El viento agitó el cabello de los dos combatientes y los tres espectadores que esperaban a que iniciara el enfrentamiento, la lucha que decidiría cual de los dos tenía razón y cual estaba completamente equivocado. No estaban peleando por un ideal, por destruir una maldición o por salvar a una persona. Ambos hechiceros estaban parados uno frente al otro como representantes de su institución. Dentro de unos días el Festival de Intercambio de las Escuelas Hermanas iba a llevarse a cabo, enfrentando a los alumnos de Kioto contra los de Tokio. Debido a eso, los estudiantes de Kioto quisieron lanzar una "evaluación" sobre sus adversarios de la otra escuela.

Mai, la hermana gemela de Maki, enfrentó a Nobara en la zona de las máquinas expendedores, llegando casi a volar la cabeza de la adolescente de un disparo. Separando a Fushiguro de su compañera, Todou Aoi se llevó al hechicero de las sombras a otra zona para enfrentarlo, para comprobar hasta que punto estaba preparado para una pelea siendo de primer año.

Estaban realizando una evaluación de sus adversarios por medio de un combate directo aprobado por el director de Kioto, algo que los estudiantes de segundo año de Tokio detuvieron cuando fueron conscientes de lo que podría pasar.

Dentro del Festival de Intercambio de las Escuelas Hermanas, la participación de los estudiantes de primer año era completamente escasa, casi nula. Debido a la expulsión de todos los estudiantes de tercer año de Tokio, el profesorado de la escuela se vio obligado a asignar a los chicos de primer año (los dos supervivientes) al festival y a la competición, lo que obligó a los de segundo año a entrenar a sus compañeros para que pudieran dar un buen espectáculo a quienes estaban observando.

A causa de la extraña excepción, los alumnos de Kioto habían querido estudiar a los chicos de primer año de Tokio, conocer que podían hacer mediante un enfrentamiento directo; enfrentamiento que fue detenido por los estudiantes de segundo en ambos casos, dando un desenlace extraño con el estudiante de tercer año Todou Aoi, quien estaba ahora parado a unos metros de su adversario, otro estudiante que debía ser evaluado.

Todou conocía la historia que los adultos contaban sobre el chico de primer año que eliminó a las maldiciones el año anterior durante el incidente. Utilizando su Expansión Territorial, el chico eliminó a todas en un solo parpadeo sin causar más bajas entre sus propios compañeros, algo que el chico de tercer año quería corroborar antes de que el festival llegara. Tuvieron suficiente con la aparición de Okkotsu el año anterior. Yuta barrió el piso con ellos y era algo que Todou no quería padecer de nuevo, prefería evaluar a los desconocidos.

―Veamos de lo que estas hecho, ¡Uzumaki!

El polvo se levantó cuando Todou se lanzó hacia Naruto. Era un chico bastante corpulento, alto y con unas dimensiones que doblaban el cuerpo del ahijado de Satoru, algo que tanto él mismo como los espectadores podían observar al mirar a cada uno de los combatientes.

―Sate, sate, sate―Naruto saltó en el momento exacto en el que Todou caía hacia él, dejando que el chico de tercer año de Kioto destrozara el suelo con su rodilla―. Eso es ligeramente peligroso.

El suelo se había fragmentado ante el choque de la rodilla de Todou, dejando que fragmentos de este salieran despedidos en diferentes direcciones y la audiencia tuviera que alejarse, saltando al tejado del edificio cercano.

―¡Uzumaki!

Nuevamente el suelo se cuarteó. Naruto agrandó sus ojos ligeramente. Todou se recuperó en un segundo del impacto y al siguiente estaba volando directamente hacia él, cargando su puño para lanzar un jab directo en su contra.

Ambos chocaron sus antebrazos, generando un viento que agitó el cabello de los dos hechiceros combatientes.

―¿Podrías no gritar?―torciendo el cuerpo, su cintura, Naruto colocó la pierna por encima del rostro de su adversario―. ¡Me vas a dejar un poco sordo!

Lanzó la patada de medialuna. Superando la reacción casi instantánea de Todou Aoi, Naruto golpeó su rostro directamente con el empeine de su pie derecho, enviando al hechicero contra el suelo, justo al mismo cráter que el chico de tercer año generó por su cuenta.

―¡Ngh!

Los hechiceros solían confiar en sus Técnicas Malditas. Aquellos que poseían una técnica no ofensiva, centraban toda la atención en su cuerpo, en su aspecto completamente físico y podían desarrollar una fuerza por encima a la mostrada por sus compañeros de escuela o, en algunos casos, tenían esa fuerza desde que nacieron, como una especie de maldición sobre sus cuerpos.

Todou generó esa fuerza descomunal debido a su Técnica Maldita: Técnica de Boogie Woogie, una de sus habilidades que le permitía cambiar de posición con diversos objetos y personas con energía maldita. Aunque la técnica fuera ofensiva y defensiva, Todou tuvo que centrar su atención en su poder físico para vencer a sus adversarios, justo como Maki y por ello quedó sorprendido cuando su adversario lo golpeó como si no fuera nada, en pleno aire.

Los pies del rubio tocaron el suelo. Tenía las manos metidas en los bolsillos de su pantalón y se encontraba mirando al derribado Todou Aoi. El hechicero de tercer año de Kioto se estaba reincorporando. Sentía la boca con el sabor óxido de la sangre.

―Eso ha sido entretenido―Naruto parpadeó. Escupiendo hacia un lado, Todou hizo crujir sus nudillos―. ¡MY BROTHER!

Un aplauso. Un simple aplauso, detuvo todo por unos segundos. Las aves, los espectadores. Todos quedaron completamente quietos, esperando un resultado.

―¿Un...aplau...?

Los instintos estallaron en la cabeza del hechicero. Naruto giró sobre sus pies dejando en su espalda al recién aparecido Panda y levantó el brazo, bloqueando la rodilla de su adversario.

―¡Usar el entorno es algo que un hechicero debería hacer!

Otro aplauso. Todou ya no estaba atacando a Naruto, si no que ahora era Inumaki quien estaba frente al rubio.

―¡¿?!

Pisadas. Todou apareció a un costado del Uzumaki mientras este aun se mantenía centrado en evitar que su compañero cayera de mala manera al suelo.

―¡Sorpresa!

Echó el brazo hacia atrás. Torció levemente el torso para mover el brazo en dicha dirección. Todou Aoi lanzó un jab directo contra las costillas de Naruto. Un crujido acompañó aquel golpe y el joven escupió sangre directamente al suelo, jadeando por la monstruosa fuerza tras el movimiento de su adversario.

―Normalmente no hago uso de mi técnica; pero haré una excepción con el legendario hechicero de primer año―separó los brazos, flexionó las rodillas, sonrió con arrogancia―. ¡Voy a tomar una victoria aquí, BROTHER!

Naruto respiró profundamente. Su mente estaba trabajando, cada una de sus neuronas buscaba comprender la técnica de Todou antes de que volviera a usarla en su contra y llegó a una comprensión demasiado acertada sobre ella. La Técnica Maldita de Todou Aoi le permitía cambiarse de lugar con cualquier persona que tuviera energía maldita, aunque eso estaba por confirmarse. Tomando en cuenta lo que podía sacar de aquel enfrentamiento, Naruto ligó el uso a los hechiceros presentes: todos tenían energía maldita y Todou había cambiado de lugar con ellos.

[Pero no solo con las personas. Si tuviéramos objetos malditos, cambiaría de lugar con ellos con suma facilidad. ¡Cambia de lugar con las cosas que contengan energía maldita!]

Descifrar la técnica y su utilidad eran el primer paso. El segundo era descubrir como Todou estaba usando esa técnica, que era lo que la activaba. Cada vez que el hechicero mayor usaba o quería usar la técnica, aplaudía para que esta surtiera efecto. ¿Sería así de sencillo? ¿Solo con un aplauso él cambiaría de puesto? Naruto dudaba que eso fuera así de sencillo, que fuera con un simple aplauso.

[Una distracción. Puede ser que la técnica se active así, pero no necesariamente lo hace para activarla. Probablemente usa los aplausos para confundir a mi mente, para obstruir mi capacidad de reacción. Confiar en mi instinto y comprensión de la energía maldita es algo completamente vital; pero siento decir que Todou no está a mi nivel]

Nuevamente Naruto escupió al suelo. Apartó la mano que estaba en su abdomen, revelando el fuerte golpe que hundió sus costillas y causó que varias de ellas se rompieran.

―¡Tienes una fuerza descomunal!―Naruto admitió, obteniendo una sonrisa de Todou―. Pero a pesar de que has roto un par de mis costillas, me has sorprendido con tu técnica y pareces estar en un buen nivel; siento decirte que actualmente estás a mi merced. He llegado a la comprensión de tu Técnica Maldita, como la usas y como se realiza. Una vez que llego a la comprensión de una técnica, nadie puede volver a usarla en mi contra, porque yo...

Naruto aplaudió. Frente a Todou ahora se encontraba Panda, quien anteriormente había estado a su espalda.

―¡¿?!

―...¡puede realizar lo que quiera, como quiera y cuando lo quiera!

La pierna se hundió en la espalda del chico de tercer año de Kioto. Todou Aoi salió disparado hacia Inumaki. Girando en el aire, el chico recuperó el equilibrio y se mantuvo erguido, ligeramente inclinado hacia el frente, sintiendo el ardor en su espalda a causa del golpe sorpresa.

―Veo cual es tu técnica. ¡Una técnica de copia o imitación!

―Se podría decir que sí; pero mi técnica va más allá de solamente copiar o imitar una técnica, Todou-kun―la energía maldita comenzó a condensarse, a envolver el cuerpo de Naruto como una capa completa―. Y es esa comprensión lo que me hace superior a ti. ¡Solo quise comprender quien era el chico que mató a seis maldiciones!

Todou abrió los ojos. La oscura energía salió disparada hacia él, envolviéndolo en una explosión que lo hizo retroceder, lleno de quemaduras leves y la ropa ligeramente chamuscada. Pequeños hilos d humo emergían de distintas partes del cuerpo de Todou Aoi.

―Esta es mi derrota completa, ¿no Brother?

La diferencia entre Todou y Naruto se había marcado el año anterior, durante el Desfile Nocturno de los Cien Demonios‏‎. Mientras que Todou derrotó a seis maldiciones, siendo cinco de primer grado y una de grado especial, Naruto venció a un ejército de ellas solamente con su Expansión Territorial, una técnica de los hechiceros compleja y que no muchos lograban desbloquear, pero que sin embargo un chico de primer año pudo usar sin complicaciones para eliminar a un ejército entero de maldiciones.

Después de ese punto de hacía un año, Naruto creció exponencialmente hacia arriba y su comprensión sobre su familia y técnica maldita fueron mayores, obteniendo el conocimiento necesario para utilizar su propio poder de una mejor forma, como había hecho al pelear directamente contra Todou, siendo el reflejo de su entrenamiento.

―Desde el primer instante que pisé esta zona de conflicto, Todou, supe que nuestros niveles eran opuestos―Naruto colocó la mano sobre su nuca―. Aunque no digo que seas débil, pero solamente Yuta podría pelear conmigo.

Ante aquellas palabras, Todou rio acarcajadas.