— ¿Entonces quieres que viva contigo? — pregunté sorprendida ante la propuesta de mi ex marido

— Si, así es exactamente — afirmó mirándola de reojo recostada en su habitación

— Nunca estuviste en su vida — le recordé sin estar segura por completo de su propuesta

— No fue culpa mía, hemos avanzado mucho en poco tiempo — me respondió un tanto alterado

— ¿Después de un mes de haberla olvidado dentro de un bar? — reclamé algo molesta tratando de no subir la voz y hacer que mi pequeña se preocupara

— Cambie, no soy el mismo de antes — insistió

— Hasta hace algunas horas casi se muere estando a tu cuidado — dije tratando de no alterarme — mira, lo que importa no eres tu. Importa halle ¿Qué crees que es lo mejor para ella?. Necesita vivir con estabilidad y con quién la conoce de toda su vida —

— Halle necesita a su padre, necesita de mí — reclamo  acercándose un poco a mi

— Lo siento, pero esa decisión no te corresponde Hobie —

— Me perdí 5 años de su vida ____ y no voy a perder más, si es necesario voy a pelear por esto — dijo casi amenazandome, debo admitir que jamás lo había visto tan a la defensiva y mucho menos por temas como estos.

— Pero que bien le va a hacer pasar por eso ¿No lo crees? — le dije con sarcasmo cruzado mis brazos — ¿Tienes idea de lo que es cuidar a una niña? —

— Llevo cuidandola un mes entero— volvió a reclamarme señalando la

— Y tuvo que llegar hasta aquí Hobie — dije sería y decidida — Lo Lamento pero no será así, los dos tomamos una decisión hace años y aunque quisiéramos no habría manera — finalice y camine de nuevo con halle que ya estaba a punto de despertar

Hobie suspiro con profundidad y recargo su hombro en la pared pensativo. Siendo sincero consigo mismo, las amenazas que recibió también lo hacían dudar si era buena idea que halle viviera con él.

Por la noche _____ estaba afuera del barco de hobie esperando a la pequeña con su equipaje junto a un portal abierto hacia su dimensión. Halle por su parte salió cargando su maleta con toda la tristeza reflejada en un su rostro. Hobie iba tras de ella siguiéndola mirándola con la misma tristeza como si los dos compartieran ese sentimiento en sus corazones.

A punto de entrar al portal halle deja su maleta en el suelo y corre hacia su papá para darle un último abrazo, hobie sonriente se agachó a su altura y correspondió a ese fuete abrazo.

— Cuídate pequeña — Dijo el mayor dando suaves caricias a su espalda cubierta por el costoso abrigo color negro que llevaba puesto.

— Tu también — respondió halle con dulzura y luego se separó volviendo con su madre entrando a aquel portal.

Hobie se puso de pie y miro a _____ con seriedad sin querer reflejar su corazón roto a través de sus ojos.

— Cuidala ¿Si? — pidió simplemente mirándola a los ojos

Ella asintió sin decir nada. Entro al portal y este desapareció junto con ellas. Hobie respiro profundo y sintió ese aire escapar entre cortada por el dolor de su alma. Con pasos débiles camino dentro a casa y cerro la puerta tras de el llevándose la mano a la frente. En ese momento el arrepentimiento lleno a el, cada momento en que rechazo a esa pequeña y sus responsabilidades estaba regresando cobrándole, cobrándole muy caro. Cerrando los ojos para hundirse en su tristeza en silencio fue distraído por el sonido de unos rasguños hacia la madera de una puerta, volvió a abrir los ojos y dando vuelta a su mirada logro ver al gato ocasionando esos sonidos en la puerta de la habitación de halle. Separando la mano de su frente nego con la cabeza y camino hacia el oscuro felino.

— ¿Qué haces? No hay nadie ahí — dijo hobie como si pudiera comunicarse con su amigo.

Abrió la puerta mostrándole que todo estaba vacío, el gato aún así entro y metió su delgado cuerpo debajo de la cama maullando insistentemente tratando de encontrar algo.

— Ya te dije que no hay nadie, además no cabría por ahí — insistió hobie mirándolo

El pequeño gato saco de debajo de la cama la mochila de halle y se la mostró a Hobie.

— ¿Una mochila? — pregunto hobie confundido, camino hasta donde estaba y la tomo entre sus manos.

El moreno fue hasta la sala y ya sentado en el sillón de color chocolatoso abrió la mochila y saco de ella una libreta negra con una pequeña flor blanca dibujada en el centro de la dura pasta. Sonriente hobie abrió la libreta y miro el contenido de las primeras páginas.

— "¿Qué es lo mejor que te ha pasado en la vida?" — leyó la pregunta vacía anotada en la hoja de papel junto con las demás preguntas a las que el i había dado respuesta.

Sonriente hobie dejo la libreta de lado y siguió examinando el interior de aquella mochila. En ella había fotografías de la niña junto a su madre, ropa para su oso de peluche, audífonos de cable y audífonos inalámbricos, y por último varios recortes y stickers. Muchos de ellos de spiderman causándole una ligera risa. En el fondo había una hoja de papel que parecía tener un elegante escrito a mano en ella.

"Hobie, es muy difícil escribirte esto. Lo intentado varias veces y siempre termino tirando la hoja. Estoy segura de que recuerdas a halle, tu hija. Es igualita a ti, me atrevería a decir que un 80% de ella es una copia tuya. Es atlética, valiente y con un corazón muy noble. Tengo mucho miedo de que llegues a enfadarte y no quieras saber nada de ella, ya habíamos acordado que nos separariamos. Me convencí de que hacía lo correcto al apartarla de ti. Apenas estabas recuperando tu vida y una hija hubiera sido una fuerte distracción”

Hobie suspiro y lanzo la carta a la mesa, con desesperación cubrió su rostro con ambas manos negándose a creer que lo que estaba ocurriendo era la realidad.

Minutos después estaba en el techo del edificio más alto de toda la ciudad llamando por teléfono a la pequeña, Pero solo obtuvo una respuesta en cada llamada.

“ hola, soy halle Pero estoy algo ocupada. Déjame tu mensaje ¡Adiós!”

Hobie dejo de intentar y guardo su teléfono en su bolsillo nuevamente mirando el soleado paisaje de una ciudad que, hasta ahora, estaba muy tranquila. Lo único que no parecía estar tranquilo era si mismo. Se quitó la máscara y mirando a la calle y la infinidad de familias felices que pasaban por ahí decidió intentar una última vez.

“ hola, soy halle Pero estoy algo ocupada. Déjame tu mensaje ¡Adiós!”

— Hola... Hola Sammy... Mira, solo llamaba para decirte que... El gato te extraña. Ya sabes, el... Te extraña mucho y bueno... Yo... — deja de hablar cuando es interrumpido por el tono de tiempo terminado para el mensaje de su teléfono.

Quejándose un poco trata de volver a llamar hasta que una voz conocida llama su atención.

— Alguien más también la extraña mucho —