- Hueningkai, ¿No sabes nada de Yeonjun hyung? - negó con la cabeza - Me parece raro...

- ¿Por qué? - pregunto mientras cerraba la puerta de su taquilla y se reunía con el resto de sus amigos

- Bueno, ya lleva más de dos semanas sin venir - alzó la ceja - Y es tu mejor amigo

- Taehyun tiene razón - dijo Soobin, incorporándose a la conversación - Además, normalmente están muy pendiente el uno al otro

- ¿Realmente no sabes nada? - cuestionó ahora Byeomgu - ¿Nada de nada?

- No, no se nada - suspiró agobiado - No hemos hablado últimamente. Seguro que está enfermo, tan solo déjenlo 

- Pero es raro que no nos haya escrito - enfatizó el castaño - A ninguno de los cuatro. ¡En dos semanas! Hyung suele llenar nuestro chat grupal de memes ¡Y ni siquiera ha hecho eso!

- Creo que deberíamos pasar a ver...

- ¡No! - interrumpió al alto, aclaró su garganta con nerviosismo - Probablemente estará muy cansado, no vamos a molestarle

El sonido del timbre le había salvado de los reclamos que Byeomgu estaba a punto de darle. Se escabulló con rapidez a su primera clase, alemán, y se sentó en la segunda fila como hacía de costumbre. Esta vez notó el cansancio invadirle y recordó lo que había pasado aquella noche

 Si no hubiera sido por el mayor del grupo probablemente ahora estaría muerto pero no podía ignorar el hecho de que este era un vampiro, lo comprobó con sus propios ojos. Conectó algunos puntos, por eso se había callado cuando le preguntó si había visto algo de eso con sus propios ojos, por eso a veces era tan insistente con el tema paranormal y por eso solía decir que era injusto poner a los vampiros como los malos en las películas 

Pero hay algo que no encaja, si Yeonjun es un vampiro ¿Por qué puede estar bajo la luz del sol? ¿Y por qué nunca le ha visto beber sangre en toda su vida? Lo conocía desde pequeño, era imposible que le ocultase este tipo de cosas

- Chicos, por fin he corregido vuestras tareas - anunció el profesor de alemán, sacando así a Hueningkai de sus pensamientos - Y he de decir que en general están bastante bien, habéis mejorado muchísimo

El castaño suspiró y se levantó para recoger su cuaderno. Al volver a su sitio le sorprendió encontrar un diez como nota, por lo general no solía pasar del seis. Recordó que el mayor le había ayudado aquella vez y explicado un par de cosillas

Sacudió su cabeza, Yeonjun era un vampiro, no debía acercarse a él pero, una vez más... Yeonjun era - y es - su mejor amigo, ¿Estaba bien dejarle solo?

- Es un vampiro - susurró - ¿Qué le va a pasar?

Así siguió el resto del día pensando en si debía ir a verle o no. Miraba a su pequeño grupo de amigos de vez en cuando y notaba que faltaba algo, algo muy importante. No se sentía bien siendo solo ellos cuatro.  Fue por ello que tomó la decisión de ir a verle después de tanto tiempo

Y ahí estaba, enfrente de la casa de su mejor amigo intentando reunir valentía para cuando tenga que afrontarlo y pedir disculpas. No iba a negar que estaba un poco asustado, el peliazul era una criatura paranormal después de todo

Se preocupó en cuanto, al acercarse, vio la puerta media abierta. Tocó un par de veces y no obtuvo respuestas por lo que entró por cuenta propia. El mayor vivía solo desde que tenía uso de razón, nunca le pudo observar con algún familiar, siempre había sido él, solamente él

- ¿Hyung? - caminó hacia la conocida sala de estar - ¿Hyung, estás aquí?

Hizo una mueca al no obtener respuestas. Pensó que tal vez estaba en su cuarto recuperándose de un resfriado, como supuso esta mañana con sus compañeros. Subió las escaleras, esperando poder ver al peliazul pero no, no estaba

- ¿Yeonjun hyung? - su voz tembló - Quería venir y pedirte disculpas...

Miró a su alrededor

- Por favor, si estás en casa responde - se tensó levemente - No intentes asustarme

De repente escuchó un portazo provenir del piso de abajo provocando que el menor saltara en el sitio, seguidamente escucho un jadeo que conocía perfectamente por lo que bajó las escaleras sin pensarlo dos veces y le vio

- ¡Yeonjun hyung! - gritó asustado -

El más alto por fin había aparecido mas tenía una profunda herida en su estomago. Este jadeó una vez más y, al ver a Hueningkai se tranquilizó

El menor observó el color de sus ojos, al igual que aquel día que sucedió el accidente habían cambiado aunque ahora tenía un color rojo

- No te acerques - pidió con voz débil - Por favor, no te acerques ahora

- Pero estás sangrando

- Esto se curará rápido, no te preocupes - cerró los ojos y respiró lentamente - Necesito que te vayas

- ¿¡Estás loco!?

- Kai, tengo que hacer una cosa realmente urgente y dudo poder contenerme más - sonó suplicante - No quiero asustarte ni que te alejes otra vez...

- No, vine aquí para arreglar y aclarar todo - se cruzó de brazos - Tan solo hazlo enfrente mía

Negó y abrió los ojos, habían vuelto al color café que les caracterizaban 

- De todas formas, ¿Qué te pasó? ¿Por qué vienes herido?

- Tuve un encuentro con alguien... Y como puedes ver salió mal - miró fijamente al cuello del menor - Dios, realmente la necesito

- ¿Necesitas qué? - ladeó la cabeza -

Bajó la mirada a su estómago y chasqueó la lengua al ver como la sangre había desaparecido 

- Hueningkai, soy un vampiro ¿Recuerdas? - asintió - ¿Qué suelen necesitar los vampiros?

- Sang... - se calló - ¿V-vas a ir a buscar sangre?

- No - frunció el ceño - Nunca haría eso. Tomaré de la mía

- ¿Puedes hacer eso?

- Técnicamente, no - quitó su abrigo y se sentó en el suelo, respetando la distancia entre los dos - Duele mucho si lo hago en mi mismo pero no importa

- Esas cicatrices de tu brazo - las señaló - Siempre me decías que un perro grande te había mordido de pequeño, ¿Era mentira?

- Bueno, ¿Cómo reaccionarías si te dijera la verdad? - apartó el pelo de su rostro con un suspiro - "Eh, Hueningkai, en verdad esto me lo hice clavándome mis propios colmillos para beber mi sangre". Hubieras salido corriendo seguro

Ninguno dijo nada por unos segundos. Yeonjun escondió su cabeza entre sus piernas intentando controlarse, mientras, Hueningkai le miraba fijamente

- Hazlo delante mía - antes de que pudiese protestar, prosiguió - No tengo razón para tener miedo, te conozco desde pequeños. Nunca me has hecho nada malo y has tenido más de una oportunidad para ello

- Te vas a asustar, hazme caso 

- No lo voy a hacer - se acercó - Fui un estúpido al gritarte de aquella manera, solo logré que tú te tenses cada vez que estoy contigo, como si tuvieras miedo a que me vaya de tu lado... Aunque realmente pensé en hacerlo. Soy idiota, lo sé, nunca me habías hecho nada, siempre me habías cuidado y protegido. ¿En serio tuve miedo de mi mejor amigo?  Qué estupidez

- Pero esto es distinto - se encogió en el sitio - Como te dije antes, morderme a mi mismo duele horrores. Me vas a escuchar gritar y llorar mientras chupo sangre y no... No quiero que te vayas otra vez

El peliazul se sobresaltó al sentir contacto físico. Alzó su cabeza con lentitud, temiendo encontrarse con la mirada contraria

- Estaré a tu lado entonces - apretó ligeramente su hombro - Es mejor pasar esto con tu mejor amigo que hacerlo solo, ¿Cierto?

- ¿Estás realmente seguro? - sus ojos cambiaron color miel. El menor miró curioso y asintió - ¿Lo dices de verdad?

- Qué si, hombre. Tan solo hazlo

Yeonjun tragó con fuerza y alzó su brazo con algo de duda. Paró de pensar al notar como la locura le iba a consumir si no lo hacía de una vez

Así que, clavó sus dientes con fuerza en su propia piel - provocando que las lágrimas fluyeran por sus mejillas - y comenzó a succionar

Hueningkai descubrió que el mayor no mentía, tenía que ser muy doloroso para él, estaba gritando y sollozando descontroladamente. Hizo lo único que se le podía ocurrir en el momento, le abrazó. Parecía tener efecto, los temblores del contrario disminuyeron al igual que los gritos

- Shh... Todo va a estar bien, hyung - había susurrado de manera cariñosa - Ya pasó...