Si bien esto se convertía en una pérdida de tiempo, quería seder a mi pecado humano y mostrar que la debilidad no era un adjetivo que deberían emplear para describirme.

-Tn... No has madurado nada- me auto regañe.

Mi mente pensába en vengarse. Sin duda, era mi prioridad ahora. Pero, sin embargo, el orgullo que cargo me hacia declinar hacia acciones imprudentes.

-Tal parece que debo de recordar mi posición actual y crear un plan a base de ello. Volveré a con el grupo. Ya sea una eternidad me encargaré de vengarme con mis manos, no planeo desperdiciar mis habilidades en una mascota del Rey. Si gano, me convertire en un adorno más en un Palacio despiadado, pero, si pierdo mi dignidad caera por los suelos.

Omnisciente.***

Tn, pensaba cuidadosamente mientras que su mano sostenía débilmente su mentón. Podría decirse que a vista simple era una mujer frágil, una escultura la cual con el más mínimo roce se destruiría en pedazos aunque realmente era una tirana sedienta de venganza.

Las horas pasaron y los combates empezaron a sacudir el lugar. El objetivo constaba de que las concubinas se enfrentarán unas a otras hasta que la ganadora de todos sus combates logre demostrar que es digna de ser la emperatriz y estar al lado del emperador, soo woon.

- tengo un plan. - susurro felizmente Tn.

Soo woon que miraba la escena interesado se sentó en su trono de oro escoltado por más de 3 guardias imperiales junto a un aura de gloria.

-¡Disfrutad este gran evento habitantes de este gran imperio. Honra y gloria a quien logre tener el puesto de emperatriz, madre de este imperio!.

Y junto a su proclamación un grito unísono de regocijo por parte de los espectadores dio a inicio.

/Tn/

Realmente fue algo difícil de encontrar una solución. Es decir, encontrar un acuerdo entre dos cosas contradictorias es complicado pero la respuesta es sencilla: dinero.
No quiero pelear y ganar ya que si es eso así, seria la esposa de soo woon. No, esposa no, mascota es un término más indicado. Por lo cual le pagaré a unas personas para que hagan un caos. Fingire que me secuestran, tomaré a la inútil que se atrevió a insultarme y la mataré.  De esa manera le enseñaré una lección y no me obligarán a seguir peleando.

-¿Miedo? Seré generosa contigo.  Si te arrodillas y me súplicas por piedad te perdonare y dejaré pasar el asunto.

Su voz es tan chillona que si no tengo autocontrol incluso ahora estoy siendo tentada a atravesar su cráneo en cualquier momento por un golpe.

-Eso lo veremos en la competición...-

Mi plan era el siguiente: vencer a la perra de soo woon y desaparecer.  Fácil y sencillo. ¿no?.

....

Luego de que los duelos comenzarán. Las concubinas eran siendo vencidas una tras otra por xiao ham choi, la mujer que me habia subestimado antes de que iniciara la batalla. Ella usaba su látigo para  derrotar a cada una mientras que un sonido brusco soñaba cada vez que este era azotado.

Realmente todas aquellas personas que eran siendo golpeadas por está mujer y su arma un tanto... ¿Exótica? terminaban gimiendo de dolor. No las culparia de ello, pues, eran azotadas por cierto con picos pequeños que juntos lograban hacer gran daño y más con la fuerza ejercida, sin mencionar el hecho de que sus esperanzas de ser la futura emperatriz se despedían fácilmente como la nieve en primavera de las siete espadas.

(Novela china que trata acerca de un guerrero que perdió a su esposa en una primavera después de haber regresado de una pelea.  Usando nueve espadas para cometer dicho asesinato.   El esposo, devastado, se suicidó y murió al lado de el cadáver de su mujer.)

Un grito casi irreconocible, No, audible llegó a mis oídos. Era tan débil la intensidad de volumen que era casi imposible de escuchar, era según en teoría, de un niño. Faltaba poco tiempo para mi turno.

¿Por qué un niño grito de esa manera? En cualquier caso de llamar la atención lo hubiera hecho aquí mismo, tener testigos que lo favorezcan y le den la razón.

Mi curiosidad subió y no tarde en darme la vuelta y caminar a la ubicación donde el sonido desgarrador provenía.

-Juraria que fue aquí - Dijo Tn Sakamaki mientras caminaba .

De un momento a otro, con los ojos sorprendidos les grité:

-¿¡Qué demonios están haciendo!?

La situación era completamente indignante y molesto para cualquiera, un niño que con lágrimas defendía a su madre me suplicó -¡Por favor hermana, ayuda  a mi madre!-

/hermana: terminó asiático para las personas mayores que tu. Como una manera de mostrar respeto.

Su madre, estaba apuntó de ser violada.  Tal parece que era hijo de una criada del palacio.  Su piel estaba llena de moratones y una línea delgada de sangre brotaba de su boca.

- algo que suelo odiar es a las pestes como ustedes. ¿como debemos lidiar con los insectos? Fácil, Eliminalos.-

///Para evitar poner gore, terminaremos este capítulo xD.

Me e dado cuenta que hemos llegado a los más de 130 seguidores  :D. Se los agradezco mucho y aunque no suba capitulos muy seguido. Tratare de encontrar un tema con el cual hablar en esta historia.

¡Lavence las manos! Los quiere veronique.