Uzu capítulo 18

Uzu capítulo 18

Naruto: Llegamos a numerosos acuerdos que... obviamente, nos benefician a ambos clanes, mi candidato al puesto de Hokage obtendrá el apoyo del clan Hyuga y sus clanes afines, por mi parte, le he garantizado a lord Hyuga una estrecha colaboración de nuestro clan con ellos, además de futuros acuerdos que pondrán al clan Hyuga en la palestra honorífica, el clan Hyuga se guardará el derecho de decidir si prefieren una relación estrecha o más escueta con nosotros una vez que... engendremos descendencia.- Hinata se sonrojó terriblemente al pensar en sus futuros hijos con Naruto y Sakae ladeó su boca en una sonrisa socarrona.

Sakae: Vamos, que se guardan el derecho a seguir siendo completamente independientes o optar por la absorción a nuestro clan...

Naruto: Yo mismo no lo hubiera dicho mejor, lord Hyuga es un hombre calculador y frío, pero ante todo es un hombre de familia, como lo soy yo ahora, nunca haría algo que perjudicara a su clan, de todas formas, según vayamos aumentando nuestro poder e influencia, podríamos desequilibrar la balanza a nuestro favor y por tanto, "obligar" a los Hyuga a unirse completamente a nosotros como una rama de nuestra familia, siendo entonces 2... los Uchiha.- Mirando a Sakae con deseo.- Y los Hyuga.- Observando a Hinata con los mismos ojos que a su otra prometida.

Hyuga: Pe... pero... Na... Naruto-kun... y... la rama... Uzumaki?.- Con su omnipresente tartamudeo y nerviosismo, el joven de vivaces ojos azules sonrió enigmáticamente.

Naruto: Todos y cada uno de ellos serán Uzumakis, sin embargo, como podrás entender, yo mismo no podría engendrar descendía Uzumaki pura, por lo tanto, sería inútil crear una rama que me es imposible continuar, es por eso que he decidido que desde ahora todos los miembros de este clan sean considerados Uzumakis, pese a que no tengan ni una mísera gota de mi sangre en sus venas...

Sakae: Mis hijos llevarán tu sangre...- Abrazando a su prometido posesivamente.

Naruto: Y también la tuya...- Besándola apasionadamente ante la atenta mirada de dos preciosos ojos perlados.

Hinata: Es... esto... yo... a mí... también... me gustaría... que mis hijos... lle... lleven tu sangre... Na... Naruto-kun...- Ocultando su rostro detrás de sus manos por la inmensa vergüenza que le producía pronunciar aquellas palabras, Naruto se levantó pese a las quejas de Sakae para bordear la mesa y sentarse al lado de la voluptuosa Hyuga y tomarla del mentón pudiendo observar sus ojos blancos y perderse en ese mar plateado.

Naruto: Lo sé Hinata... lo sé... y estoy encantado por ello...- atrapando sus labios en un beso apasionado que fue correspondido con un deje de timidez por la mujer.- Y ahora... aunque me gustaría pasar más tiempo con vosotras mis niñas... cada una tenéis algo que hacer, tu Hinata, debes ir a tu casa, tu padre querrá hablar contigo además de que estarán preocupados por tí, y en cuanto a tí Sakae, mi preciosa Uchiha, tienes que reportarte con Kakashi-sensei y el capitán Yamato, yo me cambiaré de ropa y daré un paseo por la villa.- Ambas mujeres asintieron, no muy conformes (obviamente preferían quedarse con él en la mansión) pero el deber no puede evitarse, a no ser que desearan problemas en un futuro pero no era el caso de las 2 féminas, el joven ojiazul las acompañó a la puerta despidiéndose de ellas con un tímido beso en los labios antes de abrirles la puerta, quedaron eso sí, en cenar juntos esa misma noche, una vez abandonaron el recinto Uzumaki, el muchacho rubio procedió a ir al piso de arriba y encaminarse a su cuarto para cambiarse de atuendo, se quitó la yukata blanca y revisó su armario pensando que ponerse, desde atuendos grises pasando por negros, verde oliva, azul claro, azul oscuro... deteniéndose en una yukata marrón oscuro con unas espirales de un tono más claro en sus solapas.

Naruto pov: Creo que este está bien...

Kurama: Muchacho... te lo he dicho muchas veces, pero no me canso de repetirlo... Me agrada que ya no uses el naranja chillón que llevabas antes a todas horas...- Con gesto aburrido.

Naruto pov: Sabes perfectamente que lo usaba para destacar... y ahora... bueno, créeme si te digo que ahora prefiero pasar desapercibido y aún así, todo el mundo me reconoce allá por donde camino...- Comenzando a vestirse con lo que había escogido para salir de su casa.

Kurama: Es ley de vida, cuando alguien desea algo con mucho ahínco, al final, cuando lo consigue acaba cansado y contrariado deseando no haber logrado sus propósitos, tú eres la viva imagen de lo que quiero decir.- Sonriendo socarronamente a su compañero, que por capricho del destino, no se enfadó ni le respondió cortante.

Naruto pov: Tienes razón, no sé exactamente si se deberá a que eres más viejo que el mismo cielo o a las tantas horas que te pasas aburrido en mi interior, de todas formas, está vez tienes toda la razón...- Terminando de prepararse.

Kurama: Hpmf... Odio cuando me respondes en condiciones... supongo que tanto desear que dejarás de ser un mocoso insolente y respondón a hecho que yo mismo haya caído en lo mismo que tú... mocoso.- Terminó diciendo esto último para provocar un poco la ira de su contenedor.

Naruto pov: Pues fíjate...- Saliendo de su habitación dirigiéndose a las escaleras.- Al final resultará que somos como dos gotas de agua...- Sonriendo mientras bajaba escalones.

Kurama: Sí... como dos gotas de agua en un enorme océano...- Sonriendo al darle la última "estocada" dialéctica a su compañero.

Naruto pov: Touché...- Saliendo de su morada cerrando la puerta tras él, el rubio procedió a caminar por la villa tranquilamente, no se demoraron mucho los primeros saludos, reverencias y palabras amables de todos los que se cruzaban en su camino, como era de esperar, el muchacho devolvió todos y cada uno de ellos con una leve sonrisa, prosiguió su camino sin un destino en concreto hasta que... al bordear una esquina de topó de bruces con alguien que iba sin mirar y con un poco de prisa.

????: Lo siento mucho...- Limpiándose el polvo de sus pantalones producto de su caída al chocar con alguien.

Naruto: Vaya Sakura... llevas mucha prisa a estas horas.- Extendiéndole la mano a la joven de rosados cabellos.

Sakura: Na... Naruto...- Tomando su mano para levantarse.- Voy con un poco de prisa.

Naruto: A dónde?.- Preguntó un poco interesado.

Sakura: Al hospital, verás...- Se sonrojó un poco.- Tenía que tener unos informes listos para Tsunade-sama, pero según Shizune-san hoy pasará a buscarlos.- Comentó un poco apurada.

Naruto: Y... no los preparaste para hoy?.- Con una ceja levantada y cruzado de brazos, la muchacha de ojos esmeralda negó con la cabeza apesadumbrada.

Sakura: Los iba a hacer, pero Ino me comentó que Tsunade-sama se tomaría hoy el día libre... así que... los dejé para más tarde...- Avergonzada por parecer una vaga ante Naruto.- Menos mal que me crucé con Shizune-san hace un momento... así que voy para el hospital, nos vemos Naruto.- La joven iba a retomar su camino pero fue detenida por el Uzumaki.

Naruto: Te acompaño y si puedo te echo una mano, ya sea con los papeles o entreteniendo a la Oba-chan.

Sakura: Muchas gracias Naruto...- Ambos se encaminaron a toda velocidad por los tejados en dirección al hospital.- Yo pensaba que ahora te dirigías con más respeto a Tsunade-sama.- El muchacho a su lado sonrió divertido por escuchar  aquello.

Naruto: Pues, tienes razón... y a la vez no, en cuestiones de ámbito profesional y de seriedad, me dirigiré a ella con el respeto que se merece, pero de puertas para afuera, ella es y será la oba-chan.- Ambos sonrieron y en menos de 5 minutos llegaron a las puertas del centro hospitalario de Konoha, entraron sin pararse a hablar con alguien, subieron al 4 piso y entraron en el despacho de la Haruno, el Uzumaki tuvo una enorme gota en la cabeza al presenciar 2 enormes montañas de papeles y carpetas encima del escritorio de la kunoichi médico.

Naruto: Es más de lo que esperaba... pero no importa...- Cruzando sus dedos creando 5 clones.- Dime que hay que hacer...- Sakura caminó bordeando su mesa de trabajo sentándose en la silla, ante la atenta mirada de los 6 rubios comenzó a quitar papeles de uno de los montículos.

Sakura: hay que ordenarlos por fechas en las carpetas, sellarlos y también colocarlos por orden alfabético dentro de estas...- La peligrosa cogió su sello y lo estampó en uno de los papeles dejándolo a un lado.

Naruto: Mientras tu los sellas y los firmas, mis clones los irán ordenando en carpetas, yo voy un momento a fuera a colocar un par de clones en la puerta con un henge, cuando llegue la vieja me avisarán y... si no hemos terminado, te daré un poco más de tiempo.- El rubio salió del despacho en dirección a la planta baja, Sakura asintió agradecida enfrascándose en sellar y firmar cada uno de los papeles que cogía mientras los clones de sombra realizaban su parte ordenando correctamente todo lo que ella apartaba.

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Lejos de allí, Sakae caminaba tranquilamente en dirección a los cuarteles del ambiente para reportarse con Kakashi y Yamato, la morena no era muy afín a ir observando los comercios y personas que estaban a cada lado de ella, es por eso que no se percató del hombre de cabellos plateados y cara tapada que salía de una librería con su único ojo visible cerrado como muestra inequívoca de que estaba sonriendo debajo de su máscara, miró a ambos lados despreocupado pero al ver una larga cabellera negra y un abanico en la espalda de una mujer que pasaba por la calle se aproximó a saludarla.

Kakashi: Hey Sakae...- La aludida paró en seco voltandose hacia la voz que la había llamado.

Sakae: Buenas Kakashi-sensei... ahora mismo iba al cuartel del ambu para reportarme con usted o con Yamato.- El Hatake sonrió aliviado debajo de su máscara.

Kakashi: Me alegra que te acordaras esta vez...- La mujer echó una mirada discreta a la bolsa que llevaba su sensei.

Sakae: Estaba de compras?.- El aludido bajó la mirada a la bolsa de papel que sostenía en su mano izquierda y se rascó la cabeza un poco nervioso.

Kakashi: Si... bueno... pasaba por la calle... vi la librería y me pasé a dar un vistazo... y... ya sabes... cosas de la vida, vi un libro que me interesó... y me lo regalé...- La Uchiha lo miró con una ceja levantada, el famoso ninja copia comenzó a sudar a mares frente a esos 2 ojos negros como abismos.

Sakae: No sé por qué, pero siendo usted y un libro de lo que estamos hablando, no se me ocurre otro que un Icha-Icha...- Kakashi se llevó una mano detrás de la cabeza sin cambiar su semblante un poco avergonzado.

Kakashi: Me descubriste... pero no sé de qué me extraño si siempre voy con él a la vista.

Sakae: Pensaba que ya los tenías todos... y bueno, con Jiraya muerto... no creo que haya más...- Kakashi asintió apesadumbrado al recordar que el libro dentro de su bolsa era el último de su amada saga literaria.

Kakashi: Es una pena... pero por lo menos sacaron uno más...

Sakae: Acaso Jiraya lo terminó antes de morir?.

Kakashi: No que va, lo dejó a medias pero alguien lo terminó como tributo a él, alguien que lo conocía tan bien que... según dicen los críticos, apenas hay una diferencia apreciable entre Jiraya y la otra persona...- Sakae tuvo un mal presentimiento, quién más aparte de su futuro marido podría conocer tan bien al Gamma-sannin y quererlo tanto como para continuar esa... asquerosa obra como tributo.

Sakae: Sensei...- El jounnin la miró sintiendo un escalofrío.- Me dejas ver el libro un momento...- El peliplata dudó si entregárselo o no.- No ponga las cosas más difíciles sensei...- Observándole con el mangekyo sharingan brillando amenazante en sus ojos.

Kakashi: Esto... prefiero no hacerlo...- Temblando de miedo.

Sakae: Amateratsu...- Una pequeña flama negra brotó en una de las esquinas de la bolsa, Kakashi se apresuró a sacar el libro de su interior soltando la bolsa que en menos de 2 segundos se había reducido a poco más que cenizas.- Me lo da ahora sensei? o tendré que quemarlo definitivamente?.- El jounnin se lo extendió rápidamente casi haciéndole una reverencia, Sakae lo tomó abriéndolo por la primera página, había una dedicatoria al sannin del monte Myokobuzan, leyó tranquilamente, sin duda alguna, era una dedicatoria muy personal, denotando que el que lo había escrito había sido muy cercano al fallecido, pasó la página continuando con la lectura de la dedicatoria, sus ojos se entrecerraron asustando aún más al pobre Kakashi.- Esta firma... no cabe duda... es él... cuando lo vea...- La joven Uchiha apretó el libro.

Kakashi: Por favor, no me lo rompas...- Llorando cómicamente.

Sakae: Toma.- Dándole el libro de mala gana y con un poco de fuerza.

Kakashi: Gra-gracias...- La mujer caminó en sentido contrario al de su destino inicial ante la mirada del peliplateado y entró en la librería, Kakashi abrió el libro por la segunda página y prestó atención a la firma al final de esta, un remolino... tuvo una gota enorme de sudor en su sien acompañada de un mal presagio. "Mejor me voy de aquí" pensó para después desvanecerse en una explosión de humo.

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