Cuando YoonGi se levantó, por un momento olvidó el pequeño suceso de la noche anterior. Mientras se lavaba los dientes para bajar a desayunar, pensaba en mil maneras de hablar con JiMin, cuando se despertó esa mañana se dio cuenta de que el menor no estaba dormido a su lado. 

Supuso que debía estar en la cocina haciendo el desayuno, como ya era de todos los días.

Aún no se arreglaba para ir al trabajo, pues realmente ahora no le interesaba tanto irse, sólo quería hablar con JiMin, explicarle algunas cosas antes de que sus labores iniciaran como normalmente sucedía. 

Quería arreglarlo, porque sinceramente su forma de actuar no fue la correcta, actuó de manera desesperada.

Bajó las escaleras para llegar a la planta baja y seguir a la cocina, pero, se detuvo en cuanto vio a su novio salir de ahí. JiMin ya estaba arreglado para irse, traía algunas carpetas en sus manos y su mochila colgaba de su hombro. 

El menor lo miró y sonrió suavemente. 

—Buenos días, hice el desayuno antes de irme. Disfrútalo, voy tarde. 

Aunque había dicho esas palabras con una voz sutilmente tranquila y una ligera sonrisa, YoonGi entendió la incomodidad de JiMin. 

—Espera... ¿Por qué vas tan apresurado? 

—Hyung, voy tarde.— volvió a repetir algo ansioso. 

—Entras en media hora— dijo, pues antes de salir de su habitación había revisado la hora en su celular, dándose cuenta de que aún faltaba media hora para que ambos corrieran a sus respectivas labores. 

JiMin desvío la mirada un tanto apenado, abrió la boca para decir algo pero después de la cerró, pues no tenía nada que decir. 

—Yo... necesito hablar contigo, ayer no fue precisamente correcto... 

—YoonGi, quedé de verme con Taehyung antes de que iniciaran las clases, necesitamos arreglar algunas cosas de la tesis— respondió, esperando que YoonGi no insistiera más —... y así, tengo que irme. 

—Sabes que Taehyung nunca llega a tiempo, escucha lo que tengo para decir. 

—A-ah... bueno, que sea rápido. 

YoonGi arrugó las cejas, claro que se dio cuenta de la actitud que traía el menor, sabía que era por lo de ayer, y la verdad no era difícil saberlo. Para YoonGi era fácil leer a JiMin, sus expresiones y actitudes eran muy fáciles para que él entendiera que JiMin no estaba bien. 

—Ayer... estaba siendo un idiota. Lo siento,  estaba irritado y estresado por el trabajo, estuvo mal de mi parte no haber aceptado el cariño que querías darme para tranquilizarme. 

JiMin bajó la mirada, esperaba que algo como esto sucediera, pero no pensó que sería tan temprano cuando se despertará. 

—Bien, no hay problema...

—¿Seguro?... sabes que yo no soy así, es sólo que... 

—Dije que no hay problema.— respondió de nuevo el menor, alzando un poco la voz. 

YoonGi miró sus ojos, su mirada era tranquila, demasiado a ser verdad. YoonGi negó lentamente y dijo: —Sí hay problema, deja de ser tan terco. Sé lo mal que te hizo sentir que alzará la voz en un momento en donde tú deseabas hacerme feliz. 

JiMin frunció las cejas y se cruzó de brazos. 

—Sí lo sabes, entonces ¿por qué lo hiciste?— preguntó el menor, se sentía tan intranquilo en esos momentos —, sabes hyung, no pido mucho, no soy como las otras personas. Lo único que quiero por las noches es verte y darte un beso o llenarte de abrazos. Y sí, lo admito, ayer tomé la iniciativa porque esperaba, realmente deseaba, que pudieras entender que yo quería avanzar en "esa" dirección— dijo recalcando las comillas con sus dedos —, pero tú... estabas actuando tan raro, y yo creí que ser un poco cariñoso contigo te haría sentir mejor, pero creo que me equivoqué. 

Lo había dicho, había soltado sus pensamientos de manera normal, para JiMin no era difícil hacer eso, pues realmente sus padres siempre le enseñaron que no era tan difícil hablar para resolver malentendidos. 

—Fue mi culpa, yo... he estado tan, tan cansado, tan metido en el trabajo y he tenido tantos pensamiento respecto a "eso", el problema es que, a veces no puedo controlar mis emociones y yo... en serio no quería hacerte sentir mal. 

JiMin suspiró, no quería tener una discusión por algo tan ¿tonto? no sabía con exactitud como era eso, pero, le dolió. YoonGi no era la clase de persona que se portara de esa manera con él. 

No fue nada del otro mundo, pero, por más que YoonGi llegara abrumado, cansado y muerto de estrés a su casa, nunca, nunca rechazaba sus cariños para hacerlo sentir mejor. Y era lo único que JiMin deseaba hacer, darle mimos y decirle lo mucho que lo ama para quitarle ese estrés de encima. 

Pero, no sabía cómo sentirse. 

¿Era un poco correcto sentirse herido? ¿Aunque sea un poquito? 

—Hyung, nos vemos luego.

JiMin murmuró, esperando que con ésta leve conversación ambos quedaran un poco calmados, probablemente más tarde podrían hablar mejor y resolver este asunto. Pero, por ahora JiMin solamente quería salir de ahí y dirigirse a su escuela para terminar cualquier pendiente. 

Sin embargo, YoonGi no estaba en la misma línea que él. 

El mayor aún podía notar lo incómodo de la situación, y no quería que sus días fueran tediosos por tener algo sin resolver. Así que avanzó, cerrando la puerta con su mano antes de que JiMin la abriera por completo. 

Atrapó la cintura de JiMin con su brazo y recargó la punta de su nariz en la nuca del menor, inclinándose un poco ya que la diferencia de altura era notable. 

Estaba siendo un idiota por pensar demasiado las cosas, no debería ser así. El recuerdo de sus acciones pasadas era algo asqueroso, no podía negarlo, en esos años había actuado como todo un idiota inalcanzable, acostándose con quien sea, sin tomar en cuenta los sentimientos de los demás, y es que, sólo se cuestionó sobre eso cuando decidió que era momento de dar el siguiente paso con JiMin. 

—No tenía idea de que quisieras tomar la iniciativa en esto, y lamento no haberlo notado antes, sé que tu deseas hacerlo tanto como yo, pero... tengo miedo— su voz salió baja y un poco ronca, necesitaba decirle todo a JiMin —, es sólo que a veces siento que tu primera vez no debería ser con alguien como yo, y suena estúpido. Pero, la verdad es que me apena mucho todo lo que alguna vez hice. 

JiMin se mantuvo callado al escuchar sus razones, una ligera sonrisa apareció en sus labios. 

—Si que eres estúpido— murmuró el menor. 

—Mm, lo soy— estuvo de acuerdo. 

JiMin se relajó momentáneamente al sentir que su novio estaba siendo sincero, le hizo sentir feliz escuchar por fin una de las inseguridades del mayor, y estaba seguro que esa era la raíz del problema. 

Lentamente se soltó del agarre en su cintura para darse vuelta, rodeando su cintura con sus brazos para aferrarse a él, escondió su rostro en el pecho del mayor, aspirando su agradable aroma. 

—Hyung, sé la clase de persona que fuiste antes, ¿creés que Taehyung no se encarga de repetirmelo? Pero también tienes que entender que confío en ti, cualquier cosa que hayas hecho antes hay que dejarlo ahí, en donde fue. Hace mucho tiempo que estamos en una relación, has esperado por mí, y decidiste quedarte conmigo formalizando nuestro noviazgo. Te amo tanto, que si no lo hiciera en primer lugar, ni siquiera estaríamos juntos ahora.

YoonGi soltó una ligera risita y entonces, decidió que todo estaría bien. No necesitaba atormentarse más, quería a JiMin como nunca había querido a alguien, lo amaba, y deseaba poder complacerlo sexualmente. 

Entonces por esta vez, y sin miedo al rechazo, sostuvo con sus manos el mentón del menor y unió sus labios.

El beso fue lento pero satisfactorio, sus lenguas se juntaban acariciándose  con amor, JiMin soltó una pequeño gemido cuando el mayor dio un leve apretón a su labio inferior. 

—Ya que hablamos de esto— rodeó con sus brazos la cintura de JiMin, pegándose aún más a su cuerpo —... ¿Podemos quedarnos en casa hoy? — susurró sobre su oído, erizando la piel de JiMin ante el caliente aliento de su novio. 

—Pero... p-pero... ¿y tú trabajo? ¿y la universidad? 

El mayor rió sintiendo el cálido momento en su pecho, dejó un beso en la frente del menor y murmuró: —Entonces, está noche será. 

—... 

Los ojos de JiMin brillaron bajo la mirada prometedora del mayor, con su interior sintiendo miles de ansiosas mariposas revoloteando. Besó los labios de YoonGi una vez, antes de separarse y salir de la casa. 

Oficialmente, Min YoonGi ya no haría esperar más a su novio.