¡¡Lo prometido es deuda!!

En un enorme cuarto repleto de herramientas, partes mecánicas de alta tecnología para armas y robots; se encontraban dos adolescentes.

-Yaawwnn... -bostezó entre aburrido y cansado Sppaner.

-¿Todavía estás aburrido? -cuestionó Irie.

-Bueno... los servidores de Vongola son interesantes y entretenidos, pero... no me permiten desarmarlo.

Irie casi cae de espaldas de su silla -¡¿Quieres exponernos a todos?! ¡Por eso es que no te dejan jugar con el sistema central!

-Por eso es aburrido...

suspiró en resignación -Creí que el juego del otro día había sido entretenido.

-Por su culpa me retrase en la construcción de mi robot, ahora Yannini lleva ventaja.

-Sólo estás molesto porque te interrumpió en la creación de mini-mosca.

Tras presionar un par de teclas Sppaner habló -Desde que Vongola y sus guardianes se fueron todo ha estado muy tranquilo -oprimio una última tecla -Este sujeto era algo bueno, pero no lo suficiente.

-¿Qué podías esperar de una sola persona con un equipo destartalado?

-Bueno... fueron 3 así que...

Frente a ambos se materializó una pantalla holográfica con una gran cantidad de información...

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-Nada de nuevo... -la suave voz de una adolescente resono en una habitación vacía -Fran ¿Encontraste algo?

-<<¡Mujer, ¿Cuántas veces me vas a hacer la misma pregunta?! Ayer también te dije que no había nada.>>

-Uhm... -la joven expuso un rostro preocupado -¿Dónde estará?

-<<¿Cómo voy a saberlo? ¡Tengo sueño! -se quejó -¡El maestro dijo que no hiciera nada innecesario!>>

-Está bien -accedió la joven con una lanza en la mano -¿Vamos a comer?

-<<¡Siii!>>

Y así la imagen de la joven poco a poco se desvaneció.

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Era el segundo día desde que Nijima y compañía intentaron hackear los servidores de Vongola. Con estos días la tensión que Nijima sentía sobre si gradualmente se aplaco, Kenichi, aún preocupado, tenía los nervios a flor de piel.

Durante la cena se encontraban los cinco maestros, Elder, Miu, Kenichi además de... ¡Tsuna y Nijima!

¿Cómo pasó? Pues...

*FLASH BACK*

En la residencia Shirahama se encontraban 6 individuos, dos adultos y cuatro niños, reunidos en la mesa teniendo una tranquila y deliciosa cena, sin embargo... ¡Tsuna no podía estar tranquilo en lo absoluto! Miró con recelo al niño de traje que se encontraba comiendo junto a él.

-¿Qué sucede Tsuna? -preguntó Reborn.

-¿Eh? N-No es nada.

-¿No es de tu grado la comida Tsu-kun? -preguntó Saori -Puedo preparar otra cosa si gustas.

-¿Eh? ¡No es nada de eso! -se apresuró a negar.

-No seas grosero Tsuna, la cocina de tía Saori es muy buena.

-¡Ya he dicho que no es eso!

-Entonces... -se aventuró Kenichi -¿Te sientes mal?

-¡No! -se rindió- Sólo ignorenme.

-Reborn-chan- llamó en un susurro Honoka -¿Le sucede algo malo a Tsu-chan?

-Uhm... ¿Tal vez sea por eso?

-¿Eso? ¿Qué es "eso" Reborn-chan?

Pero él no le respondió, en su lugar se dirigió a su madre -Tía Saoria.

-¿Sí?

Sawada Tsunayoshi tuvo un mal presentimiento.

-Tsuna probablemente esté incómodo porque no sabe cómo explicarse.

-¿Explicarse?

-Vera, Tsuna quiere...

Al final tras unas pocas palabras por parte de Reborn convenció a los Shirahama de que era buena idea dejaran a Tsuna quedarse en Ryozanpaku.

Todos sabemos que cuando Reborn quiere algo siempre lo consigue. Sólo Honoka estaba enfurruñada por tener que quedarse de nuevo sola en casa.

-¿No estás de vacaciones? Puedes visitar a Tsuna y Kenichi diario.

Y, al final, el décimo Vongola no tuvo ni voz ni voto.

*FIN FLASH BACK*

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La noche del tercer día en Ryozanpaku.

-¿Anciano Maestro?

Todos los moradores del dojo se encontraban reunidos en la sala inundada por un pesado ambiente.

-Vongola envió una nota - habló Akisame -Nos dan una semana para que entregar al hackear.

-Eso... -el más joven de los presentes apretó los dientes -Nijima puede ser una maldita molestia, ¡pero no puedo entregarlo a la mafia!

-Kenichi-san... -una conmovida Miu tomo la palabra -¿Cómo lograron encontrarlo? Nijima no ha salido de Ryozanpaku.

-¿Estás segura de eso? -preguntó Kenichi.

-Apachay... y Tochumaru, lo vigilan- respondió Shigure.

-No tiene caso que pienses en ello Kenichi -habló Sakaki

Los maestros del Ryozanpaku sonrieron en aceptación- Entonces sólo nos queda una salida -concluyó Furinji Hayato.

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-¡No puedo más! -gritó un exhausto joven.

-Ponte de pie Dame-Tsuna, y ve a tomar un baño.

-No puedo mover un solo dedo... ¡¡Hiiiee!! ¡¿Estás demente?! -exclamó un nervioso, cansado y asustado Tsuna ante los disparos traicioneros de Reborn.

-Últimamente te has vuelto más flojo -una pequeña sonrisa floreció en su rostro -¿Debería llamar a Varia?

-¡Absolutamente NO!

-¿Tsunayoshi-kun? -llamó la voz de una joven -El baño está listo.

-D-disculpe las molestias Miu-san.

Sumergido en agua caliente de una bañera de madera sus músculos finalmente pudieron relajarse.

-Este baño...

-Tsunayoshi-kun, te dejaré unas toallas limpias. ¡Ah! Puedes tomarte tu tiempo el entrenamiento de esta noche fue cancelado.

-¡¿En serio?! -exclamó eufórico.

-Jaja, sip. Te has ganado un buen descanso -tras decir aquello se alejó.

¡Tsuna estaba en éxtasis! Kami era testigo que los últimos 10 días fueron una gran tortura.

Uno pensaría que con Reborn siendo su tutor los últimos años estaría acostumbrado, ¡pero el método era totalmente diferente!

Reborn era un sádico espartano y su entrenamiento consistía en sacar su poder de un modo explosivo, fortaleciendo su cuerpo con pálisas en modo hyper.

Repito, ¡HYPER!

Las circunstancias son completamente diferentes cuando realiza un entrenamiento intensivo, repetitivo y cuyo objetivo es establecer los fundamentos para su cuerpo. ¿Otro punto? Era tedioso y aburrido.

¡¿No podría haberse vuelto masoquistas o sí?! ¡¡Por Kami, NO!!

Mientras Tsuna divagaba su rostro pasó de cansado a abatido, incluso el color de su rostro varió en blanco, verde y azul.

Desde su escondite secreto Reborn también tomaba un baño de sales mientras disfrutaba de los cambios en el rostro de su alumno.

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