━━━Una historia original de la autora━━
Escrito por OmegaAlfa / AllFan_

Eres la persona más suicida y loca que he conocido en mi vida y aún con eso pareces tener la mayor suerte del mundo.

Código 006 — Mercado Extra-Sistema
 Segundo Libro de la Saga Juntos o Muertos -  Regresemos como Héroes.

Frío. Muy frío. Demasiado, tanto que le era raro admitir que era una temperatura más gélida que su propio hogar. No podía mover ni un solo músculo, ni si quiera abrir sus ojos. Solo estaba quieta, reviviendo una y otra vez los últimos minutos antes de morir.

Era... una vergüenza tan grande. Una estaca clavada en su corazón gélido del cual se iba deshaciendo ante la idea de que no iba a vivir más. Su muerte no iba a ser recordada, tampoco era que lo deseara al conocer todo lo que había vivido en ese planeta.

Eso sí, sentía nostalgia. Una emoción tan inusual por como le habían enseñado a que jamás debía sentir nada. Ser imperturbable, una mujer de hielo, pero era imposible cuando revivía esa vida que había en el mercado. Vida. Eso era lo que sentía. Miles de seres de diversas Galaxias que conversaban entre sí sin temor a nada.

Tan inusual...

Se culpó en silencio y se rio por su inmadurez. Sí, debió haberlos hecho caso. Debió haberlos obedecido y estar a su lado, pero era... una rebelde en todo sentido y todo por una misión del pasado, pero también, un conflicto que no deseaba decirle a nadie.

Era tan estúpido. ¿Por qué se sentía tan mal por aquel planeta? Iba hacer algo muchísimo peor. ¿Por qué lloraba por las muertes de aquellos seres? ¿Por qué sentía rabia por haber perdido? No comprendía sus sentimientos, era una mujer que miraba a todos con desprecio, pero que aun así parecía sentir con ese corazón tan frío.

En medio de sus conflictos, pudo escuchar una voz cerca suya. La angustia se movió por su cuerpo hasta llegar a su corazón, enviándole una señal desesperante a su mente. Sin saber bien cómo, pudo abrir sus ojos.

Y el pánico la azotó al saber que iba a ser juzgada por la mujer de la guadaña.

—El Onegrot dejó un mensaje aquí —murmuró, analizándola en silencio—. No creo que lo hiciera en vano.

Se quedó impactada ante su tenebrosa e imponente presencia. Estaba muy cerca suya, moviéndose con cuidado a su alrededor, arrastrando la guadaña en medio del campo de batalla donde una vez fue destrucción y desesperación. Decidió no moverse ni un solo centímetro, cerrando sus ojos y pidiéndole al cielo que fuera juzgada con justicia.

—No merece la pena —contestó una voz carente de vida y compasión—. No tengo la paciencia para oportunidades inusuales, Karma. Lo sabes muy bien.

—No he decidido aun —habló Karma con serenidad.

—No hace falta que lo hagas cuando es obvio que...

—No, no es obvio.

Su pequeña discusión hacía que la mujer temblara sin parar. Si tuviera voz, pediría clemencia y justicia. Si pudiera moverse, se pondría de rodillas al suelo y lloraría con desespero. Haría lo que sea si con ello tuviera una sola oportunidad.

En medio de ese silencio angustiante, las presentes pudieron escuchar algo que les llamó la atención. El brillo en medio del cielo de colores rojos y azules captaron la atención de todos los que vivían en ese planeta. Una señal clara de que alguien había entrado al Mercado Extra-Sistema.

Pronto escuchó una risa ligera por parte de aquella que todos temían, sintiendo algo afilado a sus espaldas.

—Te dije que tuvieras mucha paciencia, querida amiga mía —habló Karma con total confianza—. Lo que veo no es solo para el presente, sino para el futuro, si me es posible.

—Jum. No puede ser, ¿es ella? —preguntó la otra voz.

—Sí, y si va acorde a lo planeado, entonces tengo claro lo que haré con esta alma de aquí.

El gruñido grave consumido de rabia e impaciencia salió de aquella voz tenebrosa.

—No. Hiciste eso una vez con esa chica de la tierra. ¡Se suicidó y tú le diste una oportunidad! —contestó con severidad.

—Te pido compresión, Muerte. Lo que vi no era un error, tú también te diste cuenta de ello —aclaró Karma.

—Entonces el único motivo por el que cambió toda su historia fue por algo que se nos escapa de nuestro dominio.

Hubo un silencio, uno no muy largo, pero que ponía de los nervios a la mujer inmóvil.

—Hazme caso, Muerte. Estoy viendo varias historias. Muchas se correlacionan, y la suya coincide con la de ellos si tienen ese encuentro.

Se escuchó un suspiro largo.

—Mis temores se decantan a quien tú y yo sabemos. Actúa, pero no les quites ojo.

—No, créeme que no lo iba hacer.

Sus palabras cesaron, y con ello, la mujer de hielo sintió como en su espalda parecían hacerle un corte indoloro. No había renacido en otro cuerpo. Tampoco había sido castigada eternamente. Más bien, era una tarea larga que estaba obligada a cumplir en este planeta. Una para que así recuperara lo que era suyo.

✎ 𝐂𝐨𝐩𝐲𝐫𝐢𝐠𝐡𝐭: Esta historia es completamente original de la propia autora. 

✎ 𝐀𝐯𝐢𝐬𝐨𝐬: Esa historia tendrá escenas violentas, se pide comprensión y discreción ante estas escenas de las cuales la autora avisará para evitar malestar. 

🠮Cualquier comentario fuera de tono, para malherir o solamente para fastidiar la lectura del lector, será borrada y denunciada.

✎ 𝐍𝐨𝐭𝐚 𝐝𝐞 𝐚𝐮𝐭𝐨𝐫:

Regresemos como héroes es una historia que iba a ser hecha junto a unos compañeros, pero con el paso del tiempo, la historia no se terminó y perdí el contacto de ellos. Así pues, en la actualidad, tomé referencia de algunos de sus personajes y los adapté a mi estilo para crear a los personajes y la historia que veis aquí.

En esta historia se busca la acción en todo momento, pero no solo en peleas, sino en conflictos entre, principalmente, hermanos. Aquí veréis la verdad que siempre intenta ser ocultada, pero que irremediablemente se revela.

Tiene cierta importancia en el lore de mis historias, recomiendo leer con cuidado y recordar algunos detalles porque a la larga se harán uso en otros libros que tengo pensados. Este libro, aunque pueda ser "poco valorado" en verdad tiene sus cosas.

Espero que disfruten de la historia ^^