy dispuesta a devolverles todo el mismo afectó, confianza y protección que ellos me han brindado. Ahora mas que nunca estoy dispuesta a dar la vida por mis seres queridos.

-Los escuchare. - Apenas lo dije, ellos me mostraron una sonrisa. - Pero con una condición. -Me levante de la silla para hacia lograr velos a todos de frente y poder platicar de varias cosas que andan rodando por mi mente. Al verme alejada de ellos, extrañe de inmediato la protección que me brindaban. - Tendrán que contestar un cuestionario interminable.

-Por supuesto. Empieza. - Viktor parecía contento con mi condición.

-Bien...Mis padres.... ¿Me han olvidado? - Quería saberlo y a la vez, preferiría no oír la verdad.

-Así es. A todos nos sorprendió que de golpe te dejaran de buscar y que nadie te recordara. Era muy extraño ser los únicos que te recordáramos. -Contesto Ken. Así que, ellos ya no me recuerdan. Por un momento guarde leves esperanzas de que ellos aun guardaban algún recuerdo de mí. Algunas lágrimas se me escaparon y los chicos hicieron el además de querer acercarse a mí, pero los detuve con mi mano. Limpie mis lagrimas y me resigne totalmente a lo que ya sabía.

-Explicadme ¿Cómo es que ustedes son Faelienne? - Para distraerme comencé a imaginármelos como alguno de los cientos de seres que he conocido hasta ahora

-Bueno, esa es una larga historia que resumiremos con que los miembros del sweet amoris son especiales. - Viktor trata de resumir la historia sin quererme dar más detalles, pero yo indago.

- Eso quiere decir que ¿todos en el instituto son Faelienne? - Viktor asiente. ¡¿Hasta Amber?! Ahora entiendo porque se parecía tanto a una bruja. En dado caso, deber ser pariente de un ser horrible. Las chicas son iguales a mí. - ¿Ellos lo saben? ¿Saben que son Faelienne?

-No, nosotros no lo sabíamos hasta que Viktor nos buscó y nos contó toda la verdad. - Nath, explica tranquilamente. Puede que todo lo que me están diciendo tenía sentido.

-Y bueno ¿Qué tipo de faery son?

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Hola.

Estoy contenta. Muchas gracias por su apoyo, ya van 11K, nunca pensé que mi historia llevara tañas lecturas. Mil gracias.

¿Como sienten la historia? ¿Va tomando buen rumbo? Espero que sí.

Me gustaría pedirles de favor una portada. Ya intenté hacer una, pero fue un caos, luego se las compartiré. Pero creo que necesitamos una portada, me harían un gran favor haciéndola, por favor.

Otra cosita. Una chica me dijo que escribiera cosas sobre mí, ¿A ustedes les gustaría saber algo de mi o mis historias? Si es así, marca al 000000xxx0000, ok no. Si quisieran saber algo de mi o la historia coméntenlo y responderé, si son bastante preguntas, hare un apartado.

Ahora a descansar que la noche es corta. ¿Qué faery se imaginan que es cada chico?

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