4 años más tarde.

Jimin miró inexpresivo al chico que estaba frente a él, intentando ocultar lo afectado que estaba. Porque Kim Taehyung, luego de casi 3 años, estaba nuevamente frente a él, recordándole los años de su desastrosa adolescencia donde casi había metido la pata a fondo a causa de su amor.

―¿Vas a recibir mi orden? ―Preguntó con su profunda voz, un tanto burlona. Jimin sólo asintió para atenderlo, queriendo que desapareciera luego.

Jungkook y Taehyung siguieron su relación incluso después de que este último se graduara. No obstante, grande había sido la sorpresa de todos cuando el mayor anunció que se iría a estudiar fuera de la ciudad, queriendo regresar a su tierra natal para estar más cerca de su familia. Jimin observó con cierto pesar como Jungkook entre lágrimas le dejaba ir, prometiéndose el uno al otro que cada oportunidad que tuviesen la aprovecharían para verse, que su amor era lo suficientemente fuerte para superar la distancia.

Pero no fue así. Los meses pasaron, la relación se volvió inestable, los jóvenes seguían amándose intensamente pero les era imposible soportar la ausencia del otro, las llamadas volviéndose demasiado apagadas. Y hubo un día que el menor simplemente llegó a su casa llorando, diciéndole que habían terminado, porque supuestamente era lo mejor; porque no podían seguir extendiendo su amor cuando eran incapaces de sobrellevar los malditos kilómetros que los separaban. El año siguiente a eso Jimin estuvo presente en todos los deslices de su mejor amigo, quien al final de cada fiesta terminaba llorando como un bebé mientras llamaba el nombre de su primer amor.

Pero el tiempo había pasado, ayudándole a superar. Y ahora Taehyung estaba ahí, frente a él, nuevamente en la ciudad.

―¿Tienes tiempo? ―Preguntó Kim, aprovechando que la cafetería estaba casi vacía a esa hora para señalar una de las mesas.

Jimin dedicó una mirada rápida a su compañera, esperando que esta lo retuviera, pero la muchacha sólo asintió mientras susurraba un "yo te cubro". Y ahí estaba ahora, sentado junto a un Taehyung con facciones un poco más maduras, pero el mismo aire malditamente simpático que le caracterizaba. Como si no fuera suficiente, los años parecían haber pasado increíblemente por él.

―¿Jungkook sabe que estás aquí? ―Taehyung alzó la vista, tomando el vaso de café entre sus manos.

―Lo sabe, hasta hemos quedado de encontrarnos uno de estos días ―Confesó, sus ojos centelleando mientras una dulce sonrisa rectangular decoraba su boca.

No de nuevo, por favor, no de nuevo.

¿De verdad ellos se encontrarían? ¿De verdad Jungkook no había sido capaz de deshacerse de sus sentimientos por él luego de todo ese tiempo?

Jimin había visto como el muchacho había intentado salir con otras personas, fracasando y volviendo a su lado para pasar tiempo como lo hacían de adolescentes. ¿Seguiría enamorado de Taehyung aún? ¿Y quién era él para juzgarlo si así resultaba? Después de todo, Jimin también seguía amándolo a él. Jimin había salido con un montón de personas después de aquel día donde decidió renunciar a él, pero su corazón siempre albergó la esperanza de que el menor volteara a verle; esperanzas que se avivaron un poco cuando la relación de esos dos llegó a su fin y él retomó su lugar privilegiado junto a Jungkook.

Pero, en definitiva, ¿quién era él para juzgar los sentimientos de su amigo?

―¿Aún te gusta? ―La voz de Taehyung lo sacó de sus pensamientos, perturbándole un tanto. Siempre supo que aquel chico era consciente de sus sentimientos, pero era primera vez que hablaba directamente con él de ello.

―¿Y eso qué? ¿Por qué debería de importante? ―Kim asintió mientras lo miraba con diversión.

―Tienes agallas, Jimin ―El aludido quiso decirle que no lo llamara por su nombre a secas, que no eran ni remotamente tan cercanos. Pero sólo terminó por morderse la lengua, mirándole con recelo. ―¿Sabes que nunca perdí contacto con Jungkook? Dejamos de hablarnos por un tiempo luego de la ruptura, necesitábamos un respiro, un tiempo para nosotros. Pero volvimos a hablar, muy continuamente. No hay nada que no sepa

―¿Qué intentas decir?

―Que sé que sigues estancado en tu puesto de mejor amigo ―Jimin en cualquier momento se levantaría y le daría un puñetazo. ―¿Puedo sorprenderme? Pensé que harías un movimiento. Después de todo, parecías querer hacerlo en ese entonces, incluso si él estaba conmigo

―¿Qué? ―El enfado lo abandonó, dándole paso a la incredulidad.

―Tú sabes... ―Taehyung jugueteó con la pajilla de su bebida, observándole desinteresadamente. ―En ese entonces intentaste meter a alguien más en mis pantalones, ¿no?

Jimin se puso completamente pálido, sin dar crédito de lo que oía. ¿Cómo Taehyung se había enterado de su plan? No, eso no era lo importante ahora. ¿Jungkook lo sabía? ¿Se lo había dicho?

―Jungkook también lo sabe, sí ―Mencionó Kim, leyendo su rostro.

―Pero él...

―Jamás te lo dijo, ¿no? ―Taehyung sonrió. ―No me sorprende

―¿Por qué me sueltas todo esto ahora? ¡Han pasado años!

―Ve a saber tú... ―Taehyung se encogió de hombros, sonriendo ampliamente. ―¿Por qué Jungkook no te lo habrá dicho?

Jimin no respondió, pues era incapaz en pensar una respuesta, y las dudas comenzaban a carcomerle. Hubiera pasado el resto de la tarde ahí sentado de no ser porque justo en ese momento una chica entró al café, mirando hacia todas partes antes de apresurarse hasta su mesa al encontrar la figura que buscaba.

―¡Taehyung! ―Jimin alzó la vista, viendo como el chico alto se levantaba sonriente para recibirla con un abrazo.

¿Taehyung había comenzado a salir con una chica? ¿No había regresado por Jungkook?

―Oh, ¿quién es él? ¿Tu amigo?

―No, un conocido ―Taehyung le devolvió la mirada, Jimin se levantó, sabiendo que no tenía nada más que hacer ahí. ―Fue un gusto hablar contigo, Jimin

Pero Jimin sólo asintió, con falsa cortesía, retirándose luego de que Taehyung pidiera algo más para la recién llegada. Esperaba que el tiempo avanzara rápidamente para que su turno acabara y así poder hablar con Jungkook.

―Hey, ¿y quién es el chico? Es bastante guapo ―La muchacha no dejaba de ver al empleado que se acababa de ir.

―Está pillado, tonta, mejor date por vencida de una vez ―Ella hizo un puchero con los labios, rápidamente recuperándose y regresando su mirada a Taehyung, sonriéndole.

―¿Entonces puedo saber qué trae de regreso a mi primo favorito?

―Nada en especial, tenía ganas de reencontrarme con unos viejos amigos ―Taehyung miró de reojo a Jimin, quien preparaba la orden.

―¿Sólo eso? Pensé que aprovecharías de tener una seria charla con el nuevo novio de tu ex. ¿Dijiste que había comenzado a salir con alguien más, no? ―Taehyung ahogó una risa, provocando que ella frunciera el ceño.

―No, no todavía, pero de seguro pronto caen ―La joven vio cómo su primo agachaba la mirada y suspiró, extendiendo su mano hacia él para animarlo.

―Todavía lo quieres aunque sea un poco, ¿cierto? Venga, no tienes que sonreír conmigo

Pero Taehyung sí sonrió, sintiéndose agradecido con su presencia. Y dedicándole una última mirada a Jimin, suplicó en sus adentros que aquel chico fuese capaz de cuidar de la persona que más había valorado en su vida y que aún se encontraba en un rincón privilegiado de su corazón.

Al fin y al cabo, Jungkook había sido su primer amor y eso nadie ni nada lo cambiaría. Taehyung estaría hasta el final de sus días agradeciendo los bonitos recuerdos que le había dejado, mientras le deseaba solamente felicidad.

♪♫♪

Jimin ingresó a su departamento casi arrastrando los pies. Tenía hambre, pero estaba demasiado cansado para cocinar, así que se dirigió directamente a su cuarto. En momentos como esos recordaba lo triste que era independizarse, pues seguramente su madre le hubiese recibido con un gran plato de comida luego de un largo día en la universidad y trabajo.

Abriendo la puerta de su habitación, ni siquiera se sorprendió cuando encontró a Jungkook tendido en su cama, durmiendo despreocupadamente. El mayor se cuestionó seriamente qué pasaba por su cabeza cuando decidió darle una copia de sus llaves.

―Hay muchas cosas que quiero preguntarte ―Admitió, sentándose a su lado, extendiendo su mano hacia su pelo para acariciarlo, sintiendo que su corazón latía desbocado por tan sólo verlo dormir. ―Maldición, Jungkook... ―Se acercó, observando sus facciones, llevando ahora su mano a su rostro para delinearlo.

Un celular comenzó a sonar repentinamente y Jimin rápidamente buscó en la cama, queriendo detener el ruido para que el menor no se despertara. Sin embargo, cuando finalmente lo encontró y vio el identificador, su rostro se ensombreció al comprobar quien era el que lo llamaba.

Taehyung.

―¿Hyung? ―Jungkook abrió los ojos lentamente, incorporándose mientras veía a Jimin con su celular en la mano. ―¿Quién me estaba llamando? ―Preguntó con curiosidad, pero su amigo sólo le extendió el teléfono de vuelta para que él mismo lo comprobara.

Jimin creyó que moría de celos al ver la sonrisa que se formaba en labios de Jungkook, quien no tardó en levantarse para murmurar que tenía que hacer una llamada.

―Jungkook ―Lo llamó antes de que fuera capaz de salir de la habitación. ―¿Sabías que él está aquí?

El menor despegó su mirada de la pantalla, girándose a ver a su mejor amigo. ¿Cómo sabía Jimin que Taehyung estaba en la ciudad?

―Me encontré con él esta tarde ―Dijo al notar la confusión en la mirada del castaño. ―¿Planeas verlo?

―Sí ―La respuesta de Jungkook fue rápida, sin vacilaciones. ¿Era algo que tenía que ocultar? Eso fue lo que se preguntó al notar como la expresión de Jimin ensombrecía. ―¿Qué sucede, Jimin? ―Preguntó finalmente, guardando su celular en su bolsillo, diciéndose a sí mismo que ya habría tiempo para hablar con Taehyung.

―¿No hay nada que debas decirme? ―Jungkook sólo se encontraba más y más confundido. ―¿Algo que pasó hace años y de lo cual no me has hablado? ―Agregó, queriendo orientarlo.

Los ojos del menor se abrieron más de lo normal al comprender lo que posiblemente estaba mosqueando al mayor. Pero, ¿por qué estaba sacando ese tema ahora? Habían pasado años y ya no podía ser más irrelevante.

―¿Estás hablando de YooHwan, Jimin? ―Maldición, él lo sabía, de verdad lo sabía. ¿Y cómo pudo fingir indiferencia tomando en cuenta la importancia del asunto? ―Tu cara está gritando que sí. ¿Qué quieres que diga de ello? ¿Qué estaba al tanto de que hace unos años maniobraste todo un plan esperando separarme de Tae?

Decir que se sentía la peor persona del mundo era decir poco. ¿Jungkook lo había sabido por todo ese tiempo? ¿Y cómo fue capaz de confiar en él aún después de ello? No lo entendía, se sentía miserable. Jungkook estaba siendo demasiado amable y él no lo quería así. ¿Pero entonces...?

―Mis sentimientos... ―Jimin comenzaba a hiperventilar. ―¿También sabes de ellos? ―La mirada del menor transmitía tanta tristeza que no necesitó que le respondiera en voz alta. ―Lo sabías ―No podía creerlo.

―Jimin-

―¿¡Cuál es tu problema!? ―Jungkook se sobresaltó ante su repentina cólera. ―¡Tenías razones de sobra para alejarte de mí, Jungkook! ¡Ideé un plan para que tu novio te fuese infiel! ¡Lo que más deseaba era separarlos! ¡Estabas al tanto de lo turbio que podía llegar a ser a causa de los malditos sentimientos que tengo por ti! ¿¡Por qué no te alejaste!? ¿¡Por qué no me reclamaste!?

―¿¡Cómo podía hacerlo!? ―El menor habló igual de alto, demasiado nervioso.―¡Me había enterado de que mi mejor amigo quería separarme de mi novio porque estaba enamorado de mí!

―Debiste... debiste alejarte ―Susurró, sintiendo como su vista comenzaba a arder debido a sus deseos de llorar. ―Tu amistad... no la merezco

―¿De verdad tienes cabeza para pensar en mí ahora? ―Jungkook parecía desencajado, dolido. ―Si te soy sincero, esa tarde me llevé la peor decepción de mi vida, Jimin, porque jamás imaginé que tú serías capaz de hacerme algo así. Sin embargo, mientras pasaban las horas y más pensaba en ello, fueron otras cosas las que también noté. Noté que me querías, de una manera que ni siquiera habría imaginado, y yo probablemente te había lastimado un sinfín de veces sin siquiera notarlo

―No fue tu culpa ―Murmuró. ¿Cómo podría serlo? Jungkook tenía todo el derecho de vivir libremente su amor. Él no podía ser la piedra en el camino sólo por amarlo.

―Pero eso no quitaba el hecho de que estabas viviendo una pesadilla por mi culpa ―Jimin bajó la mirada, sin saber qué decir. ―Y entonces, hubo otra cosa que noté

―¿Qué cosa?

―Que me querías lo suficiente como para renunciar a tu egoísmo y dejarme ser feliz con alguien más ―Las miradas de ambos se encontraron, Jimin contuvo el aliento al notar que los ojos del menor estaban llenos de lágrimas. ―Ese día mandé a la mierda tu plan, Jimin, porque al final no hiciste nada. Sino que al día siguiente llegaste con una sonrisa, saludaste a Tae a mi lado con la misma cordialidad de siempre y dijiste "¡hey, Jungkook, tenemos el dueto!"

Lo recordaba, por supuesto que Jimin lo recordaba. Porque hace años había llorado hasta dormirse y al día siguiente apareció en el instituto sin más, sonriendo como siempre, incluso si su rostro estaba demacrado. Había corrido hasta Jungkook, ansioso, ignorando el hecho de que el menor estaba en brazos de su novio cuando lo encontró. Y tirando de su mano para llamar su atención, le dijo lleno de júbilo que habían conseguido el dichoso dueto.

Desde ese momento, a Jimin nunca más se le cruzó por la cabeza el querer hacer algo que dañara a Jungkook.

La razón por la que Jimin había llegado sonriendo aquel día, aun después de todo, era porque sabía que aquel dueto era algo que Jungkook realmente estaba deseando. Y quería verle feliz, como siempre, absolutamente bañado en dicha mientras mostraba esa adorable sonrisa muy característica de él.

―Siempre estuviste para mí y yo... no pude estar para ti, lo siento ―Eso era todo. Jimin sintió como sus ojos también se llenaban de lágrimas con tan sólo escucharlo. ¿Pero qué culpa tenía Jungkook? El menor no había hecho nada para que se enamorara de él. Sólo sucedió y ya, así sin más. Él tampoco había querido obviarlo y había perdido su oportunidad.

―¿Vas a volver con Taehyung? ―Su voz tembló, aterrado, sin querer volver a aquellos días donde su corazón se estrujaba al verlo con alguien más.

―¿Qué? Dios, Jimin, no, yo no volveré con Tae ―Se apresuró a contestar, palideciendo. ―Tae es importante para mí y lo amé mucho, no te lo negaré. Pero nosotros... nosotros crecimos, el tiempo pasó y... nos hemos superado, de otra forma no podríamos hablar tan fácilmente

Jimin lo miró, apagado, rogando que Jungkook estuviese siendo sincero con él. El menor mordisqueó su labio con miedo, eligiendo las palabras que usaría a continuación.

―¿Qué hay de ti? ―Murmuró.

―¿De qué hablas?

―¿Qué sientes por mí, Jimin? ―Se atrevió finalmente a preguntar, obteniendo un profundo silencio en modo de respuesta.

Las lágrimas de Jimin se deslizaron por sus mejillas y lo miró con dolor. ¿Por qué le hacía eso? ¿Por qué lo ponía en esa situación? Lo amaba, claro, ¿pero qué haría Jungkook con esos sentimientos? ¿Lo rechazaría y luego se iría? ¿Mantuvo silencio por tanto tiempo sólo para no llegar a esa instancia?

―Vas a huir... ―El castaño rápidamente negó con la cabeza. ―Vas a huir de mí, Jungkook ―Repitió, sollozando.

―¡No huiré de ti, Jimin! Si realmente estuviese asustado por ti, ¿no crees que habría huido desde hace mucho? ―Empuñó sus manos, molesto. ―Siempre ha sido igual, ¡siempre me has tratado como un niño! En vez de irte por las ramas, ¿¡por qué no intentas ser directo conmigo!? ¡Soy un idiota después de todo! ¡Yo realmente necesito que me hables a la cara para lograr entenderte!

―Pero-

―¡Estuviste siempre para mí! ―Habló rápido, alterado. ―¡Has estado por tanto tiempo junto a mí que te siento impregnado en mi piel! ¿¡De verdad pensaste que podría ser ajeno a ti!? ―El mayor abrió su boca, sorprendido. ―¿Cu-Cuánto?

―¿Cuánto qué?

―¿Cuánto más vas a hacerme esperar? Sólo... sé sincero conmigo ―Pidió, por fin bajando la voz, agachando la cabeza para que Jimin no viera el desastre que había hecho debido a su llanto.

Y es que Jungkook estaba aterrado, porque luego de ser dejado por Taehyung, Jimin había sido un pilar importante en su vida. En realidad, él lo estaba siendo desde mucho antes, pero habían retomado su vínculo especial. Y mientras los meses pasaban, mientras más se aferraba a su tierna mano, la necesidad de mantenerlo de esa forma sólo aumentaba. Pero Jimin estaba viendo a otras personas y eso estaba bien. El mayor se merecía ser feliz; era injusto y egoísta esperar que sus sentimientos se mantuviesen con él.

¿Era demasiado tarde para Jungkook? Pero si Jimin no sentía nada por él más allá de una amistad, así como solía demostrar esos últimos años, ¿por qué estaba ahí exigiéndole respuestas ahora? ¿Podría tener una mínima posibilidad?

―Jungkook, ¿yo te gusto? ―El menor sintió deseos de darle un puñetazo por el hecho de que aún no lo comprendiera, pero se limitó a asentir con la cabeza, aún sin mirarle. ―Dios...

Jimin se dio la vuelta, pasando sus manos por su cabello, sin dar crédito de eso. ¿Por qué se había complicado tanto? ¿Por qué simplemente no había hablado con él antes y ya? Si Taehyung no lo hubiese empujado aquella tarde, ¿hubiese llegado a casa para cenar con él como otra noche más?

Lo miró de nuevo, llenándose de ternura ante su retraída imagen. Jungkook había crecido, más que él. Jungkook ahora lucía un cuerpo ejercitado, bastante deseable a la vista. No obstante, su rostro seguía siendo adorable, incluso si sus facciones ahora eran más duras. Y verlo en ese momento fue como ver al niño de 12 años que estaba demasiado avergonzado por ser escuchado en aquel salón de música.

―Kookie ―Lo llamó, abriendo sus brazos. ―Ven a mí ―Y Jungkook obedeció, desapareciendo la distancia entre ambos en un santiamén, aferrándose a Jimin como si de aquello dependiera su vida, mientras que el mayor aún no podía creer que había llegado el momento que por años esperó.

―Lo siento, lo siento tanto, siento haber tardado, pero estaba tan asustado, hyung ―Repitió una y otra vez entre sollozos, pero el contrario sólo sonrió, acariciando su espalda.

―No seas tonto, sé cómo te sientes ―Jungkook se distanció, lo suficiente para que fueran capaces de verse a los ojos. Jimin secó sus lágrimas, sonriéndole con dulzura para tranquilizarlo.

―Me gustas, hyung ―Balbuceó, el calor acumulándose en sus mejillas cuando Jimin lo miró impávido, tomando su rostro para acercarlo a él.

―Repite eso, por favor ―Pidió, acercando sus labios a los de él, rozándolos.

―Me gustas ―Repitió, temblando debido al roce.

Jimin sonrió, acabando la distancia entre sus labios, besándolo con ansiedad. ¿Cuántas veces había deseado besarlo, teniendo sus sentimientos claros y sin juegos tontos? Jungkook estaba ahí, entre sus brazos, temblando por sus caricias y respirando entrecortado debido a la manera en que robaba su aliento. Y se encontró con su lengua, el interior de su boca, incluso más cálido de lo que era capaz de recordar, sintiendo que su temperatura corporal subía al momento en que el menor soltaba un gemido debido a la intensidad del beso.

―Me gustas, me gustas, también me gustas, Jungkook ―Repitió una y otra vez sobre su boca apenas la liberó, con la respiración agitada y los ojos aun cerrados.

―Me gustas ―Susurró una vez más Jungkook, sintiendo la sonrisa de Jimin sobre sus labios, sonriendo automáticamente junto a él.

Y volvieron a besarse, cientos de veces en una noche. Acoplándose al otro, descubriéndose, llenándose. Sólo esas cuatro paredes fueron testigos del amor devoto que se juraron, llenando el espacio de palabras dulces, suspiros y gemidos que sólo eran el comienzo de un largo amor. Y se habían tardado años, ciertamente. Pero a veces incluso el amor necesitaba tiempo para lograr nacer de la manera más hermosa posible.

Ven a mí, había dicho Jimin esa noche. Y en el momento en que Jungkook caminó hasta él, supo que la larga espera había acabado; sus corazones finalmente estaban latiendo en la misma sintonía.

Nota:
Stigma, ¿por qué te tardaste tanto en subir la última parte?
Bro, no estuve en todo febrero, vengo llegando, vamos tranqui (?). Me dio risa leer comentarios donde pensaban que la parte enterior era el final JAJAJA.

Pero, heeeeeeeey, estoy pensando en agregar una parte más tipo "extra" unu. Así que les dejo el aviso, para que no retiren la historia de la biblioteca todavía (8. Al menos que quieran hacerlo (?) xd