28 | двадцати восьми

La memoria es el centinela del cerebro.












Alicia miró por la ventana del edificio, asomándose por el mismo con cuidado y muy lento. Pues debido a la herida no podía caminar muy bien. El sol se estrelló contra su rostro, entrando por los cristales de los enormes ventanales. Justo debajo de sus pies había una multitud abarrotada y retenida por fuerzas de la policía con rejas, impidiendo que se acercaran de más al edificio. Al parecer, a la sociedad rusa aquella noticia de hace dos días no les había gustado ni sentado para nada bien. Había pancartas escritas en ruso con imágenes suyas pegadas en ella, no tenía ni la más mínima idea de qué gritaban ni qué decían, pero parecían estar exigiéndole algo a él. Sin embargo, no era capaz de ver a sus ciudadanos directamente por lo que solo se apresuraba a entrar al coche negro BMW, el cual era escoltado por dos patrullas y dos motocicletas de policía. No era común aquello, se debió implementar desde el día en el cual las manifestaciones se formaron alrededor del complejo de departamentos.

OMS había estado en contacto con ella y FBI monitoreando su estado de salud en todo momento, incluso podía ver que el peliblanco tenía una sobre vigilancia en ella como si buscara no perderse un solo detalle de qué hacía, cómo se movía y todo tipo de reacción verbal y no verbal que ella accionara. Eran acciones sobreprotectoras tan notorias que incluso llegaba a intimidar y asustarla cuando lo hacía, nunca lo había visto así. Tampoco es que lo conociera demasiado, pues está dentro del mundo de los representantes y las Naciones Unidas desde hace un mes y dos semanas.
Vio el coche que llevaba y traía a Rusia irse y comenzar a ser escoltado por la policía mientras la multitud permanecía gritando y chillando.

—¿Sabes qué están gritando? —preguntó Alicia.

Se volteó al sentir las pisadas de Frank a sus espaldas, ella se giró con cuidado. Apoyó su mano sobre la herida mientras inhalaba lentamente ante la delicada punzada que sintió en la herida. Le miró para luego desviar su atención a lo que traía en manos, un mate preparado y servido.

—¿Desde cuándo sabés hacer mate?

—Pedí tutoriales a Argentina, Paraguay y Uruguay —le respondió y le extendió el mate. Ella lo agarró para luego absorber desde la bombilla metálica. Lo miró impactada e incluso alegre, no sabía mal ni tampoco se le había quemado la yerba. Estaba perfectamente bien hecho—. Los rusos están pidiendo explicaciones. Siempre se reúnen frente al departamento de Rusia.

Alicia le miró confundida para después girar hacia la muchedumbre en el exterior gritando al unísono.

—¿De qué?

—Bueno. Rusia es un país prácticamente dictatorial. Hay mucha represión y censura. Él es el país, el representante y el país humano que responde y siente con respecto a la población y el territorio, por lo que ellos le exigen detener todo esto. —explicó FBI con un tono tranquilo y calmado, ella continuaba bebiendo del mate mientras veía desde lo alto aquellas personas gritar con todos sus pulmones. El contrario pareció examinarla de arriba abajo y tratando de no perderse una sola acción o gesto por parte de Alicia.

La razón de aquella sobre vigilancia que había adoptado FBI desde hace dos días, especialmente desde la revelación de los países humanos, fue que esto podía desencadenar en Alicia la forma definitiva como Anonymous. Nadie dentro de las Naciones Unidas ni de Sycorax tenían la menor idea de cómo podía repercutir esto en ella por lo tanto no sabían con certeza qué síntomas, qué evoluciones y qué cambios anatómicos tendría. OMS aseguraba que ella adoptaría un tono de piel blanco y el logo negro de la silueta de un hombre con traje, un planeta de fondo y rodeado de lirios similar a la ONU o portaría la famosa máscara de Anonymous que ocultaría su rostro. Pero, aquello era solo físico. El problema el cual le tenía preocupada era su evolución a una organización no gubernamental de activismo. Nunca habían visto la creación de una, por lo que, su habilidad posiblemente sería su poder.

Las organizaciones como FBI, ONU, entre otras; poseían ciertas habilidades como lo era con los representantes de los países. Pero, al contrario de ellos, quienes son inmortales y prácticamente imposibles de atacar o dañar de algún modo—antes de la creación de una vacuna regresiva con la capacidad de poder matarlos—. Las organizaciones sí poseían una debilidad, y era la ciber tecnología y ciberataques. Pues, como ellos poseen toda su información plasmada en servidores altamente protegidos y seguros. Siendo vulnerables a los ataques cibernéticos de algún grupo de hacker internacional como lo era Anonymous.

Atacar, tumbar, borrar, robar, filtrar, alterar, o simplemente ingresar en sus sistemas los debilitaba y volvía poco objetivos. Por esta misma razón, Alicia no podía caer en manos de Anarchy y mucho menos ser Anonymous fuera del entorno de las Naciones Unidas. Era un verdadero peligro para ellos tener a una organización de ciberactivistas suelto en el mundo.

Esto podía explicar las ocurrencias raras de ONU, los pensamientos poco objetivos, las ideas no muy claras, las acciones de FBI. Ella toqueteaba las bases de ONU y FBI en simultáneo prácticamente a diario para poder adquirir un poco de información extra, o para poder enterarse sobre quiénes eran los representantes de tales países. Ella había estado tocando tanto los servidores de ONU y FBI al punto de haberlos puesto en una posición vulnerable desde el inicio.
El gran hackeo a las Naciones Unidas la primera vez, ocasionó un choque errático en ONU que debió ser canalizado por parte de OMS. Su cuerpo había mostrado heridas y moretones que solo sanaron cuando Alicia echó la conexión remota de su notebook anterior de sus servidores. Ella no podía simplemente estar allí afuera cuando podía tener el control absoluto de ellos en sus manos.
Ella era una verdadera amenaza.

—¿Y no puede hacer nada? —cuestionó Alicia, desvió su atención y la fijó sobre el peliblanco mientras le entregaba el mate de vuelta.

—No. Lamentablemente su postura para el gobierno ruso no sirve de nada. Pocas veces le tienen en cuenta en sus decisiones y casi siempre lo derivan a relaciones internas o de comercio —respondió FBI con un tono desalentador mientras vertía más agua caliente en el interior. Alicia frunció sus cejas, pensativa. Su mirada se perdió en un punto imaginario. Tratando de asimilar dos ideas que buscaban interconectarse—. Realmente ellos no tienen interés en mantener a Rusia como representante.

FBI le entregó el mate de vuelta mientras la tomaba por el hombro y la apartaba de la ventana con dirección al sofá en medio de la extensa sala. Ella caminó a pasos lentos mientras trataba de no ejercer mucha fuerza sobre la herida. Colocó el mate sobre la mesa ratona a su frente y con cuidado se sentó con ayuda de FBI sosteniéndose de su brazo y hacer el menor esfuerzo abdominal. Realmente haber recibido una herida en el estómago era terrible, todos los movimientos musculares conllevaban una pizca de inclinaciones abdominales. No podía ni siquiera sentarse en el baño sin quejarse del dolor.

El peliblanco le extendió el mate de vuelta y caminó en dirección a la cocina para buscar unos blindis que había preparado Rusia y pidió—más bien ordenó—que eran especialmente para Alicia y que FBI no podía ni siquiera tocarlos. Avanzó con el plato con las pequeñas ruedas similares a unos pequeños waffles y se lo colocó sobre las piernas para que estuviese a su alcance con facilidad. Le entregó el mate que estaba sobre la mesa ratona y ella le sonrió agradecida mientras le entregaba un blindis como respuesta.

—Si me lo como, Rusia me mata. —respondió FBI mirándole asustado, pues no descartaba en lo absoluto que el eslavo estuviese observando la cámara que estaba justo en la esquina a su frente.

—Si te la regalo yo no. —le respondió y FBI le miró dubitativo para finalmente tomar el blindis en manos.

Ella sonrió feliz antes de beber el mate. Le vio tomar el control remoto del Smart TV y buscar alguna película o serie interesante con la cual ambos pudiesen entretenerse un poco durante la mañana.

Aquello que le había dicho FBI quedó divagando en su mente.

"Realmente ellos no tienen interés en mantener a Rusia como representante." Aquella frase que había soltado pareció tener una correlación directa con las palabras que Rusia le había dicho hace tres semanas. Donde le pedía ayuda y no comprendía qué tipo de socorro necesitaría para acudir a ella, pues para eso estaban todas las organizaciones. Tenía a FBI, ONU, OMS, CIA, a quien sea para pedir ayuda. Algo le decía que esa ayuda era específicamente hacia su gobierno, no lo querían ahí, lo consideraban prácticamente un estorbo. Pero que, de todos modos, no podían deshacerse de él por muy obvias razones de ser el representante y tener ciertas habilidades y características evolutivas que le otorgaban ventaja. Y aunque decidieran encerrarlo en un calabozo en la cárcel o sótano más sombrío, el resto de los representantes los sabrían y actuarían inmediatamente contra el gobierno ruso.

Le entregó el mate de vuelta a FBI y este lo tomó en manos de manera inconsciente.

Si no podían deshacerse de Rusia encerrándolo o matándolo, ¿Qué otra opción quedaba por explorar para poder quitárselo de encima?
Por una muy extraña razón que no alcanzaba a asimilar, algo dentro de ella estaba diciéndole a gritos que, la última razón que les quedaba como alternativa, era Anarchy. Era una mafia rusa, conocía a Bielorrusia y Rusia, en especial a URSS.
¿Podía ser que Anarchy estaba metido en el gobierno actual de Rusia y por ello había aparecido una vacuna con la capacidad de poder debilitar y matar a un país como había sucedido con México?

¿Qué pasaría una vez que mataran a Rusia? ¿Nacería otro en su lugar?
Y Alicia no estaba muy lejos de aquella realidad. Era cierto, Anarchy estaba trabajando en conjunto con el gobierno ruso y bielorruso. Ambos no querían saber nada sobre ellos y mucho menos los querían dentro de sus decisiones políticas, por lo que, generalmente los desplazaban lentamente hasta hacerlos a un lado. Ellos se encargaban de mediar las situaciones críticas o de verdadero peligro como el entorno delicado sobre la ambiciosa idea del gobierno ruso con la misión del Donbass, pues eso no solo era una invasión, sino que trascendería a la representante de Ucrania, su hermana.

Los gobiernos buscaban de algún modo de deshacerse de ellos pues sus pensamientos eran totalmente distintos y contrarios a los ya existentes por su padre URSS. Pero resultó que, sus hijos mayores mellizos eran pacíficos y más diplomáticos. Al principio todo marchó bien, ellos seguían las pisadas de URSS, pero luego decidieron cambiar de actitud, mejorando para un bien mayor. Logrando también que sus poblaciones se estabilizaran poco a poco como resultado. Fueron considerados como verdaderas decepciones y cobardes a los ojos de los gobiernos rusos y bielorrusos.

Rusia sabía de esto con perfección y poco a poco se alejó del gobierno ruso con el objetivo de poder enfocarse más en la búsqueda de Alicia e investigar los objetivos principales que tenía Anarchy. Él sabía que el único representante, la única organización y el último recurso que quedaba en sus manos para detener todo aquello era Alicia. Ella, una representante supuesta de Anonymous, inquebrantable, su debilidad era su habilidad. Era la única persona en el mundo capaz de detenerlos y mantenerlos a raya. Incluso, exponiendo al mundo las verdaderas intenciones de los gobiernos rusos y bielorrusos.
Por ello mismo, Anonymous había revelado la verdadera forma de los representantes al mundo. Dio a conocer quiénes son ellos, cómo son y qué sienten. La intervención de los ciberactivistas era la única manera de avisarles a las poblaciones del mundo que ellos estaban siendo amenazados por una mafia sustentada por dos gobiernos y el cual, poco a poco otros se iban uniendo a la lista para poder deshacerse de sus representantes. Su objetivo era advertir a los gobiernos que no iban a permitir algo como aquello y que sabían lo que estaban tramando, probablemente muchos activistas informáticos sabían de la existencia de Anarchy y seguían el paso muy de cerca, asechando y al mismo tiempo escoltando a los representantes.

Anonymous avisó indirectamente que sabía, sabe y es conocedor de los representantes y como consecuencia, de la vacuna adulterada y Anarchy. Como si les hubiese dicho: Ten cuidado con lo que haces, te puede ir mal.

Y por ello, Alicia era un arma de doble filo. Tenerla bajo el brazo de Anarchy era perfecto para poder derrumbar a las organizaciones gubernamentales y filtrar cualquier tipo de dato que se les antojara. En cambio, estando bajo el paraguas de las Naciones Unidas era un arma perfecta de protección instantánea contra ellos. Lo sabrían todo, la seguridad sería inquebrantable, si verdaderamente existía el antídoto en su sangre, solo necesitarían un par de dosis de ella para poder erradicarla por completo. Y ella poseía a Horus, tenían la posibilidad de perseguir cualquier cosa o persona que se le antojara y jamás se les escaparía de las manos hasta que los atraparan en un callejón sin salida.

Alicia era lo que ONU consideraba el virus detectado.












Capitulo editado.

Necesito esta taza en mí vida

Espero que les haya gustado de ser así no olviden dejar un like o comentario. Me ayudaría muchísimo a continuar escribiendo.

Nos vemos.

—Homicidal_Bloody

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