Uzu capítulo 22

Hinata caminaba tranquilamente por las calles de Konoha, se sentía en una nube en esos momentos y no era para menos, no solo tenía el amor del hombre que ella amaba con locura desde su más tierna infancia, también estaba el hecho de que ese mismo hombre había logrado convencer a su padre, al mismísimo Hiashi Hyuga para acordar un compromiso, estaba inmensamente feliz, y así lo reflejaba su rostro alumbrado por una hermosa sonrisa, la mujer llegó al recinto Uzumaki y tocó a la puerta, después de un par de minutos está se abrió revelando al líder del clan Uzumaki, Naruto Uzumaki un poco despeinado y transpirado, la heredera Hyuga se sonrojó al ver que... llevaba su yukata un poco entreabierta, lo que dejaba perfectamente expuesto su pecho, ligeramente brillante por el sudor, Hinata hizo ademán de entrar pero el joven de ojos azules no se lo permitió.

Naruto: Esto... Hinata... he tenido un problemilla con... el calentador de agua y tengo el salón un poco desordenado... te importaría que esperemos aquí mientras mis clones y algunos operarios lo arreglan?.- La mujer asintió sin hacerse muchas más preguntas, después de todo, confiaba plenamente en el muchacho frente a ella, su futuro marido nada menos. El joven suspiró más relajado, lo último que quería es que la mujer entrara dentro o usara su técnica ocular y viera como estaba el salón (recordemos que... hubo una sesión de sexo bastante bestia) por lo que este estaba bastante sucio y con una Sakae desnuda e inconsciente la cual era cargada por un par de clones para llevarla a uno de los cuartos de arriba para poder despertarla con más tranquilidad, por otra parte, unas cuantas copias más, limpiaban el suelo y la mesa del salón, ventilaban el aroma a sexo y lo disimulaban con ambientador, por último, un par de ellos se transformaron en fontaneros, todo estaba preparado al milímetro para dar el pego, los clones disfrazados salieron del inmuebles encontrándose con el original hablando y... actuando bastante cariñoso con la mujer de perlados ojos.

Clon disfrazado: Ya acabamos con el arreglo, el agua vuelve a circular perfectamente y a calentarse, si tiene algún problema más con la instalación, no dude en llamarnos, estaremos aquí enseguida.

Naruto: Muchas gracias, espero que no tenga que volver a recurrir a ustedes.- los 2 clones dieron una pequeña carcajada y abandonaron los dominios Uzumaki, Naruto miró a los ojos a su amante Hyuga.- Ya podemos pasar adentro, lamento haberte hecho esperar.

Hinata: Oh, no te preocupes.- Sonriendo levemente.- Pero... no sé si... mentirme... te haga... sentirte bien...- El jinchuriky se detuvo en seco, el tiempo pareció detenerse, inclusive el aire dió la sensación de quedarse estático dentro de sus pulmones.

Naruto: P-perdón?.- Observándola incrédulo.- No sé por qué dices eso...

Hinata: T-tu olor Naruto-kun...- El joven alzó una ceja sin entenderla.- Conozco perfectamente tu olor... y... hueles a ella... a Sakae-san...- El rubio suspiró derrotado, la mujer de ojos claros lo había descubierto como si nada... quizás, si no la hubiese abrazado tanto mientras esperaban a que sus clones lo limpiaran todo...

Naruto: Está bien... me descubriste... espero que no te genere algún problema o molestia, es lo último que querría bque sucediera entre nosotros...- Acercándose a ella para tomarla entre sus brazos y pegar su frente a la de ella, Hinata bajó la vista un poco avergonzada por la cercanía de su prometido, Naruto sonrió, le encantaba cuando ella hacía eso... era encantadora, la tomó con cuidado del mentón y elevó levemente su rostro para mirarla directamente a sus hermosos orbes plateados como la Luna llena.-
Sabes que te amo?.- Solo con 4 palabras, el cuerpo y la mente de Hinata entró en ebullición, el jinchuriky sonrió ante el rostro cada vez más colorado de la heredera del clan protador del legendario Byakugan y se acercó lo suficiente como para juntar sus labios con los de ella, la vista de Hinata comenzó a volverse borrosa y sus piernas a temblar.

Hinata: Na-Naruto... kun...- La pobre muchacha perdió el conocimiento en los brazos de su amado, el ojiazul suspiró con una pequeña sonrisa apretándola contra su cuerpo.

Naruto: Te amo... mi pequeña perla...- tomándola al estilo nupcial mientras se encaminaba a las escaleras para dejarla recuperarse en una de las camas.

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El joven Uzumaki llevaba ya un rato metido en la cocina preparando la cena, confiaba en que sus dos bellas durmientes se despertaran para cuando el hubiera terminado, si no, tendría que levantarlas el mismo, fue preparando cada plato con tranquilidad, una sopa de vegetales, asado de cerdo al sake, un poco de arroz con huevo y pollo... en definitiva, una cena deliciosa, terminó de sazonar la carne y procedió a limpiarse las manos cuando unos golpes a su puerta llamaron su atención, bajó la intensidad del fuego para evitar que se le quemara la comida y acudió a atender la llamada, abrió la puerta topándose con su amiga pelirosa.

Sakura: Hola!.- Sonriéndole al muchacho enérgica.- Perdona que te moleste a estas horas, pero no sabía qué hacer y decidí pasarme... a hablar y eso...- Sonrojándose un poco.- Traje sake...- Enseñándole un par de botellas del exquisito licor metidas en una bolsa.

Naruto: Por supuesto, pasa, estás en tu casa Sakura...- La mujer entró y le siguió por el pasillo hasta la cocina en estricto silencio, el joven de melena dorada estaba un poco nervioso, de hecho, tenía motivos más que suficientes para estar temblando o sudando a mares producto de la ansiedad.- "Mierda, y ahora qué hago... si se levantan alguna de las 2 y Sakura las ve... pensará que soy un pervertido... joder... que hago... si se lo digo excusándome en algo... que justifique que están arriba durmiendo...".- Eran los pensamientos del nervioso jinchuriky del Kyubi, el cual reía en silencio en el interior del hijo del Yondaime disfrutando como nunca de un buen espectáculo.

Sakura: Naruto... es mucha comida para una sola persona no?.- Observando los platos sobre la encimera de la cocina y las sartenes con carne haciéndose lentamente.

Naruto: Ha pues... verás, cuando llegué a casa después de estar contigo en el Ichiraku me encontré con Sakae e Hinata, me sorprendió verlas juntas, no crees que no pegan ni con cola?.- Sonriendo nerviosamente, por suerte, estaba de espaldas a la mujer de ojos esmeralda.

Sakura: Ahora que lo dices...- Imaginándose a las 2 féminas una al lado de otra, Hinata con el cabello suelto vistiendo una yukata blanca como la nieve, al lado, Sakae con su pelo recogido en una coleta alta vistiendo una yukata negra como el color de sus cabellos.- Pues tienes razón, son como el día y la noche... pero ya sabes lo que dicen, los polos opuestos se complementan bastante bien.

Naruto: Si...- Pensando en lo bien que se sentía tener sexo con ambas a la vez.- Bueno, como te iba diciendo me encontré con las 2 y tras charlar un rato decidimos quedar para cenar, ahora vendrán...- Revisando los platillos uno por uno.- Si quieres, puedes quedarte tu también, y ayudarme a terminar de prepararlo todo.

Sakura: Me encantaría...- Dejando el sake en la encimera.- Pero primero me gustaría ir al baño...- La pelirosa se marchó al aseo mientras Naruto seguía concentrado en sus labores culinarias una vez escuchó la puerta cerrarse con seguro procedió a crear un clon para enviarlo arriba y despertar a las 2 mujeres que dormían plácidamente y juntas en la cama de matrimonio de su habitación.

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Sintió como alguien abría cuidadosamente la puerta de la habitación y pequeños pasos se escuchaban en la oscuridad del cuarto, creyó que se trataría de Naruto, pero un ligero aroma femenino muy conocido para ella la preocupó, se levantó de sopetón encendiendo la luz del cuarto topándose con su compañera de equipo, ambas se quedaron estáticas sin quitarse el ojo de encima, la tercera mujer en discordia, Hinata Hyuga, se movió ligeramente abriendo sus ojos e incorporándose, se quedó pasmada y un poco inquieta por la hostilidad que emanaban esas 2 mujeres delante de ella, procedió a salir de la cama y a alejarse lentamente sin hacer mucho ruido con sus ojos puestos en aquellas 2 muchachas que parecían estar apunto de enfrascarse en una lucha a muerte.

Sakae: Qué haces tú aquí...- Mirándola como si fuera poca cosa.

Sakura: Lo mismo te digo a tí... y a Hinata...- Apretando sus puños con impotencia.- No quería creerlo... no podía... pero esto me lo confirma...- Bajando su mirada jade con pesadez.- No me lo puedo creer... tú estás con él... nunca te interesó... lo intentaste matar... por qué... por qué?!.

Naruto: Porque la amo...- Dijo el hombre, núcleo indiscutible de esta disputa entrando a la habitación.

Hinata: Na-Naruto-kun...- Corriendo a abrazarlo asustada.

Naruto: Shhh... tranquila Hinata...- Acariciando su cabeza paternalmente ante la mirada estoica de Sakae y la incrédula de Sakura.

Sakura: No... No lo entiendo... por qué la amas? si no ha hecho nada por tí aparte de tratarte como un trapo, de abandonarte y provocarte problemas con el Raikage...- Iba a continuar pero fue interrumpida por el muchacho.

Naruto: Basta! basta ya... Sakura...- Cogiendo aire nervioso.- Tu misma me trataste mal en la academia y no fue hasta que formamos equipo que me viste como a un ser humano...- Sakura comenzó a llorar.

Sakura: No me lo recuerdes... me odio por haberte tratado así...- Abrazándose a sí misma.

Naruto: No te culpo por ello, simplemente hiciste lo que la gran mayoría de personas de esta villa hacían, despreciarme sin motivo alguno y no es tu culpa... sin embargo... Sakae no me trató así cuando me vió por primera vez... me trató como a una persona normal y se convirtió en mi primera amiga... incluso antes que Iruka-sensei...

Sakura: Pero... después te abandonó... por un capricho... te dejó tirado como basura e intentó matarte...

Naruto: Sakura... Del amor al odio... hay un paso...