Capítulo IV

—Vega es una mujer muy importante y se ha interesado en ti.

Repite mi madre por décimo octava vez.

— ¿En mí? ¿pero por qué en mí? No tengo ni la más mínima experiencia, y ni siquiera la conozco como para decir que con verme está interesada —le digo tratando de controlar la molestia en mi voz, sin mucho éxito.

«¿Como alguien podría interesarse en mi para modelo? es ridículo. Todo este asunto me parece absurdo.»

—Pues lo hizo, y vas a aceptar porque tu universidad no se paga sola. Además que elegiste esa carrera para hombres, nosotros tenemos que pagarla.

—No, no lo hacen. Mi abuela lo hizo ¿o crees que no lo sé?

—Tú no sabes nada, Vega —dice molesta antes de salir del estudio. Espero unos minutos para dirigirme a mi habitación.

Había sido un buen día hasta ahora. Busco en mi armario un vestido poco formal para la cena con "la mujer importante". Esto me fastidia demasiado. Pero no dejaré que mi madre me eche en cara todo lo que gasta en mí. Me maquillo muy ligeramente, me coloco unos zapatos altos y bajo las escaleras. El timbre sonó hace unos minutos así que supongo que nuestra invitada ya llegó.

Al momento de terminar de bajar lo primero que veo es a una mujer de cabello negro, ojos esmeralda, un cuerpo que cualquier reina de belleza envidiaría, con un vestido negro y zapatos del mismo color acompañado de accesorios esmeralda.

—Buenas noches, Vega —pronuncia al verme con los ojos entornados.

«Me está analizando.»

— ¿Acaso la conozco? —cuestiono llevándome una mirada de desaprovación por parte de mi madre, la cual decido ignorar.

—No, pero me gustaría hacerlo —responde con un tono bastante extraño y una sonrisa torcida.

—Claro, ya sabe mi nombre así que me corresponde saber el suyo.

— Mi nombre es Elizabeth. Elizabeth Afable.

— Lindo nombre.

—Lo mismo digo acerca del tuyo.

Nos acercamos a la mesa, y la sonrisa parece estar tatuada en el rostro de mi madre. Empezamos a hablar durante la cena de que va el contrato.

—No sé nada sobre modelaje, etiqueta, ni toda esa mie... —Mamá busca asesinarme con la mirada—, ...ducación se basó en lo básico. Valores y esas cosas —Intento reponer.

—No es necesario que lo sepas se te enseñará todo lo necesario en el campus.

— ¿Campus? —pregunto con desconcierto dejando mi tenedor a mitad de camino.

—Donde pasarás algunas semanas. El tiempo indicado en el contrato para ser exactos —explica.

—Estudio —agrego mientras tomo otro bocado.

—El contrato será valido después de tus vacaciones.

—Trabajar en vacaciones... no es problema ¿algo más que deba saber?

—No, nada por el momento.

Se despide de mis padres y la acompaño hasta la puerta.

—Hasta pronto, Vega —dice y al pronunciar mi nombre siento un escalofrío recorrer mi espalda. Esta mujer no me da buena espina.

Recojo los platos de la mesa pero al momento de recoger el suyo, en la copa de vino encuentro una gota de... ¿tinta? Si, parece tinta. Lo examino con mis dedos pero está se evapora.

«Que extraño, si esta mujer me daba escalofríos, ahora me causa hasta un poco de terror. Quién sabe que demonios era eso.»

Ignoro eso y subo a mi habitación a cambiarme el vestido por la pijama. Me recuesto en mi cama pero apenas cierro los ojos la imagen de esa mujer cruza por mi mente. Busco mi teléfono y mis auriculares, lo subo a un volumen que considero adecuado e intento dormir, esta vez, con exito.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top