División (Capítulo 44)
DIVISIÓN (CAPÍTULO 44)
El grupo siguió a la joven otra vez al bosque de donde habían salido, allí les explico que su nombre era Rache. Laura l y era "Ljuset" algo parecido a una elegida. Su familia estaba destinada a salvaguardar a la humanidad de las fuerzas del mal desde hacía generaciones.
Sus antepasados lucharon contra seres oscuros, primero en Suecia de donde era originaria su familia. Su madre había luchado valerosamente durante mucho tiempo contra numerosos enemigos, lamentablemente ella murió de una grave enfermedad y se tuvo que ocupar ella de defender la paz.
Con 17 años además de salir con chicos, se enfrentaba a seres como minotauros, serpientes gigantes y todo tipo de seres oscuros. Pero lo que nunca imaginaba que quien estaba detrás de eso era un humano su nombre era Victor Losse era un arqueólogo que en uno de sus numerosos viajes encontró un anillo que era capaz de crear seres sobrenaturales.
Transformaba personas normales en seres sobrenaturales, su experimentación creo a una bruja extremadamente poderosa como su arma más potente a la que controlaba. También convirtió todo aquel que no hacía lo que él quería era transformado en seres sin cerebro, con gran apetito por los seres vivos, cargado de fuerza negativa más de lo que un humano puede aguantar y por lo tanto morían.
El arqueólogo ante tanta exposición falleció también. La bruja cogió el anillo y fue la única que aguanto tanto poder oscuro pero se volvió loca. Transformó a la gente simplemente por diversión se les llamaba Zombis.
-¿Son esos que nos han atacado no?- preguntó Lucas cortando la explicación.
- ¡Así es!- respondió la chica de pelo rizado, mientras el viento movía su cabello.
Tetsuo comenzó a hablar para explicarle que eran un mundo alternativo, que era muy parecido al que estaban ahora mismo. Le contó lo que había sucedido en su hogar y también dedujo que ese anillo que transformaba a los humanos en seres sobrenaturales seguramente era uno de los objetos que tenían que conseguir.
-¡Te ayudaremos!. ¿No?- dijo Laura
- ¡Tenemos que recuperar ese anillo!. Estoy seguro que los hombres de Danko no tardará en moverse.- comentó Susana
-¡Tampoco nos tenemos que olvidar que mi padre escapó!. – exclamó Jessica, mientras respiraba entrecortada.
- ¿Te encuentras bien?- preguntó alertada la más joven del grupo
-¡Sí perfectamente!. ¡Solo estoy un poco cansada!.- respondió sonriendo la novia de Leo.
Rachel les dijo que se dieran prisa porque no tardarían en llegar, y cerca de allí había una p cabaña donde ella vivía. El grupo llegó a la pequeña cabaña que tenía bastantes agujeros, pero aun así era bastante espaciosa, y comparado con el frío que hacía fuera se sentían bastante a gusto, incluso habían 3 camas y un sofá.
-Esta casa era de una familia de tres personas, una madre, un padre y su hijo pequeño que lamentablemente se habían convertido en muertos vivientes y tuve que acabar con ellos. Desde que ocurrió el gran cataclismo no había encontrado a ningún ser humano excepto a vosotros. Vagaba por el mundo en busca de sobrevivientes pero no los había encontrado y ya hace más 9 años que estoy buscando.- les decía al grupo.
La chica se metió y sacó de la nevera varias manzanas y melocotones que es lo único que quedaba en esa casa. Ella tenía pensado marcharse de ese lugar pronto porque se estaban acabando las provisiones pero con la llegada del grupo, tendrían que marcharse a la mañana siguiente. También que ese lugar no podían atacar los zombis
Todos comieron menos Jessica que salió fuera de la caseta a respirar, Laura preocupada por ella le llevó una manzana.
-¡Ten!. No has comido nada y como te veo cansada- la adolescente le acercó una manzana de color verde.
- ¡Tranquila estoy bien!. Metete dentro solo estoy tomando un poco de aire y tú te vas a resfriar.- explicó Jessica
La adolescente se metió dentro de la cabaña, mientras ella intentaba respirar, pero empezaba a dolerle mucho el cuerpo, tosió un poco y salió sangre de su boca. No se había dado cuenta que Rachel estaba al lado de ella y se asustó.
-¡Lo siento por asustarte!. ¡Estoy entrenada para ocultarme!.- se disculpó
- ¡No pasa nada!- contestó Jessica
-¿Cuánto hace que tienes tanta energía oscura dentro de ti- preguntó la mujer de mirada penetrante
-¿Cómo..?- dijo sorprendida la bruja
- ¿Cómo lo sé?. Te está pasando lo mismo que le pasó a Victor, te estás convirtiendo aunque seas una bruja el poder oscuro que hay dentro ti es mayor del que puedes soportar. ¿Cuánto tiempo hace que tienes la energía oscura dentro de ti?.
- Hará unas horas. ¡Mierda!. Ahora que he vuelto y pensaba tener una vida feliz después de todo esto.- se lamentó
- Lamentablemente no conozco a nadie que haya conseguido evitar convertirse en zombi, solo la bruja oscura. Pero tampoco conozco a nadie que haya aguantado como tú., normalmente en menos de 30 minutos se habían transformado. No diré nada a nadie pero si mutas acabaré con tu vida . Tranquila- después de pronunciar esas palabras se metió dentro de la cabaña.
A Jessica le cayeron varias lágrimas de sus ojos, mientras imaginaba nuevamente su boda con Leo, pero esta vez no ocurría nada, solo había felicidad. Él la cogía en brazos como solo él sabía hacerlo, entonces su cara cambió y comenzó a sonreír.
Susana salió momentos después de que se fuera Rachel y le explicó que con su súper oído se había enterado después de todo era una vampiresa. Y no dejaría que le pasara nada malo, le dio su palabra de Luna de que ella conseguiría que se reuniera con Leo. Jessica le dio las gracias y puso su cabeza en el hombro de su amiga.
La vampiresa con cuerpo de adolescente se giró y sintió que alguien estaba detrás de la puerta y en efecto era Rachel.
En esos mismos instantes en otro lugar espacio tiempo el portal escupió a Leo, Richard, Damien y Gabriel aun con agua, cuando se dieron cuenta vieron que estaban en un río, y cerca de ellos había mucha vegetación. Salieron del agua.
Leo se lamentó de la muerte de Armon o Nadie como él lo conocía de no haber podido hacer nada para derrotar a sus enemigos. Mientras Gabriel intentaba animarlo, pero en ese instante alguien comenzó a hablar.
-¿Dónde estamos?- preguntó el antiguo número uno de la CIA
- ¿Y tú que haces aquí?- cuestionó el vampiro
- ¡Lo he traído yo!- afirmó Leo
- ¿Te has vuelto loco?. ¡Si él quería el Ojo de Ra desde un principio, incluso se hizo uno de los hombres de ese psicópata!.- exclamó el hermano mayor de los Luna
- El salvó a Laura. Además es quien me enseñó a ser quien soy con mi hermano Vincent. ¡Si lo dejaba allí moriría!. ¡Y estoy harto de tantas muertes!. Ya ha muerto demasiada gente.- explicó el Vampire Killer
- ¡Eres un blando!. ¡Espero no lo lamentes después!.-contestó enfadado el joven
Richard estaba acurrucado y hablando solo, Gabriel fue a ver lo que le ocurría.
-¡Mí madre ha muerto!. ¡Maldita sea!. ¡Era lo único que me quedaba!- se lamentaba mientras lloraba.- se decía así mismo el muchacho
- Todos hemos pasado por momentos difíciles. Yo perdí a mi familia, a la mujer que amaba- el español intentó tranquilizarlo
-¡Tú al menos salvaste a tú amigo Tetsuo! ¡Tienes a tu hermana!. Pero yo he visto morir a todos los que de verdad me importaban. ¡Solo me queda Laura!. ¡No me digas que es lo mismo!- dijo enrabietado el chico.
- ¡Basta ya por favor!- intentó Leo cortar la discusión.
-¡Desde que entraste en mi vida todo ha ido a peor!. ¡Mi padre murió por salvarte!. Ethan murió también porque Ra era tu enemigo, mi madre murió por está maldita guerra. ¿Para que?. ¡No hemos conseguido nada tanto Vampire Killer y no hemos conseguido nada!. Ese maldito Nadie estaba equivocado contigo. ¡Ninguno de los dos habéis conseguido nada!. Él era un perdedor ¡Sois unos perdedores los dos!.- gritó enfurecido.
Al escuchar que Richard insultaba a su fallecido maestro le propinó un golpe en la cara tirándolo al suelo, el adolescente salió corriendo. Al mismo tiempo que Damien se reía de todo lo sucedido.
El adolescente enfadado corría y corría sin rumbo, estaba llorando desconsoladamente, pero vio que algo extraño y se paró pudo ver como alguien estaba secando la vegetación, eran dos hombres por lo que podía fijarse ya que aún estaban lejos, que tenían sus manos levantadas.
Uno de esos seres vió a Richard y él se dio cuenta y con su gran velocidad empezó a correr pero el ser estaba delante de él, no era un humano corriente. Tenía los ojos amarillos, piel blanca, y vestía con unos pantalones grises como si fuera ropa militar, pelo corto rubio y grandes dientes que sobresalían de su boca
-¿Qué eres tú?. ¿No eres un vampiro?- preguntó el chico
- ¿Qué es eso de vampiro?. No lo había oído nunca. ¡Nunca te había visto por aquí!. ¿Quién eres?. – contestó el ser con pinta de humano
CONTINUARÁ
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