Dan Humphrey:

Chuck Bass:

Dan dio un paso hacia adelante, uno de muchos, entrando en el loft, furioso, siendo seguido por Chuck, que daba pasos lentos a diferencia de los histéricos de Daniel, este daba vueltas alrededor de la sala, frente al pequeño bar que estaba instalado en el lado izquierdo del loft.

-Creo que estas exagerando, Daniel- comentó ahora alcanzando su botella de whisky, bastante viejo debía añadir, y se comenzó a servir en uno de los vasos que estaban cerca.

-Te dije que podía con esto- respondió Dan pasando las manos por su cabello desordenándolo un poco, sus rizos oscuros alborotándose en su nuca, contrario a como lo tenía cuando salieron.

Chuck rodó los ojos y tomó un trago, sabía que el chico se molestaría un poco, pero no por las razones que él pensaba, de alguna forma quiso empujarlo contra el sofá para que dejara de moverse, y de morderse los labios, porque estaba llamando demasiado a sus ojos esos movimientos, y sus caderas balanceándose de un lado a otro lo estaban de cierta forma, bueno, poniendolo ansioso.

-No te pedí que hicieras nada de esto.

-¡Pero no tenías que golpearlo, Chuck!- gritó apuntándolo con un dedo, finalmente dejándose caer en una de las sillas frente al bar, quedando ante él- sabes que soy capaz de protegerme, lo sabes muy bien, el plan hubiese salido perfecto, Gabriel estaba por firmar el contrato.

-Por favor, Humphrey, estabas pidiendo a gritos que te sacara de ahí, en especial cuando él se estaba inclinando para besarte, saltaste como un conejito asustado cuando colocó su mano sobre tu rodilla- Chuck le lanzó una mirada acallando toda replica- deberías darme las gracias.

-¡Rayos, Chuck! ¡No soy tan recatado como piensas! ¡Besar a un chico no me habría importado! ¡Y hubiésemos obtenido el contrato que tanto querías! ¡Tenía todo bajo control!

-En primera yo jamás te pedí que le convencieras de firmarlo, era un plan estúpido desde el inicio- respondió Chuck dando la vuelta a la mesa del bar y acercándose peligrosamente a Dan que también irguió con la espalda recta, arrepintiéndose cuando este violó un poco su espacio personal como solía hacerlo- y en segunda no lo habrías dejado besarte.

-¿Por qué? ¿Por qué es un hombre? - dijo inconsciente alejándose un poco, pero sin bajar la mirada- te lo dije Chuck, no me habría importado, podría haberlo hecho bien yo solo, pero no confiaste en mi lo suficiente.

Dan sonaba algo herido, claro que intentaba no demostrarlo frente a él, y aun así Chuck podía leerlo como un libro abierto. Eso era peligroso, Dan no debería darle tan simplemente el podar a las personas para herirlo.

-No tenías garantía de que lo hubiese firmado después ¿no crees?

Hubo un silencio y Dan tenía que reconocer que era cierto, ya que, Gabriel solo le dio su palabra de firmarlos si le besaba, no lo dijo con palabras, más bien fue una insinuación, pero antes de que siquiera este acabara con la distancia que los separaba apareció Chuck de quién sabe donde, dándole un puñetazo al otro en la mandíbula y sacándolo de ahí agarrándolo de la muñeca, prácticamente arrastrandolo por el lugar.

Fue exagerado, muy exagerado, en especial teniendo en cuenta que el siempre controlado Chuck Bass fue quien inicio una pelea, sin darle tiempo a finalizarla. Era bastante factible, el hecho de que él jamás hubiera golpeado a alguien, jamás, y por la forma en que se sobaba los nudillos rojos con incomodidad era casi seguro.

-Debería irme- murmuró Dan, pero antes de retroceder un paso Chuck le agarró del antebrazo con un leve rastro de enojo, y lo jaló hasta él sin medir su fuerza y prácticamente chocaron en un movimiento torpe en el que Chuck terminó con su nariz contra su cuello ya que había inclinado su cabeza

Dan tembló un poco cuando le tomó de ambos hombros, manteniéndolo ahí, su respiración se agitó y sus mejillas enrojecieron un poco cuando las manos de Bass bajaron hacia sus caderas, dejándolas reposar ahí moviendo sus dedos como acariciando, pero acercándolo un poco más, la punta de su nariz haciéndole cosquillas entre su hombro y oído, lo que me hizo que sus piernas temblaran.

Dan nunca había tenido a Chuck Bass tan cerca, al menos no sin que le estuviera amenazando por alguna cosa que no hizo, se sentía raro, raro pero no del tipo mal raro, de hecho, olía bien, a hombre, claro, era un hombre, pero era como un adulto, maduro, masculino, su olor mezclado con algo de whiskey, perfume -que Dan apostaba costaba más de un mes de su salario como cuando fue camarero- y cigarrillos. Todo lo que Chuck Bass era. Tampoco pudo evitar notar que estaba fuerte- mucho más que antes cuando iban en la escuela y él fue quien golpeó a un tipo en lugar de Chuck- muy fuerte, sentía los músculos de su pecho cuando levantó sus manos para apartarlo sin hacerlo realmente.

Todo eso se sentía extrañamente íntimo, mucho más que eso, se sentía desnudo, expuesto con Chuck tan cerca, vulnerable, y al estremecerse cuando sintió la respiración de este contra su cuello dejó mostrar algo de esa vulnerabilidad sin poder evitarlo.

-Humphrey

-Chuck...- comenzó a decir, pero dejó la frase inconclusa, ya que, sin tener pensamientos coherentes dudaba decir algo inteligente, y probablemente solo se le escapara algún sonido

Sintió sus mejillas calentarse aún más mientras ciertas partes de su cuerpo también lo hacían, cerró un momento los ojos cuando las manos de Chuck se movieron a su espalda, pegándolo más a su cuerpo, y Chuck se sorprendió cuando sintió que los pantalones de Daniel tenían cierta parte despierta dentro, pero antes de poder bajar un poco más sus manos o hacer un comentario escuchó el elevador anunciando que alguien acababa de llegar y empujó rápidamente a Chuck -que lucía tan calmado como si nada hubiese ocurrido- cuando escuchó unos pasos acercándose hacia donde estaban ellos.

-Bueno- dijo Georgina con resignación- supongo que la parte A del plan no se pudo completar gracias a cierto individuo...-miró a Chuck con molestia en sus ojos, pero luego se alzó de hombros

-Era un plan estúpido de todas formas- susurró Chuck con una expresión de aburrimiento

Georgina comenzó a discutir con él sobre que no era un plan estúpido solo era simple, y continuaron así por unos minutos hasta que Dan habló.

-Uhm..- comenzó a decir algo inseguro, tirando de su camiseta hacia abajo con disimulo, gesto que no pasó desapercibido para Chuck que tenía una sonrisita divertida en el rostro, Dan quiso golpearlo pero estaba demasiado avergonzado y solo quería largarse de allí- tengo que irme... tengo... que escribir, y responder comentarios de los fans y los no fans... así que mejor voy a... n-nos vemos- soltó de sopetón y caminando con la misma velocidad hacia el elevador, presionando el botón para llamar con torpeza rogando que las puertas se abrieran más rápido cuando pudo entrar, y mantuvo la mirada fija en sus pies cuando se cerraron, sin ver a ninguno de ellos, sabía que Chuck estaba sonriendo, no necesitaba tener levantar la vista para saberlo, y entonces las puertas al fin se cerraron y el apoyó su espalda contra la pared y dejó escapar todo el aire contenido en sus pulmones, y bajó la mirada observando lo que tanto temía, se le había puesto dura como una roca por culpa de Chuck Bass.

¿Qué mierda estaba mal con él?

Chuck, se volteó nuevamente a servirse un poco más de whiskey, ignorando a Georgina que tenía la mirada fija en él.

-¿Ya fuiste capaz de besarlo?- preguntó como si nada tomando asiento donde Dan había estado anteriormente

Chuck se volteó sorprendido, observando la expresión de la chica que lucía como si supiera algo que él no. Georgina, la cruel, despiadada, y sicópata, Georgina ¿Cómo demonios no se habían dado cuenta? Claro, esa noche había estado un poco ocupado comiéndose con los ojos la silueta de Daniel, sin embargo, no era excusa, porque ahora tenía a Georgina ahí mirándole con una sonrisa como si se hubiera ganado la lotería. Su expresión se volvió seria y la miró con algo de irritación en sus ojos.

-Nunca necesitaste a Humphrey para convencer a Gabriel de firmar los papeles

Georgina rodó los ojos y sacó de su bolso unos papeles y se los entregó a él. Chuck notó que era el contrato firmado por Gabriel para ceder el edificio de la editorial a Jack Bass.

-Hazme el favor de dárselos a Jack por mi, y dile que de nada- su sonrisa se acrecentó y tomó un vaso sobre la mesa también sirviéndose del licor que el estaba tomando- Pero por si las dudas, no, no necesitaba a Dan para convencer a Gabriel

-¿Por qué lo llamaste entonces?- inquirió sonando un poco más frio de lo que pretendía

-Porque quería ayudarte

-¿Cómo es que prostituir a Daniel por un edificio iba a ayudarme?- su puño derecho se apretó en torno al vaso sin él notarlo

-Mira, estaba muy aburrida allá en Siberia congelándome- comenzó a decir ella entrecerrando un poco los ojos y contando la historia con aburrimiento- entonces un día me llegó un mensaje, pidiendo que me hiciera cargo del blog de Gossip Girl, y yo podría convertirme en la nueva fuente de información, pero entonces me llega uno de parte de los neoyorkinos anónimo que mandó otro tip, una foto, de ti, cuidando del pequeño Daniel en la fiesta de Blair y llevándolo hasta tu hotel

-Puedes verlo como un acto de caridad- respondió alzándose de hombros

-Puedo, pero no creo- ella le sonrió aun más- porque en esa foto algo se me hizo extrañamente familiar y luego recordé que no era la foto, sino que eras tú, ya que a la última persona que miraste así fue a Blair cuando estabas enamorado de ella...

-Esto no es...

-¡Y ahora!- exclamó ella con una risa interrumpiéndole y alzándose en su asiento con dicha- ahora... miras a Dan de esa forma- continuó riéndose como si fuera lo más gracioso- ¡Me encanta!

La chica continuó riéndose y murmurando cosas que sonaron como "hermosa pareja" "no me lo esperaba" y dando aplausos de vez en cuando.

-No sé que es lo que crees que ocurre, y admito que Daniel es exquisito, más aun cuando tiene la boca cerrada- le dijo y Georgina le miró con algo de sorpresa, pero parecía más complacida, aunque sin aceptar que él lo haya admitido tan rápido- pero no lo veo de esa forma

-¿Ah, no lo haces?

-Quiero follármelo- admitió Chuck como si hablara del clima- no voy a negar eso, últimamente admito que lo he pensado muy seguido, tenerlo boca abajo en mi cama, desnudo, el solo pensamiento es como un veneno que me recorre las venas y la única cura que tengo en mente es probar a Daniel, follármelo, sentirlo retorcerse bajo mío, y luego, cuando me de cuenta de lo poco atraído a él que me siento, se me quitará, y lo dejaré de una vez por todas, eso es todo

-Si es así como quieres verlo, bien- Georgina se levantó tomando su bolso de la mesa comenzando a caminar hacia la salida, pero se volteó antes y le miró- Dan es un buen chico, y te estas negando a demasiado al no aceptar que en el fondo lo que quieres es más que sexo con él, solo porque tienes miedo de los sentimientos- y con ello se fue, dejándole solo

(...)

Dan pasó la pagina de el libro "The petting zoo" el cual era uno de sus libros favoritos, había pasado una semana desde el incidente, y no había sabido mucho de Chuck hasta el momento, solo sabía que Nate iba a hacer una fiesta el Viernes en la casa- si se le podía llamar casa a la mansión gigantesca- de su abuelo.

Lo cierto era que no quería ir, no estaba de animo para encontrarse con alguno de sus amigos, o Chuck. En especial a Chuck, al menos no desde que eso ocurrió. Si, había comenzado a referirse al incidente como eso. Porque no podía creer como su cuerpo respondió casi al instante en que Chuck le puso sus sucias y manipuladoras manos encima, claro que aun se mantenía preguntándose a si mismo por qué se lo había permitido, porqué rayos no se había apartado, por qué no podía sacárselo de la cabeza, y también se preguntaba porqué cuando lo recordaba la única forma de controlar los impulsos de su cuerpo era conduciendo su mano hacia abajo y aliviarse, o tomando duchas frías.

Chuck probablemente estaba partiéndose de la risa en algún lado aun recordando lo muy hormonal que el cuerpo del pobre niño de Brooklyn- osea él- había reaccionado. Solo esperaba que no se riera de él con Serena, o Blair o Nate o cualquiera de su circulo cercano, o lejano, o en realidad prefería que no se riera de él y punto.

Volvió al inicio de la pagina que había comenzado a leer al darse cuenta de que no había prestado atención a lo que leía e intento concentrarse mejor, lo cual era fácil, ya que el libro lo había leído ya unas cuantas veces. Cuando iba como por el segundo parrado escuchó su teléfono sonar, pero no tuvo que verlo para saber que era Georgina era la que le estaba llamando, de hecho, ella le insistió muchas veces para que fuera a la fiesta, y para ser honesto no sabía por qué.

Pasó una hora desde esa llamada hasta que escuchó que tocaban la puerta, a lo que él se negó a responder, enserio no quería lidiar ahora con esa chica, si hubiese sido su padre hubiese abierto con su propia llave. Justo cuando cerró el libro y se levantó para abrir porque el sonido realmente le estaba estresando, los golpes se detuvieron y un minuto después la puerta se abrió, y Dan se quedó paralizado al ver entrar a Chuck Bass a su hogar, como si nada, con una llave en la mano. Llevaba uno de esos costosos trajes que siempre usaba, luciendo como si fuera el rey de todo el lugar.

-Ch-Chuck-dijo parpadeando al incrédulo mientras Chuck se paseaba mirando alrededor sin prestarle mucha atención-¿Cómo entraste?- claro, con la llave, pensó queriendo estrellarse contra un árbol- quiero decir, la llave ¿d-dónde conseguiste esa llave?

-Recordé donde la guardabas.

-P-pero tu nunca me viste... guardarla, creo- dijo con lentitud y siguiendo a paso rápido a Chuck cuando este entró en su habitación y comenzó a mirar los libros de su estantería arriba de la cama, leyendo unos títulos, luego pasó su dedo índice con movimientos lentos por los DVDs y alzó una ceja cuando vio a Cedric, su muñeco Cabbage Patch, Dan quiso cubrirse de repente, a él y toda su habitación porque ¿Desde cuando Chuck Bass se mostraba interesado en lo que le rodeaba a él, Dan Humphrey?

Estaba seguro de que Chuck lo considerba un aburrido don nadie, o como dijo Chuck "no pensaba en él" al parecer no era digno de los pensamientos de Chuck Bass.

Cuando Chuck ignoró sus preguntas y tomó entre sus dedos el libro que él estaba leyendo cuando fue interrumpido ojeandolo un poco y dejandolo donde estaba, y luego pasó sus dedos de la mano derecha por su cama sin hacer, por sus sabanas de futbol, por su almohada.

-Chuck- le llamó para distraerlo de su atención en su lugar más íntimo, porque enserio, esto se estaba volviendo extraño, casi bizarro a un nivel exasperante.

-¿Mmm?- preguntó este sin prestarle atención, abriendo un cajón de una de las cómodas.

-¿Qué haces aquí? Quiero decir, no en Brooklyn, sino, aquí en mi casa, aunque también en Brooklyn, es... raro, nunca pensé que vendrías por aquí, al menos no por tu propia voluntad- comenzó a decir divagando como solía hacer cuando estaba nervioso y entonces se atrevió a preguntar el verdadero motivo por el que podría estar parado frente a él- ¿es... es por lo que pasó en... en tu hotel?

No respondió, demasiado perdido en sus pensamientos, parecía que no hubiese captado una sola palabra de lo que él había dicho.

-¿Chuck?-insistió cuando vio que este estaba viendo el cajón de su ropa interior y la tocaba con curiosidad, abrió los ojos sorprendido y fue a cerrarlo con fuerza sin importarle que casi le apretara los dedos en el proceso- ¿¡Podrías escucharme!?

-¿Por qué?- cuestionó divertido- ¿tendrás otra erección si no lo hago?

Dan abrió la boca sorprendido y Chuck sonrió con prepotencia, mientras el boqueaba como pez fuera del agua sin saber que decir, y sus mejillas enrojecían con fuerza.

-¿Podemos por favor olvidar que eso alguna vez ocurrió?- preguntó luego de un rato, cubriéndose el rostro y sabiendo que Chuck nunca le dejaría olvidarlo

-No

Era de esperarse.

-Chuck, por favor

-El recuerdo sigue muy vívido en mi mente- dijo dando un paso hacia adelante- y de alguna forma... no puedo deshacerme de él, por muy...- hizo una pausa llevándose una mano a los labios como repensándose la palabra- tentador, que se me haga verte suplicando

Dan frunció el ceño mirando sus zapatos.

-Solo dime que quieres, dudo que hayas venido únicamente a regocijarte.

-Mmm en realidad eso es tan falso como cierto- comenzó a decir tomando asiento en el sillón rojo de su habitación- me gusta verte retorciéndote como haces, hacerte sentir desesperado, uno de los placeres a los que no me niego. Pero sí, he venido por algo más.

Hubo una pausa, un momento de tensión en el que Chuck se quedó mirándole desde ahí, de pies a cabeza y Dan deseó haberse puesto algo más presentable que la camisa celeste que estaba usando, jeans sueltos y probablemente haberse bañado ese día.

-¿Por qué?

-Como dije no he podido quitarme el vívido recuerdo de tu hormonado cuerpo de adolescente virgen de mi cabeza, por lo cual dejame decirte, no estoy orgulloso. Así que mi solución es...- hizo una pausa siempre con ese tono de seriedad y Dan quiso replicar que ya no era un adolescente y mucho menos virgen-Quiero que tengamos sexo, Daniel

Dan parpadeó durante unos segundos, antes de echarse a reír con fuerza, no era su intención, solo que la risa salió del alma y no pudo detenerla, al menos no hasta que notó que Chuck no se reía con él, lo cual significaba que no fue un chiste lo cual hizo que su expresión de gracia se convirtiera en horror.

-¿¡Estas hablando enserio!?- le apuntó con el dedo, acusándolo

-Solo te pido una noche, Daniel- dijo pasando las manos por su cabello, con la misma calma de siempre, pero necesitaba saber que se sentía tener el cuerpo de Dan para él, escucharlo, sentirlo, necesitaba saberlo para después poder olvidarse de él y seguir adelante, porque sabía que era un capricho temporal- solo una noche para quitarme las ganas que llevo que créeme no me siento muy orgulloso de ello

-Pe-pero yo... yo no...

-También lo quieres- susurró amenazante poniéndose de pie en un movimiento rapido y calculador, dando un paso hacia él, y luego otro y otro más hasta que estaban a escasos centímetros de distancia- No te hagas el inocente, porque si no lo quisieras también, tu cuerpo no estaría reaccionando como hace cada vez que me acerco.

-Fu-fue una vez...

-Con esta dos- selló antes de tomar su cintura y pegarlo a su cuerpo, respirándole en el oído, acariciando con la punta de su nariz el contorno de su oreja con suavidad, suspirando y haciendo que Dan sintiera sus rodillas temblorosas- Si enserio no lo quieres... pídeme que me aparte y lo haré.

-Chuck...

-No puedes- le interrumpió- no puedes porque también quieres probar como sería si lo hiciéramos ¿verdad? Quieres probar como sería tener a Chuck Bass tocándote, haciéndote perder la cabeza.

Dan jadeó cerrando los ojos cuando el lóbulo de su oreja fue mordido y una lengua pasó por él con movimientos lentos, y sus caderas acariciadas con un masaje pegándolo más a Chuck, y entonces pasó. Su cuerpo comenzó a despertar, la sangre viajó hacia el sur, igual que la primera vez que lo tocó, y el quiso separarse, hacerle caso a su parte racional, pero no encontró la fuerza suficiente, porque su cuerpo no quería apartarse, porque su cuerpo también reconoció al dueño de las fantasías de sus últimos orgasmos a base de su mano y no iba permitir que se alejara ahora.

-Quieres sentirme desnudándote, quieres que te bese el cuerpo y te abrace fuerte- siguió susurrando Chuck.

Le empujó hacia atrás y Dan calló de espaldas sobre la cama y no tuvo tiempo de procesarlo antes de que Chuck estuviera sobre él, acomodándose entre sus piernas y levantándole los brazos, sujetándole las manos sobre la cabeza con una de las suyas, e inclinándose para darle un beso en el cuello y morderlo con delicadeza, disfrutando al verlo retorcerse para ser liberado.

-Quieres que te controle y te acaricie, que te haga ver el cielo una y otra vez, quieres que te separe esas piernas e introduzca mis dedos en ese inexplorado lugar...-dijo llevando una de sus manos al trasero de Humphrey, apretándolo, pero antes de poder desabrochar el botón de este escucharon la puerta del loft abrirse.

-¡Dan, ya llegué!- anunció la voz de su padre desde la sala, y Dan notó que la puerta de su habitación estaba cerrada pero sin seguro y si su padre venía lo vería a él y Chuck en esa posición y solo... no podría con ello

-Mierda, Chuck, apártate- dijo intentando liberar sus muñecas del agarre.

-¿No te convenció mi discurso?- preguntó divertido, sin soltarle.

-Por favor, Chuck- pidió suplicante en un susurro.

-¿Que haremos el viernes en la noche entonces?- cuestionó complacido escuchando pasos acercarse a la habitación.

-¡Dan! ¿Estas en casa?- escucharon la voz de Rufus.

-Esta bien, tu ganas- exclamó Dan desesperado aun en un susurro- sexo, tendremos sexo, tú y yo, lo que quieras solo... por favor, mi papá entrará en cualquier momento...

Y no tuvo mucho tiempo para terminar la frase cuando Chuck se levantó con una expresión entre complacida y divertida, y se alejó unos pasos de la cama, tomando uno de los libros sobre la cómoda y fingiendo leerlo y justo en ese momento la puerta se abrió y él por su parte no tuvo tiempo de levantarse.

-¿Dan?- dijo su padre sorprendido al ver a Chuck ahí y luego de vuelta a él que seguía en la cama medio recostado- Oh, hola, Chuck, no sabía que estabas aquí.

-Rufus- dijo con un asentimiento respetuoso, como si no acabara de darle una charla explícita de sexo a su hijo con lo que quería hacerle, debería ganarse un Oscar por su estupenda actuación y un golpe en la cara por la sonrisa ególatra- solo andaba por el barrio y vine a convencer a Daniel de asistir a la fiesta de el viernes.

-Oh si, por favor llévalo, no ha hecho algo que no sea estar pegado en su computadora respondiendo comentarios de odio de los haters hacia su libro.

-Papá- reclamó Dan.

-¿Qué? Es cierto- dijo alzándose de hombros- ¿Te gustaría quedarte a cenar, Chuck?

-Lo cierto es que iba de salida ahora, tengo una reunión en quince minutos.

-Claro, comprendo, suerte en tu reunión- dijo Rufus estrechándole la mano cuando Chuck paso por su lado.

-Nos vemos, Rufus- dijo a modo de despedida- Daniel- se volteó a verlo divertido y Dan deseó con todas sus fuerzas que su erección no se notara estando medio recostado, y sus mejillas estuvieran de vuelta en su color natural- Nos vemos el viernes entonces- dijo antes de salir, y cuando escuchó la puerta cerrarse suspiró aliviado, o al menos así fue hasta que cayó en cuenta de lo que acababa de aceptar.

N/A: Espero que les haya gustado el capítulo, las cosas se estan "encendiendo" asíque es probable que quizás el otro capítulo sea +18
En fin, gracias por leer. Bye💖