Me pareció curioso cuando los apodaron de esta forma. Códigos. Planetas protegidos. Me pareció tan interesante como ¡encima! podían protegerlos de todos los problemas que el universo pudiera tener. Eso sí, a las invasiones espaciales, sirve de escudo, pero dependiendo de cómo lo hagas y si sabes aplicar las normas.

No es fácil. En sí, no me creo que esto sea de esta manera. A veces me quedo sin palabras.

A veces deseo... ya sabes.

O no.

No lo sabes.

En los profundos bosques de Suqueia, varios seres de forma espiritual vagaban por el lugar siendo consumidos por sus objetivos. Todos allí presentes, se aseguraban de que su hogar estuviera en condiciones, la naturaleza.

Entre todos ellos, un espíritu femenino de altura pequeña y cabellos rubios pudo ver por primera vez a un ser muchísimo más alto y fuerte. Sus orejas le eran graciosas, pero era incapaz de describirlas.

—Hola —saludó el hombre. Ni siquiera se había girado para ver que aquel espíritu estaba observándole—. Tranquila, puedes acercarte, no soy agresivo. Solo estaba de paso.

—¿H-Hola? —saludó dudosa la mujer espíritu en su idioma.

—Te entiendo, tranquila. —Giró su cuerpo para poder verla y se sorprendió ante sus ojos multicolor—. Siento por mi llegada escandalosa, no quería causar problemas.

—¿Quién eres? —preguntó el espíritu.

—Oh, mi nombre es Kemi, ¿y el tuyo? —preguntó.

—M-Mi nombre es Adelfra... —murmuró sorprendida mientras le observaba. No sabía bien que estaba ocurriendo—. ¿Q-Qué haces aquí?

Kemi sonrió una sonrisa paciente.

—Rumores se han ido esparciendo y he venido aquí para asegurarme de que todo esté en orden. Me alegra ver que aquí nada grave ha ocurrido. —Observó a su alrededor con calma—. Este planeta sin duda alguna hace la diferencia, es hermoso los bosques en donde vivís.

—G-Gracias —susurró Adelfra.

—No es nada. Espero que no os moleste mi presencia aquí.

Adelfra desvió un poco la mirada para soltar un largo suspiro.

—Mientras no construyas ciudades, todo irá bien.

—Veo en ti muchos conflictos que has tenido que lidiar, pero no temas, soy un dios, exactamente el de la naturaleza y los animales, no tengo intención en destrozar esto.

—¿E-Eres un vigilante? ¿¡Esos rumores que decían son ciertos?!

Kemi afirmó con una sonrisa amable.

—De igual forma, necesito un pequeño favor de tu parte.

Adelfra tragó en seco, mirándole con atención.

—¿C-Cuál, señor vigilante? —preguntó Adelfra.

—El universo no está a salvo y he estado moviéndome en diversos sistemas con la ayuda de... cierta tecnología que no me esperaba usar en algún futuro. Me muevo para asegurarme de que todo esté en orden, pero también para pedir ayuda de aquellos que no deseo ver. Tampoco, es que me queden muchas opciones. —Sus orejas apuntaban hacia el suelo—. Necesito buscar a posibles aliados porque me temo que el universo no durará mucho si no la freno con la ayuda de otros.

Adelfra miró a Kemi sin entender mucho sus palabras, pero aun así siguió escuchando.

—Te pido tu ayuda para que busques aliados que puedan hacer frente lo que se viene. Este planeta, y varios más, están en peligro. Si lo consigues intenta contactarme con esto. —Dejó un pequeño instrumento de madera al espíritu—. Es un utensilio que solo Fusis cede a los aprendices o vigilantes como yo. Utilízalo cuando cumplas lo que te pido o si hay algún peligro.

Adelfra lo vio y no dudó en tomarlo para luego comérselo. Kemi sonrió con calma, sabiendo que aquellos espíritus tenían una habilidad única a la hora de comunicarse y actuar.

—¡Lo tendré en cuenta! —dijo Adelfra con ilusión—. Ahora es parte de mi voz y lo usaré como usted me ha dicho.

—Muchas gracias Adelfra, esto que harás no quedará en vano y lo tendré muy en cuenta —le dijo con paciencia—. Ahora, a ver si negociar se me da bien. Kersmark se parece un poco a mi padre, dudo que sea complicado... Más si le hablo de Christel.

—¡U-Un momento, ¿Chri-

Se marchó en un abrir y cerrar de ojos, dejándole con las palabras en la boca a Adelfra. Varias dudas la inundaron, pero al final lo aceptó, más al tener en cuenta que tenía un gran cargo encima.

¿Quién se lo iba a imaginar? Los espíritus de la naturaleza, o una Scursin, con un gran cargo.

A punto de irse escuchó gran estruendo cerca suya y no era el de sus compañeros, sino que otro muy distinto.

—¿Qué es eso? Veo a dos seres extraños, un robot y... ¿¡Humanos?! 

Time Visión - Edelis — Coyote - Mako — Fitzpleasure - alt J- Dreaming - Gibson Parker Remix — Higher Power- Coldplay — I dont't like Myself - Imagine Dragons — Nervous - Magic Bronson — Chakra Daemon - Foreign Air — Borderline - Tame Impala — The Seeress Prophecy (Daydreaming) - Achillea

ÍNDICE SEGUNDA PARTE

Capítulo 9: Desde cero.
Capítulo 10: Nuevos lazos.

Capítulo 11: Código 001.
Capítulo 12: Pasado.
Capítulo 13: Que haya paz.
Capítulo 14: De confianza.
Capítulo 15: Falsas apariencias.
Capítulo 16: Pistas de un pasado oculto.
Capítulo 17: Código 005.