Capítulo 14
La llamada de K nos despertó a los dos. Madison refunfuño tocándose la cabeza.
— Tanta bebida no es buena. —le dije antes de contestar— ¿Diga?
— Buenos días, tienen misión.
— ¿Así es cómo da los buenos días? —dice Mad a regañadientes.
— Pues ésta misión te va a encantar.
— Sorprendeme.
— La misión es muy compleja. Irán unos pocos de cada sector, entre ellos, vosotros dos. Es una fiesta en celebración por una nueva empresa de ropa. Sólo tenéis que accionar si las cosas no salen como deben. Y como toda fiesta tenéis que ir vestidos bien.
— No... —se queja.
—Sí, sí, como sé que te encantan los vestidos, ya me encargué yo de ellos. A las cinco están en su casa.
— Vale. —colgué— Venga, será divertido. Nunca te vi con vestido.
— Será porque no me gustan.
— Ya quiero verte. —me mordí el labio.
— Calla. —me empuja tirándome de la cama— Vamos a comer.
— Y después iremos a que te den algo para la resaca. Tienes que estar bien para la fiesta, digo misión.
Nos cambiamos de ropa y fuimos a comer a una cafetería que había cerca de casa. Al acabar, nos dirigimos al hospital del bando.
— Aquí mi amiga bebió demasiado anoche. —le dije a la enfermera mientras miraba a Mad a lo lejos.
— ¿Dejaste a tu amiga beber sola? —me pregunta la enfermera mientras completaba unos papeles.
— Ella lo necesitaba más que yo.
— ¿Y tu qué hiciste?
— Estar a su lado.
— A lo mejor no te necesitaba cerca si ni siquiera puedes beber con ella.
— A lo mejor quieres que te meta una hostia.
— ¿Qué pasa aquí? —dijo Ethan poniéndose a mi lado.
— Ésta que no hace nada más que decir estupideces.
— Ésta tiene nombre. —murmura ella.
— Pues no me importa su nombre. —le hice una mueca.
— Bueno, ¿qué os trae por aquí? —dice Ethan llevándome hacia Mad.
— Necesita algo para la resaca.
— Pues ven conmigo. —Mad asiente y se va con él.
— Yo me quedaré por aquí. —señale donde estaba aunque no me hicieron caso.
Después de dar muchas vueltas y ver que no venían, me dirigí a la sala en la que entraron. Me paré frente a la puerta ya que se oía risas sentándome en una silla que estaba frente a su ventana. ¿Por qué mierda ríen tanto? Miré la perfusión y aún le quedaba para rato. Eché mi cabeza hacia atrás quedando dormido.
— Alan. —me sacude. Abrí los ojos.
— ¿Ya? —me levante.
— Sí, vamos que van a venir con los vestidos. —rodea los ojos.
— Claro, después de tantas risas es normal que pierdas la noción del tiempo. —me dirigí hacia el coche.
Una vez llegados a casa, nos pusimos a ver la televisión. Al rato llegaron con la ropa.
— Éstos son vuestros trajes. —nos los extiende a cada uno. No podíamos verlos, la funda en la que estaban era negra— Y aquí tienen dos relojes que vibran. Los pinganillos resaltaran demasiado. —nos explicó la mujer.
— Vale. —los tomé.
— ¿Necesitas ayuda con eso? —señala el vestido de Mad.
— No, puede irse. Sé ponerme un vestido.
— Vale. —se encoge de hombros.
Fuimos a prepararnos. Madison tardo muchísimo, podía dar una vuelta entera al barrio y aún no estaba lista.
— ¿Seguro que sabes ponértelo? —grité desde la habitación.
— Que sí. Sólo me falta peinarme.
— Mira bien, haber si te lo has puesto al revés. —reí.
— Te pondré a ti la cara al revés como no te calles.
— Bueno... —alargue— Que agresiva.
— Ya estoy, ¿estás preparado?
— Desde hace más de una hora.
Abre la puerta y me quede sin habla. Nunca la había visto tan guapa. Algo por mi estómago se movía. El vestido era negro y naranja. El negro marcaba todas sus formas y el naranja, de la parte superior, resaltaba su belleza. Realmente siempre fue guapa. Nunca se esforzó en maquillarse o vestirse con cosas caras y aún así se veía tremenda.
— ¿Cómo me veo? —da una vuelta.
— No estás mal. —sonreí.
— Éstos tacones me están matando. —levanta el vestido para enseñármelos.
— Es lo que hay. —me puse a su lado— ¿Vamos? —levante el brazo.
— Vamos. —me sonríe.
El lugar era muy grande y todas las personas iban vestidas muy elegantes. Había chicas con buenos cuerpos.
Madison
No sé como las chicas aguantan estas cosas en los pies. Las chicas que habían eran bastante feas y muy delgadas. ¿Qué podía esperar? Seguro que son modelos o alguna cosa parecida. Nos adentramos al lugar y un chico que trabajaba en el lugar, nos llevo a nuestra mesa. El tiempo iba pasando y esto era cada vez más aburrido.
— ¿Sabes que pensé mientas veníamos hacia aquí? —dije al recordar. Niega— Deberíamos de llevar chaleco antibalas en las misiones. —He perdido a muchos, no pienso perderle a él también.
— Tienes razón. La rivalidad entre bandos crece cada día así que sería lo mejor. —dice mientras miraba a una mesa llena de chicas.
— Son guapas. ¿Te gustan?
— Sí, están muy bien. —sigue mirándolas.
— Invita a alguna a bailar pero te será difícil elegir a una entre todas. —reí. Me mira.
— Para nada, llevo mirando toda la noche a una sola chica. —se levanta y acomoda su saco.
— Pues adelante. —le sonreí.
— ¿Cómo me veo? —hice una mueca y lo miré de arriba hacia abajo.
— Más feo imposible. —muestra una sonrisa torcida. Más guapo imposible.
— Ahora vuelvo. —se va pero para mí sorpresa no va a la mesa donde miraba antes, sino al chico que pone la música.
— ¡Invito a todas las parejas a la pista de baile! Ésta canción es para su chica. —señala a Alan y él vuelve a la mesa.
— Bueno, ¿quieres bailar conmigo? —abrí los ojos como platos.
— ¿Esto es por qué te dije feo y nadie bailara contigo?
— No, es porque solo contigo quiero bailar. —me extiende su mano— ¿Aceptas?
— Claro. —tomé su mano. Fuimos a la pista y bailamos al ritmo de la música. Era una canción lenta— ¿Soy tu chica?
— Siempre lo fuiste. —me sonríe.
— Gracias. —le sonreí.
— ¿Por? —por existir y estar siempre a mi lado.
— Sólo acéptalas.
— Entonces yo también debería agradecerte.
— ¿Por?
— Sólo acéptalas. —me guiña el ojo.
— Ojalá no vibre este reloj.
— Disfruta del momento mientas puedas.
Nos mantuvimos callados pero nuestras miradas lo decían todo. Nuestro primer baile lento juntos. Seguimos bailando otras dos canciones ya que también eran lentas. En este momento dejé de sentir cualquier tipo de dolor. Sólo éramos él y yo. Sentí unas cosas extrañas en mi estómago. Al acabar las canciones, volvimos a sentarnos y revisé mi móvil. Tenía un mensaje de K "La misión está completada. Pueden irse cuando quieran. Llámame cuando se hayan ido." Le mostré el mensaje a Alan.
— ¿Nos vamos?
— Sí, tengo curiosidad por saber que quiere.
Camino a casa llamé a K.
— ¿Ya se fueron?
— Sí.
—¿Recuerdas a Steve Rold?
— No.
— La misión que tuviste hace un par de meses. —siguió al ver que no decía nada— El supuesto discapacitado.
— Sí, sí, le recuerdo. ¿Qué pasa con él? ¿Revivió? —reí
— No. —ríe— ¿Recuerdas que después volviste y vinieron dos hombres?
— Sí.
— Ellos fueron los que estuvieron en tu casa. Por lo visto te siguieron. —Alan me mira y yo le devuelto la mirada.
— ¿Cómo sabes?
—Seguimos investigando y al pillarlos, los interrogaron. Dijeron que tus padres fueron unos estúpidos por cubrirte. Tus padres no sabían nada de tu trabajo y aún así intentaron protegerte.
— ¿Habéis matado a esos capullos?
—Sí, como se lo merecían.
— Bien. —colgué. La furia recorría por mis venas.
— ¿Está bien? —dice Alan poniendo una mano en mi pierna.
— Sí... Fueron unos buenos padres.
— Así es.
Por el resto del camino miré por la ventana sin decir nada más. En casa intenté quitarme el vestido pero no pude, la cremallera se había atascado.
— Anda, ven aquí. —dice Alan.
— Odio los vestidos. —bufe.
Me quita el vestido con mucha suavidad. Mientras bajaba, iba acariciando mi piel. Un escalofrío recorrió todo mi cuerpo. Al llegar el vestido al suelo me quede de espalda hacia él.
— No dejare que te maten, nunca. —dice en un susurro.
— Yo tampoco dejaría que te mataran. —me di la vuelta.
— Lo sé. —acaricia mi cara. Me mira unos segundo y luego se acerca un poco dudando. Acorte toda la distancia que quedaba entre nosotros. Nos dimos un largo y tierno beso— Vamos a dormir. —dice al separarnos. Asentí.
Él se quitó la ropa quedando en boxers y yo me puse mi pijama. Me dormí en su pecho mientras él me abrazaba.
* * * * *
¡Hola a todos! ¿Qué tal os parece la historia hasta ahora?
Quería agradecer a Jeadore, RaluDia, Minervaloveyou, Pikatware, NyxieJ, UnRarito y YisbelAbreu09 por votar en cada capítulo y dejar unos lindos comentarios. ¡Muchísimas gracias!
También quería agradecer a ChrisstianWw, AVBlink, Ride51, wilson31212, AlejaRamirez789, DFHVCWATT, holasoylaramita, kittycrazyandsweet, muerteeee, Lucia_Pradillos, fckinghurricanee FixxionStyles, ValentinaRojas674, karen_riggs, ferchdorada, FoundStars, albaalest por sus votos. ¡Gracias!
Les deseo un lindo día.
Muchos besos a todos.
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