- Hyung...

- ¿Mmm?

Ambos se encontraban ahora en la casa del menor - concretamente, en su habitación - Habían vuelto exhaustos pues cada vez que Yeonjun le informaba sobre su falta de visión tenían que desviarse. No entendía porqué alguien querría atacarle, es decir, ¿Hizo algo malo?

- ¿Los vampiros tienen como costumbre atacarse entre ellos? - al ver como le miró confuso, habló nuevamente - Me refiero a que si es usual que os ataquéis entre vosotros porque sois pocos o para establecer dominancia, no sé la razón

- Oh, eso - Yeonjun se acostó a su lado - No, de hecho es inusual que un vampiro quiera matar a otro, además, no somos pocos. En nuestra escuela hay aproximadamente cuarenta de ellos, sin contarme a mi

- ¿En serio? - el peliazul asintió - ¿Y cómo sabes eso?

- Olfato - señaló su nariz - Los vampiros olemos diferente a los humanos a la vez que sabemos cuando nos quieren atacar o no

Hueningkai ladeó la cabeza - Realmente sois criaturas curiosas

Yeonjun rió 

- Oye, hyung... ¿Puedo hacerte una pregunta algo personal? - al tener el visto bueno, prosiguió - Dijiste que tus padres habían muerto por un accidente de coche, ¿Es eso cierto?

- No... Mis padres... Bueno, podríamos decir que murieron para protegerme. Digamos que soy una especie de vampiro inusual y querían usarme para hacer experimentos 

- ¿Y cómo has podido sobrevivir todos estos años solos?

- Papá y mamá previnieron su muerte - relató - Los vampiros podemos cuidarnos solos desde una temprana edad, al contrario de los humanos, ya tenemos uso de razón desde los dos años. Mis padres habían dejado un libro el cual contiene todas las técnicas de supervivencia posibles y como pasar desapercibido entre la gente. Yo tan solo seguí el contenido al pie de la letra 

- Siento si te molesto con mis preguntas... - sonó apenado -

- No, no, está bien - le sonrió - Es normal que tengas curiosidad, puedes seguirme diciendo tus dudas si quieres, no me importa

- Entonces... - le miró fijamente - ¿Es cierto que los vampiros no pueden controlarse al oler sangre? ¿O eso es otro mito?

El mayor se quedó pensativo -  No es mentira, pero tampoco es cierto

- ¿Qué quieres decir con eso?

- Pues es bastante difícil controlarnos, por lo que tengo entendido, ningún vampiro tiene la capacidad de ver a un humano sangrando y contenerse. Sin embargo, yo puedo hacerlo, ¿Recuerdas cuando de pequeño te caías y te raspabas las rodillas? - el menor asintió - Entonces también recordarás que yo te curaba. Tenías tus heridas sangrando y, ninguna vez, yo intenté chupar de tu sangre. Es cierto que me costaba contenerme pero lo lograba

Hueningkai calló 

- Antes dijiste que eras un tipo de vampiro inusual. ¿Podrías decirme a que te refieres con eso? - el chico negó - ¿Por qué?

- No quiero que sepas eso - sus ojos cambiaron de color, dominando ahora el azul claro - No aún

- ¿Y no estarías en peligro en la escuela?

- ¿Y por qué debería?

- Bueno - rascó su nuca - Dijiste que tus padres murieron protegiéndote por lo que eras, eso significa que todo el mundo lo sabe, ¿No? Entonces, ¿No intentarían atacarte en la escuela?

- Podrías decir que mi identidad es una especie de secreto entre mi raza. Las únicas personas conscientes de ello es el gobierno y entre ellos también es un tema tabú, solo un ejército seleccionado sabe de mi. ¿Recuerdas cuando el otro día fuiste a mi casa y me viste herido? Digamos que tuve un encuentro con uno de ellos

- ¿Hiciste algo malo? - preguntó al fin - Y ¿No tendrías que estar mudándote de casa cada rato? Es decir, se supone que te encontraron, ¿Verdad?

- Woah, espera un poco - bromeó - No puedo responder todo eso de golpe

Hueningkai se sentó a su lado y rió con nerviosismo  

- Respondiendo a la primera pregunta - suspiré - Lo único malo que he hecho fue nacer, nunca he cometido ningún crimen o violado la ley. Respondiendo a la segunda, no, no tengo porqué mudarme. Puedo ocultar mi rastro si las circunstancias son las adecuadas

- ¿Cómo cuales?

- No estar acompañado, únicamente me puedo ocultar si estoy solo ya que requiere un montón de energía y, si quiero ocultar a otra persona, es probablemente que me agote del todo y muera. Tampoco debo hacerlo si es un día bastante soleado ya que mi olor se puede incrementar, lo ideal es hacerlo un día lluvioso

- Qué complicado... 

- Y que lo digas - rió - ¿Algo más?

Kai negó

- Gracias hyung, por confiar en mi y contarme todo esto

- Bueno, eres mi mejor amigo - se sentó y se apoyó en el hombro contrario - La persona que más me importa y a la que confiaría mi propia vida si es necesario

Hyuka se sonrojó fuertemente